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#Narración del tiempo
jcplana · 1 year
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Albert Sans - La niebla.
La niebla. Había sido humo sólo. El hombre había sido por él envuelto y por el breve viento frío. Pero fue la niebla sólo. Sin memoria en ella el espanto y el cuchillo y la sangre.  —— © Protegido.
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batesphilip19 · 6 months
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La Ilustración de un Imperio: Voltaire y su "Historia del imperio ruso bajo Pedro el Grande".
En el amplio panorama de la literatura de la Ilustración, uno de los nombres más destacados e influyentes es el de François-Marie Arouet, más conocido como Voltaire. Aunque es famoso por su filosofía y su ingenio satírico, pocos conocen su contribución a la historiografía. Su obra “Historia del imperio ruso bajo Pedro el Grande” ofrece una visión única y perspicaz de uno de los gobernantes más…
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karylvsjuanii · 2 months
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hermanda god bless u por tan tremendo smut con Pipe, ¿para cuándo otro? 😝😝
yo te espero todo lo que quieras
OSCARS | Felipe Otaño
tw: Lector Femenino x Felipe Otaño. MUCHA sobre estimulación, cría de semen, hablando con groserías y apodos “papi” “bebé”, bebiendo coño, dedos, masturbarse, oral f/m. Sexo sin protección. (por favor léelo bajo tu responsabilidad)
Quiero aclarar que los diálogos son en argentina pero mi narración es latina.
También que perdón mi inactividad, me tomó mucho el tiempo para hacerlo mejor posible, ojalá les guste, comenten. Si hay algún error por favor dímelo.
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Finalmente, la película está por todos lados, dándose a conocer por todos como ganadora de un oscar.
Felipe estaba celebrando con sus amigos, cuando le llega una notificación de ella.
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Felipe salió de ahí en fa, necesitaba ir con su novia. Realmente su mensaje lo dejó con la pija paradisima, si de por sí ya había pensado en el buen premio que sería la boca de su princesa en su polla. La necesita y se lo merece.
Llegó a su habitación en menos de los 15 minutos y no estaba en la sala, por lo que caminó a su cuarto y ahí te encontrabas, acostada en la cama viendo la televisión, él se acercó a ti no sin antes cerrar la puerta. Tomó el control remoto de tus manos, presionó el botón rojo y aventó el control sin dejar de verte. Comenzó a besarte mientras que tú te acomodabas en la cama.
Mi amor, ya me necesitas, verdad? - Preguntas con una voz tan excitante, que solo hace que se le pare más.
Chúpamela, solo chúpamela - Felipe dice sin más.
El se aparta de ella y se sienta en la esquina de la cama, tu te paras frente a el, y lo tomas del cuello para besarlo, bajas tus manos lentamente hacia su pecho hasta llegar a su abdomen bajo para meter tus frías y delicadas manos dentro de su camisa y quitársela de una vez.
Te da su ayuda para quitársela y seguir besándote entre jadeos de su parte por lo horrible que sentía a su pija arder.
Fuiste dándole besos húmedos por todo su cuerpo, sacándole un gemido ahogado, bajaste dolorosamente hacia sus short, tomaste la tela que sujeta y la bajaste con su ayuda.
Comenzaste a dar lamidas por encima del bóxer y juras que Felipe estaba en el puto cielo gracias a sus gemidos.
Si así se sentía sobre una tela, no se podía imaginar como sería sin una de por medio.
Cuando te cansaste de dar lamidas bajaste su ropa interior, paraste un momento para verlo.
Su risa expresaba claramente lo orgulloso que se sentía al notar tu expresión sorprendida por ver lo disparada que salió su polla apuntando a él.
Te gusta? - Pregunta acariciando tu cabello largo.
Me encanta mi amor, es mejor a cómo la había imaginado - Contestaste sin vergüenza.
La idea de que esto ya lo habías imaginado antes, le hizo a Felipe más tentadora la idea de comerte entera.
Entonces también habías imaginado esto? - Preguntó mirándote a los ojos.
Muchas veces - Dices para tomar su gran polla entre tus manos y dar la primera lamida.
Felipe soltó un gemido leve sin dejar de mirarte.
Empezaste a dar círculos por el glande haciendo que su polla se enrojezca más y amenace con pre semen. Justo cuando empezó a salir, la metiste en tu boca, hiciste lo más que pudiste, y lo otro lo seguiste trabajando con las manos.
Felipe no pudo evitar soltar el gemido más grave de su vida, echó la cabeza para atrás y sintió que sus brazos y espalda se debilitaron, quería follarte la puta boca de una vez pero no quería lastimarte.
Era un regalo de Dios verte mientras lo comías y se prometió que será una imagen que nunca olvidará.
Verte de esa manera es mejor a todas las imágenes mentales que pudo haberse creado antes, lo que más deseaba era tenerte así.
Mi amor, si, si bebé, sigue así. - suelta tu novio entre gemidos graves.
Lo único que recibió de tu parte es sentirlo más rápido y gemidos que hacen a su polla vibrar.
Felipe siente que se va a correr y es lo mejor que ha sentido pero no quiere terminar en tu boca, así que te detiene.
Bebé, para, ven - Dice alejando su cuerpo de ti para levantarte y tumbarte en la cama.
Qué pasó? Hice algo mal? - Dices con una cara de tristeza.
No preciosa, todo lo contrario, me sentí muy bien pero quiero correrme junto a vos. - Felipe mima tu rostro colorado.
Pero antes, quiero hacer algo que me gustaría haber hecho desde que te vi en las gradas del estadio - Quita tu sostén con torpeza, lográndolo.
Que cosa? - Preguntas, viendo a tu sostén ser arrojado.
Mientras pipe baja a quitarte los pantalones apretados que llevabas puestos.
Lo ayudas a quitarlos, y cuando finalmente los termina de quitar, rápidamente toca tu coño sensible para sentir por fin lo mojada y caliente que estabas.
Agh, felipe, no - Dices tomando su mano haciendo que pare los movimientos.
Qué pasa, linda? - Pregunta el castaño preocupado.
Me voy a correr amor, no toques. - Continuas cerrando los ojos.
Eso es lo que quiero, hermosa. - Felipe sonríe para rápidamente bajar tu encaje y tocar con su dedo índice tu entrada.
Su novia suelta un gemido quejumbroso tomando su brazo y apretándolo.
Con su dedo índice en tu entrada comienza a dar círculos y agrega rápido su dedo anular para tocar tu clitoris con este e iniciar a masajear las dos zonas lentamente.
Escucha cuando comienzas a gemir y lo hace querer oírte más, Él necesita que gimas su nombre.
Empieza un ritmo más rápido con sus dedos, gemidos salen sin parar cuando quita su dedo anular de tu clitoris para reemplazarlo por su lengua.
Hace circulitos rápidos con su lengua y mete su dedo índice en tu entrada para sentir como lo aprietas con todas tus fuerzas.
Felipe siente cómo poco a poco como te vas relajando más e intentas succionar su dedo al ritmo de su lengua presionando tu área sensible.
Tu novio suelta un gemido por la sensación de las cobijas rozando su polla y gritas por la vibración, jalándole del cabello.
Felipe, ya, por favor es mucho - Gritas tomando entre tus dedos el cabello de Felipe, este suelta un último gemido antes de retirarse de ti y se limpia la boca con sus dedos.
Los chupa mirándote.
Su novia se veía tan atractiva, estaba toda roja y despeinada, con los ojos llorosos y los labios rojos hinchados, las ganas de follarsela crecían, así que sin más, te tomó de las piernas y se acomodó en medio de ellas.
Intentaste cerrarlas.
Abrí las piernas - Dice mirándote fijamente con esos ojos azules. Te matan.
Amor, me duele - Respondes mordiendo tu labio y acercando la mano a tu área.
No te vas a correr si no abrís las piernas, bonita. - Felipe habla con una voz más grave de lo normal.
Abrí esa’ piernotas para mi, princesa. -
Felipe sujeta tus piernas impidiendo que las vuelvas a cerrar.
Su mano derecha toma su polla y la calma, empieza a rozarla con tu coño mojado, tú empiezas a gemir quedito por la sensación y metes la punta de tu dedo índice en la boca en forma de desesperación.
Empiezas a moverte al compás de su polla en tu coño, buscando más fricción, y cuando intentas hacer otro movimiento, rápidamente Felipe mete su polla a tu coñito caliente y los dos sueltan un gemido que piensas, todos escucharon.
Gimes y respiras pesado, quieres ir rápido.
Más rápido Felipe, ya follame toda, lléname de semen el puto coño - No te la complicas.
Y con eso le bastó para empezar y no parar por el resto de la noche.
Empezó a follarte de una manera descontrolada, veía sus tetas moverse por todos lados mientras tu sigues chupándote el dedo y gimiendo sobre el.
Para él, ver tu cinturita y piernotas abiertas sobre él, lo hace querer llenarte de semen, verte pellizcarte una de tus tetas lo llevó a golpearte el coño.
Notó que entre más te golpeaba con su polla, más rojita te ponías y justo así te quería desde un inicio, toda abiertota para él, dejándolo destruirte el coño, y toda roja por él, solo por él.
