(...) Recógeme, amor mío, con tus cálidas plumas; recógeme y húndeme tu ternura llagada; colócame en tu olvido, recógeme cantando. No es para que preguntes, no es para que indagues el sitio donde puse mi corazón hundido; recógeme, ahora, para estar en lo ausente, sin preguntar qué ocurre, qué pasa, por qué vuelves tu cabeza de ausente firmamento.

Amargo amor | Miguel Arteche

No todo suma.

Ella me tiene en sus manos y yo la llevo en mi corazón.  Alguien metió los afectos en esta ecuación. Está claro quien se ríe y quien se retuerce lamentando la ausencia, es evidente quien no extraña un carajo y cual se la pasa echando de menos, es una obviedad saber quien se desvive pensando en quien y cual no se desvela en lo más mínimo. No hace falta rimar su ambivalencia con mi desazón, ni sus besos azarosos con mis sueños moribundos, solo hace falta ser así de idiota, restar y dividir, cerrar los ojos y abrir el pecho para entender esta cuestión. Soy el problema y el resultado, la incógnita a resolver siempre inmune ante fórmulas complejas que busquen dentro de esta veneración tortuosa una razón que me haga ceder, algún bofetazo de realidad que deje sin sentido a mi idiotez y entonces de mi brazo a torcer.

Siempre he amado la soledad, no como algunos que encuentran algo fascinante en estar totalmente aislados, llenos de si mismos y acariciados por la ausencia de otro ser, no, yo amo la soledad porque... Solamente odio las despedidas

-quiza no ame la soledad y solo odio que te vayas

Así es la realidad, no nos pertenecemos a la misma eternidad🍃

Aún tengo tu recuerdo en mi mente atormentandome, como una herida mal curada apunto de infectarse.

No te olvido, solo dejo que pase ese amargo, confuso y triste amor a medias que me diste los últimos meses.

¿Que más podría hacer?

~

julián con el mate 😭

Mientes, te conozco bien, está claro que algo está cambiando.

Habla, no huyas de mi , a quema ropa ya di, que es lo que te tiene así visiblemente agitado.

Yo no soy de abrazar, pero soy de tus brazos.

Café

Me estoy enseñando a tomar café. No sé si es algo bueno o malo, me sigue pareciendo que tiene un sabor muy amargo, pero tiene ciertas ventajas que actúan sobre mí, me quita el sueño que llega durante el día a causa de los insomnios que me invaden por las noches, incluso parece que me pone de buen humor, me encantaría que también me borrara los pensamientos pero sucede lo contrario y te trae, a mis labios, con sabor a café y azúcar morena, dulce como tu piel.

Me estoy enseñando a tomar café, como un pequeño secreto, un gusto extraño que se balancea entre la aceptación y la negación pero que me seduce los sentidos con su aroma y el calor que emana hacia mis manos, mi lengua y todo mi interior. Me enseño a probarte desde una taza y poco a poco me acostumbro a la amargura de tu ser, con muy poca dulzura, pero suficiente para no empalagar y necesaria para desearte más.

Me propongo no beberte aunque sin lograrlo, por eso te disfruto a escondidas y si me preguntan, no me gustas, pero bien sé que la adicción es un hecho desde que te probé, áspero el corazón y dulces los labios.

-Nadia Fugaz 🌠

Un bocadito de dulzura, un beso dulce, un café amargo pero que sea miel en los labios, una mañana llena de cariños, empezando un día con arrumacos, unos instantes plenos y llenos de felicidad, un atmósfera de ternura que nos arreglé para empezar este y todos los atardeceres, y más que nada un te amo que quede como canción en el pensamiento para continuar hoy y lo que sigue de la semana.

Leregi Renga

Vueltas sin regresos.

Me sé de memoria lo que haces, al derecho y al revés, sé lo que viene después de este preludio de silencios que murmuran lo que escondes a lo lejos. Sé que hay detrás de esta avalancha que se viene abriendo paso sepultando cada palabra que ahora ya no pronuncias. Vengo de vuelta, como tú, no hacen falta estratagemas ni maromas para evitar decirnos las cosas a la cara, mucho menos continuar escudándonos bajo consignas piadosas por temor, ni ser tan cobardes como para seguir disfrazando con nuestra piel, la verdad que desnuda se quedaba. Te invité a la odisea sin darme cuenta de que había zarpado solo, quise salvarme del naufragio haciendo caso omiso a tus muecas y pretextos. Error y sus efectos. Me tomaste de la mano y nos vi logrando la proeza, sueños en mis ojos y en los tuyos la mirada esquiva, ya me habías soltado y dejado a la deriva. Ibas junto a mi sin ir a ningún lugar, estabas a mi lado sin estar. Verdad y malestar. Quise volver a intentarlo con el corazón abierto y no me arrepiento, era el sueño por el cual que habías vuelto ¿qué te lo impidió ahora?, me imagino que todo aquello que aún no has resuelto. No es necesario darnos otra lección de aquellas donde la culpa siempre es del otro, de esas bañadas de cinismo y que usamos para quitarnos el peso de la conciencia, con la que evitamos hacernos cargo de lo que jode, y es que ya lo aprendí, ganar o perder, regresar nunca fue volver, ya no te tortures por no quedarte conmigo otra vez.

