#optó
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La han roto tantas veces que ya no fue divertido volverse a enamorar, optó por mantener la mente fría, las pupilas fijas, los sentimientos apartados, la emociones de lado.
Se dió cuenta de que nada es para siempre, ni siquiera un buen amor, todo tiene un principio y un final. Así que ya no más de encariñarse, menos enamorarse, va a evitar a toda costa un dolor, una tristeza, una perdida más.
Leregi Renga
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He calls me the Devil (I make him wanna sin) - Enzo Vogrincic
+18! Needy!Enzo (unos segundos de Sub!Enzo, parpadeen y se lo pierden). Biting, choking, creampie, fingering, masturbación, (breves descripciones de) plus size!reader, sexo oral, sexo sin protección, (kind of) semi-public sex, spit kink, edades no especificadas. Uso de español rioplatense.
El vestido fue idea de Enzo.
Luego de un par de días viéndote batallar frente al espejo e intentando consolarte cuando la frustración te vencía, recordó que la caja que contenía la prenda estaba sepultada en alguna parte del armario. Enzo odiaría que lo malinterpretes y no tiene absolutamente nada en contra de la chaqueta y el pantalón de cuero que pretendías combinar con un top burdeos, pero…
-No, no sé- recuerda cómo empujaste el vestido contra su pecho-. ¿No te parece que es mucho?
-¿Para mí…? Es poco- bromeó, refiriéndose sutilmente a los atuendos mucho más atrevidos y extravagantes que utilizaste en ámbitos mucho menos formales.
-No son los Oscar, Enzo, es un concierto de música clásica.
-¿Y?- se mordió el labio-. ¿No te gustó el vestido? ¿Es eso?
-Me encantó, amor, pero…
La inseguridad ensombreció tu rostro por un breve momento, evocando el recuerdo del día en que le enseñaste el vestido en una página web: las únicas fotos exhibiendo el producto eran de modelos utilizando la talla small, un detalle recurrente que te aquejaba a la hora de buscar ropa. Aún puede oír la forma en que suspiraste, entre harta y triste, antes de cerrar la página y bloquear la pantalla de tu celular para arrojarlo sobre la cama.
Normalmente Enzo no se habría atrevido a husmear en tus dispositivos electrónicos, pero esa noche luego de ver tu decepción decidió revisar tu historial. A falta de una referencia fotográfica, optó por confiar en que uno de los talles se correspondía con tus medidas.
-Te queda hermoso- insistió, sosteniéndolo con delicadeza entre sus manos-. Dale, probátelo otra vez.
La forma en que te sonrojaste le pareció tierna, un tanto divertida considerando el tiempo que llevaban juntos y la inocencia del cumplido en comparación con los comentarios que guardaba para otros momentos, los cuales hacían que la sangre de tu cuerpo ardiera no sólo en tus mejillas. Observó cómo deslizabas las tiras de tu camisón por tus hombros y su respiración se entrecortó cuando vio tus pechos desnudos.
El vestido se adhería a tu cuerpo como una segunda piel, los tonos rojos de la seda resaltando tu figura y volviéndote la viva imagen de lo que Enzo llamaría la perdición.
Ahora ese recuerdo lo atormenta y se obliga a mantener las apariencias, ocultando su erección con el programa del concierto y agradeciendo por la tenue iluminación de la sala. Intenta distraerse observando los detalles del lugar, tal como lo hizo desde que llegaron al Auditorio Nacional, y por unos instantes la sincronización en los arcos de la sección de cuerdas de la orquesta es más que suficiente para cautivarlo.
Es entonces cuando siente que te movés en tu asiento y sus ojos se centran en tu figura. Tus manos se encuentran entrelazadas sobre tu regazo, cubiertas por unos delicados guantes de largo asimétrico, y al ver tus dedos jugando distraídamente con el papel no puede evitar pensar en lo bien que se verían envueltos sobre su miembro, su semilla arruinando la seda que oculta tu piel.
El súbito aplauso del público lo saca de sus cavilaciones y está a punto de sumarse al mismo, pero tu mano se cierra sobre la suya a modo de advertencia. Si la calidez de tu palma empeora su estado, la forma en que el vestido abraza la curva de tu abdomen y resalta tus pechos es prácticamente una sentencia de muerte.
-Todavía no- aclarás, señalando con la cabeza hacia el escenario-. Falta uno más.
El primer movimiento de la Serenata para cuerdas de Tchaikovsky le pareció sublime, ¿pero el cuarto…? Le resulta eterno y le cuesta horrores mantener la concentración, por lo que se muerde los labios hasta sentir el gusto metálico de la sangre en su lengua. Comienza a mover la pierna y tu mano acaricia su muslo -probablemente interpretando su agitación como nerviosismo o ansiedad- en un gesto que debería ser tranquilizador, pero que es en realidad todo lo contrario.
La preocupación en tus ojos es evidente cuando encuentran la mancha escarlata en sus labios y te inclinás para examinar el daño, ignorando que el ángulo le permite ver tu escote y el sostén de encaje rojo que contrasta con tu tono de piel. Es el mismo rojo que tiñe tus labios y que difuminaste en tus pómulos, el mismo rojo que en alguna ocasión utilizaste para dejar la marca de tus besos en su pecho, su abdomen y…
Se siente culpable cuando acerca sus labios a tu oído y susurra:
-¿Me acompañás?
La obra concluye y Enzo aprovecha el momento en que otro músico, un pianista, entra en escena. Toma tu mano y te arrastra hacia las puertas de la sala, más de una mirada curiosa posándose sobre ambos y algunos susurros, que te hacen sentir más insegura de lo que lo hicieron a tu llegada: Enzo juró que te miraban porque “¿Cómo no te van a mirar? Si estás hermosa”, pero vos no estás convencida de que ese fuera el motivo.
Ambos llegan a un corredor desierto y cuando Enzo tira de tu mano para guiarte hacia una puerta lateral, lo seguís al interior de la habitación sin hacer preguntas. Te sorprenden los estuches de instrumentos vacíos, desperdigados por doquier, y estás a punto de comentar que la puerta no debería estar sin seguro, pero el ataque de algún instrumento de viento -que no distinguís- en la habitación contigua hace que te sobresaltes.
-¿Qué pasó?- preguntás, recordando el motivo por el cual abandonaron el concierto. Cuando tomás la mejilla de Enzo para examinar su herida, sus dedos aprisionan tu muñeca-. ¿Qué…?
Dirige tu mano hacia su erección, cubierta por un costoso pantalón, sus ojos fijos en tu rostro para examinar tu reacción: tus labios se separan lo suficiente para permitirle ver tus dientes y tu respiración se torna agitada en un abrir y cerrar de ojos, obligándolo a admirar cómo el movimiento hace que tus pechos suban y bajen. Su mirada desciende hasta llegar a tu cadera y sus manos siguen el mismo camino, masajeando con fuerza tu cuerpo antes de atraerte hacia el suyo.
Soltás un gemido y, en algún recóndito lugar de tu mente, te preguntás si las personas presenciando el concierto pueden oírte con la misma claridad con la que oís el piano en este momento.
-¿Ves lo que me hacés…?- pregunta. Besa tu mejilla y sus labios trazan una línea hasta tu cuello, sus besos húmedos y su aliento cálido repercutiendo en tus sentidos-. Desde que llegamos estoy así.
El sonido del seguro llega a tus oídos.
-¿Qué hice?- fingís inocencia.
