Tumgik
multyeverything · 5 months
Photo
Tumblr media
15K notes · View notes
multyeverything · 5 months
Text
Le tengo miedo a mi mente cuando no está ocupada.
5K notes · View notes
multyeverything · 5 months
Text
Tumblr media
“The fruit was never an apple”
Max Svabinsky, (1873-1962)
“In Paradise” circa 1918
50K notes · View notes
multyeverything · 5 months
Photo
Tumblr media
10K notes · View notes
multyeverything · 5 months
Text
Tumblr media
130K notes · View notes
multyeverything · 9 months
Text
Paint me naked
Tumblr media Tumblr media
Autor: multyeverything
Tw: Angustia, mención de sexualidad (masturbaci*n), mención de órganos sexuales, uso de insultos, presión, representación equivocada del idol, mención de dr*gas (no uso).
Rating: 18+
Sinopsis: Cuando el perfecto Choi San tiene que someterse al talento de su compañera de materia. Y la pequeña t/n a los encantos y dominación de su ídolo.
Au: Classmates to lovers / Semi slowburn
Emparejando: Choi San X t/n (mujer)
Conteo: 6k palabras
━━━━━━━━━━━━✧❂✧━━━━━━━━━━━━
Choi San entró a la universidad y a nuestro curso a mediados de semestre ya que por asuntos personales que nadie conoce tuvo que tomarse un año sabático en sus estudios. Por ende era ligeramente mayor al resto de nosotros. Si bien lo conocía de antes, muuucho antes de elegir bachillerato, jamás había entablado una conversación o había comparitdo más que un 'buenos días' con él. Así que verlo atravesar la puerta del taller fue una enorme sorpresa para mí, no daba crédito de lo que veía hasta pasados unos minutos y varios parpadeos después.
Vaya que me había quedado sin palabras... y es que no es cualquier estudiante que se integra. Es EL Choi San. Aquel estudiante del que todos los profesores alardean y ponen como ejemplo. Se sabe que realizó su examen de admisión a mano alzada gracias a que los mismos se encargaron de propagar esa información como el fuego. Jamás se había visto a alguien con tan alto puntaje en su primera oportunidad.
Como he dicho, antes de tomar su sabático contaba con una gran reputación de talentoso en sus hombros y demostró el porqué desde el día 1. Así que fue una maravillosa sorpresa que pudiera comprobarlo en primera fila cuando comenzamos a trabajar juntos en el taller. Si ya lo consideraba atractivo, verlo en acción hizo que mi interés creciera aún más. Virtud es más bien lo que poseía: convertía una simple hoja en blanco en una réplica exacta de alguna obra, arcilla en esculturas, adoptaría cualquier corriente de arte, tallaría madera con facilidad ...
Poseía unas manos habilidosas y talento innato que se encargó de perfeccionar con la práctica. Ganándose mi respeto y admiración día con día.
Todo esto me cayó de perlas, ya que nuestro grupo originalmente estaba conformado por un número impar de alumnos, así que siempre me quedaba sola en los proyectos y la carga de trabajo era insoportable para mí la mayoría del tiempo. Fue asignado automáticamente como mi compañero y nos acoplamos a la perfección uno con otro ya que amamos nuestro tronco común, somos dedicados, perfeccionistas, con mucha disposición para las tareas y más importante, no juzgamos el arte ni preferencias de ninguno. Él, a pesar de que domina todo lo que se proponga, va más por el tipo abstracto en gran escala y utilizando cualquier elemento a la mano, y yo por el realismo en canvas de tamaño normal.
Diría que comprendo qué es lo que plasma en sus lienzos, pero estaría mintiendo ya que mi inexperto ojo únicamente ve colores y formas sin sentido. Me convierto en una ignorante en cuanto entablo la mínima conversación sobre la materia con él, pero me gusta, siempre es enriquecedora por poco que dure. Es un deleite ser corregida en clase si es de su parte. A cualquier tipo que se atraviese a cuestionar mi desempeño lo mandaría por un tubo directo al infierno, pero no a San. El detalle y respeto que tiene para señalar los errores es tal que el de una madre o padre amoroso que quiere lo mejor para ti. Modula su tono de voz y suaviza sus felinos ojos cuando está apunto de hacerlo. Oh y jamás lo hace en voz alta o frente a nadie para evitar momentos vergonzosos; porque es bien sabido que entre estudiantes de arte las envidias y malos deseos abundan.
Algunos con baja autoestima lo han tachado de insoportable, antisocial o demasiado bueno para nosotros; pero personalmente metería las manos al fuego para descartar esas malas lenguas.
En cuanto se integró al curso dejó muy en claro que no estaba en un grado más avanzado porque no lo había. Por lo que es entendible que irrite a algunos que estamos en el proceso de mejora (me incluyo en el proceso, pero no en los malos sentimientos). Pareciera que tuvo la mala suerte de estancarse con nosotros los amateurs. Más debe ponerse sobre la mesa el hecho que efectivamente no ha hecho "el gran" intento de socializar con el resto. Creo que únicamente nos habla al profesor y otros 10 (¿?) compañeros aparte de mi. Por lo mismo lo han llamado muchas cosas pero yo lo consideraría simplemente serio, hasta tímido me atrevo. Pero con tanta exposición a los cumplidos y tan constantemente, me sorprende que sea así ¡Le llueven los elogios maldita sea! Pero aún así se mantiene estoico ante las palabras.
¿Antisocial?
¿Introvertido?
Tal vez. Eso no quita que tenga un pequeño séquito de seguidoras enamoradas de un par de semestres abajo que asisten a cada una de las exposiciones de la clase, si tienen la oportunidad de verle. Se ha ganado la fama de insoportable por lo mismo; ignorará a sus "fans" como si de la peste se tratara a pesar de que sean bellas o cuanto le adulen. Los demás hombres en la carrera odian eso. Que las chicas saliven en su presencia y él no tenga que hacer el mínimo esfuerzo más que para seguir existiendo. Que el talento le brote de los poros de sus perfectas manos y nosotros hagamos ricos a la farmacéuticas con banditas y pastillas para la migraña.
De vuelta al presente, limpio el sudor de mis empapadas manos contra mi pantalón de algodón. Una mancha de humedad queda perfectamente calcada tras retirarlas, la forma de éstas muy visibles comparadas con el tono deslavado de mi prenda. 
Consigna...
Calificación...
Peso en calificación final...
Lapso de un fin de semana...
Escucho lo que dice pero no comprendo su significado. Jamás me había sentido tan nerviosa, ni cuando presenté mis exámenes de ingreso a la universidad o las múltiples veces en que alguna de mis obras fue presentada al público, ni cuando perdí mi virginidad. Los nervios me atormentan casi al punto de hacerme temblar el cuerpo completo, aprieto la mandíbula para que no castañeen mis dientes.
San está a medio metro junto a mi en esta pequeñísima banca. Y odiaría que piense que soy poco profesional o incapaz de hacer la consigna. Es ahora que deseo nos separaran unos centímetros más. 
Lo que empezó con dibujar rostros, manos o figuras en las sombras; evolucionó en dibujo anatómico de cuerpos completamente desnudos. Y créanme cuando digo que no tendría ningún problema en ver a múltiples personas en cueros múltiples veces; es que... No es lo mismo ser parte de la desnudez de un extraño a serlo de quien has sentido atracción por un rato bastante largo. De alguien que le debas tanto respeto y admiración como le tengo. Casi un ídolo.
Al momento de elegir quién sería el artista y quien sería el modelo (que por cierto cuando fue nuestro momento de comentarlo no pude ni decir una palabra sin tartamudear), casi toda la clase permanecimos enmudecidos por bastante rato hasta que el catedrático hizo presión a nosotros. 
Nos fuimos por la elección más común entre nuestro acuerdo no verbal. Quien domine mejor esa técnica, es el artista; el otro pasa a ser auxiliar o herramienta. San sería quien modelase para mí ya que yo domino un poco mejor la tecnica de grafito (o esa fue la razón mentira que nos llevó a tomar esa decisión), cuando en verdad habría hecho o dicho todo lo posible por no desnudarme yo.
Ni siquiera nos dieron tiempo para planificar en lo absoluto. Según el profesor, es demasiado fácil para otorgarnos más de un fin de semana. 4 días exactamente si contamos la noche de hoy jueves. Para no perder valioso tiempo, acordamos vernos en el aula de dibujo donde usualmente tenemos la clase, a las 8:00 pm cuando ambos concluyeramos nuestras respectivas materias u ocupaciones laborales. Y bueno, siendo honesta, para asegurar que nadie malinterpretara si llevo a un chico a mi complejo de departamentos donde solo admiten chicas, o ser juzgada por sus compañeros de casa si me llevase a mí. Haríamos el trabajo lo más rápido posible y daríamos por acabado esto. No hay que quebrarse la cabeza con esto, ¿Verdad?
Es solo una consigna, no un crimen.
El resto del día no puedo enfocarme en mis demás clases. Pienso en como sostener la barra de grafito sin temblar o que posición adoptará para que lo retrate. No puedo ignorar el pequeño flujo que sale de mi coñ* cada vez que pienso en eso. En su torso tonificado que he espiado bajo sus playeras flojas, o las piernas carnosas a las que se ciñen sus jeans. Tampoco me engañaré diciendo que no he observado su caminar e imaginado el compás de sus caderas torturando las mías. Ha sido el protagonista de mis sueños húmedos demasiadas veces.
¿Donde colocará sus manos?
¿Se inclinará o recargará?
¿Obedecerá toda indicación que le dé?
Carajo, tengo que ir al baño rápido a arreglar este desastre que me causado en mis panties. Debo tocarme porque mi cuerpo lo pide a gritos. Y como perr* en celo, llego al orgasmo en unos vergonzosos 3 minutos solo pensando en su desnuda figura.
Esto me ayuda a sobrevivir hasta que se me llega la hora de volver al taller. Un mensaje llega mientras ya estoy recorriendo el pasillo principal del edificio de artes.
¿De quién podría ser?
Si... De él. Dice que no sería posible encontrarnos a la hora indicada; no le permitieron salir temprano de la academia donde toma clases de Tae Kwon Do. Un extraño dolor en mi corazón pero alivio a la vez hace que frene mis pasos en seco.
"¿Podremos vernos mañana por la tarde? Hoy es prácticamente imposible llegar." 7:45 p.m
“No lo creo, es cumpleaños de mi papá, regresaré a casa para el fin de semana. Mañana por la tarde me habré ido.” respondo contemplando el poco tiempo de anticipación
“¿Tienes planes para más tarde? Tenemos encima la fecha de entrega”
"No, pero dijiste que era imposible llegar. Bueno, dijiste que prácticamente"
"A la hora original. Podría llegar a media noche"
"¡¿Media noche?! No nos darán acceso al aula"
"A tu departamento me refería"
Mis ruidosos pensamientos enmudecieron tras leer su mensaje. Releí varias veces su respuesta antes de darle la mía.
"Puede que sí, no tengo clases temprano. Nos desvelamos trabajando" espero y luzca como que no le doy importancia
"¿Puede que sí?"
"Si, perdón, esta bien para mi. Te veo más tarde"
Comparto la ubicación de mi departamento y me devuelvo para aprovechar que aún no ha oscurecido del todo. Era alguna de las pocas personas que seguían aquí, y si no tenía motivo alguno para quedarme, es claro que no lo haré. Ni siquiera para distraerme de mis obligaciones.
El camino de regreso pasa sin pena ni gloria. La mente tan ocupada que no presta atención a los alrededores hasta recobrar la consciencia cuando el aire acondicionado del edificiome pega en la cara y saca de mi transe. Vine hasta acá sin pensar realmente, únicamente la memoria muscular es lo que me hizo llegar al lugar correcto.
Para entrar en mí misma y bajar los nervios, tomo un baño de agua helada. Evito comer algo porque no me apetece.
“Llegaré antes” 9:22 p.m
Suelta otro balde de agua helada a pesar de ya haberme sumergido en uno por mi cuenta.
"Perfecto, ¿A que hora?" 9:25 p.m
"De unos 20-25 minutos" 9:26 p.m
Ya no es un balde, es una bomba que arrasa con todo a su paso.