¡¡Estúpido corazón!! inquieto… ¿por qué sigues insistiendo en volver a latir? yo te sepulte, yo te destierre de mi, no vuelvas a latir, no vuelvas a surgir. De amores no correspondidos bastante mal has tenido, no quiero amar y no ser amada, ¡¡cálmate!! no te aceleres frente a él, que aquellos ojos fríos ni siquiera te ven.

Es mejor ajustar tu vida a la ausencia de alguien, que ajustar tus límites para acomodar las faltas de respeto de alguien más.

Dulce como el amor, amargo como la vida...fue un documental que alguna vez vi en la universidad, lo había hecho un profesor en uno de sus viajes a Argelia. Dista mucho de lo que es esta ilustración, aunque lo amargo de la vida tiene muchas formas. El amor es una de ellas y ahora que lo pienso no lo he vivido de otra manera, será por eso que no quiero (ni puedo) representarlo de otra manera que no sea amarga...

Hablando de la pieza más a detalle, es sobre el amor melancólico e imposible. Que parece dejar hueco y triste pero es en cierto sentido también bello y si no, al menos contemplable en la añoranza. Creo que en Japon ven el amor algo asi tambien, pero no soy japones asi que se me llena la boca hablando de eso. Lo que si pedi prestado fue la estética "anime" de tonos planos y ciertos simbolismos, que si la luna es hermosa, que si los cerezos en flor son una cosa romántica, que como está sentada la muchacha...en fin, supongo que el chocolate también...es que necesitaba apelar a esos constructos porque esta pieza es para un concurso, que requería de estos.

Como sea, ya sea el tema melancolico, mis lineas gruesas o incluso la eleccion de color le da mi sello, mas alla de los simbolos prestados que dibuje, al menos eso espero...ahhh, espero poder llamar la atencion con esta pieza, pero hace rato me perdi la fe...que soy un viejo amargado. (Bueno, esta vez si traigo algo del proceso, disfruten)

Uma vez me perguntaram: o que é o amor para você.

Eu pensei por uns instantes e disse:

O amor é como quando alguém te oferece uma batida de vodca com morango e leite condensado bem docinho e suave. Você fica com o coração quentinho e leve, como nunca se sentiu antes na sua vida e pede por mais uma bebida. Seu segundo copo, já não é mais tão doce. Você bebe a vodca com o energético, está um pouco mais forte do que a batida, mas ainda está gostosa. Você se sente leve, feliz e aquela queimação no estômago pelo álcool se tornam lindas borboletas pela pessoa que te ofereceu a primeira bebida. Quando te serve um pouco mais desse amor líquido, pela primeira vez pura, você sente um gosto amargo e ruim. A bebida desce pela sua garganta queimando até chegar no estômago, onde as borboletas estão, flutuando pela alegria de receber álcool e a você percebe que mesmo passando pelo amargor na boca, pela queimação na garganta e estômago, quer cada vez mais, porque apesar de todos os males que essa bebida e a pessoa que te ofereceu causam, você sentia leveza e alegria. Você queria mais daquele amor líquido, bebeu tanto a ponto de não se importar mais com o amargo ou a queimação pois era aquela sensação de leveza pela qual você procurou a sua vida inteira. Quando você vai para cama e vê tudo girando, se sente feliz.

Mas no dia seguinte… Você acorda com uma dor insuportável de cabeça. Você está de de ressaca. Tudo dói. Suas pernas doem, suas mãos doem, seu coração dói. Então você corre para o banheiro o vomita todas aquelas borboletas. Sente dor de barriga, a luz fortes te incomodam, e pensa “eu nunca mais vou beber de novo.”

Amar é lindo no começo. Mas quando acaba, te destrói por inteiro. Amar é como uma garrafa de vodca que te deixa feliz, mas no dia seguinte te causa uma ressaca inimaginável.

– este não é um texto sobre bebidas alcoólicas

— Sammyxx

La ironía de la vida, lo rápido que uno se acostumbra a las cosas que le gustan, lo mucho que luego cuesta olvidar un instante amargo de apenas unos segundos...

13 Locuras que regalarte

Alice Kelle

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