Tumgik
#te pierdo
8vo-pecado · 1 year
Text
Sensación
Siento miedo de perderme si te pierdo.
51 notes · View notes
lasnotassuicidas · 2 years
Text
Cada rincón de su piel yo toqué y acaricié, y al desnudarla solo me enfoque, en darle a su vida y a su cuerpo un porque...
Lasnotassuicidas
32 notes · View notes
iseethestarsss · 2 years
Text
Tumblr media
10 notes · View notes
corazondemusa · 8 months
Text
¿Dónde vas cuando mi alma te nombra? 
Te busco en todos lados y en ninguna parte, 
Y así he aprendido a encontrarte, 
En las sombras y en los silencios, 
En los labios de los sueños, 
En el beso de la soledad
Que hace de tu nombre un infinito mar
En el cual me pierdo. 
e.v.e.
Tumblr media
55 notes · View notes
paraiso-de-estrellas · 7 months
Text
Tumblr media
8 notes · View notes
Text
Hola, soledad
Nos encontramos de nuevo, la primera vez llegaste como susto y hoy te abro la puerta lento pero con gusto. Hola otra vez soledad, amiga, compañera, musa de mis letras e inspiración continua. Te vuelvo a ver aunque esta vez te noto diferente, no se quien ha madurado si tú, yo, o hemos sido las dos.
Es cierto que fui yo quien te buscó, quien te planeó sin embargo al primer encuentro te negó, te confieso que me da miedo sentirte pues tengo la sensación de que vienes a herirme. Siempre quiero huir de ti sin embargo hoy no tengo a dónde ir. Esta vez no es como aquel adiós que nos presentó o ese camino que inesperadamente nos unió. Ahora  nadie te impone ni me avienta a tus brazos, esta vez estoy contigo por decisión y convicción. Hoy te gozo, te aprendo y sigo tus pasos.
Estar contigo irónicamente se ha vuelto un ejercicio de estar conmigo, pues cuando más te tengo, más me siento. Al estar contigo no me pierdo; al contrario; me encuentro. Me sorprendo contándome chistes y riéndome sola, planeo citas conmigo misma en lugares dónde antes no iría sin compañía e invento nuevas recetas en la cocina. Canto en alto por las calles y hablo a versos, pierdo la vergüenza y el «qué dirán» cada vez me importa menos. Comienzo a conocer de cerca mis miedos, demonios y defectos pero me enfoco más en lo que llevo dentro.
Contigo me he vuelto mas tolerante, paciente, empática y perseverante. Me he aprendido a dar lo que necesito y a satisfacer mis propias necesidades. He buscado compañía, anhelado compartir con alguien mi día sin embargo al toparme siempre contigo en la rutina me doy cuenta de que no necesito a nadie más que a mi en mi vida.
No te pongas triste si te digo que este tiempo no será eterno, siendo honesta tengo otros planes para lo nuestro. Y aunque siempre buscaré momentos para reunirnos, no quiero vivir eternamente contigo. Pues una vez creciendo juntas me gustaría recorrer una vida de la mano de alguien más y eso significa que tú ya no estarás.
Hola otra vez soledad, por mientras disfrutémonos un poco más.
Tumblr media
ℜ𝔬𝔰𝔞🖤
6 notes · View notes
parcecallese · 1 year
Text
Parce, nunca creí que diría esto pero, me estás perdiendo, te juro que sí
21 notes · View notes
tinynebula · 1 year
Text
the sucky part of being an extrovert is that having a million friends means you're inevitably going to neglect some of them and they will get angry and you will end up losing some of them and it's not the end of the world you still have friends but a small part of yourself will always feel the heartbreak of every lost friendship and like you are the problem
4 notes · View notes
leregirenga · 2 years
Text
Tumblr media
Cuándo me hablas, me pierdo en la melodía de tu voz y,
por mas que busqué,
no encuentro, cómo dejar de encontrar tus ojos...
ciertamente, no hay salida
cuándo me hablas..
te busca mi alma
te llamo en silencio..
y no hay nada que pueda hacer
mas que permanecer suspendida en el tiempo, buscandote
sin encontrarte, aquí!