"Me avisas al estar afuera, necesitas que te dé acceso al edificio"
"Entendido" 9:30 p.m
Puedo con esto, es lo mío. Repito en voz alta interminable para calmar las ansias unas 100 veces sin respiro hasta que el tono de llamada irrumpe mi forzada paz. No respondo, únicamente aprieto el botón del intercomunicador para darle acceso, tampoco le digo nada ahí.
1...2...3...4...5 segundos le toma llegar con sus largas piernas hasta mi puerta. Tomo un trago de agua para la garganta seca (repentinamente).
- Buenas noches, me disculpo por adelantado por mi "aroma", no pude tomar un baño por las prisas de no hacerte esperar tanto. - recalca AROMA con sus dedos
- No hay problema Choi, pasa. -
Con una pequeña sonrisa hace caso a mi invitación, y pasandome por unos centímetros delante es que su AROMA golpea mis fosas nasales. Carajo que olor a hombre tan intenso. Existe la ligera acidez por el sudor mezclada con las sobras de su colonia que usualmente usa (que también me encanta), y un calor corporal que irradia sus cercanías.
Estoy una vez más empapada de la ropa interior con esa fuerte esencia de masculinidad.
- Tienes un lindo lugar, muy tú. -
- Te agradezco, ¿puedo ofrecerte algo? -
- Agua está perfecto. -
Mientras le doy la espalda, se ocupa en darle un buen vistazo a donde vivo y memorizar pequeños detalles de lo que ve. Trata de sacar algo de platica para aminorar la tensión.
- ¿Estás lista? -
- Claro, ¿y tú? -
- Yo no haré nada más que posar jaja, y aún así, lo haré en la manera que me indiques. Asi que, ¿Estás lista? -
- Cierto... ammm ¿Te apetece algo más? Puedo prepararte algo de comer si tienes hambre, o pedir algo, ¿Quieres más agua? -
- jajaja tranquila, solo es un retrato. Lo harás bien, no te angusties tanto. - ríe suave ante mi notorio nerviosismo
- Si, es que te seré sincera. Me intimida mucho todo esto. -
- ¿Es así? ¿He hecho algo para intimidarte? -
- No me refiero a eso. Es que eres un gran artista y es tu reputación lo que me intimida. No poder crear algo digno o que se asemeje a lo que podrías hacer. -
- No entiendo. - un ruido involuntario de confusión sale de mi pecho sin aviso - Eres una gran artista por igual t/n, me asombra que me digas eso. Y es que yo también me siento intimidado por ti. -
- oh Choi no me mientas para darme confianza. -
- ¡No lo hago! Y dime San por favor, odio que me llames tan formalmente, me hace sentir más viejo de lo que ya soy. -
- Ok San, pero por favor no trates de engañarme para sacar habilidades que no poseo. ¿Cómo es que alguien podría compararse contigo en las artes? -
- Tú podrías responder esa pregunta por ti misma, ¿Acaso no expusimos juntos y solo nosotros dos hace unas semanas en la galería? ¿Acaso no recurro a ti para consejos y opiniones? - asiento a sus preguntas - Eres más talentosa y brillante que muchos de los profesores en la facultad pero no lo ves porque la EDAD tiene más peso a tu percepción que la realidad; pero eres demasiado buena para dudar de ti o tus capacidades. Aprecia un cumplido cuando te lo hacen.-
- Creo que nadie me había hecho sentir tan bien conmigo misma desde hace mucho. -
- ¡Perfecto! Ahora canaliza esa felicidad en papel. -
¿Todo fue un estructurado plan para romper el hielo?
¿Miente para hacerme sentir mejor?
¿Miente porque cree que así tendre un mejor desempeño?
Como sea, utilizo esa adrenalina recién obtenida para comenzar nuestro proceso. Llegamos a la pequeña habitación closet que he destinado para estudio de creación y comenzamos a instalar lo que será el fondo: una cortina blanca para dar enfoque al objeto San y una desván que será su apoyo. Es un trabajo en dueto donde no se comparten muchas palabras ya que es el proceso que siempre seguiríamos para dibujar bodegones por ejemplo; osea, ya conocemos lo que cada uno debemos hacer y cómo hacerlo.
Tal como conseguí ese boost de adrenalina, tal cual lo pierdo. Pareciera que retira sus ropas en cámara lenta para mí deleite. Dándome tiempo de guardarlo en mi memoria para siempre para esas noches de insomnio donde un orgasmo ayuda a relajarme para conciliar el sueño. Tras liberarse de su camisa, su olor varonil se intensifica. No molesta en lo absoluto, al contrario, es un afrodisíaco potente. Cuando sus manos perfectas llegan a la altura de su cintura considero mandar todo al demonio y arrodillarme a m*marsel*, pero la idea sólo se queda en mi cabeza. Tan tentadora como el escenario que estoy presenciando. Tras ese jogger holgado se esconde un culo tonificado donde podemos apreciar cada musculo que lo conforma... glúteo medio, glúteo menor y tensor de la fascia lata... hmmm perfectamente definido.
- Y entonces, ¿Cuál es tu visión? - tengo que fingir que estaba distraída arreglando cualquier estupidez y no viendo el espectáculo de striptease. No irónicamente, trago la saliva que se acumula en mi boca tras 1 segundo y miradas de reojo a su verga bajo mis narices. Es un esfuerzo sobre humano para no darle una buena mirada.
- Pensaba en recostado, con la pierna derecha ligeramente doblada y los brazos bien abiertos a los costados. En cuanto al rostro, en dirección al lado opuesto. -
- ¿No verte? -
- ajam -
- ¿Te importa entonces ayudarme a acomodarme? - asiento y me acerco a él. Su cuerpo permanece en la misma elevada temperatura, puedo percibirlo antes dr tocarlo siquiera. Con algo de timidez tomo su brazo y lo paso sobre su cabeza quedando su mano colgando en el respaldo, ya estando ahí, giro levemente su rostro en la misma dirección del brazo. Para respetar su privacidad, considero que una pierna, en este caso la derecha, estaría bien que quedara ligeramente elevada para cubrir sus bien dotadas partes nobles.
- Tu eres la artista, confío en tu visión. -
- Gracias. -
Y sin muchas palabras de por medio, iniciamos con la sesión de dibujo. Solamente siendo distraídos de vez en cuando por los sonidos fuera del departamento, ajenos a nosotros.
Tras una fuerza sobre humana y morderme los labios, es que "terminé" nuestro trabajo en conjunto. Excelente al ojo de quien no aprecia el arte a profundidad, mediocre ante los nuestros. Y esto bien lo sabía, a cada trazo de la barra de grafito; pero no me detuve con la esperanza de que mejora al final. 'Confía en el proceso' me repetía. Y es que mi dibujo no evoca nada, ni siquiera sensualidad a pesar de que se trate de un desnudo con las características físicas de San.
Estaba... ¿Molesto? Me costó poder descifrar algo. Sus ojos no se arrugaron en señal de ello. Tampoco como decepción. Como dije, algo en él cambió pero no pude identificar qué exactamente. Amable como siempre, solo me dijo.
- Puedes hacer algo mejor. -
- Lo sé. -
- Hazlo. Te ayudaré. -
- ¿Cambiando lugares? -
- No, terminarás lo que empezaste. -
- No puedes hacer el dibujo si estás allá. -
- Tampoco. Solo te daré consejos en el proceso. Además de cambiar de posición, ¿Cómo se supone que transmiras algo si ni siquiera me ves a la cara? Tambien yo tengo que poner un poco más de mi parte, es injusto dejarte todo el trabajo, ser modelo también implica esfuerzo. -
Asiento mientras se aleja de regreso al sofá. Sus redondas nalgas brincan un poco con cada paso. Cuando llega a éste, no se recuesta como esperaría, sino que se recarga en la parte más elevada del respaldo viendo de frente, tensando sus músculos abdominales por la inclinación que adquiere su espalda. Levanta la mirada para clavarla a la mía.
- Comienza, primero céntrate en mi y luego harás el fondo o el sofá, como decidas. Pero concéntrate en el cuerpo. - no respondo al instante y eso lo desespera - Comienza. - eleva su tono para que reaccione
Dibujo una silueta en mi cuaderno, voy definiendo las curvas de sus músculos y líneas de estos hasta llegar al interior. Su brazo yace en su muslo, cerca de su miembro relajado, comienzo a trazar unas líneas para darle forma. No se que es difícil, si dibujar su entrepierna o mantenerle la mirada en el momento en que veo ligeramente hacia arriba.
Apenas y mis ojos siguen otra dirección, ya me encuentro con los suyos que me regañan sin decir nada por no ser capaz de concentrarme.
- Creo que sé qué es lo que te detiene. -
- ¿Para que? -
- Para estar a mi nivel. - enmudesco tras su demostración de ego que pocas veces había visto. Claro que sabía que ha puesto a varios compañeros en su lugar cuando trataban de demeritarlo, y lo había escuchado a lo lejos criticar fuertemente nuestro desempeño. Específicamente cuando llamo la reintepretación del Nacimiento de Venus de alguien "un pedazo de porquería al que con gusto escupiría si no fuera tan repulsivo de ver". Pero nunca jamás había hecho algo para hacerme sentir inferior intencionalmente. Así que aunque no fuera la gran cosa o tan ofensivo como con otros, sacude mi mundo.
- Eres distraída, ¿Cómo se supone que podrás ser mi competencia? -
- No busco serlo. -
- Si no eres tú, ¿Quién? Debes trabajar en ello. Empezando por ahora... no habías notado lo duro que me ha puesto verte así. - como en cámara lenta, me topo con un miembro erecto. Malicia, eso era. Lo que no pude descifrar. - Apuesto que querrás meterlo en tu boca, pero no lo harás. Vas a plasmar ese deseo en el maldito papel. Si fracasas, no te cogeré hasta llorar; como perfectamente sé que te gustaría. Ahora ponte a trabajar. -
Apenas y se calla, mis temblorosas manos ya están en acción. No es lo que esperarían, es una adrenalina inesperada que impulsa a la centésima potencia mi rendimiento. Me convierto en una adicta con la promesa de una dosis más de su droga. Si algo sale mal, mis dedos descubiertos salen a la acción para repararlo. Es todo menos pulcro.
Parpadeo contadas veces, así no perderé detalle de su cuerpo. Sus muslos ligeramente abiertos para exponerse bien, cómo sus test*culos están apretados por la dolorosa erección que mentiene desatendida, sus manos aparentando el acolchado y su pierna respectivamente.
- Levantalo para que pueda verlo. - obedezco - Perfecto, haz terminado mi brazo, ya puedo hacer esto. - Y como leyendo mi mente, levanta el brazo que apenas había terminado y lo lleva a su miembro, escupe en él desde la altura y comienza a frotarlo de arriba a abajo. A este punto mis panties escurren a través de mi ropa, no dudo que mi olor llegue hasta allá. Toma un color más rojizo con cada apretón.
- Regresa, aún no haz terminado. - sin notarlo ya me había acercado un poco, dejando abandonado el cuaderno y demás instrumentos. - Estás tan cerca de terminar y lo has hecho taaaan bien, preciosa. Mi preciosa y talentosa t/n. -
- Por favor... -
- Estamos trabajando. Tienes que dejar de ser tan distraída. -
- Es mucho... por favor... -
- Así tiene que ser. Si lograr hacerlo hoy, será más fácil en un futuro. -
Continuo mi calvario hasta el punto de no retorno. Ignoro el sabor metálico en mi boca por morder mi labio con tanta fuerza y por un prolongado rato. Él no deja de darse placer frente a mi, ahora suelta unos deliciosos gemidos con cada movimiento. Me tiene al borde del colapso y lo sabe, no se calla con su maldito 'plasmalo en el papel' o 'transmite eso que sientes en el papel'. Ningún puto consejo como prometió, solo un tortura.
- No puedo dibujar tu rostro si no dejas de contorsionarlo. Para de fruncir tu ceño. -
- Ven acá. Trae esa cosa contigo. -
Me levanto para acercarme pero mis piernas fallan, un buen chorro de mis jugos se quedan manchados en mi anterior asiento.