Su mano se cierra sobre tu cuello y vuelve a besarte, la intensidad de sus acciones provocando que sus dientes rasguen tu labio inferior y su lengua haciéndote gemir cuando invade el interior de tu boca. Se aferra a la parte más ancha de tu cadera con fuerza, como si la cercanía entre ambos no fuera ya suficiente, y su otra mano baja la cremallera de su pantalón.
El sonido provoca un cosquilleo entre tus piernas y mirás a Enzo de manera provocadora mientras tirás del botón de la prenda, la cual cede levemente dejando ver una franja de su ropa interior. Recorrés la tela visible con tu dedo antes de llevártelo a la boca, capturando la seda entre tus dientes para retirar el guante.
-No- te interrumpe-. Dejátelos puestos.
Le dirigís una sonrisa, intrigada y más que excitada por la situación y su petición. Tu mano colándose bajo su ropa interior hace que se muerda el labio y una expresión de dolor atraviesa su rostro, pero cuando cerrás tus dedos sobre su miembro esa expresión se transforma en placer y arroja la cabeza hacia atrás. Comenzás a masturbarlo con lentitud, tu oído atento a la orquesta percibiendo también el sonido de su piel y la aceleración de su respiración.
En cuestión de minutos y bajo las caricias que le suministran tus manos, Enzo se convierte en un desastre: sus dedos se clavan en tu carne y tenés que esforzarte para lograr mantener el ritmo de tus movimientos, el líquido preseminal brotando de su punta humedeciendo cada vez más tu guante y tus dígitos, y su miembro palpita desesperadamente en busca de alivio.
Te detiene antes de que sea demasiado tarde y te guía hacia el pequeño sofá en la esquina de la habitación, apartando unas partituras olvidadas sobre este para tomar asiento y señalar el lugar entre sus piernas. Obedecés inmediatamente, como siempre, y luego de ayudarlo a deshacerse de su pantalón y su ropa interior Enzo decide tirar de la cremallera de tu vestido y despojarte de tu sostén, liberando tus pechos.
Tomás su miembro entre tus manos para centrarte en su extensión mientras tus labios se acercan a la punta para besarla con delicadeza una y otra vez. Su excitación brilla bajo las luces de la habitación y es adictiva cuando el sabor invade tu lengua, haciéndote gemir cuando lo introducís en tu boca y provocando que las vibraciones amenacen con llevar a Enzo al borde del orgasmo nuevamente.
Sus caderas se mueven en contra de su voluntad y su punta golpea tu garganta, llenando tus ojos de lágrimas que rápidamente comienzan a deslizarse y humedecer tus mejillas. Te separás de Enzo, ya que no estás dispuesta a arruinar todo tu maquillaje, pero la solución que encontrás logra arrancar un gemido de su boca antes de que pueda procesar la imagen frente a él.
-Dios…- dice entre dientes, cubriendo su rostro con una mano luego de ver cómo rodeás su miembro con tus pechos y escupís sobre su punta. Recuerda todas las ocasiones en que lubricó el interior de tus muslos y se deslizó entre ellos hasta el agotamiento, oyéndote suplicar por un poco de placer a cambio y prometiendo hacer lo imposible para merecerlo-. Lo hacés a propósito, ¿no?
Permanecés en silencio, pero Enzo recibe una respuesta cuando tus manos presionan aún más tus pechos. Su excitación comienza a ser cada vez más abundante, gotas de líquido incoloro cayendo desde su punta hasta el largo de su miembro y entre tus pechos, llenando la habitación de los indecentes sonidos húmedos que tanto disfrutan ambos. Sus dedos contrayéndose sobre el sofá y sus nudillos blancos hacen que te detengas con una sonrisa de satisfacción.
Toma tu cabello entre sus dedos y se acerca peligrosamente a tu rostro, su pulgar delineando tu labio inferior y haciéndote sisear cuando toca la herida que sus dientes dejaron allí. Tira de tu cabello hasta posicionarte en un ángulo doloroso y te observa, el cabello cayendo a los lados de su rostro haciendo que se vea aún más imponente, y luego escupe en tu boca. Le enseñás tu lengua, su saliva mezclándose con la tuya, y tragás.
Te conduce hacia el otro extremo de la habitación sin delicadeza alguna y presiona tu cuerpo contra el espejo en la pared, el efecto de la superficie fría evidenciándose en tus pezones. Con movimientos lentos, Enzo toma el dobladillo de tu vestido y comienza a arrugarlo entre sus manos, descubriendo centímetro a centímetro de tu cuerpo y maravillándose como si fuera la primera vez que te ve.
Intenta no perder la razón al ver el encaje rojo cubriendo tu intimidad… Pero él es un hombre débil y vos, la tentación.
Se arroja sobre sus rodillas sin pensarlo y comienza a morder tus piernas con fuerza, haciéndote gemir y lloriquear debido a la sensibilidad, utilizando su lengua posteriormente como si fuera suficiente para aliviar las zonas abusadas. Aparta la prenda que lo separa de tu centro y observa cómo la humedad que cubre tu piel se adhiere en forma de hilos brillantes a la tela.
Introduce un dedo en tu interior mientras reparte besos y mordidas en tus muslos. Te oye gemir contra el espejo y sabe, aunque no puede verte, que tal imagen podría pertenecer al paraíso. Debería, asegura al introducir otro dedo y sentir tus paredes contrayéndose cuando los curva para dar con tu punto dulce, la resistencia de tus labios nula ante tus gemidos, jadeos y suspiros.
Los sonidos obscenos que producen los dedos de Enzo en tu cavidad no se comparan con la imagen entre tus piernas, tus fluidos cayendo sobre sus dedos hasta llegar a sus nudillos e incluso su muñeca. Tus piernas tiemblan y tus manos masajean tus pechos, imitando los movimientos que tu novio suele repetir para brindarte el máximo placer.
Tus rodillas están a punto de fallarte y le suplicás, pero cuando Enzo se detiene y te deja respirar la sensación de vacío junto con la desesperación te inundan. Encontrás sus ojos oscuros a través del espejo, un leve asentimiento de su parte que pretende ser un consuelo, y arqueás tu espalda para darle mejor acceso a tu entrada.
Sostiene el vestido, la tela arrugada a la altura de tu cintura, mientras acaricia tu entrada y tu clítoris con la punta goteante de su miembro. Suspirás al sentir su calor y el suspiro se vuelve un gemido cuando comienza a empujarse dentro tuyo, recibiendo el ardor que provoca su tamaño en tu entrada estrecha.
-Enzo...
-Sí, amor, ya sé- dice entre gruñidos-. Querés más, ¿no...? Vos siempre querés más.
Y él está dispuesto a dártelo todo.
Sus movimientos son delicados y mínimos para permitir que te acostumbres a la sensación, pero eso se acaba cuando ve tu expresión prácticamente pornográfica en el espejo. El placer dibuja en tus cejas una curva que acompaña la caída de tus párpados y tus labios entreabiertos permiten que un hilo de saliva caiga por tu mentón.
Desesperado por sentir más, comienza a penetrarte con fuerza y en profundidad. Adora los sonidos que dejan tu boca y aún más los que produce tu cuerpo al colisionar con el suyo, así como también adora ver los movimientos de tu carne como consecuencia de cada impacto originado entre las caderas de ambos.
El ritmo de sus estocadas es cada vez más rápido en contraste con la música (ahora muy lejana, como si la sala se encontrara a kilómetros de distancia) y te fuerza a sostenerte para no perder el equilibrio, pero la tarea resulta casi imposible cuando sentís la forma en que su punta abusa de tu cérvix de manera placentera.
Su mano repta por tu espalda y acaricia tu cuello antes de cerrarse sobre el mismo, la presión que ejerce mínima pero aún presente como un sutil recordatorio. Volvés a encontrar su mirada.