E.G.
3 notes · View notes
losjavis · 2 years
Text
Tumblr media
i’m:
Tumblr media
x
5 notes · View notes
daeluin · 2 months
Text
nicki nicole peterick edi-[me abate la federal]
0 notes
americangroupie · 3 months
Note
plz plz plz!!!!! UN TRÍO (matías, reader, enzo)!!!! estoy muriendo muerta de tanto pensar en eso, sí pudieses hacerlo sería LIVE SAVING fr
✪ pyramids ✪
enzo vogrincic x reader x matias recalt
tw: +18 la fantasía sexual de todas
a/n: mi escrito mas largo, más producido y del que estoy más orgullosa ;) si veo que les gusta puedo hacer la parte dos, vivan los hombres
୨୧┈┈┈┈୨୧┈┈┈┈୨୧
"¿qué tanto mirás?" susurró matías cerca de tu oreja, tratando de seguir el camino de tu mirada al percibir que llevabas varios minutos con tus ojos estancados en algo.
bueno, en alguien.
desviaste la mirada hacia tu derecha, mirándolo a él por un par de segundos mientras apoyabas la cabeza en la palma de tu mano. "nada." matías levantó una ceja. "qué pasa, mati. ¿celoso?"
rió, negando la cabeza. "depende. ¿a quién mirás así?"
"adivina." dijiste mirándole a los ojos, devolviendo tu mirada al uruguayo. este se encontraba charlando con sus demás compañeros de reparto en el otro extremo de la mesa del restaurante del hotel, expresándose corporalmente al discutir sobre un tema inaudible gracias a la cantidad de personas que se encontraban a tu alrededor, y a los pensamientos obscenos que se encontraban invadiendo cada espacio de tu cabeza.
"no tenés nada que envidiarles a las nenas fanáticas de internet; sos igual." dijo acompañado de un suspiro, envidiando que el brillo de tus ojos sea gracias a alguien más. "es cómo diez años mayor que vos, hija de puta."
reíste, mordiéndote levemente el dedo. "yo las entiendo tanto." te respondió alzando ambas cejas. "por algo estoy acá con vos."
"estás acá conmigo y lo mirás a él. ¿cómo es la cosa, gorda?"
"no sos mi novio."
"él tampoco."
"puede llegar a serlo."
devolvió su mirada a ti. "¿eso querés?"
imitaste su acción, bajando la mirada a sus labios haciéndole sonreír pícaramente. "mmm. si te pierdo a vos, no."
matías giró su cabeza hacia enzo, analizándolo por un par de segundos mientras apoyabas tu cabeza en el hueco entre su cuello y su hombro. eran altas horas de la madrugada, pero aún después de un largo día el perfume del argentino seguía siendo predominante en el aire cerca de su cuello. "no necesariamente."
"¿qué me estás queriendo decir, amor?" susurraste alzando tu mirada sin moverte, tus ojos aparentando una inocencia que matías sabía era inexistente.
"vos sabes exactamente a que me refiero."
sentiste tu corazón acelerarse levemente al sentir un poco más real una de tus fantasías más intimas y utópicas, no considerabas a matías una persona que estuviera abierta a algo así. y sincerándote contigo misma, antes de conocerlos a ambos tampoco te veías capaz de encontrarte soñando despierta con dos hombres, uno adelante y otro por detrás. pero faltaba la parte más importante, que era que enzo estuviera dispuesto.
sentiste la noche pesada y larga, los minutos parecían horas al no poder concentrarte en nada más que en tus fantasiosos pensamientos, siendo poco charlatana comparada a los días donde matías no tenía una mano sobre tu muslo, y donde enzo no tenía el pelo tan desordenado y la remera tan apretada.
al finalizar la cena, te despediste de todos con un beso en el cachete, quedándote charlando con esteban por un par de minutos mientras matías saludaba al resto.
y entre tanto que lo escuchabas contarte sobre su próximo proyecto, divisaste a matías por sobre el hombro de esteban hablando con enzo, haciendo contacto visual con el uruguayo mientras matías hablaba.