- Delicioso mi preciosa t/n. Delicioso como cada cosa que tenga que ver contigo. Arrastrate hasta acá si no puedes caminar, debemos terminar esto. -
Gateo hasta quedar a sus pies, más específicamente a la altura de sus rodillas ya que he quedado rendida física y mentalmente. Con la misma mano con la que se ha dado placer, toma mi rostro y lo levanta.
- Mantente, y no apartes la mirada ni cierres los ojos. Tampoco hables. -
Me suelta y regresa a lo que hacia antes. Su tamaño a todo flujo cubre casi todo mi rostro, apuesto que apenas puede verme bien desde ese ángulo. Saltaría a ayudarlo si no estuviera tan drenada de energía.
- Carajo t/n, si no fueras tan mojigata las cosas serían tan diferentes. Si te hubieras postulado como modelo, te habría hecho venir tantas veces que toda la clase de habría enterado que cogimos al ver nuestro dibujo. Ahora estarías llorando en este mismo lugar rogando que te permitiera venir una vez más. -
- Por favor termina en mi cara. - interrumpo su dirty talk para serle de ayuda por lo menos en esto. - soy una inútil que solo puede estar aquí lista para beberme tu leche. Por favor déjame al menos probarte San. Termina en mi cara y boca. - unas lágrimas de cocodrilo escurren de mis ojos cansados, dando más la impresión de jodida que estoy segura disfruta. Una grata sorpresa para él... casi al instante su *sp*rma escurre por mi rostro. No titubeo ni cierro los ojos mientras alcanza su orgasmo.
- Mi preciosa y juguetona t/n. No eres menos de lo que esperaba. Ve lo que has creado... algo bello y real. - se agacha para levantar el dibujo. Que ahora tiene unas cuantas gotas de s*men y lágrimas que lo manchan. - Es perfecto y lo has hecho tú, estoy tan orgulloso. -
Sus palabras llenan mi corazón. Él es el San que conozco, dulce y preocupado por que dé el 100%
- Vamos a llevarte a la cama que mañana tienes que ir a casa con tu familia. Lastima que no podrán ver la belleza que acabas de crear, sabrán que su preciosa hija es una artista de método. -
21 notes · View notes
multyeverything · 11 months
Text
8K notes · View notes
multyeverything · 1 year
Text
Tumblr media Tumblr media Tumblr media
he’s giving us fanfic material and I appreciate it.
459 notes · View notes
multyeverything · 2 years
Text
Halloween Party
Autor: multyeverything
TW: Consumo de drog*s, semi exhibicionismo, groserías e insultos, angustia, sexualidad, fing*ring, or*l, p*n*tración, nulo uso de preservativo, mención de sangr*.
Rating: 18+ (Smut)
Sinopsis: Todos obtienen un poco se diversión en Halloween. Desde los más pequeños hasta los más grandes la pasamos bien.
Algunos la pasamos mejor con los chicos malos que no tienen temor en tomar lo que quieren.
Au: Strangers to lovers
Emparejando: Im Chang-kyun X lectora femenina
Conteo de palabras: 2k
━━━━━━━━━━━━✧❂✧━━━━━━━━━━━━
Tumblr media Tumblr media
09:37 pm
Doy los toques finales a mi maquillaje facial antes de que lleguen las chicas por mí. Quedan miles de pecas que poner en mi rostro antes de estar lista.
Tic tic tic, cada segundo es vital.
Mi gusto por Halloween me ha hecho pasar por los disfraces más extraños hasta los más provocativos año con año: de botarga de Barney hasta conejita playboy, y todo lo que hay en medio.
¿Buscas una buena idea para ti? Basta con revisar mi instagram para inspirarte.
El disfraz por el que he optado este año es algo mucho menos llamativo que los anteriores por el poco tiempo de preparación que tuve, verán: Me enteré demasiado tarde que la fiesta ofrecida anualmente por la sociedad de alumnos no sería cancelada en esta ocasión tal como se había anunciado. Algunos vecinos de las casas de estudiantes levantaron una queja por ruido excesivo en la última reunión, para calmar las aguas con la policía, la sociedad de alumnos dijo que era el último strike. Todo parecía perdido.
Cómo era de esperarse, la mayoría de los alumnos levantaron la voz en contra de esos pocos y ganaron la disputa. La única condición que puso el decano fue que no se realizaría el viernes en qué originalmente se celebra la fecha, sino una semana antes.
Pero claro, la señorita distraída no se enteró del desenlace de esa historia a tiempo. Todo por haber olvidado mi teléfono en el salón de clases durante todo un fin de semana.
¿Para qué una semana antes? Se preguntarán al igual que yo lo hice al enterarme.
Se supone que de esta forma los ánimos no estarían tan altos y la fiesta sería más tranquila. Vaya que se equivocan.
Como sea, yo no tenía idea del desenlace de esta odisea y estaba resignada a dar dulce o truco a los menores mientas me emborrachaba sola viendo películas de terror. Cuando por fin pude recuperar mi dispositivo un lunes a primera hora y revisar la lluvia de mensajes al respecto, ya quedaban menos de 5 días para la fiesta. No planeación equivale a no disfraz.
Por suerte encontré un vestido olvidado en los rincones de mi clóset listo para ser arruinado con pintura vegetal simulando grandes manchas de sangre (excluyendo el pelo). Voy como una sensual y menos escalofriante Carrie, incluso llevo un ramo de rosas que recibí y la tiara de coronación. Ya saben, para esos pequeños detalles importantes.
Poca o mucha planeación, me veo increíble en estos harapos, mas apegado imposible. Lista para lo que sea que la noche me depare.
11:33 pm
Las luces color neón de la casa anfitriona son apenas suficientes para iluminar los rostros de los invitados.
Muchos súper heroes, personajes de series, algunos vestidos del sexo opuesto, villanos, y una que otra máscara. La identidad de quiénes estén detrás de ellas me es totalmente desconocida. Algunos nombres pasan por mi mente, pero dudo mucho que se trate de alguien de la misma escuela con tantos invitados presentes.
Hasta ahora son varios los que han reconocido el personaje en quien me he inspirado esta noche. También hay cada imbécil llamándome todo tipo de nombres menos el correcto.
¿Que películas de mierda ven estas personas?
¿Nadie conoce a la icónica Carrie?'
Proponen a las chicas y yo unirnos al juego de beer pong que llevan a cabo en patio. Es mi tercer trago y apenas siento los efectos del alcohol en mi sistema, ¿Por qué no acelerar el proceso un poco más?
1... 2... 3... 4... 5...
Acierto tras acierto tras acierto.
Descubro algo que no sabía sobre mí misma... tengo una puntería de mierda.
La multitud se forma al rededor de nosotras para ver la derrota más humillante ante los chicos de la estatal, que son sin dudas unos expertos en lo que hacen.
02:10 am
La música retumba mis tímpanos. Canciones en idiomas que no entiendo me tienen "bailando" (frotando el culo) con Karina a mis espaldas. Las dos estamos en éxtasis literalmente y diversión que hace mucho no sentíamos. Un tipo nos ofreció algo para bajar el alcohol y aceptamos.
Tanto mi tiara y rosas como sus pompones de porrista yacen en el sofá abandonados donde ahora Ning Ning se come a besos a alguien. Vaya que es guapo el chico pero que parece le arrancará el labio.
En conjunto con lo que estén fumando a nuestro al rededor, el cansancio por fin ha caído en nuestros hombros.
- ¿Conoces a ese tipo? - veo un imponente ghostface frotar su muslo cubierto de tela negra, como invitación a acercarme a su asiento. Dudo en aceptar su propuesta
- En la vida lo había visto t/n. Pero no hay que perderla de vista - grita en mi oído para que pueda escucharla sobre el ruido a nuestro alrededor
- No me refería a él -
- No te escucho, ¿Qué dices? -
- Que no la deja ni respirar carajo. -
- ¿Envidia? -
- Un poco. Tengo ley seca desde hace unos meses, creí que está noche la rompería. -
- ¿Algún prospecto? -
- No, nadie me agrada. -
- ¿Ni para la noche? Vamos baja las expectativas un poco o seguirás seca un poco más. -
- No, todos lucen como si su rostro real fuera una máscara terrorífica. -
- ¡Que cruel! Entonces deberías hacerlo con alguien que en verdad tenga máscara. Lo hacen en la oscuridad y listo. -
- Tal vez lo haga, así me evito charlas innecesarias. - la música nos ha hecho dar una vuelta, cambiando de lugares
- ¿Qué tal él? - señala desvergonzada al mismo ghostafe sentado a pocos metros, la cabeza inclinada un poco de lado hace que mi terror/atracción aumente
- ¿El asesino de Scream? -
- ¿No ves lo sexy que se le ve ese traje? -
-Bueno sí, pero y si te equivocas. Tal vez te esté viendo a ti. -
- Sé diferenciar cuando alguien me está observando. Podría jurar que te ha visto toda la noche, no estoy tan afectada por las drogas como tú. Estaba cuando llegamos, cuando jugamos bp y desde hace rato en aquí. -
- ¿Debería esperar un poco más? - no paramos de bailar en ningún momento que hemos tenido la conversación
- ¿Importa? Todos están en lo suyo. Si a Ning no le interesa, ¿Por qué a ti si? - tiene razón, todos los presentes están al borde del colapso por ingesta de sustancias o encima de sus parejas, a nadie la importa un demonio si decido ir a casa con un desconocido muy sensual - Ve ahora o lo haré yo. -
Antes de que cumpla su palabra y vaya por mi presa, abandono su lado para ir con el villano. El cómo va levantando la mirada con cada acercamiento mío, confirma que sí estaba observándome.
Abre sus piernas un poco más cuando estoy a punto de sentarme para acaparar el pequeño espacio y tenga que hacerlo en sus piernas.
- ¿Pensabas en algún momento acercarte? - rodeo su cuello con mis brazos mientras hablo
- Quería cazarte un poco más antes de hacerlo. Pero eres una amable chica en venir antes. - envuelve mi cintura con su brazo izquierdo. Su voz es grave, aunque me cuesta escucharlo por el volumen de la música y la tela de su máscara distorsiona sus palabras.
- De nada. Ya no tienes que esperar más, voluntariamente he caído en tus garras ¿Harás algo al respecto? -
- ¿Quieres dar un espectáculo? - su propuesta roba cualquier palabra que pueda responder, ¿Esta implicando que quiere hacerlo frente a todos? - Ven, sé dónde tendremos privacidad. - levanta mi peso de su pierna y estira la mano para guiarme a dónde sea que quede ese sitio privado.
'Prohibido el paso para los no miembros'
Terminamos en la habitación de uno de los chicos anfitriones. Comiéndonos a besos apenas cerrando la puerta, vaya que besa bien.
La oscuridad no permite que vea el rostro del cazador y desconozco dónde esté el interruptor del bombillo, ya que jamás había subido hasta el tercer piso de la casona.
Arranca de sus manos los oscuros guantes de cuero para tener el placer de recorrerme el cuerpo piel con piel directamente, o le sea también más facil el deshacerse de mi ropa. Carajo, ni la luz de la luna que se filtra por entre las cortinas es suficiente para distinguir un solo rasgo. 
A movimientos apresurados terminamos en la cama, donde los besos mojados por el cuello no se hacen esperar apenas y abandona mis labios.
- Puedo saborear el alcohol derramado en tu cuello hace rato. - escucho su voz claramente por primera vez, es profunda y rasposa tal como sus manos en mi trasero.
- Puedes borrarlo con tu lengua si gustas. -
- Un gusto muñeca.- me causa un gemido con el apodo usado - ¿Te gusta que te llame así? Muñeca... muero por probar tu coño. - fisicamente me siento derretir en sus brazos
- Por favor... -
- No hay necesidad que lo pidas. El gusto es todo mío muñeca. -
Sin esperar un segundo más, baja hasta mi entrepierna y habilidoso devora de mí con ayuda de sus dedos. ¿Debo mencionar la manera en que estoy gritando?