-Voy a...
-Sí- se limita a contestar. Arroja la cabeza hacia atrás.
Continúa embistiéndote hasta sentir las contracciones de tu interior caliente y te permite tocarte sólo después de atraer tu cuerpo hacia el suyo, con tu espalda sobre su pecho y su brazo rodeando tu cuello. Su otra mano sostiene tu cadera y se hunde dolorosamente en tu piel, amenazando con dejar alguna que otra marca.
El ángulo actual te deja sentir cada detalle de su miembro en tu interior y no pasa mucho tiempo antes de que llegues a tu orgasmo, con sus dedos aprisionando tus mejillas para mantener tu vista al frente, la imagen de tus pechos saltando de arriba abajo casi tan hipnótica como el rostro de tu novio al ver la escena.
Cuando Enzo alcanza su propio clímax sentís sus dientes mordiendo tu cuello antes de percibir cómo su semen caliente te llena por completo. La sensación es suficiente para causarte otro orgasmo, más breve pero de mayor intensidad.
-Te amo- dice Enzo contra tu piel-. Te amo, te amo, te amo.
-Yo también te amo- tomás su mano y la llevás a tus labios-. Mucho.
-¿No tenía razón?- oculta su sonrisa tras tu hombro-. El vestido era una buena idea.
Estás a punto de darle la razón, pero te interrumpe el sonido de alguien tocando la puerta.
-Te voy a matar- jurás, apresurándote para acomodar tu ropa.
Enzo sólo suelta una carcajada.
Notas de Lu:
La inspiración para el vestido, estoy completamente obsesionada. Espero hayan disfrutado la lectura y si ven algún error..., un hechicero lo hizo ♡
taglist: @madame-fear @creative-heart @recaltiente @llorented @chiquititamia
#enzo vogrincic#enzo vogrincic smut#enzo vogrincic x reader#lsdln cast#esteban kukuriczka#esteban kukuriczka smut#esteban kukuriczka x reader#matias recalt#matias recalt smut#matias recalt x reader
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El gay Sabino, a la hora de reformar su cuarto de baño, optó por el diseño por encima de la funcionalidad. Y ahora se ve así: no cabe en su bonita bañera de diseño. ¿Sabes qué? Por una parte bien, así se tendrá que duchar y ahorrará agua.
¡Oh! Si lloviese un poco. Solamente un poco.
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Hello! As promised, here I bring you Liu Kang's headcon! Even though almost no one reads this, I'm happy if only someone reads it! (La versión en español está en esta publicación!)
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Liu kang headcon!
<>With this man there will never be boring moments, even if he is busy there will always be time for him to be with you, he will always try to make you happy!
<> He will always, but ALWAYS, take care of you physically and emotionally, he will try to ensure that you are always under protection, even if you don't even realize it, he really doesn't want you to suffer any harm.
<> One day you called him "Lulu" and his face was initially confused and then he would say "Lulu? Really? Why?" With a smile mixed with confusion, from that moment on his nickname was "lulu", But he was not far behind, he chose to put something like "sweet heart" or I would also call you "pumpkin."
<> He is the big spoon (do I understand?) He is the one who hugs you when you sleep, he is definitely a rock when he sleeps, he doesn't move at all which made you wonder if he was really asleep, when he falls asleep in one position They wake up in that same position, like a ROCK
<> You two would have tea sections, you would drink tea while talking about anything or you would just drink tea in silence, he is almost always the one who prepares the tea and tasks you with it to start your daily tea section (Sorry if "section" is spelled wrong.)
<> Sometimes you two read books together, most of the books Liu Kang has already read but he pretends not to reread it with you, maybe drinking tea or something else.
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¡Hola! Como prometí, ¡aquí les traigo el headcon de Liu Kang! Aunque casi nadie lee esto, ¡soy feliz si alguien lo lee!
Liu Kang Headcon!
<>Con este hombre nunca habrá momentos aburridos, aunque esté ocupado siempre habrá tiempo para que esté contigo, ¡siempre intentará hacerte feliz!
<> Él siempre, pero SIEMPRE, cuidará de ti física y emocionalmente, tratará de asegurarse de que siempre estés bajo protección, incluso si ni siquiera te das cuenta, él realmente no quiere que sufras ningún algún daño.
<>Un día lo llamaste "Lulu" y su cara inicialmente estaba confundida y luego decía "¿Lulu? ¿En serio? ¿Por qué?" Con una sonrisa mezclada con confusión, a partir de ese momento su apodo fue “lulú”, pero no se quedó atrás, optó por ponerle algo como “Cariño” o también te llamaría “calabaza”.
<> Él es la cuchara grande (¿entiendo?) Él es quien te abraza cuando duermes, definitivamente es una roca cuando duerme, no se mueve en absoluto lo que te hizo preguntarte si realmente estaba dormido, cuando se queda dormido en una posición Se despiertan en esa misma posición, como una ROCA
<> Ustedes dos tendrían seciones de té, tomarían té mientras hablaban de cualquier cosa o simplemente tomarían té en silencio, él casi siempre es quien prepara el té y les asigna la tarea de comenzar su sección de té diaria
<> A veces ustedes dos leen libros juntos, la mayoría de los libros que Liu Kang ya ha leído pero finge que no para volver a leerlos contigo, tal vez tomando té o algo más.
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El amor está compuesto por una única alma que habita en dos cuerpos.
Eso solía creer, hasta que entendió que un cuerpo habitando en el suyo sanaba un poco su alma por la mitad, porque parte de la misma se había marchado hace tiempo.
Sus días no habían vuelto a ser igual, le costaba levantar su cuerpo de la cama, con frecuencia se sentía cansado y agotado, a veces tomaba la iniciativa de caminar, le gustaba la sensación del viento golpeando su cara, despeinando su cabello y causándole algo de frío, sus defensas aún se mantenían bajas; a veces perdía la noción del tiempo divagando en sus propios pensamientos que no notaba cuando comenzaba a llover, o quizás si y no quería irse a casa, porque la lluvia le hacía recordarlo, o simplemente no distinguía la lluvia de sus lágrimas.
Comenzó a tomar baños con frecuencia, varias veces al día, varias veces por la noche, su momento a solas siempre era ese, o al menos eso quería pensar, ¿A quien iba a engañar? Siempre estaba sólo, pero sé sentía culpable por querer llorar, entonces optó por sentir diminutas sus lágrimas, solo en la ducha parecían pequeñas, en la ducha todo le dolía un poco menos..
Le costaba mantenerse de pie, se sentía un niño pequeño al balancearse, no tenía coordinación con su cuerpo; a veces corría a encerrarse en el baño y abría el grifo del lavamanos para que no pudieran escucharle hasta que sus mareos desaparecieran, se duchaba sentado en el suelo, se abrazaba con frecuencia, le gustaba el sonido del agua caer sobre su débil cuerpo; recostaba su barbilla en sus rodillas, o simplemente ladeaba su cabeza para apoyarse sobre ellas, cerraba sus ojos con fuerza e imaginaba como sería el mundo si él ya no estuviese, ¿Qué cambiaría? ¿Alguien pensaría en él? ¿Alguien lo extrañaría? La respuesta siempre era no.. y estaba bien, quizá lo merecía, quizá así debía ser, lo aceptaba porque ahora si, ya nadie podía salir lastimado por su culpa, desde el comienzo sólo él debía sufrir, y vaya que lo estaba haciendo.