"estoy en el proceso de casting, pero pienso que ya lo tengo en el- ¿qué pasa, flaca?" esteban pregunto con un leve tono de preocupación en su voz, girando su cabeza hacia un lado para encontrar a lo que mirabas que coloreó tus mejillas de un vibrante rosado.
"nada kuku." respondiste rápidamente y con seguridad, queriendo que volviera a hablarte para no llamar la atención de nadie más. "¿que decías?"
te alzó una ceja. "nada, que pienso que ya tengo el rol en el bolsillo." le sonreíste y asentiste a ver a matías caminando hacia ustedes.
"¿vamos?" dijo matías al acercarse lo suficiente; asentiste como respuesta. "chau, kuku, nos vemos mañana."
"chau, nos vemos al desayuno." dijo dirigiéndose a ambos, pero regalándote una sonrisa picara al comenzar a alejarse.
suspiraste y apretaste los labios con vergüenza mientras caminabas al lado de matías hacia el ascensor.
"mati."
"¿hm?"
"¿qué le dijiste?”
"¿a quién?"
resoplaste. "matías."
"¿pero a quién, nena?" respondió riendo.
"no me molestes hijo de puta, ¿qué le dijiste?"
negó con la cabeza mientras se adentraba en el ascensor. "nada, no le dije nada de vos. no te comas la cabeza."
lo miraste con los ojos entrecerrados . "no te creo nada."
"no me creas." respondió, cruzándose de brazos mientras miraba hacia adelante. "pero yo no le dije nada sobre que te lo querés coger."
lo miraste con los ojos muy abiertos, pegándole un codazo. "sos una mierda."
"y bueno." dijo cuando el ascensor abrió sus puertas. "no era necesario con cómo estuviste mirándolo toda la noche.”
resoplaste. "cortála, querés. que te pones celoso, como si vos no fantasearas con otras minas."
"en realidad, no. me basta con lo que tengo en frente mía." dijo mientras cerraba la puerta de la habitación detrás suya, tomando tu mano y acercándote hacia él abruptamente para besarte con brusquedad.
llevaban varios días en el hotel de venecia, hoy siendo el ultimo antes de viajar al siguiente festival de cine. matías decidió llevarte a vos como acompañante, ayudándolo con sus tareas diarias como la buena amiga que eras; cogiéndotelo cada momento en el que estuvieran los dos solos.
la dinámica entre vos y matías llevaba un par de años funcionando a la perfección, acompañándose mutuamente en todo sin la necesidad de formalizar nada, para no sufrir gracias a la distancia y las diferencias de horario.
sonreíste en el beso al sentir la brusquedad de sus acciones- agarrando tu culo con fuerza, mordiendo tus labios con poca timidez mientras jadeaba en tu boca. empezaste a caminar hacia atrás sin abrir los ojos, chocando contra la pared y un par de muebles hasta sentir la suavidad del colchón debajo tuyo.
matías gruñó en tu boca, explorando cada esquina de esta mientras se acomodaba encima tuya y bajaba con poco cuidado los tirantes de tu vestido por tus hombros; dejando descubiertos tus senos haciéndote estremecer con rapidez por el frío aire que rápidamente se transformó en la cálida sensación de la lengua de matías.
mientras su lengua rotaba en círculos por encima de tu pezón, matías bajó su mano con lentitud hasta tu entrepierna, rozando con sus dedos por encima de la ropa interior y esbozando una risa burlesca al sentirla tan mojada tan rápido.
"cómo te vas a mojar así, mi vida. aún ni empiezo." dijo separándose de tus senos por un segundo para besarte, pasando su lengua por tus labios antes de volver a dar toda su atención a lamer, morder, pellizcar y besar tus pezones.
consumida por el placer de su boca, cerraste tus ojos mientras acariciabas y tirabas de su pelo, gimiendo su nombre de vez en cuando acompañando todos los quejidos que salían de tus labios.
pero a pesar de estar nublada por la sensación, el sonido de la puerta de la habitación abriéndose no pasó desapercibido para tus oídos, haciéndote abrir los ojos de golpe mientras te apoyabas en tus hombros, tratando de taparte lo más que pudieras al no saber a quién estabas por traumar.
pero para tu sorpresa, matías no cesó sus movimientos.