Es vergonzoso admitir el hecho que no puedo controlar mis expresiones conforme aumenta la velocidad y profundidad de sus administraciones. Inclusive permite que llegue a mi orgasmo sin que tenga que suplicarle, tal como han hecho algunos tipejos pensando que es sexy (lo es, pero no con ellos supongo). Para regresar el gesto, me levanto apenas me he recuperado y beso sus labios para saborearme en ellos, después empujo sus hombros al acolchonado. Trato de bajar hasta el final de su bata negra parte del disfraz pero me detiene antes de separarme. 
- Yo soy quién está en control. En cuatro ahora. - habla autoritario
Sobresaltada por su dureza, obedezco inmediatamente. Aprieto de las almohadas para soportar el dolor que es que entre en mí. Ha pasado un rato desde que estuve con alguien.
- ¿Puedes ir despacio? -
- Sólo porque eres linda y lo pediste tan tiernamente. -
Posa su mano en mi espalda baja para darme cierta estabilidad mientras invade mi cuerpo. Con la otra dirige su miembro palpitante.
Mierrrrda se siente bien. Duele tan delicioso.
¿Alguien más ama a los hombres vocales que no tienen vergüenza en demostrar lo mucho que disfrutan? Con cada embestida sale un gemido de sus expertos labios. Entre su cuerpo y su voz, me tiene volando más alto que cualquier cosa que haya consumido hace rato.
Poco a poco ha aumentado su ritmo y fuerza hasta tenerme boca abajo con la brutalidad de sus movimientos. Todo pensamiento que pudiera quedar en mi cabecita ha desaparecido, no puedo pensar en nada más que con mi coño.
Cuando el nudo comienza a formarse en mi vientre, abruptamente se detiene. No logro descifrar lo que ocurre a mi alrededor. Son como imágenes tomadas con diferencia de tiempo entre cada una.
La puerta abriéndose...
Karina entrando desesperada en mi búsqueda...
Karina empujando a ghostface lejos de mí...
Él vistiéndose y pasándole mi ropa a Karina...
La acera donde estacionó el auto...
Mi puerta...
Mi cama...
Y el reloj, 6:21 am.
9 notes · View notes
multyeverything · 2 years
Text
El ascenso
Tumblr media
Autor: multyeverything
TW: Semi exhibicionismo, groserías e insultos, angustia, sexualidad, sumisión forzada, fing*ring, or*l, s*xo p*n*trativo, comportanmiento infantil, comportamiento vengativo, insolencia por parte de protagonista.
Rating: 18+ (Smut)
Sinopsis: La oportunidad de subir de nivel en un trabajo de pacotilla se presenta, después de tanto trabajo parece que llegarán los deliciosos frutos de éste.
¿El problema? No soy la única que lo desea.
¿Lo peor? Quien he hecho de mis días un infierno es mi mayor competencia para conseguirlo.
Au: Aventura en la oficina / enemies to lovers 
Emparejando: Suh Johnny X lectora femenina
Conteo de palabras: 5k
━━━━━━━━━━━━✧❂✧━━━━━━━━━━━━
- Maldita sea, a este paso jamás seré capaz de salir de casa de mis padres. -Reviso por enésima vez en el día mi sustrato bancario en la aplicación para móvil. Con lo que recibí este mes apenas cubro las deudas que adquirí en mi fallida inversión y la renta de mi habitación, por increíble que sea, que mis padres me han dado por seguir viviendo bajo su techo. Quedando con unos pocos centavos que van al fondo de ahorro.
En un mundo laboral tan competitivo como lo son las finanzas, los buenos puestos con salarios suficientes son tan escasos que habemos quienes nos tenemos que conformar con puestos mediocres, a pesar de haber salido con excelencia académica. Aquí los ascensos aparecen una vez cada siglo y son tan peleados que muchos quedan sólo con la frustración. 
Esa oportunidad ha llegado a mi vida tras 5 años de haber llegado aquí; soy una muy buena aplicante y estoy dispuesta a pasar por encima de quien se atreva a meterse en mi camino, incluído al pesado de mi compañero John, Johnny para los amigos. Ese gigantesco patán se ha convertido en un dolor en el trasero desde que llegué a trabajar a la empresa a este mismo puesto: siempre criticando mi trabajo, ignorándome cuando tengo alguna duda o problema, reportar si llego tarde o me marcho aunque sea 1 minuto antes, no notificandome de las órdenes recibidas, etc. Un cubículo de 2x2 es lo único que nos divide, evitando que nos lancemos a la yugular del otro.
Lo admitiré, he sido una enorme perra con él en varias ocasiones, pero en mi defensa solo lo hice porque él lo inició. Como cuando corrí el rumor que tenía una ETS, que su tesis universitaria había sido plagiada, tiré de  los cables de su ordenador antes de poder guardar su trabajo del día… Una desgraciada hecha y derecha, pero no siento el mínimo de remordimiento.
-Oye t/n, cuando me den el ascenso me aseguraré de llevarte conmigo. - arrastra su silla móvil fuera de su lugar para que pueda verlo, ya tiene bien puesta su máscara de amabilidad
- ¿De qué hablas John? - Una fachada amable es la que ambos presentamos siempre a nuestros demás compañeros, ya que ninguno está dispuesto a tener una llamada de atención que ensucie nuestro currículum. Nadie adivinaría que existe un repudio tan profundo si no hiciera una pequeña investigación a nuestra historia.
- Te haré mi secretaria personal linda. Tu pequeño escritorio estará frente al mío por un tiempo más, ¿No es eso hermoso? -
- Prefiero ser despedida a eso. - No, claramente no puedo ser despedida ahora pero somos como perros y gatos, me es imposible no responder a sus provocaciones.
- Claro, necesitarás cambiar algunos aspectos si quieres serme útil ¿eh? Utiliza un poco más de maquillaje, una falda más ajustada, ah justo como Susan, y me encantaría que todos los días me recibieses con una sonrisa de oreja a oreja con un “Buenos días amo y maestro Suh”. - me saca una risa involuntaria
- Cuando YO obtenga el puesto, me encargaré de que jamás puedas salir de la sala de copias por el resto de tu carrera. Así no tendré que ver tu cara jamás. - aprieto tan fuerte los dientes en una falsa sonrisa que las piezas bucales saldrán volando en cualquier momento
- Y pensar que yo iba a ser bueno contigo, ¡Que idiota fui! Olvida mi propuesta, puedes quedarte aquí si tanto quieres. -
- Tú recuerda mi promesa. - sin más regreso a mi ocupado itinerario
Mis dedos escriben a la velocidad de la luz para terminar el informe que me pidió mi jefe antes de la fecha programada (mañana) y sorprenderlo con mi eficiencia, así verá que las tareas que me asigna quedan cortas ante mis desperdiciadas habilidades, pienso. Esta es una racha que he tratado de mantener desde hace unos meses que se empezaba a rumorear del puesto que se abriría. Cuento los segundos para el momento en que salga de aquí, lo cual se anunciará en la fiesta de aniversario del grupo empresarial del que formamos parte. Un hermosísimo vestido negro espera en mi closet listo para ser usado. Vestido con el que quiero dejar claro que sigo siendo la rompecorazones de la empresa y no la farsante Susan y su escote relleno de papel higiénico. Sueño con esa noche donde también humillaré a John mientras luzco sensual como el infierno. 
Como si fuera una clase de castigo, John y yo somos llamados a los pisos superiores para encontrarnos con nuestro superior poco antes de dar por terminada la jornada. Afortunadamente la asistente del jefe está con nosotros en todo momento, sin saberlo, evitando otro enfrentamiento verbal. Presto nula atención a la conversación que se está desarrollando entre ellos, seguramente está coqueteando con ella como lo hace con cualquier mujer que se cruza en su camino, maldito mujeriego. Unos pisos antes de llegar a la cima, sube al elevador Mark, quien es encargado de publicidad, un chico un poco mayor que yo, amable y muuuy atractivo, con quien algunas veces he coqueteado discretamente. Sus ojos se abren al notar mi presencia.
- Buen día. - dice al acomodarse al fondo junto a mí
- Buen día. - respondemos todos al unísono
- ¿Ocupada? - habla en voz baja 
- Ligeramente, sí. -
- Ya veo, ¿Y después del trabajo también? -
- No lo sé, depende. -
- ¿De qué depende? -
- Si algún valiente me invita a cenar. -
- Conozco a alguien interesado. -
- hmm, ¿Es guapo acaso? -
- Mucho. -
- ¿Gracioso? -
- Dicen por ahí. -
- ¿Interesante? -
- Mucho, honestamente podría pasar horas tan solo escuchándolo. -
- Que triste. -
- ¿Cómo? - no oculta su sorpresa
- Un hombre que podría pasar horas hablando y sólo ser escuchado, no es uno que me interese. -
- Fierecilla. -
- Por algo debo ser conocida ¿no? -
- Y vaya que te das a conocer. - sonrío con los labios coquetamente - ¿A qué hora terminas t/n? -
- Te haré saber, ¿Tienes una tarjeta? - apresurado saca una de su saco - Nos vemos Mark, éste es tu piso. -
- Si si, adiós. - embobado queda esperando que se cierre la puerta sin perder contacto visual. 
La chica cuyo nombre desconozco nos acompaña hasta estar ambos sentados frente al larguísimo escritorio de caoba fina; esta parte del edificio es donde se encuentran los altos cargos, llenos de hombres gordos como leones marinos, pinturas que juraría son originales de reconocidos artistas, muebles tan finos que temo lastimarlos si me acerco demasiado, asistentes tan delgadas que parecen sacadas de catálogos (y apuesto son las actuales amantes de ellos). El panzón esclavista que es dueño de todos nuestros traseros llega inmediatamente para encararnos. 
¿Podría tornarse peor? Claro que sí. Siempre puede. 
El monstruo pide, no no, ordena a ambos nos quedemos a preparar una elaborada presentación sobre la inflación y los mercados actuales para los funcionarios de gobierno que, adivinen, vendrán mañana por la tarde a visitar el recinto para un programa gubernamental que implementarán, en resumen, haremos SU trabajo en un lapso de tiempo imposible para gente que puede desaparecernos de la faz de la tierra si les molestamos.
¿Cómo logró que aceptáramos? Dos razones: Es nuestro jefe y no podemos decirle que no a ninguna orden; y que textualmente dijo “Lo que resulte de vuestro trabajo conjunto definirá el destino de ambos puestos, pongo en sus manos los argumentos para su éxito”. 
Eso nos bastó para callarnos la boca en todo nuestro regreso a nuestro piso aunque volviéramos por nuestra cuenta. Sin mirarnos ni hablarnos, nos limitamos a caminar en piloto automático. Habría que terminar nuestro respectivo trabajo del día para poder comenzar con el asignado. Mando un mensaje a Mark informándole que nuestra cena tendrá que posponerse un día por lo menos, rápido como bólido me responde que no hay ningún problema con esperar.  Que lindo que es, o tiene muchas ganas de meterse en mis pantalones.
Afortunadamente las bases de la presentación y los números que son necesarios ya existen, lo que nos va a ahorrar un poco de tiempo al menos. Pero eso no nos salva de pasar la mayoría de nuestra noche en el lugar en que menos quiero estar y con la persona que menos quiero. 
¿Qué hora es ya? 10:05 pm, ni el guardia de seguridad se encuentra en el edificio. Solo nosotros y la pila de carpetas a reventar.