-Felipe, ahí más, ahí, si -
Era lo único que podía escuchar de la boca de su hermosa novia.
Verla toda destrozada por él era un sueño de todo hombre, una mujersota con una cinturita y unas piernotas, más un culote de puta madre, era lo que todos querían y solo él lo podía tener.
Tu empezabas a retorcerte más sobre Felipe, y le empezabas a tocar los brazos, en especial los bíceps.
Este recordó como una vez habías mencionado en tu sueño que querías correrte en su bícep, esa noche descansó muy bien con una buena masturbeada viendo tu culo y bonitas piernas.
Iba acercándose a su orgasmo, viéndote.
Papi, voy a correrme ya, voy a correrme en tu polla por favor, córrete dentro, embárrame tú semen y lléname mucho. -
Fue lo que finalmente hizo que soltara todo.
Córrete chiquita, Córrete como una puta. Mi puta. - Después de soltar un gemido, Felipe cae lentamente apoyando sus brazos a un lado de tus hombros.
Y sin más, solo logra escuchar como te corres desesperadamente por toda su polla, estremeciéndote y aferrándote de los brazos de Felipe para apoyarse, sin parar de gemir y gritar su nombre.
Tiras y tiras de semen salen disparadas de su polla rojiza llenándole el coño a su bebé.
Felipe saca su polla ya cuando se recupera y puede admirar la belleza de su novia estando muy perdida, lo único que sale de su boca es “mhhm”
Lo cual le excita más y te toma de la cintura con fuerza.
Este te recarga en el respaldo de la cama, no logras procesar lo que esta pasando, poco a poco aclaras tu vista cuando Felipe abre tus piernas y las separa lo más que puede, haciéndote quejar.
Sus ojos azules escaneándote te hacen temblar, se agacha y empieza a comerte el coño de forma descontrolada, gimes sintiendo sus dedos empujando el semen que ruega por salir de tu entrada.
La muñeca de Felipe realmente duele cuando mete sus dedos y aumenta la velocidad, luego de su lengua hasta hacer, de igual forma, doler su mandíbula.
Esa noche descubrió que su nueva adicción chupar tu coñito escuchando los hermosos gemidos y súplicas de tu parte diciéndole que se detenga.
Amor, es demasiado, es mucho, ya- Empujas con tus brazos débiles a su cabeza tratando de cerrar las piernas.
Con el mismo ritmo de antes, la novia del castaño pegó un grito enorme de satisfacción, dándole la razón del por qué su boca se llenó de fluidos, lo cual le hace mover los dedos más rápido, Felipe abre la boca para tomarlo todo.
Ese si que era un premio para él.
Tu no paras de gemir por la sobre estimulación. Felipe mueve rápido tu clitoris antes de que sueltes un último grito.
Felipe da un beso en tu zona y empieza a masajearla con delicadeza. Su cuerpo sube para quedar pegado con el tuyo.
Los dos ardiendo.
Yo creo que el oscar debiste haberlo ganado vos, amor. - Felipe se acomoda en la cama con una sonrisa en el rostro.
Por que lo decís? - Preguntas entre jadeos, estabas cansada.
Por tener a un novio guapo que puede comerte como a vos te gusta. - Felipe te abraza por la cintura escondiendo su rostro en tu cuello.
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ironspdr6700 · 27 days
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Los traductores de la Odisea al español
Este post, está dedicado a @rubynrut (gracias por tu fanart de Nausicaa), @iroissleepdeprived @perroulisses y @aaronofithaca05 porque nunca pensé que habría tantos fanáticos de la Odisea en español en Tumblr además de mí. Así que decidí hacer un repaso de las muchas traducciones que me he encontrado.
El listado lo saqué del libro Voces de largos ecos: Invitación a leer los clásicos de Carlos García Gual. Aunque la primera traducción al español de la Odisea fue en 1556 (titulada "La Ulixea" porque en España siempre han preferido el nombre romano de Odiseo), me quedaré con las versiones publicadas desde el siglo XX.
Luis Segalá (1910). Esta es la más difundida por todo el Internet. Segalá se tomó el trabajo de toda una vida de traducir en prosa la Ilíada, la Odisea y los Himnos Homéricos en prosa, lo que inició un nuevo interés entre los académicos castellanos por la poesía griega arcaica. Es, probablemente, la traducción más directa y literal del griego, pero personalmente creo que le hace perder la fuerza del texto. Sin embargo, Segalá debe ser el mejor que ha sabido traducir los epítetos con mayor impacto (mi favorito: Hijo de Laertes del linaje de Zeus, Odiseo fecundo en ardides) y su traducción de la Ilíada hasta ahora me parece insuperable.
Háblame, Musa, de aquel varón de multiforme ingenio que, después de destruir la sacra ciudad de Troya, anduvo peregrinando larguísimo tiempo, vió las poblaciones y conoció las costumbres de muchos hombres y padeció en su ánimo gran número de trabajos en su navegación por el ponto, en cuanto procuraba salvar su vida y la vuelta de sus compañeros a la patria.
Fernando Gutiérrez (1953). Esta es mi versión en verso favorita. Gutiérrez se basó en la traducción de Segalá y, usando versos de 16 sílabas, intentó hacer una imitación del hexámetro dactílico. El ritmo le confiere una musicalidad preciosa a la obra y la potencia que se pierde en Segalá.
Habla, Musa, de aquel hombre astuto que erró largo tiempo después de destruir el alcázar sagrado de Troya, del que vio tantos pueblos y de ellos su espíritu supo, de quien tantas angustias vivió por los mares, luchando por salvarse y por salvar a los hombres que lo acompañaban
José Luis Calvo (1976). Esta es la más interesante que me he encontrado. En esta ocasión, Calvo empezó con una invocación a la Musa en verso:
Cuéntame, Musa, la historia del hombre de muchos senderos, que anduvo errante muy mucho después de Troya sagrada asolar; vió muchas ciudades de hombres y conoció su talante, y dolores sufrió sin cuento en el mar tratando de asegurar la vida y el retorno de sus compañeros.
Pero el resto de la obra la traduce en prosa, tratando de darle una velocidad amena intentando, según él, imitar una novela española moderna (no he leído ninguna de esas. así que no tengo con que comparar), pero creo que lo consigue estupendamente.
Ello es que todos los demás, cuantos habían escapado a la amarga muerte, estaban en casa, dejando atrás la guerra y el mar. Sólo él estaba privado de regreso y esposa, y lo retenía en su cóncava cueva la ninfa Calipso, divina entre las diosas, deseando que fuera su esposo.
José Manuel Pabón (1982). Una versión en verso, rítmica en dáctilos acentuales. Esta es muy respetada por los académicos, aunque tiene demasiados arcaísmos para mi gusto y hay pasajes donde creo que el ritmo hace perder la narración, cosa que me decepciona porque la Odisea es el precedente de la novela moderna, pero cuando encaja, encaja con toda la belleza posible
Musa, dime del hábil varón que en su largo extravío, tras haber arrasado el alcázar sagrado de Troya, conoció las ciudades y el genio de innúmeras gentes. Muchos males pasó por las rutas marinas luchando por sí mismo y su vida y la vuelta al hogar de sus hombres
Carlos García Gual (2005). Esta versión en prosa la tengo pendiente, pero le tengo muchas esperanzas. Este traductor es uno de los mejores helenistas de la actualidad y ha publicado un gran número de libros estudiando la cultura griega, sobre todo la mitología griega, tanto para especializados en literatura como para el público general (si tienen la oportunidad de leer su Prometeo: mito y tragedia). Me encanta como se expresa, especialmente hablando de los poemas homéricos (vean un video con una de sus conferencias en Youtube: https://www.youtube.com/watch?v=C70tFKnMZ9o&pp=ygUSY2FybG9zIGdhcmNpYSBndWFs)
Háblame, Musa, del hombre de múltiples tretas que por muy largo tiempo anduvo errante, tras haber arrasado la sagrada ciudadela de Troya, y vio las ciudades y conoció el modo de pensar de numerosas gentes. Muchas penas padeció en alta mar él en su ánimo, defendiendo su vida y el regreso de sus compañeros.
Pedro C. Tapia Zuñiga (2013). Hecho para la colección de clásicos grecolatinos de la Universidad Nacional Autónoma de México y viene incluido con el poema original en griego. No sé por qué me gusta tanto, si tiene el doble de arcaísmos que la versión de Pabón, pero me encanta con su estilo en verso rítmico.
Del varón muy versátil cuéntame, Musa, el que mucho vagó, después de saquear el sagrado castillo de Troya; de muchos hombres vio las ciudades y supo su ingenio, y él sufrió en su alma muchos dolores dentro del ponto, aferrado a su vida y al retorno de sus compañeros.
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jacobelgordi · 2 months
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creo que el error mas grande de esta live action fue no haber empezado con la narración de katara y con el ataque a la tribu agua del sur que iba a dejar a aang y katara ya con algo en común en el momento que se conocieran y habria dejado que aang sea un misterio por mas tiempo en vez de meterte todo en ma cara al principio. serie hecha medio pensando en la gente que no larga el celular cuando ve una peli :/
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notasfilosoficas · 14 days
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“La historia es una galería de cuadros en la que hay pocos originales y muchos falsos”
Jules Michelet
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Fue un escritor e historiador francés, nacido en París en agosto de 1798, conocido por su obra de varios volúmenes “Historia de Francia”, que traza la historia de Francia desde los primeros tiempos hasta la Revolución Francesa de 1789.
