Estar siempre a la defensiva es síntoma de haber condicionado y soportado toda clase de hostilidades, insultos o ataques personales, es una respuesta más que psicológica, es también nerviosa y automática. Los mayores que se quejan de la «generacion de cristial» por su sensibilidad e inmadurez deberían reflexionar que son los principales causantes de esa respuesta sensitiva en los jóvenes. Por esa disfuncionalidad: la exigencia estricta autoritaria que genera una dependencia extrema por un lado; y libertad sin responsabilidad, la pereza y la inconsciencia que genera una independencia extrema por otro lado, con base al maltrato, a la humillación y al insulto son condicionantes para que nuevas generaciones sigan reaccionando sensitiva y generalizada contra todos, sin diferenciar cuando es un insulto, y cuando no lo es, porque sus cuerpos reaccionan automáticamente a la defensiva.