"mati-" dijiste tirando de su pelo hacia atrás para alejarlo, tratando de advertirle que había alguien más en la habitación. pero no se detuvo, mordiéndote con fuerza obligándote a ahogar un gemido.
y en cuestión de segundos, miraste la alta figura de enzo pararse frente a la escena. pudiste mirar con detalle su cara transicionar de neutro a horror.
"la puta madre-" habló fuertemente luego de voltearse con rapidez, subiendo su mano hacia su cara para taparse los ojos. "perdón, discúlpenme, no pensé que- dios, mati como me pasaste la llave pensé-"
"mirá, enzo, volteáte." miraste a matías con los ojos ultra abiertos, sintiendo cómo tus mejillas se pintaban de rojo puro. "no te tapes vos." dijo mirándote con el semblante serio, pero con la comisura de los labios torcida. sentiste tu estomago burbujear de la vergüenza, pero en el fondo sabías que era de la emoción.
"no mati disculpáme, en serio no quería interrumpir-"
"en serio enzo, volteáte. mirála." enzo giró su cabeza por encima de su hombro, mirándote por breves segundos antes de desviar la mirada hacia matías. "vení, acercáte." dijo mientras levantaba tu vestido, dejando tu ropa interior descubierta y sentiste una fría brisa de aire recorrer tus piernas; pero tu cuerpo estaba caliente. "abrí más, mi amor." te ordenó, a lo cuál obedeciste inmediatamente. sentías la mirada de enzo constantemente sobre ti, pero te sentías incapaz de mirarlo. "¿ves lo mojada que está?" dijo pasando su dedo indice por encima de tu ropa interior, haciendo presión para mojar la rosada tela aún más. "en la cena, me confesó que era por vos." matías te dedico una breve mirada, sonriendo pícaramente mientras sentías tus mejillas arder a no más poder. seguidamente miraste como los ojos del uruguayo se oscurecían frente a la vista. "y yo sé que vos también te la querés coger, por como la mirabas en la pileta ayer. ¿quién soy yo para detenerlos?"
enzo tragó saliva mientras te miraba, su respiración estaba levemente agitada y sentía la habitación tornarse caliente. "es tu novia, matias, yo-"
"amiga." interrumpiste. enzo desvió sus ojos rápidamente hacia los tuyos, compartiendo contacto visual por unos segundos.
"dale enzo, acercáte." dijo matías separando más tus piernas, mirándote con lujuria. "a este paso me la voy a terminar cogiendo yo y vos vas a tener que mirar nada más. mirá como está." enzo se inclinó con lentitud, arrodillándose al frente tuyo sin quitarte los ojos de encima ni un segundo. divisó de cerca la oscura mancha en tu clara ropa interior por pocos segundos antes de que matías hiciera a un lado esta, dejándole ver sin nada de por medio lo mojada que estabas. "mirála." dijo pasando su dedo indice por tus labios, ganándose un gemido ahogado de tu parte por el inesperado contacto, necesitando más. "¿no la querés probar?"
enzo mantenía el semblante serio, pero asintió inmediatamente. jadeaste al darte cuenta de lo que estaba pasando, alzando las caderas y ganándote una risa por parte de matías. te incorporaste, acomodándote para así sentarte en la cama. enzo te miraba constantemente, prestando atención a cada movimiento tuyo- buscando tu aprobación para actuar.
a raíz de esto inclinaste tu cuerpo hacia el, enzo imitando tu acción al levantarse y reclinarse hacia ti. te arrodillaste en el borde de la cama, al lado de matías y bajo enzo. lo mirabas con inocencia, esperando su actuar mientras él esperaba el tuyo.