Sus manos recorrían sus piernas, sus brazos, su abdomen, le gustaba acariciar esa zona con nostalgia, y fino al tacto; siempre había sido sensible a los olores, pero los últimos meses toleraba sólo unos pocos, el coco y la vainilla se habían vuelto sus favoritos, había adquirido recientemente una gel de ducha que le hacía sentir bonito, claro que poco le duraba, pues cada vez que se veía en el espejo volteaba la mirada, no soportaba verse y tampoco quería hacerlo, no así.
Secaba su cabello primero, no había dejado de usar aquella toalla blanca de mano, a veces extrañaba poder echarse y que nada más importara, pero debía irse a la cama seco, o podría enfermarse más, aunque en el fondo le diera igual, ahora debía cuidarse, porque no era sólo él, ahora de él dependían dos niños que le consideraban su mundo, por eso debía seguir al menos hasta que tengan la edad suficiente como para dejarlo sólo nuevamente y él perdiera una vez más.
Ya en la cama se aplicaba sus tónicos, se echaba algunas cremas en el rostro y deslizaba otras por sus muslos, deteniéndose en esa zona en particular, siguiendo el camino hasta sus piernas, realizando pequeños masajes para calmar aquellos dolores musculares que venía teniendo, se sentía pesado, pero era normal.. a lo lejos, algunas aves comenzaban a cantar, quizo sonreír cuando recordó el como empezó a ver la vida de otra manera y habían dejado de molestarle, solían ponerle nervioso.. pero ahora se había vuelto un gruñón y no toleraba ningún sonido, la naturaleza ya no le hacía feliz, pero siendo sincero, ¿Qué lo hacía? Lo único que le robaba una sonrisa era recordar a su pequeño jugando en el parque, le recordaba mucho a él años atrás, cuando aún dependía de sus padres y la vida le parecía bonita por sus pequeños detalles.. su niño es una copia de lo que él fue, los animales le siguen a todas partes y sorprendentemente también le gusta dibujar, quizás escriba algún día, no lo sé, pero sé que le apoyaría en todo, sólo esperaba que la escritura no sea motivo de tristeza como el suyo; tiene un gran instinto protector, incluso con él, que se suponía era quien debería cuidarle.
A su corta edad sabe perfectamente lo que ocurre cuando no puede hablar, cuando de repente su padre se esconde y desaparece para que no lo vea llorar, sabe que su hermanita también lo siente, y él en su inocencia, abraza a su papá con todas sus fuerzas, esperando que eso solucione todo, y lo hace, pero los días son largos y las noches eternas para alguien que lleva lastimado mucho tiempo, pero ese pequeño era la única luz que veía entre tanta oscuridad, y estaba muy agradecido.
A veces pensaba en como estaría la otra mitad de su niño, ¿Su papá le estaría cuidando bien? ¿Seguirían siendo idénticos como al momento de su nacimiento? ¿Lo recordaría? No lo sabe, pero nuevamente se llena de nostalgia y en la habitación habita la melancolía de aquellos recuerdos donde creía ser feliz, cuando creía que podía tener una familia, pero ya había fallado dos veces.. la primera vez creyó que moriría de dolor, de angustia.. la segunda experimentó lo que era sentirse muerto.
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König one-shot 🖤⛓️
Contenido para mayores 🔞
Nubes grises y truenos leves brotaban de fuera...no parecía que la lluvia fuera a parar pronto, el olor a pasto mojado y las gotas de agua hacían acto de presencia por la ventana de tú cuarto; era un día bastante flojo, sin embargo era cómodo para ti y tu enorme acompañante, quién te mantenía sentada en su regazo mientras miraban la t.v.
König apenas tenía un día de haber llegado a casa, así que estaba en esa fase donde no te quería soltar ni para ir al baño. El chico te miraba fijamente mientras veías tele, sin embargo al sentir su persistente mirada decidiste preguntarle si se encontraba bien, su respuesta? Frotó su mejilla con la tuya, puso sus enormes manos en tu cintura y te acercó a su cuerpo...te aprisionó con cariño...tal vez demasiado cariño. Entre risas y besos el ambiente comenzaba a tornar algo caliente, si así se le podía llamar.
La temperatura entre ambos subía tan intensamente que parecía una competencia; finalmente cediste ante las manos tan grandes de tu pareja. Iniciando con pequeños apretones en tus piernas y muslos con los que apenas podías contener la respiración... könig estaba atacando con todo lo que tenía, después de todo había pasado un gran tiempo sin tenerte a su lado. Los besos de tu chico se convirtieron en pequeñas y placenteras mordidas en todo tu cuello, mientras que tú te aferras a su enorme y formida espalda, könig nisiquiera había comenzado con las estocadas, no eran más que mordidas y besos húmedos en todo tu cuello y clavícula, eso era suficiente para mantenerte en el filo de tu asiento.
Cada quejido y súplica tuya le provocaban un enorme estímulo, el cuál compartía contigo por medio de sus acciones; la lujuria iba escalando a niveles catastróficos; trasero, cintura, abdomen, senos... El francotirador trazaba ese camino en tu cuerpo con sus grandes manos, te agarró de la pierna abriéndose camino a tus pantis mojados, dónde después de una leve mirada a tu rostro de súplica optó por pasear sus dedos por encima de tu intimidad. La sensación era alucinante, después de unos leves golpecitos y masajes en tu intimidad, decidió retirar tus pantis para complacerte con sus enormes dedos de una vez por todas.
Entre jadeos y súplicas entrecortadas el soldado parecía divertirse mientras veía y escuchaba cada uno de tus ruidos. Nisiquiera sabías cuánto más podrías aguantar con toda la exitacion brotando hasta por tus poros pero tu cuerpo abandono toda esperanza cuando viste como tu novio bajo hasta tu intimidad solo para probarte lentamente; su lengua era tan mágica que los espasmos previos al orgasmo ya habían aparecido, sin embargo paro antes de que llegarás a él; con tu mirada confusa esperaste a qué könig diera una explicación, sin embargo solo viste como brotaba una enorme erección de sus pants y sus ojos te miraban brevemente, como si te hubiera preguntado acerca de hacerle un favor. Sin pensarlo dos veces te levantaste y en un pestañeo ya estabas recorriendo su enorme pecho con tus delicadas manos, mientras lo besabas de una manera intensamente deseosa, pero había algo pendiente ahí abajo.
Entre caricias y masajes tu boca había tomado el enorme miembro de tu chico, como pudiste tratabas de incorporarlo todo en tu boca. König te miraba desde arriba, acariciaba tu cabello mientras te llenaba de cumplidos por todo tu esfuerzo; no obstante, te detuvo en un momento clave, te levanto para dejarte de nuevo en la cama y se colocó encima tuyo pero sin dejar caer su peso sobre tí, una vez ahí se dedicó a besarte intensamente mientras bajaba lento a tus pechos, dónde repartió besos, pequeñas mordeduras y apretones, mientras te colocaba en posición para lo siguiente.
Poco a poco se hicieron presentes los choques entre cuerpos que soltaban sonidos indecorosos, súplicas y gemidos altamente sucios; podías sentir como poco a poco könig lo daba todo, los besos se volvían más calientes y ni hablar de las estocadas tan indecentes y placenteras. Y cuando parecía que estabas a punto de llegar, una enorme mano te rodeo gentilmente del cuello dando pequeños apretones que te daban un pase total al orgasmo. Poco a poco estabas más cerca hasta que sentiste el espasmo definitivo seguido del líquido de tu pareja. La satisfacción de ambos era tan prominente, könig calló rendido a tu lado, y sin dudarlo te acercó a él.