Nació en el seno de una familia calvinista, su padre era un próspero maestro de imprenta y Jules le asistía en el trabajo de impresión. 
Estudió en el célebre colegio Lycée Charlemagne rechazando un puesto en la imprenta imperial. Fue un alumno destacado aprobando su examen universitario en 1821 y convirtiéndose en profesor de historia en el College Rollin.
En 1824 contrajo matrimonio con Pauline Rosseau en donde tenía padrinos poderosos como el político y escritor Abel-Francois Villemain y el filósofo y espiritualista Victor Cousin entre otros.
Michelet era más que un apasionado político, un hombre de letras y un investigador de la historia, publicó sus primeras obras escolares entre los años 1825 y 1827, produciendo diferentes esbozos y cronologías de la historia moderna. 
1838 fue un año de gran importancia en la vida de MIchelet, fue nombrado titular de la cátedra de historia en el Collège de France en un momento en que la actividad de la orden jesuita causaba cierta pretendida alarma. 
Ayudado por su amigo el escritor e intelectual francés, Adgar Quinet, abrieron polémicas conferencias en contra de la orden religiosa, era tal su fervor que sus cursos tuvieron que ser prohibidos al inicio del estallido de 1848, tiempo en el que emprendió y llevó a cabo una entusiasta “Historia de la Revolución Francesa”, durante los años que transcurrieron entre la caída de Felipe II y la instauración definitiva de Napoleón III.
Tras el golpe de estado de 1851, el hombre de ideas liberales, y republicanas, con la instauración del segundo imperio, se vio privado de su empleo en el Archivo Nacional y de su cátedra en el colegio de Francia.
Al tiempo en que continúa trabajando en su obra histórica monumental, emprende la publicación de una serie de libros extraordinarios como versiones extendidas de ciertos episodios o comentarios a volúmenes anexos.
En 1867 la gran obra de su vida es terminada y se trata de una edición compuesta de 19 tomos que abarca desde la historia antigua llegando a la muerte de Carlomagno, hasta la historia del siglo XVIII y el estallido de la revolución.
Michelet es probablemente el primer historiador en dedicarse a algo así como una historia pintoresca de la edad media, y su narración sigue siendo la mas viva que existe.
Aunque su investigación en manuscritos y textos impresos fue de lo mas laboriosa, su imaginación y fuertes prejuicios religiosos y políticos lo hicieron ver las cosas desde un solo punto de vista.
Michelet no pudo concluir la segunda parte de su obra titulada Histoire du XIX, llegando hasta la Batalla de Waterloo.
Jules Michelet muere a la edad de 75 años de un infarto agudo al miocardio y su cuerpo es enterrado en el cementerio del Père-Lachaise en Paris, uno de los cementerios mas celebres del mundo.
Fuentes: Wikipedia, phte.upf.edu
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internod · 2 months
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SENDEROS DEL FESTIVAL / 21:13 AM - 20.03
PERSONAJES MENCIONADOS: MAI (@maigawa)
Siempre me ha resultado sencillo extraviarme entre los sonidos estridentes, las luces cegadoras y el calor asfixiante que caracterizan las festividades del Sabbat. No es sorpresa que intente evitar los eventos de estos bárbaros, pero hay situaciones que uno simplemente no puede perderse. Incluso si la consecuencia de lo mismo es esta desorientación con la que cargo. 
Los senderos parecen extenderse hasta lo infinito, y perderse en un lugar donde lo sagrado es tan profuso como abrumador no es tarea difícil. Sin embargo, como una luciérnaga atraída por la luz, termino descubriendo un rincón casi tan apacible que podría llegar a acostumbrarme. Una eternidad en medio de los muertos, nada muy diferente a la vida que tanto desprecio.
No pasa suficiente tiempo como para recuperarme cuando unos pasos me obligan a esconderme, incapaz de soportar la insistencia de otros Lasombra que intentan arrastrarme hacia sus actos inmorales y viles. 
— Mi paciencia tiene límites. “Controla a tu chiquilla, o la próxima vez, se despedirán de Tokyo de una manera poco amistosa.” Díselo cuantas veces sea necesario.
Algo me impide escuchar la voz del otro hombre, pero podría reconocer a un Assamita en un santiamén. Sea la precisión sobre sus miradas o el aroma a muerto que les persigue, son realmente indistinguibles. Incluso si la tentación por espiar más es fuerte, me asusto rápido cuando la conversación continúa.
— Los independientes como nosotros debemos ser astutos en nuestras alianzas. La conexión con el Sabbat es simplemente un juego de intereses. No debería resultar tan complicado pedirle a una vástago tan novata que se abstenga de inmiscuirse en asuntos del Sabbat que no le competen. ¿O acaso no sabe a quién debe rendirle cuentas ahora? Hinata era lento, pero las historias que he oído de Osaka son de terror. No se puede esperar el paraíso de estos tipos. 
— Ahora bien, ¿tiene aire en la cabeza o por qué le está dando esos secretos a los Ravnos? Demasiadas ambiciones para alguien que no tiene un poco de lógica. Esa Mai debería agradecer que no la estamos matando nosotros mismos. Su sire por igual. Llámalo, búscalo, escarba donde sea necesario para que te conteste. Esto no puede quedar así. 
𝐀𝐂𝐋𝐀𝐑𝐀𝐂𝐈𝐎𝐍𝐄𝐒 𝐎𝐎𝐂.
⦾ Los sucesos narrados son de conocimiento público IC. Quien quiera jugar con esta información, puede hacerlo de la manera que mejor le sienta: adoptando las características de quien presenta esta narración, acomodando a sus personajes para que hayan sido ellos quienes también oyeron los pedazos cruciales de la información, o simplemente aceptando la información como si proviniera de una fuente externa. 
⦾ El o los usuaries de los personajes mencionados pueden utilizar esta información de forma directa o indirecta para incluirlo en sus convos, si así gustan.  
⦾ Cualquier consulta, les recordamos que estamos a su disposición y a tan solo un mensaje de distancia.
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jartitameteneis · 4 months
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¿HAS LEÍDO CIEN AÑOS DE SOLEDAD DE GABRIEL GARCÍA MÁRQUEZ? ¿Sabías que tuvo tanto éxito que fue traducida a 46 idiomas? Aquí te cuento un poco sobre ella
“Cien años de soledad”, una obra cumbre del escritor colombiano Gabriel García Márquez, es una narrativa épica que entrelaza lo real y lo mágico, presentando una visión profunda y alucinante de la vida en América Latina. Situada en el imaginario pueblo de Macondo, la novela sigue la historia de la familia Buendía a lo largo de siete generaciones, explorando temas de soledad, destino, amor y poder.
La trama se inicia con la fundación de Macondo por José Arcadio Buendía y Úrsula Iguarán. Este lugar, aislado del mundo exterior, se convierte en el escenario de eventos extraordinarios y cotidianos que reflejan la historia de Colombia y, por extensión, de América Latina. La narración fluye entre la realidad y lo fantástico, haciendo uso del realismo mágico para tejer una historia que desafía las convenciones del tiempo y el espacio.
Los personajes de la familia Buendía son únicos y memorables, cada uno con sus propias pasiones, obsesiones y destinos trágicos. Desde la búsqueda de conocimiento hasta los amores condenados, la novela retrata un ciclo repetitivo de errores y tragedias que parecen predestinados. Estos ciclos se ven reflejados en los nombres recurrentes dentro de la familia, como Aureliano y José Arcadio, cada uno con su propia historia, pero unidos por la herencia familiar.
García Márquez, a través de “Cien años de soledad”, no solo cuenta la historia de una familia, sino también la de un continente en constante cambio y conflicto. La obra aborda la violencia política, las guerras civiles, la explotación del imperialismo, y la lucha por la identidad cultural. Estos elementos históricos se entrelazan con lo fantástico, creando un mundo donde lo imposible parece cotidiano.
El estilo narrativo de García Márquez en esta obra es notable por su riqueza y complejidad. Utiliza una prosa poética y vívida que transporta al lector a un mundo donde la realidad se funde con la fantasía. Los elementos mágicos, como lluvia de flores amarillas o personajes que levitan, se presentan de manera natural, haciendo que el lector acepte lo maravilloso como parte de lo cotidiano.
En conclusión, “Cien años de soledad” es una obra maestra que captura la esencia de la experiencia latinoamericana, marcada por la soledad, la lucha, el amor y el destino. García Márquez crea un universo literario único, donde la magia y la realidad coexisten, reflejando las complejidades, contradicciones y bellezas de la vida.
Fuente: Un Angel X el Mundo
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kainamendozasolano · 6 months
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Un día leí, en alguna parte, que “el amor tiene un precio”.
Y es que, a lo largo de la historia humana hemos escuchado o leído grandes epopeyas de amor, con tórridos caminos y despeñaderos sentimentales.
Hemos llorado a cántaros cuando esos discursos conducen nuestras imaginaciones (hasta los corazones más duros).