- Estás muy callada, demasiado. No es divertido así. -
- Estoy estresada, no tengo tiempo para ofenderte. -
- ¿Entonces yo te hago enojar o te estreso? Porque siempre tienes tiempo para hacerlo. -
- Ambas John, es que estoy concentrada en esto. Vuelve a lo que estabas haciendo. -
- Terminé, ahora necesito que me ayudes a organizar las copias que entregaremos mañana. -
- Hazlo solo, es tu tarea. -
- Necesito tu ayuda, si no fuera así no te molestaría. -
- Aún no termino.- se entromete en mi espacio personal para juzgar el contenido de mi computadora
- Por dios, ya terminaste, solo estás puliendo esos cálculos. -
- ¿Se te olvidó para quién va dirigido todo esto? Tiene que estar perfecto. No quiero ni imaginarme lo que has hecho.-
- Detesto lo perfeccionista que eres, no hay más que puedas hacer. Ni ellos o su equipo pueden mejorar esto, entenderlo siquiera. Así que POR FAVOR levanta tu trasero de esa silla. - tiene razón, he hecho el mismo cálculo por unos 30 minutos para verificar que no dejé ni una milésima olvidada, siempre llegando al mismo resultado que la primera vez
- Ok ok, ¿Qué necesitas? -
- Vamos a la sala de copias para organizar ésto y copiarlo. No veo el sentido de estar aquí si se desordenará al transportarlo. Después de ti. - no mirando atrás, me adelanto a él
Todo luce tan tranquilo, solitario… como si de una película se tratase. Estoy tan acostumbrada al ajetreo diario del lugar que no siento que me encuentre en el mismo sitio. Hay poca iluminación también, solo están encendidos los bombillos del pasillo por donde vamos caminando, apagándose segundos después de no percibir movimiento, resaltando un color azúl profundo a nuestras espaldas o al inexplorado frente. Una lucecita verde al fondo del pasillo me indica que en efecto las cámaras de seguridad están grabando, perfecto, si John decidiera lanzarme por una ventana habría evidencia de mi desaparición. 
El cansancio que había en mis hombros desaparece al momento que siento un empujón contra la máquina de copias seguido de un firme apretón en el cuello. Apenas y hemos librado el alcance de grabación de la cámara.
El poco oxígeno que había en mis pulmones es insuficiente para emitir palabra, solo quejidos salen de mi boca.
Duro y seguro de sí mismo, John restriega una creciente erección en mi trasero, lo hace sin vergüenza o timidez alguna. Con la mano libre presiona el cráneo (no muy fuerte) contra la máquina para dejarme a su merced.
- ¿Creías que nunca te haría pagar por tu insolencia pequeña perra? - libera mi garganta para que le responda
- Sueltame John, ¿Qué carajos piensas hacer? - salen en tartamudeo mis palabras
- Te haré pagar por tu insolencia. Eso es lo que haré, ¿Recuerdas "tu promesa" hacerme trabajar el resto de mi carrera aquí? Eso fue la gota que derramó el vaso - intento separarme de la máquina o quitarlo de encima, en vano - Además de tu descarado coqueteo con el insípido de Mark. No sabes lo mucho que me alegró saber que por fin nos quedaríamos solos, siempre tienes la suerte de escabullirte de mi, pero hoy nadie podrá salvarte. Me aseguré de eso, aquí no hay cámaras. -
¿Va a matarme? ¿Esto es real? La cabeza me da vueltas con sus declaraciones. Estoy aterrada la verdad, unas pesadas lágrimas brotan de mis ojos en cuanto termina de hablar. Mis fuerzas se van desvaneciendo al segundo.
- ¿La pequeña perra está llorando? No lograrás chantajearme con eso. Ahora, compórtate y mantén tus manos aquí. - las coloca entrelazadas en mi espalda baja. Después arranca mi falda de mis piernas junto con mi ropa interior. Su lengua no espera para atacar mi entrepierna por detrás. Gemidos involuntarios salen al compás de sus movimientos, rudos pero deliciosos poco a poco detienen mi miedo. Si esta es la manera en que piensa castigarme por mi comportamiento, estoy feliz de haberlo provocado por tanto tiempo.
- ¿Estás celoso? ¿Por eso me castigas? - el valor sale de mis entrañas ahora que no siento la cabeza tan liviana por su estrangulación sino por sus administraciones a mi coño.
- No, aún no puedo estarlo. Hoy solo estoy molesto por tu comportamiento, después de que seas mía pagarás por ofrecerte como puta a Mark. -
- No soy una puta, y si lo fuera, sería la de él, jamás la tuya engreído. - golpea con una fuerza brutal mi trasero, haciendo que grite del dolor, repite esta acción otras cuatro veces. Por doloroso que sea, no retiro mis manos de donde las dejó antes - Puedes arder en el infierno John. -
Como si de una muñeca de trapo se tratase, me levanta con facilidad y deposita en el escritorio repleto de hojas más cercano. El resto de ropa en mi cuerpo es también arrancado, dejando los tacones. Tras desnudarme, baja la cremallera de sus pantalones y mueve su ropa interior, saliendo rebotando una deliciosa verga roja con venas bombeando a máxima fuerza. Una mueca de asombro mezclada con preocupación causa una carcajada suya, sabe que va a disfrutarlo. “¿Dónde carajos va a caber eso?”
- Prepárame, John, vas a lastimarme. -
- No lo mereces. - inserta rápido su miembro en mi interior, robando un quejido
¿Por qué no me quito de encima a esta bestia?
¿Por qué no pido ayuda?
¿Por qué no estoy suplicándole que se detenga?
Porque estoy disfrutando cada maldito segundo de ésto, estoy amando el apenas soportable dolor de ser partida a la mitad por sus violentas caderas. AMO la manera en que está aprovechándose de mi fragilidad, amo cómo me tiene a su merced el hombre que más desprecio en esta vida, más que nada, amo como está utilizando mi cuerpo como un simple objeto sexual para descargar su ira. Está derrumbando el pedestal en que me había colocado, haciéndome lucir como nada. Como si fuese lo más fácil del mundo.
Agh. Lo está haciendo tan bien que un 'te amo' o 'gracias' podría salir de mi boca. Duele tanto y tan bien que tengo que contenerme de no suplicar por un beso. 
Su miembro estira profundidades inexploradas en mi interior y sus musculares piernas hacen que mi culo rebote con cada impacto contra él; para no caerme, me ha asegurado con sus pesados brazos contra la superficie, dejando una marca segura para mañana en mis posaderas. Como leyendo mi mente, ataca mis labios en un sensual beso acompañado con un mordisco a su final.
- Desde el momento en que te vi llegar con esa estúpida actitud de sabelotodo, supe que habría que ponerte en tu lugar. Ha pasado tanto tiempo desde eso, que pensé en ir a buscarte yo mismo a casa para hacerlo de una vez por todas, pero voilá, el destino te puso en bandeja de plata para mí. Para mí, ¿Entiendes eso pequeña y estúpida zorra? - aunque mi mente comprende el significado de sus palabras, no puedo emitir palabra - Pruebas un poco de verga de calidad y pierdes la cabeza. -
Continúa con sus embestidas un buen rato, dando besos y mordidas esporádicamente. Después, me recuesta más o menos delicado en el suelo, no sin antes propinarme un buen jalón de pelo para levantar mi cabeza.
- Voy a hacerte mía ¿Lo escuchaste? Voy a venirme y marcar este lindo culo. Así jamás volverás a coquetear con cualquier idiota que ponga un solo ojo en ti, vas a recordar el calor de mi eyaculación entre tus piernas cada vez que un hombre te dirija la palabra. -
- Si... - implorando a un ser superior algo más de resistencia, logro responder
Pero realmente qué quise decir con eso, me pregunto tras callar. ¿Deseo que me clame cómo de su propiedad? Sí, si eso significa que podré disfrutar de su comportamiento animalista conmigo. ¿Deseo seguir siendo rebajada de esta manera? Si, dios mío, jamás me había sentido tan bien con nadie, no tiene que volver a escupirme para humedecer mi entrepierna, estoy tan mojada que mis jugos escurren y ya han formado un pequeño charco debajo mío. Y eso él lo sabe, puede saborear el olor desde ahí.
- ¿Sí qué? ¿Lo entiendes o lo deseas? - espera mi respuesta en vano, pues ya agoté la poca fuerza que había reunido para aceptar sus órdenes - Como sea, trata de mantenerte quieta. -
Con exquisita lentitud vuelve a introducirse en mi vientre, llegando casi hasta mi estómago en esta posición que explota su tamaño al 100%. No puedo ni deseo controlar mis gemidos ante tanto deleite aunque su volumen sea bajo, así lentamente mis piernas van fallando hasta estar completamente recostada boca abajo en el suelo, dejando que abuse de mí con acceso completo. Me aferró a su mano junto a mi cabeza para soportar todo este viaje, mordiendo su muñeca cada que pierde el control.
- John... yo voy a... - el mundo parece temblar incontrolablemente a mí alrededor en ese momento, además de ponerse en extremo caluroso ¿Es el mundo o soy yo? Ha pasado tiempo desde que tuve un orgasmo tan intenso que me retorcía, apostaría que es el mejor que he tenido en mi frígida existencia y no podría mejorarlo de ninguna forma. Espasmos que llegan hasta las profundidades de mi coño vacían a mi amante a mis espaldas, por llamarlo de alguna manera. En estado de extrema sensibilidad, soy consciente de cómo cada chorro de su semen sale disparado dentro mío, justo como me lo prometió. Después se desploma a un lado para descansar de la sesión que dirigió en su totalidad él solo.
Al no querer ser la primera en romper el silencio, opto por fingir estar desmayada, tal vez de esta forma me abandona acá tirada y escapo a la primera oportunidad. Mañana será otro día y podré seguir fingiendo que lo aborrezco (no será posible tras lo ocurrido) o que no recuerdo nada. Eso es asunto de mi yo del futuro, lo primordial ahora es descansar. 
Pero no, levanta mi flácido cuerpo para sentarlo.
- Hey, ¿Estás consciente t/n? ¿Me escuchas? - pellizca gentilmente mi mejilla algunas veces - Gracias a dios, ¿Estás bien? -
- Sí, sólo estoy agotada. -
- Y qué lo digas, vamos a vestirte para salir de aquí. Afuera hay cámaras y no puedo cargarte desnuda. -
- Dame unos minutos y podré hacerlo sola. - al levantar unos centímetros la pierna, una incómoda sensación de escurrimiento me regresa de golpe al suelo. Por suerte es amortiguada
- No puedes ni mantenerte en pie. Vamos, déjame ayudarte. - cedo ante su insistencia
Mientras pone lo que quedó de cada pieza de mi ropa, noto cierta cosa muy diferente a su conducta normal o lo que esperaría después de haberme tomado como vil yegua. Una consideración nunca antes vista venir de él. Cómo sea, cuando dije que estaba agotada no mentí, conforme pasa el tiempo pierdo la batalla contra la fatiga. Ya no soy consciente de lo que pasa a mi alrededor hasta estar en un vehículo desconocido con Johnny como mi conductor designado.
- Necesito que me digas donde vives. -
- ¿Y mi auto? -
- En el estacionamiento del edificio, no te preocupes, me aseguré que tuviera la llave. Por favor dime dónde vives o ponlo en el GPS. -
- Sí, está bien. - tecleo mi dirección en su teléfono como pide - Pero ¿Cómo iré mañana al trabajo sin mi auto? -
- Pasaré por ti, no te dejaré tomar el transporte si yo te quité tu auto tonta. Además debemos ser puntuales para nuestra presentación. -
Un estruendoso golpeteo en mi puerta perturba mi profundo sueño. Estos no cesan hasta que permito la entrada de Johnny a mi pequeño departamento. Entra como si fuera su propia casa en cuanto abro la puerta.
- Te has quedado dormida. Ni siquiera te quitaste la ropa de anoche. - esto último lo dice en cierto tono para tantear mi respuesta, comprobar si he vuelto a ser la misma pesada de antes o su 'tratamiento' de anoche tuvo su efecto deseado. Pero aunque quisiera, mi respuesta sale en el tono más tranquilo del mundo. Todo rastro de la perra que era ha muerto y fue enterrada metros bajo la tierra.
- Si, yo... He caído en la cama en cuanto me trajiste. - no lo veo al responder, algo que no pasa desapercibido a sus ojos
- Podemos llegar después, diremos que necesitábamos recoger algunas cosas. Si tú no dices nada, yo tampoco. - camina del sofá que había escogido para sentarse hacia mí - ¿Necesitas ayuda para ducharte? - levanta mi mandíbula para que lo observe - Indícame dónde está el baño... Princesa. - tomando algo de iniciativa sin ser demasiado atrevida, lo tomo de la mano y llevo hacia donde me indicó
El cómo me desnuda y mete a la tina es el opuesto más claro de lo que hubiese hecho hace 8 horas; arremanga su camisa para asistir mi limpieza y tallar mi pelo, cuidando que su perfecto traje permanezca de esa manera. Luego permite que por mi cuenta me vista y perfume.