😔😔😔😔😔😔😔😔😔😔😔😔😔😔😔😔
Gray clouds and slight thunder came from outside...it didn't seem like the rain was going to stop soon, the smell of wet grass and the drops of water made an appearance through the window of your room; it was a pretty lazy day, however it was comfortable for you and your huge companion, who kept you sitting on his lap while they watched t.v.
König had barely gotten home a day, so he was in that phase where he didn't want to let go even to go to the bathroom. The boy stared at you while you were watching TV, however, when you felt his persistent gaze, you decided to ask him if he was okay, his answer? He rubbed his cheek with yours, put his huge hands on your waist and brought you closer to his body...he imprisoned you with love...perhaps too much love. Between laughter and kisses the atmosphere began to turn something hot, if that's what you could call it.
The temperature between them rose so intensely that it seemed like a competition; you finally gave in to the big hands of your partner. Starting with small squeezes on your legs and thighs with which you could barely hold your breath... könig was attacking with everything he had, after all he had spent a long time without having you by his side. Your boy's kisses turned into small and pleasant bites all over your neck, while you cling to his huge and shapely back, König hadn't even started with the thrusts, they were nothing more than bites and wet kisses all over your neck and clavicle, that was enough to keep you on the edge of your seat.
Every moan and plea from you caused him an enormous stimulus, which he shared with you through his actions; lust was escalating to catastrophic levels; behind, waist, abdomen, breasts... The sniper traced that path on your body with his big hands, he grabbed your leg making his way to your wet panties, where after a slight look at your pleading face he chose to walk his fingers above your intimacy. The sensation was amazing, after a few light strokes and massages in your privacy, he decided to remove your panties to please you with his huge fingers once and for all.
Between gasps and broken pleas, the soldier seemed amused as he watched and heard your every noise. You didn't even know how much more you could take with all the excitement gushing through your pores but your body gave up all hope when you saw how your boyfriend went down to your intimacy just to slowly test you; his tongue was so magical that the spasms prior to orgasm had already appeared, however I stop before you reach him; With your confused look you waited for König to give an explanation, however you only saw how a huge erection sprouted from his pants and his eyes looked at you briefly, as if he had asked you about doing him a favor. Without thinking twice you got up and in the blink of an eye you were already running your delicate hands over his huge chest, while you kissed him in an intensely desirous way, but there was something pending down there.
Between caresses and massages your mouth had taken the huge member of your boy, as you could you tried to incorporate everything in your mouth. König looked at you from above, he caressed your hair while he filled you with compliments for all your effort; However, he stopped you at a key moment, he lifted you up to put you back in bed and placed himself on top of you but without letting his weight fall on you, once there he dedicated himself to kissing you intensely as he slowly lowered himself to your breasts, where he distributed kisses, little bites and squeezes, as he positioned you for what was next.
Little by little, the clashes between bodies that released unseemly sounds, pleas and highly dirty moans became present; You could feel how little by little König gave everything, the kisses became hotter and not to mention the indecent and pleasant thrusts. And when it seemed that you were about to arrive, a huge hand gently wrapped around your neck, giving small squeezes that gave you a complete pass to orgasm. Little by little you were closer until you felt the final spasm followed by your partner's liquid. The satisfaction of both was so prominent, König fell surrendered to your side, and without hesitation he brought you closer to him.
-lana 💟
#könig smut#ghost smut#könig cod#konig imagine#konig mw2#konig headcanons#könig mw2#könig imagine#könig x y/n#könig x you#könig x oc#cod headcanons#cod x reader#ghost cod#cod mw2#soap cod#ghost x reader#ghost call of duty#ghost mw2
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¡Hola! ¿Podrías hacer headcanons de Gavi estando celoso? ❤️
gavi celoso headcanons:
advertencia: lectora fem.
- intenta convencerse a si mismo de que NO es del tipo celoso
- pero a quien puede engañar?? literalmente es la personificación de la violencia :)
- no le gusta sentirse inseguro, odia con todo su corazón sentirse celoso porque él confía mucho en ti y sabe que lo amas y que jamás lo cambiarías por otro, pero es tan difícil mantener ese pensamiento cuando chicos random se acercan a vos para pedirte tu número
- ¿acaso no ven que tienes novio?
- pero también le encanta cuando los rechazas porque siente que le das su lugar
- gavi puede llegar a ser bastante inseguro, pero jamás lo admitiría
- por ejemplo, esa vez cuando fueron al starbucks saliendo de uno de los entrenamientos…
- hicieron sus pedidos y todo iba bien hasta que el cajero comenzó a coquetearte
- pablo pensaba que era un jodido descarado, ¿acaso no veía que estabas con tu novio?
- fuiste amable al responderle, no querías causar una escena
- pablo intentó ignorar las enormes ganas que tenía de golpear a ese tonto en el rostro por haberte intentado ligar
- les dieron sus bebidas, y mientras las tomabas, te diste cuenta de que el cajero había escrito su número en tu vaso
- “amor, mira” le mostraste a gavi y él solo pudo rodar los ojos un tanto molesto
- no era tu culpa ser tan jodidamente hermosa que todos los chicos y chicas se te quedaban viendo embobados.
- observaste como tu novio tomó tu bebida y se levantó de la silla para caminar hasta el mostrador, donde se plantó frente aquel chico.
- “¿la miras a ella? bueno, ella tiene novio, y soy yo, así que no intentes nada porque somos muy felices y ella jamás te haría caso.”
- quisiste reír ante las palabras de tu novio, y aún más cuando observaste el rostro del empleado.
- “vámonos” dijo pablo tomándote de la mano y caminando fuera del local.
- si, podríamos decir que gavi no es del tipo que se queda callado cuando algo le incomoda.
- cuando está celoso intenta llamar tu atención de muchas maneras :)
- una vez estabas platicando muy contenta con uno de sus compañeros de equipo, y él no podía quitarte la mirada de encima. los miraba desde lejos con una mueca ):
- así que hizo todo lo posible para llamar tu atención: dominadas, goles, dribbling… etc.
- pero no lograba que le hicieras caso.
- así que optó por lanzarte el balón a la cara.
- no fue la mejor opción pero al menos así habías dejado de hablar con aquel chico.
- pablo te cuida DEMASIADO!!! no está dispuesto a perder lo que más ama, así que te protege tanto de absolutamente todo <3
- odia estar celoso, confía mucho en ti pero ese sentimiento nunca se va realmente
- si mira que un chico te está mirando más de lo debido, te besa frente a todos para demostrar que ya tienes novio <3
- incluso se pone celoso de tus peluches porque pasas más tiempo con ellos que con él, o algo así dice gavi.
- cuídalo, esta chiquito.
- a pesar de no saber controlar muy bien sus emociones, te ama por sobre todas las cosas.
#fc barça#barça tumblr.#pablo martín páez gavira#gavi blurb#gavi x reader#gavi headcanons#gavi imagine#pablo gavi headcanons#gavi barcelona#gavi#pablo gavi#gavi x tu#gavi x you#gavi x vos
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yo la quería hacer feliz
pero optó por el amor de alguien más
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"Nada sucede dos veces
ni va a suceder, por eso
sin experiencia nacemos,
sin rutina moriremos.
En esta escuela del mundo
ni siendo malos alumnos
repetiremos un año,
un invierno, un verano..."
Wislawa Szymborska
(Kórnik, Poznan, 1923 - Cracovia, 2012) Poetisa polaca, considerada una de las más singulares de su país, que recibió el premio Nobel de Literatura en 1996. Hija de un funcionario, en 1931 se trasladó con su familia a Cracovia, ciudad en la que se asentó de forma definitiva. Estudió filología y sociología después de la Segunda Guerra Mundial en la Universidad Jagellónica, tras lo cual inició su andadura literaria, consagrada esencialmente a la poesía, aunque también a la crítica y al ensayo en diversas publicaciones periódicas, en particular en Vida Literaria.