La trágica historia de Edipo y Yocasta, tal vez Romeo y Julieta o Eloísa y Abelardo son un claro prototipo de ello.
Existen cuentos, novelas, leyendas, mitos, relatos y fábulas que pueden demostrar esta teoría que para muchos puede parecer un absurdo.
Incluso, la mitología griega nos deleita con sus fantásticos relatos de entrega total y amor incondicional. Para mencionar sólo uno podemos echarle un vistazo a Orfeo y Eurídice.
Y esto es algo real, el amor tiene un precio.
Muchos no lo aceptamos, porque hoy en día (año 2023) las personas sienten que, a menor apego, menor sufrimiento. Y está bien. La forma en que vemos o vivimos el amor es una cuestión de épocas.
Pero aquellos que conocen un poco de historia y han amado las letras, pueden discernir con gran facilidad el hecho de que el amor no es solamente éxtasis y encantos. Pues el destino no siempre juega a favor de los amantes. (Para los que creen en el destino).
A finales del siglo pasado nos encontramos con esta magnífica narración de Fernando Gaitán.
Las mentes humanas del año 1999 no estaban listas para la complejidad de esta construcción, incluso, hoy en día, muchos no están preparados para entenderla en su totalidad.
“Yo soy Betty, la fea” está llena de matices y dinámicas determinantes para el desarrollo de una buena historia.
Sólo una mente brillante, como la de Mario Ribero, logró captar la intención de este escritor incomprendido y plasmó en nuestras pantallas una obra maestra.
Sí, cada minúsculo detalle de esta novela está bien pensado y ejecutado (salvo a algunos detalles que se escaparon por cuestión de tiempo).
La forma en que Beatriz Pinzón Solano se enamora de Armando Mendoza Sáenz es sublime, es completamente real.
Y, sin embargo, posee unas chispas mágicas que nos envuelven en los más pasmosos estremecimientos. (risas)
Está muy bien estructurada en cada una de sus formas. Aborda diversos temas que valdrían la pena desglosar y analizar con cierta determinación.
Pero hoy quiero hablarles acerca del amor. Y perdón por divagar tanto.
No soy una experta en estos temas. Pero ¿quién lo es?
Igualmente, me deleito en cada pequeñísima e imperceptible pincelada de esta historia de amor tan peculiar.
El amor que Betty sentía por este hombre no apareció de un instante a otro. Fue una construcción paulatina.
A ver, pongámonos por un momento en la posición de esta mujer (sé que no se nos va a hacer difícil).
Una niña solitaria que sufría burlas desde que tenía uso de razón. El rechazo y el desprecio formaron parte de su vida desde la infancia. Su círculo de amigos o seres queridos era bastante limitado, sólo contaba con Nicolás y sus padres que la protegían hasta del aire que respiraba.
Cuando llegó a Ecomoda, el segundo día, este hombre la defendió frente a su prometida. Fue capaz de llevarle la contraria a la mujer que amaba (según lo que se percibía en las revistas sociales) sólo por ella.
Cuando Marcela la humilló, comparándola con Patricia, hablando pestes a sus espaldas… Betty estaba acostumbrada a esta clase de tratos. Pero, jamás esperó que un hombre, tan apuesto y elegante, la defendiera.
Comencemos por allí.
Sí, sí. Armando era un ogro y un desgraciado desde el principio. Pero nuestra niña se quedó con esa parte bonita de él.
Ella descubrió que detrás esa fachada, de neurótico y mujeriego, se escondía un ser humano sensible.
Beatriz se sintió en deuda con él. Por sus atenciones, por la confianza que le dio. Porque él defendía su trabajo y la valoraba como profesional. (Las condiciones laborales son otro tema)
Armando Mendoza hizo, por Beatriz Pinzón, lo que absolutamente nadie había hecho por ella.
Y desde allí comenzó a crecer ese amor, esa ilusión hermosa que la conducía cada día.
¿Cómo nace el amor? ¿En qué punto germinó este amor tan fuerte de Beatriz hacia su jefe?
Son preguntas tan difíciles de responder. ¡Porque es tan complejo este ilógico proceso!
Según Platón, el amor consiste en que la persona que ama no va a amar la belleza simple; se va a concentrar en buscar lo bello de quien ama.
Y eso le sucedió a Beatriz (otro día hablamos de Armando).
Día a día, con la convivencia y la cercanía, Betty descifró un hombre que nadie conocía.
Un hombre que le secaba las lágrimas y la abrazaba, que le dedicabas miradas tiernas y sonrisas hermosas. Que le prestaba atención y ponía toda su confianza en ella.
Un hombre que le confesaba sus temores y le pedía que no lo dejara, que permaneciera a su lado.
Él incluso era capaz de romperle la cara a Daniel Valencia por defenderla a ella (antes del malévolo plan).
Y es así como en este punto de su historia, el amor asciende, se glorifica, se realza y se convierte en el más claro patrón del “amor cortés”. (como la luz de la aurora, que crece hasta que el día es perfecto).
¿Quién no se enamoraría de alguien así, cuando toda tu vida no ha sido nada más que dolor y rechazos? ¿Quién no se enamoraría de una persona que te demuestra lo importante que eres en su vida?
Creo que cualquiera de nosotros, estando en la posición de ella. (Por eso les dije que debíamos ponernos en su lugar para entenderla).
En ella surgió un sentimiento puro e incorruptible. Sus ojos brillaban, su sonrisa se iluminó.
¡Señores! ¡El amor no se puede ocultar! Mario Calderón se dio cuenta de ello. Armando, en su subconsciente, estaba extasiado con la entrega de esta mujer.
Como bien escribió Béroul: “el amor no puede disimularse.”
Ella no era una persona cualquiera… Era un espíritu elevado.
Por el simple hecho de que su amor, no se limitaba a lo carnal (al eros), sino que ese sentimiento traspasaba las barreras del raciocinio.
Antes de desearlo como hombre, ella lo amaba como amiga.
¡¡Beatriz lo amaba!! Y ella era feliz. Aunque sabía que era un imposible (por diversos factores).
Ella deseaba el bienestar de él. Anhelaba su felicidad. Y sabía perfectamente que Marcela no era idónea de efectuar esa dicha.
Cuando su sueño se realizó, ella no lo podía creer. Tenía aún los pies sobre la tierra. (Eso lo podemos percibir en su diario).
Pero se arriesgó a vivir el sueño y se entregó a esa fantasía que, ella sabía, era efímera.
Sí, nos hubiese gustado ver más de este romance. Mas noches clandestinas de estos dos amantes. Pero sólo nos resta jugar con la imaginación y hacer fanfics. (risas)
He escuchado de personas que dicen que lo de ella era un “amor platónico”, por el contrario del real, éste se queda en lo corporalmente hermosísimo, idealiza y es inverosímil. Estoy es total desacuerdo con ello.
Y según un psicólogo de nuestra época, dice “Amar es algo que necesitamos, pero necesitamos amar bien. Va más allá del entretenimiento. Una aventura, pasar un rato, es más por el lado del enamoramiento. El amor implica eros, que es deseo, tener ganas del otro como un postre, es amistad, humor, confianza, compartir cosas y no explicar el chiste”. Walter Riso ha tenido mucha razón en esa simple frase.
(Repito) ¡¡Antes de desearlo como hombre, ella lo amaba como una amiga!!
Por eso su sentimiento es tan fuerte, hasta el punto que fue capaz de perdonarle todo el daño.
Pero todo ese amor maravilloso que hoy alabamos y nos deleitamos en él, le costó un precio a Beatriz.
Sí, el amor tiene un precio.
Ella pagó con su vida. Ella murió.
Y es allí cuando me cuestiono el final de la historia. Pero intento disfrutarla y ser feliz con el resultado.
Porque...
Cuando veo al Armando Mendoza de la serie “ECOMODA” digo: Valió la pena morir por un hombre así.
Aclaraciones: Sólo vale la pena en la ficción.
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belvedia02 · 7 months
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Getting caught in a storm
Enid había permanecido en silencio porque estaba temerosa de la reacción de Wednesday, si había entendido lo que se escondía detrás de la analogía que hizo durante toda la narración del cuento. Consideraba a Wednesday como una persona fundamental en su vida, porque se había convencido que gracias a su desesperado intento de salvarla, ella había podido transformarse por primera vez, ahora, si Wednesday sentía lo mismo que ella, Enid lo dudaba.
—Un cuento adecuado para niños—Wednesday rompió aquel silencio que se estaba convirtiendo en incómodo.
— ¿Tú crees?, quizás cuando empiecen las clases de arte en Nevermore, me anime a dibujarlo— Su mirada estaba concentrada sobre las llamas.
— Pensé que lo harías durante las vacaciones— Tampoco se atrevía a mirarla, todavía sentía aquella cálida sensación en medio de su pecho. 
—No, perdería mi tiempo, o sea, prefiero dar paseos por estos sectores, leer y seguir aprendiendo a tocar el violín, no me gustaría estar encerrada sola dibujando.
—¿Por qué tendrías que estarlo?
—Porque dibujaría en mi habitación.
—Quizás puedas dibujar mientras escribo— Wednesday siempre decía que su hora de escritura era sagrada para ella, al principio le molestaba los ruidos que provenían del lado de Enid, sin embargo a medida que fueron conviviendo, formaban parte de esa hora.