"que tímida que estás, mi amor." dijo matías burlescamente, tomando la mano de enzo y acercando dos de sus dedos a tus labios. "chupá."
enzo rozó con suavidad tus labios, mirándolos mientras los entreabrías con lentitud, la inocencia en tus ojos haciéndolos brillar frente a lo oscuros que se habían tornado los suyos.
acariciaste con suavidad la yema de sus dedos con la punta de tu lengua por unos segundos para luego meterlos por completo a tu boca, gimiendo en estos por la vista que yacía ante tus ojos; vista similar a lo que verías al chuparle la pija.
los pensamientos que recorrían la cabeza de enzo eran más impuros de lo común; no se habría imaginado en mil años tenerte en la posición que te tenía ahora. el bulto en su entrepierna crecía acorde pasaban los segundos, y sentía como si fuese a explotar al sentir tu cálida lengua dar vueltas en círculos por al rededor de sus dígitos.
luego de haber recorrido cada parte de sus dedos con tu lengua, te acercaste más hacia él levantando tu cuerpo hasta quedar a una altura en la cual sus labios eran accesibles para ti. matías te miraba expectante, relamiéndose los labios al mirar la inocencia que reflejaban tus grandes ojos al mirar al uruguayo; sabiendo que estabas muy lejos de la inocencia hace años.
acercaste tu boca a la suya con lentitud, enzo imitando tu acción al inclinarse hacia ti; mirando a matías por unos segundos casi que pidiéndole permiso para actuar. el argentino le sonrió, asintiendo levemente con la cabeza creciendo impaciente al no poder hacer nada al respecto de la molestia en sus pantalones.
enzo subió su mano hasta alcanzar tu pómulo, rozando suave por unos segundos hasta deslizarla a la altura de tu mandíbula; tomando ésta para hacer coincidir su boca junto a la tuya, rozando ambos labios por un par de segundos antes de amoldarlos entre sí. el beso comenzó lento, empapándote en el hecho de estar besando a enzo vogrincic luego de estar meses fantaseando sobre algo que considerabas imposible. podías sentir su respiración agravarse a medida que el beso se agravaba con el pasar de los segundos, el uruguayo devorando tus labios mientras gruñía al saborear la dulzura de tu boca. movías tus labios al compás, dejando que tu lengua se entrelazara con la suya al ladear tu cabeza para obtener mejor acceso.
impacientemente, matías se acomodó sobre el colchón colocándose detrás tuya; acomodando tu pelo hacia un lado de tu cuello y comenzando a besar y mordisquear el otro, provocando un quejido tuyo dentro de la boca de enzo el cual fue directamente al bulto del pelinegro.
matías quitó tu vestido con agilidad, dejándote completamente desnuda a excepción de tu ropa interior con la cual jugueteaba mientras frotaba su bulto contra tu culo.
te separaste de los labios de enzo por unos segundos- un hilo de saliva los conectaba mientras ambos tomaban bocanadas de aire- para poder quitar su apretada remera negra y así poder sentir su cuerpo sin nada de por medio, y matías aprovechó de robarte un beso y mordisquear tus labios mientras enzo admiraba la escena.
"dale enzo-" rió matías al separarse de tus labios, notando como el uruguayo solo se había quedado parado mirando en vez de actuar. "tocála."
negaste con la cabeza, riéndote mientras mordías tus labios para seguidamente acercarte a él, juntando sus labios por un par de segundos para luego comenzar a dejar un camino de húmedos besos desde su mejillas hacia abajo, besando, lamiendo y mordiendo cada trocito de piel que tus labios rozaban. enzo pasó las manos por su cabello, ahogando jadeos entre suspiros gracias a la sensación de tu lengua recorriendo todo su torso hasta llegar a su cinturón. mientras, matías comenzó a desvestirse a si mismo, admirando la vista de tu cuerpo encorvándose levemente hasta posicionarte en cuatro, dejándote perfectamente como él necesitaba.