Ahí aparecieron desde 1968 sus "folletines literarios", a modo de poco convencionales críticas, que serían publicados en forma de libro en dos volúmenes, Lecturas facultativas (1973 y 1981). Su primer poema publicado, "Busco la palabra", apareció en 1945 en el Diario Polaco, y fue a partir del poemario Por eso vivimos (1952) cuando obtuvo reconocimiento público.
El inicio de su itinerario creativo se produjo bajo las normas estilísticas del realismo socialista imperante y denota tanto el estremecimiento por los crímenes de la guerra reciente como su identificación con los sufrimientos del pueblo polaco y su esfuerzo por superarlos. En esa estela, aunque ya anunciando algunas de las características de su obra posterior, en particular la ironía para abordar poéticamente los dilemas filosóficos que la inquietan, escribió Preguntas hechas a una misma (1954).
Pero será con Llamada al Yeti (1957) cuando romperá definitivamente con los preceptos del régimen, en un ajuste de cuentas con su actitud anterior y también con la de la sociedad oficial. A partir de aquel año, en Polonia como en otros países, se inició un fuerte movimiento de rechazo de la imposición soviética y del doctrinarismo comunista, en forma de rebeldía nacionalista. Szymborska optó por la reflexión filosófica y ética, tomando distancia de los debates concretos, y siempre tiñendo de su peculiar humor sus indagaciones poéticas sobre el espíritu humano individual.
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GILLETTE, un APELLIDO FAMOSO
A King Camp Gillette, se lo considera el inventor de la maquinita y las hojas de afeitar.Nació en Wisconsin en 1855.
Sus padres eran inventores pero sin grandes legados a la humanidad. Gillette conoció a William Painter,quien inventó las tapas descartables con un corcho y le dio trabajo como vendedor. Un modelo de comercialización “atado” dado que los consumidores deberán seguir comprando.
Hasta entonces se usaban las navajas que se afilaban con una correa de cuero y afeitándose un día ideó una hoja de acero,que una vez perdido el filo,se desechara. Tardó unos ocho años en concretar la idea de las hojas y la clásica maquinita en forma de T.
Formó la compañía en 1901,la patentó en 1902 y para 1903 había vendido 51 máquinas y unas 160 hojas de afeitar.No se desalentó y entregó a precios muy accesibles, a soldados que participaron en la Primera Guerra Mundial, la maquinita. Eso dio frutos y también optó por obsequiar el producto a los muchachos que cumplían 18 años. De esa manera se asegura la venta de las hojitas.
Por esto se lo considera uno de los padres del “freebie marketing “. La Gran Depresión de 1929 casi lo lleva a la bancarrota. Falleció en 1932. Fue un socialista con utopías y publicó varios libros con ideas casi imposibles de llevar a cabo. Se hizo universalmente conocido por su foto en los paquetes de las hojas de afeitar.
La compañía continúa en funcionamiento a través de una gran variedad de marcas como Brown, Duracell, Oral B entre otros.
La hoja de afeitar tuvo y tiene una identificación con el apellido Gillette en el lenguaje popular.
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Era una mañana soleada y muy agitada en el mercado del pueblo. Como siempre, había una gran cantidad de personas caminando por el pasillo que creaban los puestos instalados uno al lado del otro, mientras que el resto se amontonaba frente a los puestos de interés para mirar y comprar.
Y Athan estaba ahí, en medio de todo eso, observando como precisamente el puesto que era de su interés estaba repleto de personas. Aunque el problema no era precisamente ese, sino el hecho de que estaban los unos a los otros empujándose, repartiendo codazos...
—No me meteré ahí. No me levanté el día de hoy para recibir una golpiza gratis. —así que optó por tomar distancia del montón y observar un rato. En eso miraba a su alrededor de vez en cuando para ver si podía pasar a otro puesto mientras se calmaba el lío de ahí o en una de esas oportunidades encontraba un hueco donde meterse y revisar por qué tanto alboroto en la tienda ¿Un nuevo producto? ¿Sería una máquina? ¿Tela? ¿Perfume? O... ¿una pócima? No, eso sí que no, no podían robarle el negocio de esa forma. O mejor dicho, sí, si podían, pero en ese caso tendría que investigar y ver que tipo de estafa se trataba porque honestamente ¿Alguien mejor que él para eso? No había.
》 @s-theunknown
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Un hechizo gracioso
Título: Un hechizo gracioso.
Pareja: Steve Rogers X Lectora bruja y agente de S.H.I.E.L.D.
Palabras: 405 palabras.
Cuadro: C2 “Fic infantil.”
Clasificación: B.
Sinopsis: Steve leyó el hechizo equivocado.
Advertencias: Hechizo equivocado.
N/A: Esta es mi entrada para Captain Bottom Bingo round 2. CABB2024.
Links: Wattpad, Ao3, versión en inglés.
Si te gusto por favor vota, comenta y rebloguea.
No doy ningún permiso para que mis fics sean publicados en otra plataforma o idioma (yo traduzco mi propio trabajo) o el uso de mis gráficos (mis separadores de texto también están incluidos), los cuales hice exclusivamente para mis fics, por favor respeta mi trabajo y no lo robes. Aquí en la plataforma hay personas que hacen separadores de texto para que cualquiera los pueda usar, los míos no son públicos, por favor busca los de dichas personas. La única excepción serían los regalos que he hecho ya que ahora pertenecen a alguien más. Si encuentras alguno de mis trabajos en una plataforma diferente y no es alguna de mis cuentas, por favor avísame. Los reblogs y comentarios están bien.
DISCLAIMER: Los personajes de Marvel no me pertenecen (desafortunadamente), exceptuando por los personajes originales y la historia.
Anótate en mi taglist aquí.
Otros lugares donde publico: Ao3, Wattpad, ffnet, TikTok, Instagram, Twitter.
Tags: @sinceimetyou @black23 @unnuevosoltransformalarealidad @azulatodoryuga
Steve entró a tu oficina, buscándote , pero al no encontrarte, decidió que esperaría así que optó por curiosear en tu estante de libro, donde algunos estaban en idiomas que él no conocía o comprendía, no obstante, le llamó la atención uno que parecía muy antiguo lo tomó.
Steve, sintiendo curiosidad, abrió el libro y comenzó a hojear las páginas amarillentas. Después de unos minutos, sus ojos se posaron en un hechizo en particular. DE pronto, un destello de luz, y el libro cayó al suelo.
Steve Rogers se transformó en un niño de unos diez años.
Confundido y asustado, Steve miró a su alrededor, intentando comprender lo que acababa de suceder. Sin embargo, no pasó mucho tiempo antes de que se diera cuenta de que algo estaba mal. Se sentía muy pequeño, y la habitación parecía gigantesca desde su nueva perspectiva.
En ese momento, entraste a tu oficina, enseguida notaste que había algo extraño, comenzaste a recorrer con la mirada el sitio hasta que notaste la presencia de un niño desconocido, te acercaste, nadie llevaba niños al Triskelion. Cuando tus ojos se encontraron con los del niño, enseguida te diste cuenta de lo que había ocurrido.
—¿Steve? —preguntaste, sorprendida.
Steve, todavía procesando lo que había pasado unos minutos antes, asintió con timidez. Comenzaste a interrogarle, por lo menos sus recuerdos seguían intactos, eso era una ventaja. Luego, te enseñó el libro casi temblando, lo tomaste y le revolviste el cabello.