— No lo sé, además no soy buena dibujando— Enid tenía varias libretas de dibujos, pero nunca se sentía satisfecha con lo trazos y formas de esos bocetos.
Wednesday no volvió a insistir con el tema, porque comprendió que el tono de voz de Enid carecía de entusiasmo.
— ¿Quieres qué volvamos? — Le preguntó mientras miraba su perfil.
—La noche está tan serena y despejada, qué me dieron ganas de caminar por el bosque.
—¿Por el bosque?, pensé que querías permanecer cerca de la fogata y del lago.
—De la fogata sí, pero no del lago, todavía sigo pensando en ese cuento.
—Enid, solo era un cuento, nadie se asustaría de verdad.
—Wends dijiste que había un demonio y ¿qué pasaría si hay otro?
—Es imposible, la abuela se encarga de revisarlo cada cierto tiempo, además ya no hemos cometido ningún error con las invocaciones.
—¿Invocaciones?
—Técnicamente nos comunicamos con los espíritus de algún familiar para fechas importantes, en algunas ocasiones han venido con algún intruso. Además me viste cuando quise establecer contacto con Goody.
—Para ser sincera no le tomé demasiada atención a lo que estabas haciendo ese día.
Wednesday tampoco quería recordarlo, Enid le había preparado una fiesta sorpresa de cumpleaños y ella no se había comportado acorde a la situación, casi sintió que despreciaba totalmente su día de nacimiento, no era así, pero estar inmersa en la investigación la había vuelto más terca de lo acostumbrado.
— Así que el bosque… — Desvió el tema— Me parece una buena idea, sería bueno poner a prueba tus sentidos agudizados.
—Nada de eso, no haré nada extraño que una chica de 17 años haría mientras pasea en el bosque con su mejor amiga.
—Cómo digas, al menos si se aparece un animal extraño lo escucharas antes que yo.
—Sí, sí, a menos que tengas unas de tus extrañas visiones.
—Aún no puedo encontrar la forma de controlarlas, además que tocar el tronco de un árbol no creo que desencadene nada.
—Te daré la razón por esta vez, además aprovechemos que trajiste la linterna y no sé que más hayas empacado para esta noche.
— Lo esencial; una tienda, mis cuchillos y cuerdas.
—Realmente eres una niña exploradora— Enid se puso de pie y se estiró. Wednesday hizo lo mismo, mientras Enid guardaba la manta en la cesta vacía, Wednesday apagó el fuego de la fogata.
—Estamos lista—
—¿Dejaremos esto acá? — Refiriéndose a la cesta y a la mochila.
—Sí, nadie se atreve a traspasar este terreno. — Enid se abstuvo de preguntar si alguien lo había hecho, no quería saber qué destino había sufrido ese pobre ser humano.
Wednesday había tomado solo los cuchillos y se los había guardado en los bolsillos de su chaqueta. Caminando relativamente juntas se adentraron en la espesura del bosque.
 Durante su paseo todo estaba en relativo silencio, la conversación también estaba ausente, a medida que se adentraban al bosque Enid estuvo tentada a agarrar la mano de Wednesday en las ocasiones en que sus dorsos se habían tocado, se contuvo por el temor de provocar una reacción de fastidio, estaba segura que no lo soportaría, porque eso significaría que no tenía ninguna oportunidad de declararse.
—Enid.
—¿Qué pasa Wends? — Se detuvo unos segundos después que Wednesday pronunció su nombre.
—Es mejor que volvamos.
—No me asustes, ¿qué viste?
—Nada, pero si te fijas en el cielo, se está cubriendo y será más complicado regresar, sería difícil sin la orientación de las estrellas.
—¿Estamos perdidas? — Se asustó ante la posibilidad y le agarró con fuerza el brazo con ambas manos.
—No, quisiera decir que conozco este bosque como la palma de mi mano, pero sería mentirte, digamos que dejamos con mi hermano y el tío Fester señales para evitar perdernos.
—Por un momento pensé que habías arrojado migajas de pan.
—No Enid, eso solo sucede en los cuentos.
—Y ¿cuáles son esas señales?
—Cintas negras en los árboles, trazamos un camino que sea fácil de seguir.
—¿Negro? Creo que será difícil de ver en la noche.
—No creo, si encontramos el primer árbol sería más sencillo desde ese punto. Porque recuerdo la altura a las que están atadas.
—Seguramente se han movido con los años.
—No, cada verano lo revisamos cuando se inician las vacaciones.
—¡Qué precavidos!
—Es culpa de mi hermano, se perdió durante la primera noche de vacaciones. Tuvimos que salir a buscarlo. De ahí aprendimos que deberíamos revisar las cintas cada año. Por mi parte lo hubiera dejado ahí, cuando lo encontramos ya estaba amaneciendo, se podían distinguir perfectamente las cintas.
—Cada vez que encuentro un problema, ustedes los Addams tienen solución para todo, son increíbles— Enid fijo su vista en el árbol más cercano y no había rastro de ninguna cinta.
—Aprendemos de la experiencia propia o de los errores de los demás, así de simple— Wednesday estaba alumbrando los árboles, todavía no encontraba ninguna cinta.
Siguiéndola de cerca, Enid sentía que se le aceleraba el corazón, pensando en lo peor.
—La encontré— Wednesday se detuvo y Enid vio claramente la cinta.
—Creo que para las próximas vacaciones deberían colocar cintas rosadas o algún otro color que sea más fácil de ver por las noches.
—Eres cruel Enid, ¿te has olvidado de mi alergia?
—¿Qué alergia? Seguro fue uno de tus inventos, has convivido conmigo por más de un año, la viva imagen del arcoíris y nunca vi que tuvieras al menos un sarpullido.
Wednesday iba a contradecirla, cuando sintió algo en su cara, luego otra, hasta que pudo notar que el cielo estaba cubierto de nubes y por el espacio entre los árboles se estaban colando las gotas de lluvia.
—Es mejor apresurarnos comenzará a llover— Siguió alumbrando los árboles hasta seguir el camino que las llevaría hasta el lago.
Cuando salieron, ya no eran algunas gotas, si no que una tormenta se había desatado.
—¿Revisaste el tiempo Wends? — Enid había confiado en que el tiempo estaría despejado.
—No— Dijo con simpleza mientras estaba agarrando su mochila. — Además me parece perfecto.
Enid sabía que Wednesday amaba los días lluviosos, eran sus preferidos, incluso más si estaban acompañado por tormentas eléctricas.  Solo bastaron un par de minutos para que quedaran empapadas.
—Vamos Wedns ¡apúrate!
—¿Cuál sería la finalidad? Más adelante también está lloviendo, además no te parece una noche maravillosa— Wednesday alzó su cabeza y cerró los ojos.
—Si, bueno yo… — Con la ayuda de la luz de la linterna pudo apreciar el rostro de Wednesday, uno que rara vez veía, así que aprovechó de tomarle una foto.
—Vamos, supongo que no querrás pasar más tiempo bajo la lluvia— Enid fue hasta el lado de Wednesday disfrutando de su caminata bajo la incesante lluvia. Estando a mitad de su camino, escucharon un estruendo acompañado de una fugaz luz.
Ahora sí es una magnífica tormenta. Pensó Wednesday.  
@choicesprompts
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necromancercoding · 7 hours
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Necro, tengo curiosidad ¿cuántos seguidores tienes en total?, en todo este tiempo dándole soporte a la comunidad ¿qué es lo más difícil que te ha tocado contestar? ¿has recibido comentarios feos? ¿Qué tipo de rol resulta ser tu favorito? ¿Qué tipo de narración manejas para tus personajes? ¿Prefieres pbs buenos, malos o neutros? ¿roleas pbs masculinos, femeninos o todo lo demás que se han inventado actualmente?
¡Hola anon!
Pues ando alrededor de los 2.9k, aunque es a tener en cuenta que muchos blogs que me siguen llevan muertos un tiempo 😂 No es poco habitual que me sigan tumblrs de promoción que o bien dejan de usarse cuando el foro abre o bien se usan hasta que el foro muere, por lo que un porcentaje importante de estos seguidores no son gente activa.
Lo más difícil que me ha tocado contestar... No te sé decir un post exacto, la verdad, hay preguntas que pueden ser más complicadas que otras. Normalmente las más 'difíciles' (aka que me llevan más tiempo contestar) son aquellas que involucran un uso tocho de JS, y unas cuantas de ellas acaban siendo convertidas en tutoriales porque queda más limpio.
He recibido comentarios feos en muchas ocasiones, aunque normalmente la gente en cuestión, incluso con anon, no se atreven a decirlos aquí. Usan ciertos otros blogs para tirar caca, por lo que realmente su opinión es un poco irrelevante; es simplemente un círculo de chimpancé tirando caca a la ventana y señalando para que los demás chimpancés aplaudan y se rían, mientras los visitantes del zoo los ven como los animales tirando caca que son (?)
Los PBs, a mi juicio, no son neutros, buenos, o malos, así que presupondré que te refieres a PJs. En tal caso, realmente no me decanto por unos u otros, depende de la ambientación, las tramas que quiero montar, etc.
