Sinopsis y primer capítulo de Fama

Les dejo la sinopsis de Fama, la novela que estoy escribiendo actualmente pero que ustedes lectores, pueden ayudarme a decidir a donde llevar la historia. 

SINOPSIS

Allison Blake es una actriz americana de 20 años cuya carrera está empezando a despuntar. Asediada por los fotógrafos y teniendo como novio al también famoso vocalista de The Broken, Matt Anderson; Allison ve su vida convertirse en un caos cuando firma para protagonizar la adaptación cinematográfica de El Forastero, novela romántica que ha roto todos los récords de ventas en 25 países. Con Matt y The Broken de gira y sin poder salir a ninguna parte sin tener el asedio de la prensa y los fans del libro, las cosas se complican cuando comienzan a relacionarla sentimentalmente con Ryan Davies, un actor inglés que ha captado la atención del público femenino en Estados Unidos y quién será su co-protagonista. De la noche a la mañana, Allison ve cada vez más difícil mantener su vida privada fuera de los tabloides y programas de espectáculos, especialmente teniendo en cuenta que el tacto con la prensa no es lo suyo. El verdadero problema comenzará cuando Allison descubra que tal vez conocer a Ryan no sea malo del todo.

Próximamente el primer capítulo.

My tragic flaw by Ephram Brown

The more things change, the more they stay the same. I’m not sure who the first person was who said that. Probably Shakespeare. Or maybe Sting. But at the moment, it’s the sentence that best explains my tragic flaw, my inability to change. I don’t think I’m alone in this. The more I get to know other people, the more I realize it’s kind of everyone’s flaw. Staying exactly the same for as long as possible, standing perfectly still… It feels safer somehow. And if you are suffering, at least the pain is familiar. Because if you took that leap of faith, went outside the box, did something unexpected… Who knows what other pain might be out there, waiting for you. Chances are it could be even worse. So you maintain the status quo. Choose the road already traveled and it doesn’t seem that bad. Not as far as flaws go. You’re not a drug addict. You’re not killing anyone… Except maybe yourself a little. When we finally do change, I don’t think it happens like an earthquake or an explosion, where all of a sudden we’re like this different person. I think it’s smaller than that. The kind of thing most people wouldn’t even notice unless they looked at us really close. Which, thank God, they never do. But you notice it. Inside you that change feels like a world of difference. And you hope this is it. This is the person you get to be forever… that you’ll never have to change again.

No le interesaba ver a ninguna. Ya había quién atraía su atención de una forma que nadie podía imaginar

Ángeles y Demonios

Quote blog! Follow me for more

Ángeles y Demonios.

CAPITULO I Encuentro.

    Ariel observaba cautelosamente hacia el final del callejón. Podía sentir la presencia de una fuerza oscura, una particularmente cercana. Recorrió los extremos de la calle con cautela, esperando ver algo fuera de lugar. Las construcciones abandonadas lucían como de costumbre, no había ni una sola persona merodeando por ahí. Por un momento le pareció distinguir a alguien entre las sombras, pero pronto se dio cuenta que no era más que el viento que arrastraba pedazos de periódico viejo.

La intensidad de la fuerza oscura se hizo más fuerte.

-Me iba a sentir sumamente decepcionado si no te encontraba por aquí –dijo una voz amarga proveniente de las sombras. -Lo mismo digo, Verine –respondió el ser de luz que estaba de pie junto a la barda de ladrillo. -¿Sabes? Me comienza a parecer ridícula tu vestimenta, Ariel. No creí que después de tantos milenios iba a considerarlo una molestia.

Recorrió sus ropas blancas, casi azuladas. Ariel vestía pulcramente de pies a cabeza. Tenía un cuerpo atlético y su cabello rubio y ojos verdes parecían salidos de las páginas de una revista de moda. Usaba un sweater cuello en v blanco, con tiras de tela saliendo de lugares extraños y uniéndose de nuevo a él en algún punto aleatorio. La camiseta de cuello redondo que usaba debajo tenía unas costuras muy particulares en los bordes. Los pantalones resultaban igualmente extraños, estaban llenos de bolsas y cierres por todas partes. Era obvio que eran ropas que estarían de moda en unos años, quizá unas décadas, no ahora.

-No es el color lo que te molesta, Verine –contestó Ariel sin sentirse ofendido–. Es la luz.

Verine parpadeó arqueando las cejas.

-No, estoy seguro que es el color. No es lo que yo elegiría usar, si quieres mi opinión –agregó en un tono cargado de descaro.

Se acomodó las solapas de su gabardina negra, quitando una mota de polvo por aquí y por allá. Su vestimenta no tenía nada de futurista. Los pantalones de mezclilla negro y las botas de caucho del mismo color, lo hacían ver como cualquier persona. Excepto que no era una persona. Ninguno de los dos lo era. Verine volteó hacia el centro del callejón, donde había un hombre tirado en el suelo y otro de pie. Tenía los ojos fijos en el que estaba parado.  

–Conoces Las Normas. No puedes tocarlo –dijo Ariel, adivinando el curso de los pensamientos de su viejo conocido.