"¿me ayudas?" preguntaste con dulzura mirando hacia arriba con una de tus manos en su cinturon, hablando por primera vez desde que enzo se había adentrado en la habitación; el uruguayo comenzó a desabrocharlo como respuesta.
"así que la nena sabe hablar después de todo." habló matías en un tono burlesco mientras enzo acariciaba tu mentón con suavidad mirándote a los ojos.
bajaste sus pantalones junto con su ropa interior por completo mientras sentías a matías separar tus piernas con poca suavidad mientras acomodaba su cara en estas, tragando saliva y mirando con los ojos brillantes el miembro de enzo completamente descubierto, relamiéndote los labios para luego devolver tu mirada hacia el y divisarlo con una sonrisa pícara en sus labios.
comenzaste tomándolo por la base y depositando delicados besos por la longitud de este, para luego trazar una línea con tu lengua desde abajo hacia arriba y comenzar a chupar con poca suavidad la cabeza de este. enzo no demoró en quitar el pelo desordenado de tu cara para poder mirarte con la boquita llena sin nada de por medio; tomando todo el pelo posible en su puño mientras que con su otra mano acariciaba tus mejillas. el uruguayo no tardó en convertir sus jadeos ahogados en gemidos, apretando sus labios con fuerza al sentir que los ruidos que le provocabas se estaban haciendo demasiado notorios.
mientras tanto, matías deslizaba sus dedos con lentitud de arriba abajo por tu feminidad, frotando círculos en tu clitoris cuando se percataba de que tenías gran cantidad del miembro de enzo en tu boca para hacerte ahogar a propósito. cerrabas tus ojos con fuerza frecuentemente, gimiendo y quejándote sin vergüenza alguna provocando que las piernas de enzo se sintieran débiles, y la erección de matías dolorosa.
“así, justo así- dios.” gimió enzo entre dientes, gruñiendo al sentir las vibraciones de tu boca en su miembro y tratando de concentrarse en algo más para no acabar tan rapido en tu boca.
te sentías desesperada por más. “mati-” lloriqueaste separándote de enzo por un segundo, frotando círculos con tu pulgar en la cabeza con mucha presión provocando un jadeo de parte de enzo. “cogeme, por favor. no aguanto más.”
enzo gimió al solo escuchar tus palabras. “¿ah, sí? yo creo que podés aguantar un poquito más, hermosa.” dijo matías mientras introducía dos de sus dedos dentro tuyo. “hacélo acabar a enzo primero, ¿no era eso lo que querías? ¿que se corriera en tu boca?”
miraste hacia arriba con la respiración agitada, encontrándote con el semblante burlesco de enzo. “¿eso querés?” dijo con la voz ronca, pasando su pulgar por tus labios empapados de saliva y su líquido preseminal. “nunca te habría imaginado teniendo esos pensamientos a vos. tenés una carita de ángel.” te sonrió, notando como tus mejillas se tornaban mas y mas rojas. “y esos ojitos inocentes. quién podría pensarte así, ¿eh?” lo interrumpiste tomaste su miembro dentro de tu boca una vez más, pasándole la lengua en círculos haciéndolo quejarse. “c-con la boquita llena y rogando que se la cojan- dios seguí así, así.” enzo tiró la cabeza hacía atrás al sentir como acelerabas el movimiento de tu lengua y como tu mano se movía con más rapidez por la longitud, sintiendo a la vez como matias encorvaba sus dedos dentro tuyo.
percibiste una sensación conocida burbujear en tu estómago al sentir el pulgar de matias moverse en círculos encima de tu clitoris; a la vez sintiendo como su cálido cuerpo se pegaba al tuyo al notar que el orgasmo de enzo se acercaba.
sentiste un golpe abrupto en tu culo, provocando un lloriqueo agudo sobre el miembro de enzo el cual lo hizo tirar de tu cabello y sobrestimularte aún más, abrumada por el placer y el dolor que sentías a la vez al tener a matias por detrás y a enzo adelante.
pasaron pocos segundos hasta que enzo comenzó a mover sus caderas hacia adelante, suplicando entre gemidos hasta que sentiste el líquido caliente llenar tu boca mientras matías movía con brusquedad sus dedos dentro tuyo, haciéndote acabar en cuestión de segundos mientras enzo sostenía tu cabeza para no dejarte caer sobre la cama. apoyaste una de tus manos en su abdomen mientras recuperabas el aliento, escuchando la conocida risa de matías detrás tuya.