- ¿Lista? - pregunta cuando salgo (tímida) de la habitación, su sonrisa ahora tiene otra connotación. Ya no es sarcasmo y odio lo que me transmite, sino calidez que mantiene cierta dominancia sobre mí.
De camino al trabajo, hubo varias ocasiones en las que su mano abandonó la palanca de velocidades para acariciar mi pierna o pellizcar mi mejilla. Sólo podía pensar en el delicioso aroma que tiene su auto (que anoche no noté) o lo mucho que hubiera deseado que me volviera a tomar esta mañana. Ni siquiera intentó besarme.
- ¿Qué tanto hay en esa cabecita tuya? -
- Nada, sigo cansada y estresada por lo que ocurrirá más tarde. -
- ¿Es sólo eso? ¿O es que estás decepcionada? - vuelvo a verlo confundida - ¿Esperabas una continuación? -
- Sinceramente, sí. - no pienso mucho al responder
- Pequeña nena codiciosa, no puedo estar encima tuyo todo el día. Tenemos una vida que vivir. -
En el trabajo tenemos un mínimo contacto puesto que estamos verdaderamente ocupados. Evito dirigirme a él si no es estrictamente necesario hacerlo, como para informarle que es hora de ir a la sala de conferencias o que no olvide la USB donde se encuentra toda nuestra labor.
Tal como planeábamos, nuestro trabajo es implacable y somos felicitados por quienes asistieron. Sin el mínimo inconveniente sobrevivimos a la tarea y somos libres de tomarnos el resto del día. Es lo menos después de ayer, menos sería un insulto, opino.
- Hey, ¿Cómo salió esa junta? - diablos, es Mark
- Bien, creo. No hay nadie gritando o pidiendo nuestra renuncia. -
- Entonces supongo que sí. Me preguntaba si... Nuestra cena sigue en pie. - rasca nervioso su cuello por detrás de la cabeza
Antes de planear bien mi respuesta, a lo lejos diviso la cabellera café claro de Johnny. Quién no luce feliz en lo absoluto, y aunque sería tentador molestarlo un poco a ver si anoche llegase a tener segunda parte, no me apetece jugar. Soy una especie de loba domesticada que ha perdido el apetito por la caza y se conforma con ser alimentada de una misma mano. Tal vez y sólo tal vez, necesitaba un buen revolcón para apaciguar mis frustraciones. ¿Gracias?
- No lo sé con seguridad Mark, con mi posible ascenso es difícil saber si tendré el tiempo. - rechazo indirecto pero confiable, tratando de parecer tranquilo y no rompiendo su corazón del todo
- Claro claro, tienes a los ejecutivos comiendo de tu mano. Dalo por hecho. -
- Pero seguimos en contacto ¿Ok? Nos vemos por acá. -
Apresurada sigo la figura de mi domador, quien solo ha avanzado unos pasos de donde lo encontré antes. Para llamar su atención, tomo de su brazo.
- Lo rechacé. - apenas y voltea su cuerpo a mi dirección
- ¿Perdón? -
- Que rechacé a Mark. -
- Oh, pensé que aceptarías salir con él solo para molestarme. Alguien aprendió su lección anoche, buena chica. - algo en sus palabras suena como cumplido a mis oídos, una sonrisa se forma en mis labios - Que linda te ves cuando sonríes. -
Tan pronto o tan rápido como pasa el tiempo, me encuentro a tres semanas después de lo ocurrido en la sala de copias. Ya se corren los rumores de noviazgo entre nosotros dos, que no nos molestamos en aclarar a nadie.
Johnny se comporta de la manera más amable en este mundo (dejando de coquetear con toda cosa que tenga vagina) y me hace suya en cada oportunidad que tenemos. Parecemos conejos: En el auto, la oficina, el comedor, su casa, mi casa, la ducha, la cocina, etc. La calidad y cantidad de relaciones sexuales satisfactorias me tiene volando en una nube todo el tiempo. 
No he sentido un gramo de estrés o ganas de ahorcar a nadie. Mi vida parece tan tranquila ahora que la veo con otros colores. Además de mi nueva actividad favorita, la mencionada fiesta de aniversario (y el consecuente nombramiento de puesto) hace todo más emocionante.
Tras la larga espera, ¡Es hoy! ¡Es hoy! ¡Es hoy! Y mi acompañante estrella es nada más y nada menos que mi contrincante más fuerte. Si antes lo habría matado para conseguir mi ascenso, ahora estoy feliz por quién sea que lo logre mientras sea uno de los dos.
Un toque de perfume y polvo en el rostro, y estoy lista. Un auto espera fuera a mi llegada para irnos, el piloto abre la puerta por mi.
- Tu trasero se verá tan hermoso cuando pases al frente. Lástima que no aceptaste cinchar mi nombre en tu vestido. -
- ¡Sería un pecado arruinar un vestido así! -
- ¡Una verdadera lástima! Por eso al rato me aseguraré de quitarlo con cuidado antes de hacerte todo lo que planeo, jefa. -
- Me gusta el apodo. -
- Entre tantos de los que uso contigo ¿Ese es el único que te ha gustado? Ni nena, princesa, mi amor, pequeña zo…-
- No digas más, o ni siquiera llegaremos a la fiesta. -
- Podríamos hacer varias cosas ahora mismo sin tener que desnudarte. - con la mano que no sujeta el volante, baja su cremallera - Trae esa boquita acá. -
Su miembro va adquiriendo grosor y tamaño con cada apretón que le doy, aún sin envolver mi boca. Salivo sobre su longitud para lubricar aún más mis movimientos. Deliciosos gemidos salen de su pecho sin la mínima contención, aunque en los semáforos pueda ser visto o escuchado. La facilidad con que podemos ser atrapados agrega ese toque de adrenalina o "prohibido" al momento.
Una pesada mano toma un puño de cabello en un chongo para hundirse en mi cavidad.
- Sé una niña buena y no juegues. - ocupada en su envergadura me es imposible responder
Aún con la práctica que he adquirido, es difícil abarcar toda su longitud sin ahogarme o tener el reflejo de vómito. Por muy o poco humillante que pueda ser darle placer de esta forma, disfruto del cómo luce su rostro cada vez que voy más profundo en él o la contención que tiene para no abusar de mi boca (a veces como no se contiene en lo absoluto); soy una esclava de su placer que permitirá que haga todo lo inimaginable conmigo y lo recibiré gustosa. Estoy dispuesta a explorar nuestros cuerpos para descubrir qué es lo que nos gusta, o nuestros límites.
Por cómo empuja hacia arriba sus caderas, noto que está desesperado por alcanzar el alivio.
- Comerás todo lo que salga de mí ¿Entiendes? No dejarás ni una marca de semen o saliva en mi pantalón. Sino, te castigaré tan fuerte que ni una pequeña puta como tú lo tolerará. - no le toma mucho para rellenar mis mejillas con su semilla, casi escabulléndose una gota - Muéstrame tu boca, quiero ver que hayas tragado todo. - tan limpio como puede estar - Buena chica. -
Al llegar somos recibidos por un montón de miradas curiosas que de seguro se preguntan "¿Por qué están juntos si compiten por el mismo puesto?" o algo similar.
- Mira esto. - muestra el chat grupal de los hombres en el trabajo, ya repleto de mensajes de felicitaciones por llevarme a la cama, otros hablando de haber conseguido el mejor culo de la oficina. 
- ¿Es algo malo? -
- En lo absoluto. Que sepan que estás fuera de su alcance. Eres mía. - un simple guiño me llena de orgullo
La noche transcurre tranquilamente entre discursos de agradecimiento por parte de la gerencia y demás palabrería que se dice en eventos como éstos. Lo verdaderamente importante viene casi al final de la noche, el momento que varios hemos estado esperando. Tomo la mano de Johnny para detener mis trepidaciones, sabiendo que lo necesitaba, aprieta mi palma.
Los nombres de los candidatos son anunciados, al igual que sus cualidades, currículum y porqué se les considera calificados. Lo mejor se queda para el último, nosotros dos obviamente.
- Felicidades a todos los candidatos mencionados, y gratitud a su arduo trabajo que día con día hace de nuestra empresa una de las mejores. -
Como si de entrega de premios se tratase, un sobre sellado es abierto para revelar a la persona que ha superado a todos.
- Si bien son trabajadores excelentes, existe una persona que ha demostrado estar más calificada para avanzar el siguiente peldaño. Les pido un fuerte aplauso para la señorita T/N. - ambos nos volteamos a ver
Ni todos los aplausos y vítores de mis compañeros podría hacerme más feliz que la sonrisa que John me da al escuchar al jefe. Se alegra por mí desde el fondo de su corazón sin un solo rastro de envidia o egoísmo.
- Tendremos que celebrar jefa. No todos los días se escapa de la sala de tortura - apretuja mi cara con ambas manos - Lo que me recuerda, necesitarás de un asistente personal ¿No seguirás pensando en enviarme a la sala de copias? Porque tengo mucho que hacer al respecto. - me libera de su agarre voraz pero pellizca la mejilla
Descubro que tal vez es un hábito suyo.
40 notes · View notes
multyeverything · 2 years
Photo
Tumblr media
25K notes · View notes
multyeverything · 2 years
Text
Roomates are not boyfriend material
Tumblr media
Autor: multyeverything
TW: Amor/atracción no correspondido, groserías e insultos leves, angustia, sexualidad, uso de sustancias nocivas, comportanmiento infantil, sin final feliz.
Rating: 18+
Sinopsis: La universidad es una etapa de aprendizaje, tanto profesional como emocional. El estudio va a ser la menor de tus preocupaciones si vives con personas que están dispuestas a romper o reparar tu corazón. Desiciones, la vida está llena de ellas... ¿Pero cuál es la correcta? ¿Aventura y pasión o dulzura y amor?
Au: Roomates / Universidad
Emparejando: Lee Jeno X T/N X Jeong Jaehyun
Conteo: 4.2K palabras
━━━━━━━━━━━━✧❂✧━━━━━━━━━━━━
¿Cómo describir la situación con Jaehyun en este momento?
Complicada.
Todo se ha tornado demasiado incómodo para continuar viviendo bajo el mismo techo, hasta preferir quedarme tiempos extras en la cafetería donde me explotan laboralmente o tener interminables trabajos de la universidad, así de incómodo me es vivir en las mismas cuatro paredes que él. Es fácil pensarían, "solo vete de ahí", pero la despedida será demasiado dolorosa es por eso que la he evitado lo más posible. Lo sigo queriendo de cierta forma e irme significaría romperle el corazón a mi otro compañero.
En puntitas salgo directo a la puerta del departamento para ir a mis clases, he pasado demasiado tiempo esperando oír algún sonido que confirme que ya se ha ido o sigue aquí. Si no salgo pronto llegaré tarde. Dando la vuelta por el pasillo que bifurca en la sala de estar y la entrada, lo encuentro parado esperando mi aparición.
- Hice el desayuno, esperaba que pudiéramos comer juntos antes de que te fueras. -
Sin otra opción me siento en la pequeña barra de la cocina que la conecta a la ya mencionada sala, frente a él. Me tiento el corazón a rechazar su comida, no sé decirle no. Aceptando otra falta en mi boleta.
- He querido hablar contigo desde hace varios días t/n, pero nunca coincidimos en la universidad y pareciera que me ignoras en casa. Ya no ves películas con nosotros, estudias todo el día si no trabajas o estás en casa de alguien más, ya ni siquiera dormimos juntos cuando hace frío. Y déjame decirte que el calefactor ha fallado en los últimos días, he pasado una helada pero no puedo estar contigo porque corres el seguro en tu puerta. Dime, ¿Hice algo malo? - Una mueca de preocupación perturba su bellísimo rostro, que ahora cuenta con unas notables ojeras. Mastico rápidamente el waffle con fruta que ha puesto.