—Déjame investigar qué es lo que ocurrió —dijiste mientras buscabas dulces en alguno de los cajones de tu escritorio.
En cuanto encontraste algunos, se los diste, quizás así podría calmarse un poco, también le diste unas hojas y algunas plumas para que se entretuviera, nadie podía verlo así, mientras tanto buscabas cuál hechizo había sido el responsable de que Steve terminará así.
—Steve— lo llamaste después de unos minutos, él alzó la vista para verte—. Hay un pequeño problema.
—¿Cuál? —Steve preguntó temeroso.
—No podemos revertirlo hasta dentro de una semana —respondiste con rapidez.
—Oh, no, eso no es bueno —Steve comenzaba a ponerse nervioso.
—No te preocupes yo me encargaré de todo, nadie tiene porqué enterarse de lo que ocurrió, aunque debo de admitir que es muy gracioso.
Después de que hablaran con Fury, Steve tuvo que quedarse una semana en el departamento para evitar que alguien supiera lo que había ocurrido, a los demás le dijeron que estaba en una misión.
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Te puede parecer que el gay Ciro está ocioso, tumbado a la bartola. Pero no. Está ahorrando agua. Desde que optó por no abrir el grifo de agua para cualquier tontería, ha renunciado a descongelar sus medallones de merluza bajo el chorro del grifo. Ahora mismo, está esperando que se descongelen en la nevera que, entre otras cosas, es el método correcto. A su vez, las cruditées que harán de acompañamiento están sumergidas en una cacerola con agua y una gota de hipoclorito. No es necesario usar cienes y miles de litros de agua solo para cenar un plato.
¡Oh! Si lloviese un poco. Solamente un poco.
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¡Toyota celebra los 40 años de la 4Runner con una edición limitada con temática retro!
Presentado por primera vez en 1983, el Toyota 4Runner es un SUV mediano popular que ha acumulado más de 4,000,000 de ventas globales desde su lanzamiento.
Con 2023 marcando cuatro décadas desde el lanzamiento del modelo, Toyota optó por celebrar la ocasión a través de una serie limitada de SUV 4Runner 40th Anniversary Special Edition.
Será además una edición exclusiva de este exitoso modelo poniendo a disposición solo 4,040 unidades en los Estados Unidos. Durante sus 40 años de lanzada al mercado, la 4Runner tiene más de 4 millones de ventas acumuladas. Con estos números está muy claro que se ganó un lugar como la SUV lista para medirse a cualquier tipo de terreno o aventura.
Toyota anunció que esta 4Runner se basa en el grado SR5 Premium y estará disponible en tres colores: blanco, negro media noche metalizado y rojo Barcelona metalizado. Tendrá además llantas de aleación de 17 pulgadas de color bronce, una parrilla Toyota del mismo color de la carrocería.
La 4Runner 40 aniversario Edition lucirá gráficos en la carrocería con colores amarillos, naranja y rojos de inspiración retro. La edición especial del 40 aniversario de la Toyota 4Runner 2023 estará limitada a solo 4,040 unidades y aunque aún no se ha revelado el precio, anticipamos que será de $41,515.
Fuente: hiconsumption
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https://www.instagram.com/hdfueltech/
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No le temo al infierno
Temas: Primer beso / Conociéndose de forma diferente
•Créditos de la ilustración en la imagen•
Hannibal siguió las instrucciones de Susan. Prescindió de sus elegantes trajes y optó por un pantalón de vestir y un suéter rojizo. Según ella, eso haría que Will confiara y se sintiera cómodo con él.
No era sencillo intimidarlo, sin embargo, tratar al descendiente de su novia despertaba sus nervios.
Cientos de veces, la mujer lo invitó a observar fotografías del muchacho, no obstante, se negaba. No dejaría su profesión de lado, si lo miraba… ¿Lo psicoanalizaría?
Un verde campo rodeaba la construcción de madera, repleta de ventanales y dos chimeneas. Contrario a su hogar, lleno de ciudad y vanagloria.
La hermosa figura de la Sra. Graham resaltó envuelta en un vestido almagre que delineaba su cintura, piernas y destacaba su prominente busto. Un sueño.
Lecter cargaba una botella de vino y una cesta que contenía una bolsa de gel helado, que mantenía a temperatura adecuada, varios quesos, “carnes frías” y frutas. Una escena mediterránea.
—¡Cariño! Me alegra que vinieras —saludó, dándole un beso en la mejilla—. Pasa. William espera en su dormitorio.
La antítesis de la mansión del doctor. No hallaba tono distinto al marrón de la corteza obtenida de los árboles y alguna explosión vibrante que acompañaba a diseños tribales presentes en telas.
Pequeñas cornamentas funcionaban como candelabro; uno de los pocos detalles que le agradaron al invitado. Excesivamente hogareño para su gusto.
Colocó los aperitivos sobre el comedor mientras la esbelta dama gritaba al pie de las escaleras a su primogénito.
Se ocuparon en ordenar la vajilla y servir la comida. Precisaban ser productivos al aguardar.
—Perdón por la tardanza. Ya estoy aquí.
El mayor no supo si maldecirse por privar a sus ojos de esa fascinante imagen o, si existía un Dios, agradecer la extraordinaria bendición enviada.
Le doblaba la edad al chico, que andaba en sus veintes, rizado al igual que su progenitora, tez blanca con un brillo y rubor interesante, pestañas largas que acrecentaban su aspecto tierno y un cuerpo bastante trabajado que se marcaba gracias a sus formales prendas. Al parecer jugaron a lo mismo.
—Hannibal, Will. William, Hannibal.
—Un placer —dijeron simultáneamente.
El ojigarzo estiró su mano, mas el psiquiatra estaba demasiado embelesado que la ignoró durante segundos y cuando al fin se dio cuenta de la situación, la estrechó tan fuerte y por un largo tiempo que resultó vergonzoso.
La cena transcurrió de manera “normal”, fuera del sugestivo modo en el que los masculinos ingerían sus alimentos. Imposible que solo uno de ellos inventara la palpable tensión sexual que percibían.
Eran conscientes de sus actitudes erróneas, pero todo quedaría en eso… una simple fantasía.
—¿Aló? —Una llamada irrumpió a mitad del postre—. Disculpen, asuntos de trabajo. Contestaré en el jardín —indicó la señora, tapando el micrófono y retirándose.
—Doctor, ¿se encuentra bien? —cuestionó el joven, apenas los tacones de su mamá se volvieron inaudibles—. Lo he notado algo… ansioso.
El castaño se acostumbró con los años a escuchar dicho título previo a su apellido, aunque, en la voz del menor, lograba estremecerlo.
—Tu… presencia. No es fácil enfrentarse a un individuo tan importante que tiene licencia para juzgar.
—Yo no sentencio, querido cirujano —El rizado entendió, a raíz del nerviosismo en las palabras de Lecter, que poseía el permiso de proseguir—. Si hay un ente superior, se encargará de ello, si no, nuestros iguales lo harán —Retiró uno de sus zapatos de sus pies y con él, escaló a partir del tobillo del castaño hasta su entrepierna—. He de mencionar que no le tengo miedo al infierno, como ya puede notar.
El mayor recordó al muchacho con el que tuvo sexo por primera vez. Esperaron a ser "adultos", ambientaron románticamente una habitación y compartieron su inexperiencia. Memorable, debido a la confianza y comunicación de la que gozaban. Después de él, no hubo otro hombre, por cobardía, quizá.
—Saldré un rato. Problemáticas empresariales. Me necesitan ahí —La fémina regresó a la estancia con su bolso, deteniendo la reacción del psiquiatra—. Prometo no tardar. ¿Estarán bien solos?