Suelo rolear cosas de fandom, distopías y terror, generally. Sólo uso 3ª persona (1ª persona solo lo uso en escritura personal, fuera del rol, como algunos fanfics), y suelo rolear personajes masculinos. "Todo lo demás que se han inventado actualmente" también, teniendo en cuenta que, según tu arcaico lenguaje para definir gente fuera de lo binario, yo soy alguien inventado, al ser agénero 😌 Así que te pido de buena fe que no uses ese tipo de lenguaje en mi blog si no quieres ganarte un bonito block 💕
¡Saludos!
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jcplana · 2 months
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Albert Sans - La puerta.
La puerta.  La casa tuvo otros moradores tras el fallecimiento de la mujer. Fue la puerta la justificación. Lo que aparentaba ser una puerta, pues no había abertura en el muro. Un marco sobre el ladrillo, un armazón de madera, un tirador, sin goznes, sin cerradura. El prado del otro lado. Nada en el plano original de la casa, ninguna remodelación.  Una factura apareció que reflejaba tal labor…
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lilietherly · 6 months
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[Fanfic! Newcob]
Omegacember.
Omega Jacob Kowalski/Alfa Newt Scamander.
Fluff.
Romance.
Rule 63. AU!Fem. Femslash.
Lindo y tierno, pero con resultados sexuales.
Los resultados sexuales ocurren luego de la narración.
Inspirado en fanart.
Tumblr media
¡Y ese fanart es este! Que no pudo haber sido dibujado por nadie más que por mi amada y siempre dulce @drunkenelevator 🥰, a quien yo espero no le moleste mi atrevimiento de escribirle una historia a su arte uwu, ¡pero juro que no lo pude evitar! Así como tampoco pude evitar que esta historia fuera ridícula y asquerosamente dulce. Estaba pasando por un mal momento y NECESITABA con mucha urgencia algo todo bonito-todo lindo, y así nació esta cosa; que es, además, el día 23 del reto Omegacember. No sé si seguir enfatizando en que esto es realmente cursi, porque no puedo hablar lo suficiente de eso jajaa, entonces, solo te desearé suerte, cariño, si decides leerlo uwu
* * *
Artemis salió de la tienda sin arrepentimientos luego de lo sucedido. Su buena señora, que seguramente la esperaba en casa con una comida caliente y una hermosa sonrisa en sus labios perfectos, nunca dio una señal que alentara la reciente acción de Artemis. Cierto es que, tal vez, le pedía hacer lo contrario.
A sabiendas, Artemis no se detuvo, permitió que el anhelo y su imaginación enamorada tomaran las riendas. Entró en esa tienda lujosa, hizo alarde de su apellido y, manejándose como las buenas Alfas solían hacer, sin dedicarle una mirada extra al hombre que le preguntó si debía esperar a su Omega, fue directo al hermoso vestido que se exhibía detrás de las cortinas espesas. Ella entregó los galeones, tomó la caja y salió de la tienda conservando los altivos gestos de quienes por mero deporte gastan su tiempo oliendo flatulencias.
Su rostro cambió unas calles después, conforme las dudas hacia su estado mental iban en acenso. No por completo arrepentida, —en realidad no se arrepentía en absoluto—, las dudas eran dirigidas a la reacción de su querida Omega. Mucho le había costado a Artemis el que le permitiera mantener las luces medio encendidas cada vez que hacían el amor, lo que ahora llevaba en esa ostentosa caja exigiría de la amada esposa un salto de fe muy lejos de sus límites.
Paciente como lo sería nunca con nadie más, Artemis jamás haría nada para evocar sentimientos negativos a su venerada mujer, no obstante, la simple idea de verla usando la prenda que resguardaba la caja, casi hizo desmayar a la Alfa. Jackie Scamander, de soltera Kowalski, a pesar de Artemis y el amor descarado que nunca tuvo la intención de esconder una vez resultó demasiado obvio, guardaba complejos irracionales, cuya fuerza, presencia temprana y escasa voluntad para luchar contra ellos una vez perdió a su familia, la volvieron susceptible, desconfiada, no merecedora.
Siendo en realidad preciosa, dulce y valiente; Artemis mucho tardó en comprender los motivos por la que su adorable Omega pretendía ocultarse bajo ropas indignas de su hermosura o porqué se removía incómoda entre los amorosos abrazos de Artemis. Jackie, sin saber explicarlo, y Artemis sin tener la menor idea, llevó antes a que la ignorante Alfa buscara prendas y otros obsequios para adornar, como lo merecía, de pies a cabeza a la hermosa diosa que aceptó su marca de unión. Apunto del llanto, la diosa le preguntó cuál era el objetivo de su burla.
Artemis lo entendió entonces, y desde entonces, dio inicio la cruzada de la Alfa para colocar en las alturas esa cabeza de suaves risos castaños, justo en el lugar a donde pertenecía. Hacía tan solo un año de eso, recordarlo disminuía de las peores formas la fuerza en la decisión de su última compra. La imagen de la forma en que se podría ver su Omega, no obstante, aún retenía cualquier señal de arrepentimiento.
La Alfa tenía un plan, por supuesto.
Difícilmente la Omega aceptaría su obsequio si llegara a entregárselo directamente, Artemis lo sabía. Evitándolo y habiendo aprendido de los errores, previo a la inevitable compra, hizo un par de adquisiciones extra y luego una reservación para el día siguiente en el restaurante favorito de su buena señora. Lugar en donde servían exquisitos postres y que carecía de la tendencia a darle los peores lugares a Omegas Sangre Impura, siempre que sus Alfas pagaran adecuadamente o tuvieran tras sus nombres el apellido correcto, detalle que Artemis seguiría feliz de ocultarle a Jackie.
Dicho el anuncio sobre el lugar de la cena de mañana, y tras el incansable trabajo de Artemis para convencer a su Omega de que bajo ninguna circunstancia la haría repetir un vestido en cada visita, dejaría a la linda esposa sin opciones. Ella lo comprendería de inmediato, reconocería que su Alfa ya guardaba en algún lugar un nuevo vestido, la besaría y, con suerte, harían el amor antes de revelar el contenido de la caja. Los nervios provocarían que Artemis le entregara primero los complementos que, esperaba, reforzaran el ánimo de su Omega, suavizando el impacto del protagonista y dándole mayores oportunidades de un visto bueno.
Suspirando, Artemis se detuvo en un callejón, mirando hacia los lados procuró que nadie la observara y, caminando al fondo, abrió la maleta marrón, con un suave movimiento de la varita guardó en él la caja, justo a un lado de las otras. Se acomodó los cortos risos, se alisó el abrigo azul y tomó un respiro profundo, con todos los pensamientos positivos en la mente, se Apareció justo frente a la puerta de su piso.
No abría la puerta y ya los encantadores aromas de la comida y su amada esposa colmaron sus sentidos, erizándole la piel. Pequeños tacones, que resonaban paseándose en la cocina, la recibieron nada más entrar; se detuvieron al escuchar la cerradura y poco tardaron en caminar hacia ella. La señora Scamander recibió a su Alfa con una sonrisa de delicados labios rojos. Artemis se abrazó a su cintura, inclinándose a su altura la besó tiernamente, aunque sin el cuidado necesario para no mancharse con el labial.
—Lamento haber tardado tanto, bonita, los clabberts sí estaban en época de apareamiento y capturarlos fue doblemente complicado —se excusó al ver a la Omega usando su bata por encima de los hombros, lo que hacía de extrañar el aroma de su Alfa si llegaban a separarse un lapso mayor a lo planeado.
—Esta bien, cariño, lo supuse después de que lo mencionaste —dijo Jackie, sosteniendo la mano de su Alfa y llevándola a la cocina—. Casi nunca te equivocas con los cálculos de las épocas reproductivas, así que comencé con la cena un poco más tarde.
Artemis la siguió tras colocar en su lugar la maleta, les dio suficiente comida a los recién llegados, así que los dejaría descansar esa noche, pues si se mostrara de nuevo ante ellos, luego del estrés de la captura, provocaría reacciones que mucho le costaría tranquilizar. De camino a su propia cena, Artemis se maravilló con el vestido midi de Jackie al haberse deshecho de la bata. Los sueltos pliegues, que si bien lograban esconder las generosas nalgas de su señora y a su vez casi el total de sus piernas hasta los tobillos, aún podía apreciar debidamente el vaivén de sus caderas, lo perfeto que andaba en sus tacones y, arriba, el cómo la tela suave arropaba esa cintura. Inevitablemente le provocó un suspiro.
Sin poder resistirlo, Artemis se abrazó a su Omega, lo que dificultó el avance de las dos a la cocina. Jackie sonrió cantarina, acariciándole la nuca al sentir la punta de una ávida nariz olisqueándole el cuello. Artemis repartió pequeños besos en cada centímetro de piel descubierta por el amplio escote, maravillándose a su vez de la vista en el interior que le entregaba su favorable altura.
—Te extrañé.
—¿Demasiado público? —preguntó Jackie con sabiduría.
—Demasiado ruidosos también, y todos tenían un consejo experto sobre lo que debía hacerse con los clabberts.
—Ya veo, ¿debería quitarme los zapatos? —Artemis aumentó la fuerza de su abrazo.