- Jae, no te negaré nada de lo que me has dicho. Tampoco trataré de justificarlo, pero... No me parece que sea correcto hacer todo eso, esa es la razón de evitarte. -
- Pero... Es lo que hacemos. -
- No es correcto. -
- Entonces te hice enojar para que cambies de opinión. Dime y lo cambiaré, pediré disculpas. Dime qué hice y no se repetirá.-
- No hiciste nada. -
- ¿Es por Jeno? -
- ¿Qué tiene que ver él con esto? -
- Nada, pensé que pudo haber hablado mal de mí contigo. Últimamente actúa raro también. -
- ¿Por qué hablaría mal de ti? -
- No lo sé. -
- Jae olvídalo, debo irme. -
- No has terminado tu desayuno. -
- Lo llevaré para el camino. -
- Lo guardo por ti y te llevo a tu edificio. -
- No tienes qué. -
- Pero quiero, ve el clima. Puedes caerte. -
Solo le doy por su lado y acepto todo lo que quiera hacer. Incluso de camino a clases tomo su brazo para no resbalar en el congelado camino; los días de invierno son terribles en este lado del país y la gélidas noches lo son aún peor para quienes duermen sin quién los caliente. Tiene razón, desde que lo veté de mi compañía me ha costado conciliar el sueño con tanto temblor a causa de la baja temperatura.
Me aferro a su musculoso brazo hasta casi hundir la cara en su chamarra, extraño tanto de sus abrazos que el corazón físicamente me duele. Quisiera que las cosas volvieran a ser lo de antes. Volver a vivir en esa bendita ignorancia que antes me hacía tan feliz.
Pero no, no es posible. Y ver a Mercedes correr a nosotros es un recordatorio del porqué mi distanciamiento con Jaehyun. Ella es la que debería dormir en su cama, comer a su lado y hacer el amor cada noche hasta desfallecer; no yo, no su simple compañera de departamento y ligue fallido.
- Gracias, mi salón es este. Pasa un buen día compañero. -
- t/n... -
- Adiós Jae. Saluda a tu novia de mi parte. -
¿Me adelanté demasiado a la historia?
Claro que lo hice, siempre me apresuro, retrocedamos unos años a mi relato para ponerlos en contexto.
La NCIT es la universidad más prestigiosa para carreras de ingeniería e informatica del país, la mejor sin duda. A la cual tengo la suerte de ser aceptada, así que me dedico a encontrar un departamento cómodo y económico para vivir los próximos 5 años de mi vida, por suerte aparece una muy buena opción con los mínimos inconvenientes para mis padres. Dos inconvenientes más bien, los cuales se llaman Jeno Lee y Jaehyun Jeong. Mis padres odiaron la idea de dos hombres conviviendo tan de cerca con una mujer.
No tienen respeto
Todos los hombres son iguales
Se aprovecharán de ti
No es de damas
Verás cosas que no debes ver
Son sucios
Bla bla bla, lo que dicen todos los padres. Que ahora desearía haber escuchado.
Al principio me pareció incómodo igualmente pero tras la convivencia tan cercana pude darme cuenta que jamás habría mejores y más respetuosos roommates que ellos. Jeno tenía una hermana con la que se crío para ser respetuoso y Jaehyun cómo hijo único se le prestó toda la atención para enseñarle modales.
La química entre nosotros tres fue inmediata, era improbable por la diferencia de edades, pero hecha realidad por la buena vibra y disposición que tuvimos cada uno. Si bien los hombres tienen que ser hombres, el lugar siempre estaba limpio (excepto por el ocasional desorden) y se mantenían vestidos en mi presencia. El que trajeran chicas me era irrelevante siempre y cuando mantuvieran el ruido al mínimo y sus amiguitas no estuvieran al día siguiente, cosa que creo que cumplieron porque nunca me enteré de la presencia de alguna, hasta puedo asegurar que nunca las hubo.
Cómo sea, nos volvimos muy cercanos antes de acabar mi primer semestre de universidad: preparábamos y comíamos juntos, íbamos al gimnasio, salíamos de fiesta a las fraternidades e incluso conocimos a la familia de cada uno.
Increíble ¿Cierto?
Casi al final del segundo semestre, Jeno conoció a una chica con la que comenzó a salir apenas pasada una semana de verse por primera vez. Se alejó de nosotros de golpe y las únicas veces en las que coincidíamos eran en las fiestas (si es que no nos ignoraba) fuera de nuestro hogar. Una época muy oscura la verdad.
El encontrarlo por el angostísimo pasillo del departamento era casi tan terrible que caminar por vidrios; un "buenos días" sin mirarte a la cara y con suerte se quedaba a desayunar, sino, aveces ni tocaba el plato que habíamos hecho para él. Cero contacto amistoso con nosotros durante casi tres meses, que se sintieron una eternidad.
Más tarde que temprano terminaron su relación por los altos niveles de celos de ella y lo "mucho que nos había extrañado".
Al no ser rencorosos, lo aceptamos a la manda de nuevo en seguida.
Después de eso es donde todo empezó a irse al carajo lentamente: No soy fea, para nada, de hecho consideraría mi atractivo visual excelente. Solo que nunca me ha agradado ir de cama en cama o de relaciones fallidas a otra nueva destinada al fracaso. Hubieron varios chicos: Yuta, Johnny, Chris... Todos en buenos términos en la actualidad pero siempre había esa cosa que evitaba que formalizaramos algo más que una amistad. Al vernos solos por tanto tiempo y "teniendo las bases de una amistad", Jaehyun propuso salir en citas de vez en cuando. MALA IDEA... TERRIBLE.
Si bien es todo un caballero, le es muy difícil cumplir la labor de fidelidad. En pequeños aspectos como intercambiar mensajes casuales con chicas que sabes que están flechadas por ti, hasta coquetear descaradamente en tu cara. Su gran defecto opacaba las muchas virtudes que tenía; era una gran mancha roja difícil de ignorar. El tratar de compensarlo con regalos o tiempo de calidad conmigo lo volvía más tedioso. No duró mucho esa etapa nuestra, además de frustrarnos por no ser lo que esperabamos, Jeno se vió extrañamente afectado por eso. Poniéndome en sus zapatos, lo comprendo al 100%; él acababa de salir de una relación toxica que lo alejaba de nosotros para que ahora nosotros seamos quienes lo alejan.
No le tomó mucho a Jae para seguir con su vida amorosa, no esperaba que me guardara cierto "luto" tras nuestro fracaso (porque nunca se alejó del mercado de citas estando conmigo) pero fue hiriente hasta cierto punto que la presencia de las chicas comenzara a notarse tan descaradamente. Como si intentar algo conmigo hubiese despertado algo o quedase tan inconforme que necesita alguien con quién olvidarlo.
¿Qué hice al respecto? Nada. Nunca le hice una escena, comenté al respecto o quejé por mis pertenencias que desaparecían cada vez que venía con alguna de ellas. Sería darle una importancia que definitivamente no quería darle. Me dediqué a ser una mejor estudiante y ahorrar el dinero que ganaba vendiendo café los fines de semana. Con todo mi tiempo repartido en éstas actividades, no podría ni pensar en él.
Cerré mi corazón por un tiempo a posibles romances, apesar de que los chicos no dejaban de buscarme, entre ellos Yuta. Quién parecía ser el mejor de todos, con su sonrisa coqueta y frialdad ante todos los que no fuéramos cercanos a él, lo admito, me gustaba presumir que formaba parte de su grupo especial. Que pudiera ver esa perfecta sonrisa sin intentarlo demasiado y que él sin mayor problema iba a buscarme al trabajo para que no caminara sola o compraba cada clase de tontería que creía me gustaría, esas y más cosas que enamorarían a cualquiera. Varios meses de intentos fallidos lo llevaron a ver la difícl verdad: No importa cuan duro tratara, no me enamoraría.
- Sé que sientes algo por mí, muy profundo en ese pequeño corazón, sé que nos hacemos bien mutuamente, que cuando salimos el tiempo parece nunca ser suficiente. Pero también sé que lo que sientes por mí no es lo mismo que yo, está bien, no tienes que amarme. -
- Suena como si fuera la peor persona del mundo. - Tomo su mano fuerte, él la acerca sin soltarnos a mi cara para acariciarme.
- No es mi intención t/n, en verdad, sólo quiero aclararlo. También quiero hacerte saber que lo entiendo, no te presionaré a que me correspondas como yo quisiera. -
- En un futuro tal vez podríamos ser algo más... Pero ahora por alguna razón mi corazón no está listo. -
- ¿Te hirieron? ¿Sientes algo por alguien más? -
- No no, Yuta no es eso... Es que yo... -
- ¿Sin palabras? No te presiones linda, la razón por la que te estoy siendo directo no es para cargarte con otro peso, esperaba que si era directo contigo las cosas tomarían otro rumbo. -
- Eso no me suena a libre de presiones. -
- Tienes razón, que tonto soy. -
- Tal vez si. - Nos reímos ante la situación
- Pero por más que me duela, soy consciente que no podré dejar que desearte como lo hago ahora... Espero y algún día podamos estar juntos, cuando tú corazón esté listo ¿Si? -
Y continuamos nuestra amistad como si nada; con mensajes constantes y visitas en mi trabajo para acompañarme en mi hora de comida, ya que Yuta es mayor que yo y no estudia en NCIT.
Volviendo al tema central, se preguntarán cómo es que llegué a compartir cama con Jaehyun. Bien, tras sentirme culpable por rechazar al mejor chico que había conocido en mucho tiempo, necesitaba distraerme urgentemente de la culpa que tenía. Las chicas y yo iniciamos con un precopeo a las 6 PM, llegamos al sitio de la fiesta a las 9 PM y terminamos en un after-party a las 3 del día siguiente en una locación desconocida. Tenía tanto alcohol en mi sistema que pensé caería en coma por ello, porque después de todos somos jóvenes ¿No? Esto no es diario ¿No? TENGO DERECHO A DIVERTIRME CARAJO.
Lo peor que podía ocurrir fue exactamente lo que pasó, alguien puso algo en mi bebida y el poco conocimiento que me quedaba terminó por irse a la mierda. Como un milagro, Jaehyun estaría en el mismo lugar para sacarme de inmediato y llevarme a nuestro departamento; entre él y Jeno me limpiaron de todo vestigio de vómito, sudor o lágrimas dando uso únicamente a toallitas húmedas para no desvestirme.
Me cuidó el resto de la madrugada (muy en contra de la voluntad de Jeno) aún cuando apestaba a inmundicia, me abrazó y dió calor cuando la calentura empezó, fue mi almohada, al despertar no me juzgó o regañó por mi mis actos. Ambos me llevaron a un chequeo al hospital privado que pagaron con sus ahorros y mi salario juntos para que no tuviera que enterarse nadie. 
Las siguientes noches volvería conmigo a la cama con la excusa de cuidarme si quedaba alguna secuela. De ahí, no se separaría de mi por el resto de las noches, siempre se escabulliría conmigo o yo con él utilizado cualquier mentira para ocultar el simple hecho que disfrutábamos hacerlo. Ya sea dormir, tener charlas hasta muy tarde, estudiar, juegar juegos, tener sexo, etc. Creímos que nuestro amigo no se enteraría pero estábamos tan equivocados, ¿Cómo diablos no se enteraría si eramos tan ruidosos como gata en celo? Y me refiero en todo aspecto, maldita sea su manera de llevarme al cielo con su boca, la perfecta sinfonía de sus caderas al embestirme o lo bien que conocen sus dedos mi cuerpo.
Ya sea que no quería molestarnos con eso o que no le importaba, jamás trajo el tema a la mesa de todas maneras y agaradecí por ello. Para repararlo, sería la mejor amiga que alguna vez tuvo:
Maratones de sus aburridas series, dalo por hecho.
Acompañarlo a hacer las minimas tareas, claro.
Ir sin falta a sus competencias de atletismo, por supuesto.
Masajear sus cansadas piernas después de correr más kilometros en una hora que yo en un día, con gusto.
Religiosamente contestar sus mensajes sin sentido, sin mayor problema.