“¿mucho para vos?” se burló al mirarte sin aire apoyada sobre el uruguayo que se encontraba en una situación parecida. negaste con la cabeza sin mirar hacia atrás, tragando lo que tenías en la boca mientras enzo te miraba con una sonrisa.
“te toca, recalt.” habló enzo mientras soltaba el agarre de tu pelo, sonriéndole con lujuria al argentino y haciéndote dar cuenta que la noche iba a ser más larga de lo que pensabas.
834 notes · View notes
kasja93 · 1 year
Text
Ostatnio było sporo zapytań o napady. W ogóle temat napadów ostatnio dosyć często przewija się na „naszej” części Tumblr.
Napady były, są i będą! Napady to norma! Napady to NATURALNA rzecz!
Nie wstydze się tego powiedzieć na głos. Miewam napady. Ostatnio coraz rzadziej, ale come on! Ja miałam jeden wielki napad przez kilkanaście lat! Bo tak wygląda życie, gdy ma się BED. Ciągła spirala myśli typu „spieprzyłam mogę jeść więc więcej”, „a co tam! Mi i tak nic już nie zaszkodzi”. Moim naczelnym mottem było „A co ja sobie będę żałować! Przecież jutro mogę już nie żyć bądź leżeć w szpitalu na intensywnej!”. Było jeszcze jedno „A zjem jak się ma zmarnować!”.
Ta wewnętrzna pustka, która się nie zapełnia pomimo pochłaniania jedzenia. Ten brak uczucia sytości. Sytość? Za sytość podczas napadu uważa się przecież wtedy najedzenie albo raczej przejedzenie wręcz do porzygu… A i nawet wtedy jeszcze by się coś zjadło.
Tumblr media
Śmieszne nie? Może i tak, ale nie dla ludzi z zaburzeniami odżywania. I jak ktoś pierdo🤬 że „prawdziwe motylki” nie mają napadów to aż mnie strzela chuuuu nie powiem co… Ja nie wiem. Czy ktoś ma już tak zagłodzony mózg, że nie myśli już logicznie? Ale… szkoda gadać. Niektórzy są ludźmi inni parapetami.
Zatem może napisze coś o tym jak uspokoić napady? Wiele widziałam zapytań jak uniknąć napadu. Jednym z fundamentalnych rzeczy ją się nauczyłam podczas wychodzenia z BED odnośnie długotrwałych napadów to:
Nie pościmy następnego dnia!
Nie ma sensu. Tak możesz myśleć, że zawaliłeś/aś, że jesteś beznadziejny/a, że nie zasługujesz na jedzenie. Tylko tak się nie da po prostu. Owszem znajdą się osoby co powiedzą „ja tak robie i jest dobrze”. No to fajnie! Jednak przy DŁUGOTRWAŁYCH napadach, które potrafią ciągnąć się kilka dni, tygodni a nawet miesiące tak to nie działa, że z dnia na dzień się z tego błędnego koła wyjdzie.
Gdy wpadnie się w spirale napadów trzeba zachowywać się jak podczas wpadnięcia do rwącej rzeki. Nie staramy się płynąć pod prąd, ale z prądem powolutku korygując kurs by dotrzeć na brzeg.