—No, eres adorable en ellos, además, hacen un sonido reconfortante.
Ellas tenían un comedor, por supuesto, aun así, siendo únicamente dos, solían comer siempre en la mesita de la cocina, en donde al ser uno de los lugares predilectos de la Omega, su aroma resaltaba incluso en su ausencia. Ocupando su respectiva silla, Artemis se preguntó cuánta influencia tuvo el estresante día en su decisión de comprar aquella prenda para su esposa, lo que regresaba una parte de las dudas. Es decir, pese a que el vestido llamó su atención desde un par de semanas atrás, consideró que resultaba en exceso atrevido para el nivel en que su diosa era consciente de su divinidad. Quizá, si bien no se arrepintiera de la osadía, aún nada la disculparía por tomar esa decisión impulsada por el estrés.
La comida y la charla afable, espléndida como siempre, llenó el estómago y el corazón de Artemis, colmando los pensamientos inquietos de paz; de nuevo agradecía en silencio la oportunidad de compartir un momento tranquilo con su Omega. Al terminar, usó un hechizo simple para lavar los utensilios y platos sucios.
—¿Vamos al sofá? —Jackie le sonrió, asintiendo al reconocer la petición indirecta para abrazarse y hablar un poco más.
La ayudó a descalzarse los zapatitos y a que el vestido no se arruinara al acostarla contra el respaldo del sofá, donde fue tras ella al deshacerse de sus zapatos y calcetas. La acorraló con su cuerpo y el brazo derecho alrededor de su cintura, ofreció el brazo izquierdo como almohada y acercó su rostro para besarla lenta y tiernamente. La hermosa Omega suspiró, correspondiendo, sintiéndose segura en el apretado abrazo de su Alfa; que como cada noche le recordaba el lugar a donde pertenecía, que la cuidaría y besaría y que cumpliría sin dudar su responsabilidad para con su Omega.
—Hay algo que no me has dicho —aseguró Jackie, leyendo una travesura en los ojos de su Alfa.
—Es… Yo… Creí que… —tartamudeó Artemis, evitando la mirada inteligente de su esposa. Ella la besó un par de veces, apaciguando su nerviosismo de la manera más efectiva—. Lo adivinaste en cuanto llegué, ¿verdad? —Su Omega le sonrió tímidamente, aceptando la acusación.
—Lo siento, quería esperar hasta que estuviéramos en la cama. —Artemis frunció los labios, suspirando derrotada.
—Esta bien, dulce, es mejor hacerlo ahora. Pensé en invitarte a cenar, como celebración por una captura sin víctimas. Mañana, en… —no completó la frase a propósito, dedicándole a su Omega los gestos suficientes para que ella lo adivinara, y naturalmente, su preciosa esposa lo comprendió al instante, agitándose alegremente entre sus brazos.
—¡Claro que sí, amor! —Jackie hizo llover una ráfaga de pequeños besos en el rostro de su esposa, deteniéndose no mucho después, su rostro cambiando a un gesto de duda—. Oh, pero no tengo nada que… —Nuevamente, Artemis respondió sin decir nada, obteniendo el mismo resultado de ojitos brillantes y una sonrisa que podría detenerle el corazón—. Tú… Alfa maravillosa…
Los besos se renovaron con especial ternura y agradecimiento. Jackie le acariciaba las mejillas, los hombros y la espalda, suspirando y susurrando su nombre como si Artemis fuera digna de sus mimos o de siquiera encontrarse bajo la atención de sus ojos enamorados. Una vez los exquisitos labios de su esposa lograron hincharse y casi todo su color rojo terciopelo se debía a las atenciones recibidas, Artemis le preguntó:
—¿Quieres verlo? —Jackie asintió, riendo.
—¿Qué clase de pregunta es esa, cariño?
Con piernas temblorosas, Artemis bajó del sofá y caminó hacia la maleta, conforme se alejaba de su esposa las dudas regresaban. Extrajo los obsequios cuidadosamente, colocando la caja principal en la base de la pila, así, aún si se trataba de lo que llamaba toda la atención, la buena señora Scamander examinaría primero las demás. Inhaló cuanto pudo y regresó a la sala, casi conteniendo la respiración, gritos internos advirtiéndole que su Omega leería de inmediato si algo iba mal a menos que controlara su rostro y el probable aroma a estrés que comenzaría a dispersar. Al final, ya que su esposa no lo mencionó, supuso que lo había conseguido.
—¿Bebé, por qué hay tantas cajas? —Le cuestionó la Omega, sin fingir que la cantidad de obsequios no le agradaba.
—Puede que me haya emocionado un poco... —Tras una amorosa mirada de reproche, Jackie esperó impacientemente a que las cajas fueran instaladas en la mesita para café—. Aunque no es mi culpa en absoluto, solo pensé en ti y..., cuando me di cuenta, ya estaba hecho. —Eso último le ganó un beso y una dulce promesa contenida dentro del abanico de espesas pestañas.
Sentándose a su lado, Artemis le entregó a su esposa la primera caja, antes de ceder a sus impulsos. Pequeño y rectangular, de color dorado, no precisaba de un pensamiento complejo para saber lo que contenía, ello no redujo la sorpresa en el adorable rostro de Jackie. El collar, de apariencia simple, fue acariciado de manera reverente. La Omega sostuvo la banda recubierta de oro que abrazaba en el centro una brillante piedra roja como el fuego. No era un collar creado para ensalzar la marca de unión, sin embargo, desde que lo vio, Artemis supo que nadie sino a su Omega sería capaz de lucirlo.
—A-Artemis, esto es…
—Hermoso, como tú, y serás feliz de usarlo mañana —completó Artemis, acariciando la cintura y la cadera de Jackie. Ella, sonrojada, devolvió el collar a su caja, asintiendo sin decir palabra.
Los siguientes obsequios, para fortuna de Artemis, tuvieron reacciones similares. Lo que advertía a su vez el positivo avance en la confianza de su esposa y la aceptación del innegable lugar que merecía como la Omega y la esposa de Artemis Scamander. No es que importara, al fin y al cabo, si decidía no vestir con la ropa lujosa que la Alfa adquiría para ella, siempre que la hermosa mujer fuera consciente de su belleza, cualquier prenda con la que deseara cubrir su cuerpo sensual, Artemis estaría feliz de complacerla hasta el final de sus días.
En tanto alguna decisión ocurriera, la señora esposa continuaría, como ahora, abriendo pequeñas cajas de pendientes, brazaletes y anillos; o cajas medianas, con medias de ceda, atrevidas bragas y sostenes, zapatos, guantes y sombreros. Cada pieza seleccionada para hacer resaltar lo que resguardaba el último obsequio.  Llegado el momento, pese a que el rostro de Artemis ya había sido limpiado cuidadosamente por el sedoso pañuelo de Jackie luego de cubrirlo con marcas de besos, tal parecía, las muestras de afecto apenas resultaron suficientes para ayudarle a controlar cualquier señal de estrés que pudiera reflejarse en su aroma, su rostro o en el lazo que unía su alma a la de su esposa.
La caja grande, admirada por ojitos de dulce chocolate derretido, hizo latir el corazón de Artemis, dándole la fuerza necesaria para no arrepentirse. Lentamente, esas manos que nunca se cansaría de adorar, retiraron la pesada tapa. Artemis tragó con fuerza ante el inusitado silencio que ahogó la habitación. Intentó leer alguna emoción que la alcanzara a través del aroma o el lazo de unión, y al igual que mirar el dulce rostro o el movimiento de su cuerpo: nada obtuvo. Cierta sensación desagradable comenzó a nacer en el fondo de su cráneo al verla levantarse, despacio y sin apartar su atención del vestido.
Vestido rojo como sangre fresca, de seda tersa y falda que permitiría un arrastre distinguido, de tirantes y pronunciado escote, que fue sostenido por las cuidadosas manos de Jackie. Paralizada en su lugar, Artemis comenzó un silencioso golpecito de su pulgar contra el asiento vacío a su lado, sin notarlo, mordió su labio y agitó un pie. Pronto, el corazón se le saldría por la garganta.
—Yo…yo. Oh, Artemis.
—Puedo devolverlo, si lo odias, no tienes que… —Silenció al instante lo que pretendía ser una disculpa, advirtiendo cómo sus primeras palabras hicieron que la Omega abrazara su vestido. Ella, sonrojada y estudiando la repentinamente interesante alfombra, tardó un largo minuto en hablar.
—Me encanta, cariño, es hermoso, y no quiero que te lo lleves, pero… —Artemis supo enseguida lo que debía hacer. Siempre que a su esposa le gustara, tenía las herramientas para detener los malos pensamientos y que lo aceptara al cien por ciento. Una de ellas serviría muy bien para la ocasión.
Renovado su ánimo por su buena compra, Artemis atrajo a su hermosa Omega abrazándose a sus amplias caderas. Le dejó en el estómago un tierno beso y, restregando ahí su mejilla, miró hacía arriba con los ojos más grandes y brillantes que una Alfa podía lograr. La respuesta, casi inmediata, resonó en la habitación en la forma de una risa maravillosa y cálida. El feliz aroma de espeso caramelo se expandió como una nube, aturdiendo los sentidos Alfa de Artemis, que reaccionó a lo feliz que hacía a su Omega, cumpliendo su papel de Alfa; se esforzó en mantener los gestos y no devorarla como lo merecía.