Haría lo que fuera para compensar nuestra aventurilla y mantenerlo feliz. Parecía estar funcionando, logramos crear cierta dinámica que hacía funcionar las cosas en casa, ambos parecían estar conformes y hasta más felices que al inicio, si eso fuera posible.                                                                               Pero nuestra felicidad no podía durar por siempre, los hombres son unos desgraciados que no pueden mantener su miembro o corazón en un mismo sitio. Jae formalizó una relación (o eso decían las malas lenguas) con una de primer año llamada Mercedes, encantadora si no fuera la autora intelectual de mis desgracias; al principio dejó de tener relaciones sexuales conmigo o besarme, cortó todo contacto con sus demás amigas/exes, no me llamaba por apodos, no le importaba que Jeno aveces bromeara con que soy el amor de su vida, y más cosas que se habían vuelto nuestra rutina. Pretendió ser el mejor hombre en la faz de la tierra por unos buenos malditos 5 meses hasta que vio que la pristina Mercedes no se acostaría con él si no existía una relación formal de por medio. Después de eso, volvió al juego conmigo.
La chica es encantadora, lo digo en serio, es tan amigable que me sentía culpable cada vez que venía a cenar con nosotros al departamento o me pedía ayuda con una de sus materias ya que "soy la chica más inteligente que conoce", ¡carajo! es tan amable que cualquier vez que quise ser mala con ella terminé llorando de culpa en mi cama. Eso nos trae aquí ahora; no puedo verla a la cara sin querer confesarle las porquerías que he hecho con su novio a sus espaldas. Me he convertido en la amante que disfruta del lado más carnal de su pareja y lo envía fresco cada mañana para que sea ella quien escuche los te quieros. Me doy asco la mayoría del tiempo, y es esa sensación de repudio conmigo misma la que me ha alejado de todos los que solía frecuentar. Esta mañana fue la gota que derramó el vaso, la insistencia de Jaehyun en volver a nuestros hábitos pero su nulo interés en asentarse conmigo. Él no me ama como yo desearía ni ve como una chica digna para tener una relación más allá de lo sexual, porque como una vez lo dijo Eres diferente a ella, más... Sensual, me inspiras pasión... Y nada más, lo sé por fin. Todos mis intentos fallidos por demostrar que soy suficiente han sido en vano, y sinceramente estoy cansada. Estoy agotada de vivir compensando a todo mundo pero seguir sintiendo pena de mí misma, peor aún, tener que actuar como si nada.
Hoy llegando a casa hice mis maletas con lo más importante que tenía, el resto lo recogería en los siguientes días o puedo enviar por ellas. Como en piloto automático y sin percepción real del tiempo, ya estoy por irme de la casa pero soy detenida por la suave mano de alguien en mi hombro.
- ¿A dónde vas? - Pregunta tartamudo
- Me voy Jeno. -
- ¿De vacaciones? No me contaste nada...-
- No, me voy de aquí. No puedo seguir viviendo aquí, no con él. - Me da la vuelta para atrincherarse en la puerta, saca su teléfono temblando y marca un número.
- Tienes que venir, hay problemas. - Se escucha la respuesta pero no distingo lo que dice - Es sobre T/N, sí, ahora. -
- ¿Qué estás haciendo? ¿Lo llamaste? Dime, ¿Llamaste para pedir su ayuda? ¿A él que es la razón por la que me estoy llendo? -
- No puedes irte T/N, no puedes dejarnos, somos un equipo. -
- ¿Quieres verme hacerlo? - Lanzo mi maleta pesada a sus piernas para que se quite o trate de esquivarlas y poder salir, pero sus musculosas piernas no se mueven un centímetro, reciben el golpe como si nada. Ahora soy yo quien trata de lanzarse a el para tratar de correr, dándole la oportunidad ideal de atraparme en la cárcel de su cuerpo. - ¡¿Qué haces?! ¡Sueltame animal! -
- Deja de arañarme T/N, por favor, hablemos los tres y tratemos de encontrar una solución. -
- No hay nada que solucionar Jeno, si quiero largarme de aquí lo haré. No me importa si lo aprueban o no. - Ya estamos colocados en el sofá, con sus piernas y brazos bloquea cualquier movimiento que pueda hacer, mi cara hundida en su hombro.
Tras un rato de lucha, me rindo ante su incomparable fuerza. La frustración de nunca conseguir lo que quiero a pesar de mi esfuerzo me hace estallar en llanto (moco y todo), ya no es necesario que me sostenga para no escapar, ahora quiero que me sostenga como consuelo. Lo hace, acaricia mi hombro delicadamente con su mano derecha y con la otra limpia sus propias lágrimas, se le han contagiado las ganas de llorar. Unos pasos ruidosos por el pasillo nos avisan de la llegada del tercer individuo.
- ¿Cuál es el problema? - Nos encuentra de esa manera al azotar la puerta en su brusca entrada. Por sus expresiones puedo ver que toda clase de pensamientos pasan por su cabeza. Con lentitud me levanto de mi posición anterior, no sin antes palmear el hombro de mi amigo como gesto de agradecimiento.
- Me voy. Me mudo de este lugar porque ya no puedo vivir aquí un día más. - Digo aún con las lágrimas corriendo por mis mejillas.
- No no no... - Es notable su shock a pesar de que está casi murmurando, más como para sí mismo.
- Sí, y como le decía a él, no espero su permiso para hacerlo, de ninguno de los dos. -
- ¿Esperas que nos crucemos de brazos a ver cómo nos dejás? Así como si no nos importaras en lo absoluto. -
- Espero que respeten una desición, una que ya tomé. -
- Por lo de esta mañana, pensé que... Bueno, creí que todo volvería a la normalidad. Me abrazaste T/N. -
- Cómo siempre, entendiste lo que quisiste. Yo fui bastante clara al decirte que lo nuestro no era correcto y que no estaba cómoda con seguir siendo tu... Zorra. No seré objeto de tu diversión. Ya no más. Durante mucho tiempo he querido hacer algo al respecto y por fin tengo el valor, no como tú, que no tienes el valor para un compromiso real con nadie más que contigo mismo y tu satisfacción. - El otro habiéndose convertido en un espectador en el sofá que no para de sollozar.
- No eres una zorra, por dios. Qué necesidad de intensificar la conversación. -
- No desvíes el tema. -
- Ok ok, no te enojes cariño, ¿Mi satisfacción? ¿De qué hablas? -
- No me llames así, y deja de actuar como si Jeno fuera un idiota que no sabe la razón REAL del porque me voy, como si no comprendiera lo que está ocurriendo. - Se queda mucho, su cara de angustia muta a una de creciente molestia.
- Con que la razón real eh... ¿Quién te metió esa idea a la cabeza? Nunca antes eso fue un impedimento para nosotros, por qué casualmente ahora me pides algo que aclaramos al inicio. - Voltea hacia mis espaldas para acusar con la mirada a nuestro amigo.
- ¿Qué no lo ves? Esta peor que tú ante la situación, no implantó ideas ni habló mal de ti si es lo que insinúas. -
- No estoy insinuando nada, solo digo que parece sospechoso que lo involucras demasiado en un asunto que es de los dos, y sólo de los dos. -
- Suenas como un idiota, hablando mal de la persona que te llamó para pedir tu ayuda al enterarse que me iba, en vez de agradecerle lo estás acusando de culpas que no tiene. Y si lo involucro es porque tú lo hiciste primero. - Cierta lucidez llega a su mente tras decir esto.
- Ok, tienes razón, fui demasiado duro con él. Es que yo... - Se queda sin palabras - Ahora tú estás siendo dura conmigo, sugiriendo que soy de lo peor. -
- Oh no, no digo que seas de lo peor; pero en efecto eres un maldito mujeriego, un infiel, inmaduro,  convenenciero y me tratas como a una propiedad. - flaqueo, mis lágrimas salen de nuevo sin control - Y se que no cambiarás, sin importar cuanto me lo prometas, y yo no podré decirte que no, sin importar cuanto trate. Me voy porque esto a la larga nos hará más daño. -
- No quiero que te vayas. -
- Pero yo no quiero quedarme. - Y aprovechando que he quebrantado su voluntad, recojo mis regadas maletas. Jaehyun no dice una sola palabra después ni separa sus ojos del suelo, creo que es mejor.
- Yo no he hablado. -
- Nono, por favor no hagas esto. -
- T/N, por favor no me dejes, no puedes dejarme solo. -
- No te dejaré solo, seguiremos siendo buenos amigos, iré a tus competencias siempre y todo lo que sea posible para seguir siendo buenos amigos. -
- Pero ya no desayunarás conmigo, no estarás para ver películas, no jugaremos a las luchas, ni beberemos vino barato en el balcón. -
- Tal vez no, pero de esa forma los momentos serán más especiales aún. -
- No quiero que sean especiales entonces, quiero que sean a diario. -
- Mi querido y necio Nono. Algunas cosas cambiarán pero nosotros permaneceremos iguales. - acorto nuestra distancia para apretar sus mejillas - Te seguiré queriendo como siempre lo he hecho, no tienes nada de qué preocuparte... -
- Te amo. - me calla antes de terminar, ahí Jaehyun abandona la sala y se dirige a su habitación - Te amo T/N, no me importa lo que hayas hecho o no con Jaehyun, no me importa en lo más mínimo, te amo y estoy seguro que eres el amor de mi vida, jamás había conocido a una chica como tú, así que por favor no te vayas. No me dejes. -
- ¿Por qué esperaste tanto para decirlo? -
- No tenía el valor. - Besa las palmas de mi mano que están cerca de sus labios
- ¿Y solo lo tuviste cuando parecía todo perdido?-
- Sé que eso no me hace mejor que Jaehyun, pero la manera en que yo te amaré será la que mereces, no tendrás que volver a sentirte usada o ocultar algo tan natural como un beso. -
- Aunque aprecio que te abras a mí, tu confesión no cambia mi desición. Si me quedara en este lugar, la poca dignidad que tengo se iría al demonio. -
- Entonces vámonos los dos. Mudemonos tan lejos como gustes, ganaré todas mis competencias para tener los premios económicos y pagar la renta. -
- Eres un verdadero obstinado. -
- No quiero perderte, no ahora que por fin te declaré mis sentimientos. -
- ¿Y mis sentimientos? - A través de sus ojos puedo ver cómo una fracción de su corazón se rompe. La realidad golpea tan duro que su respiración se corta brevemente y la resignación se asienta.
- Supongo que tienes con quién pasar la noche. -
- No tienes que preocuparte por eso. -
- Siempre me preocuparé por ti, somos los mejores amigos después de todo. -
- Claro que sí. -
- Bueno, nos vemos mañana ¿Tienes práctica verdad? -
- Sí. - responde casi inaudible
- Ahí estaré, puntual como siempre. Descansa Nono. -
Cierro la puerta, dando por oficial mi partida. Sus sollozos se pueden escuchar tras de ésta y hasta unos metros de distancia, llora como un niño que ha perdido su posesión más preciada, con pesar incontrolable. Aún así no desatiende mi desición de irme, con todo el dolor de su corazón planta sus pies en el alfombrado para no salir corriendo en mi búsqueda.
Si bien su declaración de amor cambia mi panorama, mi determinación es infranqueable. Él sabe cómo soy, no hay caso en luchar una batalla perdida.
En la entrada del edificio se encuentra estacionado el auto de mi amiga Alexa, esperando para irnos.
- Hiciste lo correcto. -
- Lo sé. -
Arranca en dirección a mi nueva residencia temporalmente, donde mi nueva lucha comienza. Sin un Jaehyun o Jeno en mi vida.
46 notes · View notes
multyeverything · 2 years
Photo
Tumblr media
38K notes · View notes
multyeverything · 2 years
Photo
Tumblr media
Me, Myself, and Jung Kook
 #Photo_Folio​ #Editor_JK
991 notes · View notes
multyeverything · 2 years
Text
Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media
͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏͏ ͏ ͏૮₍ ≧ ³≦ ₎ა
725 notes · View notes
multyeverything · 2 years
Photo
Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media
cha eunwoo for w korea
841 notes · View notes
multyeverything · 2 years
Text
Tumblr media
Bad Bunny saved 2020 once again!
698 notes · View notes