Jak wychodziłam z długotrwałych napadów? Stopniowo. I nie zawsze się udawało. Potrafiłam „wszystko spieprzyć” a mój mózg nagle zaczął ze mną walczyć i przestawiał się na tryb odkurzacza tudzież tornada wciągającego wszystko wokół. Nie od razu Rzym zbudowano. Z dnia na dzień nie zmieni się nawyków, które towarzyszą nam nie od dziś. Pozwalałam sobie na te napady częściowo. W sensie nie walczyłam z nimi za wszelką cenę i nie zabierałam się do tego jak z motyką na słońce. Jeden posiłek jadłam „normalny” oraz ograniczyłam się do 2 „napadów” na dobę. Starałam się z dnia na dzień zmniejszać ilość jedzenia podczas napadu. Powoli kroczek po kroczku wyszłam z napadów. Wylałam mnóstwo łez czując się beznadziejna. Wydawało mi się, że do niczego się nie nadaje i że w sumie lepiej mi było wcześniej. Sprzed czasów, gdy zaczęłam z tego wychodzić. Bo dobrze mi było w moim osobistym bagnie. Totalnie akceptowałam to jak wyglądam i zwisało mi to wszystko. Czułam się dobrze jedząc.
Trzeba dużo samozaparcia by zdecydować, że chce się coś zmienić w życiu. I jeszcze więcej siły by w tym wytrzymać.
Warto też pamiętać, że wszelkie zachciewajki to sygnał od naszego organizmu, że czegoś nam brakuje. Podczas odchudzania jest się na deficycie. Czy to mniejszym czy większym, ale należy pamiętać by posiłki były zbilansowane (nawet jeśli są bardzo małe bądź mało kaloryczne). Jeśli zapewnicie organizmowi potrzebne makro i mikro to nawet będąc na niezdrowym deficycie będzie mogli żyć bez napadów… Bądź zredukować je do niemal zera tak jak ja. Średnio jem 500/600 kalorii dziennie (czasem mniej, czasem więcej) ale każdy kto śledzi mojego bloga nawet wybiórczo zauważy, że nie mam napadów. Nie dlatego, że was oszukuje. Po prostu staram się (co nie zawsze mi się udaje) zapewniać sobie tak składniki by moje ciało dobrze znosiło głodowe porcje.
Oczywiście nie jestem specjalistą, lekarzem etc i to co działa u mnie nie musi działać u ciebie, ale teksty typu „bądźmy jak te motylki w 2014 roku” są zwyczajnie popieprzone. Większość tutaj chce być chudym i pięknym, ale raczej nie martwym. Jak chcecie umrzeć to weźcie sznur i się dyndnijcie zamiast się głodzić i namawiać innych do tego samego
373 notes · View notes
caostalgia · 11 months
Text
Te hago daño, corazón.
Cada vez que me hundo me pierdo un poco más a mi misma. Hoy me falta la sonrisa que ponía cuando miraba al sol, ayer me faltaba la risa de los nervios, la semana pasada la alegría de conocer a alguien y mañana me faltará el corazón.
Ese corazón que cada vez late menos de amor y más de obligación. Porque solo lo hace porque tiene que cumplir una función, porque el cerebro y las neuronas le obligan. Aunque él quiera dejar de latir porque le duele, porque la vida le hace daño.
"Me haces daño" me dice a cada rato; cuando me encariño de alguien que no va a quererme, cuando me fuerzo a recordar cosas que dolieron, cuando me aplasto a mi misma, cuando echo mis sueños a la basura, cuando me siento insuficiente, cuando las inseguridades son mayores que todo lo bueno que habita en mi.
"Lo siento" le digo a cada rato; cuando lo rompo, cuando lo menosprecio, cuando le obligo a permanecer en mis vaivenes, cuando le culpo del dolor, cuando siento tanto que no respiro y le hago daño, cuando le obligo a ver como tiro todo la sanado a la basura.
Y, al final, yo hago que la posibilidad de que mi corazón me falte sea culpa mía. Culpa del masoquismo continuo en el que vivo, en el que me fuerzo a vivir. Culpa de las decepciones que me rodean, en las que me obligo a permanecer estancada. Culpa del dolor que no tiene principio ni fin, que solo está ahí y del que no me deshago porque no sé hacerlo. Porque no sé qué hay después de él y me da miedo. Miedo de que sin dolor no haya nada en mí. Nada que no sea este vacío que no tiene fin.
Katastrophal
285 notes · View notes