—Esos ojos de cachorro deberían ser ilegales —susurró Jackie antes de sellar sus labios contra los de su Alfa. Artemis, una clara ganadora en todos los sentidos habidos y por haber, no pudo contenerlo otro segundo, dirigió el beso a una dirección que su linda esposa comprendió y que no dudó en aumentar.
—Pruébatelo —gruñó Artemis, ahora de pie, masajeando la espalda de Jackie, obligándose a no ir hacia abajo—. Por favor, Omega, pruébatelo… —Jackie, que no estaba mejor, deteniendo todo intento de guiar sus manos a esa zona que declaraba con firmeza cuánto la deseaba, negó la orden de su Alfa.
—Así es como has arruinado la mitad de mis vestidos… —Artemis comenzó a lamer la piel de su cuello—… ¡Mmh! No…, no te dejaré hacerlo… No con este… Oh, Alfa…
Aquellas últimas palabras suspiradas derrumbaron el poco autocontrol de Artemis.
El vestido salió ileso…
Al menos esa noche.
* * *
Amor, sabes que soy una puerca, una puerca romántica, pero una puerca al fin y al cabo, por lo que no pude y nunca podría haber evitado darle a esta pequeña historia un final ligeramente sexi 😏... Además, ese smut con una Alfa femenina esta cada día más cercano y, creo, debo tener más experiencia escribiendo Alfas femeninas antes de lanzarme a una tentación como esa 🥴 Entonces, por mucho que me haya costado, terminé aquí esta historia y solo dejaré lo que sucede luego a tu imaginación 🌈 Me voy, gracias por leer, ¡te amo muchooooo! ❤️‍🔥❤️‍🔥❤️‍🔥❤️‍🔥❤️‍🔥
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"Sí, somos historias." Esta afirmación es profundamente cierta y evocadora. Cada uno de nosotros es una narrativa en evolución, una historia viviente que se teje a lo largo del tiempo a través de nuestras experiencias, relaciones, elecciones y emociones. Aquí hay algunas reflexiones sobre esta idea:
Narradores de nuestra vida: Cada individuo es el narrador principal de su propia historia. Tomamos decisiones, enfrentamos desafíos y experimentamos alegrías y tristezas que dan forma a nuestra historia personal.
Capítulos y momentos clave: Nuestras vidas están compuestas por una serie de capítulos y momentos clave que definen quiénes somos. Estos pueden incluir logros importantes, relaciones significativas, desafíos superados y cambios significativos.
Conexiones con otros: Nuestras historias no existen en un vacío. Están entrelazadas con las historias de otras personas a través de nuestras relaciones familiares, amistades, romances y conexiones sociales.
Aprendizaje y crecimiento: A medida que vivimos nuestras vidas, acumulamos experiencias que nos enseñan lecciones importantes y nos ayudan a crecer como individuos. Cada obstáculo superado y cada elección tomada contribuye a nuestro desarrollo.
Identidad y autenticidad: Nuestras historias también reflejan nuestra identidad única y autenticidad. A medida que descubrimos quiénes somos y lo que valoramos en la vida, nuestra historia se convierte en un reflejo de nuestra verdadera esencia.
Reflexión y narración: A menudo, reflexionamos sobre nuestras vidas y compartimos nuestras historias con los demás a través de la comunicación verbal, escrita o artística. La narración de nuestras experiencias puede ser una forma poderosa de conectarnos con otros y procesar nuestras propias emociones.
La continuidad de la historia: Nuestras historias continúan evolucionando a medida que avanzamos en la vida. Cada día es un nuevo capítulo, y cada elección es una oportunidad para dar forma a la dirección de nuestra historia futura.
Impacto en el mundo: Las historias individuales también tienen un impacto en el mundo que las rodea. Las acciones y decisiones de las personas pueden influir en las vidas de los demás y en la sociedad en su conjunto.
En resumen, nuestras vidas son narrativas únicas y valiosas que merecen ser exploradas, compartidas y celebradas. Cada uno de nosotros es el autor y protagonista de una historia en constante desarrollo, y cada día presenta nuevas oportunidades para dar forma a nuestra narrativa personal de maneras significativas y gratificantes.
ℜ𝔬𝔰𝔞🖤
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jedivoodoochile · 7 months
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The Thing from Another World ,es una película de culto , de nacionalidad estadounidense , de ciencia ficción y terror dirigida en 1951 por Christian Nyby y Howard Hawks (este último sin acreditar).
El guion se basó en el relato de John W. Campbell Who Goes There?.
La película se estrenó el 6 de abril de 1951 en los Estados Unidos y fue un éxito de taquilla.
Esta adaptación de una narración de John Wood Campbell se convertiría en uno de los clásicos de la ciencia ficción, estableciendo unos arquetipos que se han venido repitiendo hasta nuestros días, ya que esta película, con unos modestos efectos especiales y un reparto poco conocido, se ha convertido en uno de los paradigmas del terror y de la ciencia ficción, y su fórmula, además de resistir muy bien el paso del tiempo, ha sido copiada en muchas ocasiones y ha influido en todo el cine que ha llegado después.
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vlp-wrtng-prctcs · 8 months
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Destinado
Cualquier hora es buena para publicar, y ya que se lo mostré a mi gran amigo, vengo a exponer mis ideas aquí porque para eso tengo este blog.
La idea sin un contexto previo se siente como una narración vaga, así que resumamos esto en: "Bodoque sabe que Tulio es, básicamente, su persona destinada. Pero no puede aceptarlo, como tampoco puede aceptar una realidad en la que Tulio lo ve con una indiferencia completa. Entonces ¿qué es lo que necesita?"
La bilis corroe el esófago, perforando la piel en busca de una salida desesperada, pero mantiene la boca cerrada, con los dientes rechinando entre sí.
No puede ahogarse ahora, no puede celebrar la victoria de una muerte patética y trágica. No mientras él esté ahí, mientras sus ojos sean unas borrosas manchas amarillas que le recuerdan las margaritas que desearía, desesperadamente, oler ahora. Pero no le puede pedir que le devuelva la flor de su condena, tampoco puede pedirle ayuda; la verborrea amenaza salir junto con sus órganos; hablarle significa exponer lo más miserable de sí, hablarle significaría quedarse vacío.
Hablar significa firmar su muerte, lo que nuevamente, no puede pasar.
No puede ensuciarlo.
Inhala con violencia, a una rapidez que marea cada uno de sus sentidos, hasta que es inevitable y se inclina, regurgitando una baba oscura, ácida y desagradable que poco a poco va adquiriendo diferentes formas: odio, miedo, amor, obsesión, tristeza, anhelo. Ningún sentimiento que, a ese punto está siendo vomitado, parece ser agradable.
Nada lo es.
Su persona no lo es.
Jadea cuando todo culmina, reposando la mirada en la masa sin forma que se va extendiendo a lo largo del suelo.
Cierra los ojos, luchando por volver a recuperar su vida. Luchando por no pedirle que le diga cualquier cosa que sabe que lo calmaría por más que implore en el interior que lo sostenga tan solo un momento; para cuando vuelve abrirlos, ofuscado por las repentinas luces brillantes, sigue encontrándose con ese dorado en el que cualquiera podría perderse. Pero no lo miran, no lo observa como lo ha hecho durante toda una vida; es un oro falso. Él es falso.
Las lágrimas se sienten como cuchillas diminutas apuñalando las esquinas de sus ojos; más no llora, no reacciona. Solo se levanta, recuperándose, o fingiendo que eso hace. Lo ha hecho siempre.
Pero cuando da un solo paso, todo en sí se derrumba.
¿Quién era él?, ¿por qué tenía sus ojos, pero no su mirada?, ¿por qué se ve como una pintura en el que retrataron a la persona equivocada?
El asco vuelve, lo encierra y le roba todo el aire.
Ya no está respirando.
Afortunadamente, su cabeza es extraída, con poco cuidado, del precioso pozo de mármol en el que se estaba hundiendo poco a poco, lo que lo lleva a toser, a rabiar, a destruirse las manos al aferrarse a los laterales de su captor, quién no se opone, quién no resiste, pero se mantiene firme; entonces es cuando por fin puede recuperar su visión, reencontrándose con la margarita que llora, desconsoladamente, mientras lo ve.
¿Cuánto tiempo estuvo ahí?
No logra escuchar nada de lo que dice con desesperación, tan absorto en por fin reconocer la persona quien está frente suyo.
Aún siente el sabor de su acción anterior, aún siente todos los sentimientos acumulados, aún siente el rechazo, la indiferencia; puede sentir la delgada línea que los une, lo fácil que puede tensarse, lo terrible que es si se rompe.
Inhala, exhala. Y cuando está cansado de estar vivo, lo obliga a besarlo.
No preguntan motivos, ni razones, tan solo corresponden, tan solo lo aman. Tan solo aceptan que están destinados.
Cosa que aún sigue sin aceptar, cosa que tal vez, seguramente, aún trate de cuestionarse.
Tiene muchas preguntas que hacerle a ese charlatán que le prometió mostrarle lo que necesitaba.
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