Ambos se miraron, cómplices. La oportunidad perfecta.
—Nos cuidaremos mutuamente —aclaró el chico, recibiendo un beso de su madre en la frente—. Esto es conveniente para… relacionarnos mejor.
Desafío y sensualidad reinaban las pupilas del ojigarzo.
El vínculo con su mamá era bueno, sin embargo, la sexualidad jamás imperaba en sus pláticas. Desconocía que probó a todos sus amigos, aunque nunca cruzaron hasta la penetración.
El castaño no era otro experimento, realmente quedó encantado desde que lo vio a través del móvil de su progenitora y tenerlo en carne y hueso sólo aumentó su interés.
Graham se levantó de su silla y le extendió la mano con el objetivo de que lo siguiera hasta el sillón. Dudó. Su corazón latía a mil por hora, un ligero temblor se adueñó de sus músculos y la cabeza le explotaría ante tantos pensamientos contradictorios.
—Esto es una mala idea —externó el cirujano al encontrarse junto al joven que lo rodeó del cuello con su brazo, recorriendo su pecho con los dedos de su extremidad libre.
—Deja de fingir que no llamé tu atención. Los ojos no mienten en lo absoluto —Bajó la mirada hasta la sutil erección formada en Lecter—. Eso tampoco.
—No voy a follarte —jadeó al apreciar el aliento del menor a milímetros de su boca.
—Me encanta que lo hayas considerado, pero ¡oh doctor!, deseo más que eso. Esa intimidad se construye.
—Va a odiarnos —Su oposición flaqueaba a cada segundo. Lo acarició con ternura, como jamás lo hizo con nadie más.
—Soy mayor de edad. Nuestro consentimiento está dado. Además, el día en que ella se entere, es lejano —Ocupó el regazo ajeno, deshaciéndose de la distancia—. Me perdonará, soy su único hijo. Si me ve feliz, también se apiadará de ti.
¿Qué pensaba? Era el gran Hannibal, cualquier cosa que hiciera triunfaría. Sus planes nunca fallaban y esa no sería la excepción.
Asintió lentamente. El rizado se acercó a sus labios, lo miró como si fuera el ser humano más hermoso sobre la Tierra y lo besó.
Calidez, pasión y cariño incipiente. Todo lo que Susan no le proporcionaba, no obstante, era lo correcto; mujer y varón de la misma edad.
Qué tontería.
Si pecar se traducía a probar, sin cesar, la experta lengua húmeda del muchacho que encendía sus sentimientos y cuerpo con solo pronunciar su nombre… Estaba condenado.
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One-shot könig ⛓️
—pero Mein kleiner...no quiero que esto afecte en—La interrupción temblorosa no se hizo esperar del otro lado de la conversación;
—no me vuelvas a llamar de esa manera könig, y mucho menos después de lo que me estás haciendo.— tu voz denotaba tristeza y furia al mismo tiempo, los rayos de la lluvia que comenzaba a tornarse feroz iluminaban por escasos segundos la figura del gigante que tenías frente tuyo. El ambiente se volvía cada vez más tenso entre tú y él, könig se había decidido a terminar su relación después de cuatro años. –No entiendo, hice algo malo? Conociste a alguien más?— la desesperación te tragaba viva, repasando una y otra vez en las vivencias que tenías junto al soldado, necesitabas recordar si hubo algún evento que causó todo lo que estaba ocurriendo.
–No es tan fácil de decir klein...—könig trataba de calmarte, pero tus reacciones solo le estrujaban aún más el corazón mientras contenia sus ganas de abrazarte; el francotirador jamás se había sentido así de mal, ni el campo de batalla se le comparaba con este momento. Pero como explicarte de manera coherente su decisión? "Mein Klein, es casi definitivo que en la siguiente misión no vuelva con vida, es tan peligrosa que puede que nisiquiera encuentren mi cuerpo, tal vez vuelva pero es casi seguro que no tendré ninguna extremidad, así que quiero terminar contigo para que no me veas en ese estado tan deplorable, por cierto, te amo." König sabía que al decir eso...daría por seguro que no lo dejarías volver a la base militar, que harías lo imposible por evitar tal suceso. Entonces, que podría inventar para que no tuvieras que escuchar esa terrible noticia?
-No somos los mismos de antes, la gente crece y avanza... Y nosotros no somos la excepción;—könig saco una sombrilla y te la ofreció, el cielo se estaba callendo a cántaros— Es momento de centrarme en otras cosas—te ofreció la sombrilla con una mirada dura que escondía toda su frustración—Lo mínimo que puedo ofrecer ahora es mi amistad, y que llegues a casa seca– könig estaba esperando el momento para que tomaras la sombrilla, pero ese momento jamás llegó. Tú solo ladeaste tu cabeza, la primera de tus lágrimas ya había salido, dandole el permiso al resto de las que tenías guardadas...suspiraste en silencio, parecía que tenías tantas cosas por decirle pero tus cuerdas vocales no entendían tus pensamientos, trataste de tocar la mejilla que se escondía en su capucha, pero tu mano se quedó a mitad del camino cuando optó por volver rotundamente; y después de eso simplemente diste media vuelta para ir a casa.
La lluvia comenzaba a caer cada vez más agitada y rápida, llevándose con ella tus tristes pisadas, disolviendo tus lágrimas en los charcos más cercanos, finalizando con el borrado de tu silueta mientras el francotirador te veía a lo lejos, hundido en tristeza y sentimientos encontrados.
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—but Mein kleiner... I don't want this to affect in— The trembling interruption did not wait on the other side of the conversation;
Don't call me that way again, König, much less after what you're doing to me." Your voice denoted sadness and fury at the same time, the rays of the rain that began to become fierce illuminated the figure of the man for a few seconds. giant that you had in front of you. The atmosphere became increasingly tense between you and him, König had decided to end their relationship after four years. I don't understand, did I do something wrong? Did you meet someone else? — despair swallowed you alive, going over and over again the experiences you had with the soldier, you needed to remember if there was any event that caused everything that was happening.
It's not so easy to say Klein..." König tried to calm you down, but your reactions only squeezed his heart even more while he contained his desire to hug you; The sniper had never felt this bad, nor was the battlefield compared to this moment. But how to coherently explain his decision? "Mein Klein, it's almost certain that I won't come back alive on the next mission, it's so dangerous that they might not even find my body, maybe I'll come back but it's almost certain that I won't have any limbs, so I want to end you so I don't get hurt." see you in that deplorable state, by the way, I love you." König knew that by saying that... he would assume for sure that you would not let him return to the military base, that you would do everything possible to avoid such an event. So what could I come up with so you wouldn't have to hear that terrible news?
-We are not the same as before, people grow and advance... And we are not the exception;—König took out an umbrella and offered it to you, the sky was falling down heavily—It's time to focus on other things—you He offered the umbrella with a hard look that hid all his frustration—The least I can offer now is my friendship, and that you come home dry—König was waiting for the moment for you to take the umbrella, but that moment never came. You just tilted your head, the first of your tears had already come out, giving permission to the rest of the ones you had saved... you sighed silently, it seemed that you had so many things to say but your vocal chords did not understand your thoughts, you tried to touch the cheek that was hidden in his hood, but your hand stayed halfway when he chose to return flatly; and after that you just turned around to go home.
The rain began to fall more and more agitated and fast, taking with it your sad footsteps, dissolving your tears in the nearest puddles, ending with the erasure of your silhouette while the sniper saw you in the distance, sunk in sadness and mixed feelings. .
-lana 💟
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