Verine sonrió fríamente para tratar de ocultar su irritación. Su espeso cabello negro contrastaba un poco con su piel ligeramente rojiza, como de alguien muy blanco que se ha expuesto al sol recientemente. Sus ojos negros se fijaron en el centro. Ariel pudo ver la mirada de él encenderse de ansiedad. Verine comenzó a caminar alrededor del par de hombres que había en medio del callejón, quienes no se daban cuenta del intercambio hostil que se desarrollaba junto a ellos.

-No pretendo hacerle daño. Es su alma la que me interesa –fijó su mirada en el hombre que estaba de pie–. Sabes que si lo mata, estará más cerca de mí que de ti, ¿no es verdad?

Ariel no contestó. Observó al hombre que estaba frente a él. Vestía una camiseta sudada de color gris, llena de agujeros y tenía manchas de aceite para coches por todas partes. Sostenía un revólver y no dejaba de apuntar hacia el individuo que permanecía en el suelo, inconsciente. Se acababa de guardar el dinero que había obtenido de la cartera de aquél desconocido. Sostenía el arma decidiendo aún si lo mataba o lo dejaba vivir.

-Tiene toda su vida para arrepentirse de sus pecados, ¿recuerdas? Él siempre perdona –respondió finalmente. -Él no esta aquí para perdonarlo ahora, ¿verdad?

Continuará…

Twitter: @RiveraEscritora

Ángeles y Demonios [Fragmento]

"Entonces Sophie sintió un escalofrío, algo le decía que debía voltear de inmediato. En cuanto se giró vio al demonio que preparaba una esfera envuelta en llamas rojas. Era un ataque poderoso, pero Sophie no se inmutó. Sabía lo que tenía que hacer, aunque nunca antes hubiera visto una esfera como aquella."

Ángeles y Demonios [Fragmento]

De pronto Sophie comenzó a sentir un hueco en el estómago, un repentino bajón como cuando vas en una montaña rusa y dejan la pendiente más alta para el final. Una corriente de electricidad le corrió por todo el cuerpo y después un escalofrío. Las manos comenzaron a hormiguearle, primero fue una sensación casi imperceptible, pero fue subiendo paulatinamente. Algo le decía que debía salir de ahí inmediatamente.

Me queda claro.

El Forastero.

Tenía veintidós años cuando lo vi por primera vez. Llevaba la camisa de cuadros azules y grises arremangada hasta los codos, los pantalones de mezclilla llenos de aserrín y las manos llenas de pequeñas cortadas. Su sonrisa amable me dio los buenos días, pero sus ojos reflejaban una tristeza que contagiaba, como si a través de ellos pudiera sentir su pena. A pesar de eso el primer recuerdo que guardé de él fue así: sonriendo.

Cuando cierro los ojos y recuerdo esos días, me gusta verlo así. Justo como lo vi la primera vez.

Siempre.

Famous [Fragmento]

Suspiré. Tenía un nudo en la garganta y me forcé a pasar saliva. -Nadie encuentra su alma gemela a los 18 años, Matt. -Yo sí.

Ángeles y Demonios [Fragmento]

Verine se levantó, observando a Ariel con la mirada centelleando de odio.

-Está a salvo –dijo Ariel, refiriéndose al hombre que acaba de desaparecer calle arriba. -Por ahora –respondió Verine con una mirada envenenada. Entrecerró los ojos antes de desaparecer.

Ariel suspiró antes de hacer lo mismo.

Ángeles y Demonios [Fragmento]

"Sophie no supo que pensar, de pronto se había sentido tan bien y ahora todo parecía haber cambiado. Dejó caer su cabeza entre sus manos. En el fondo sabía que ese beso cambiaría todo entre los dos, aunque después del año que Peter estaría fuera, tal vez las cosas habrían cambiado de cualquier forma."

Ángeles y Demonios

  Estaba corriendo a mitad de la calle, no podía explicar porque me sentía tan insegura, aún cuando iba de la mano de él. Corríamos sin mirar atrás, obsesionados con llegar a un sitio que parecía estar muy lejos. El viento soplaba con fuerza y las nubes estaban tan cerradas que era difícil saber si estaba amaneciendo o el atardecer estaba a punto de morir.

  De pronto un destello de luz nos hizo detenernos súbitamente y cubrirnos los ojos. No sabía de donde había salido aquello, pero el acto reflejo fue más rápido que todas las preguntas que se arremolinaban en mi cerebro. Me abrazó con fuerza y hundió mi rostro hacia sí para que no me cegara aquella luz. De pronto la luz nos alcanzó y pude ver una figura borrosa de color azulado que pasaba junto a nosotros. No se detuvo a vernos, sólo siguió corriendo hasta que tomé el valor de levantar la cabeza y fijar la vista en su objetivo.

  Una figura de color negro se alzaba a velocidad en nuestra dirección. No podía verle la cara y no estaba segura de que el tono rojizo de su piel fuera producto de un mal bronceado, sólo sabía que se dirigía hacia nosotros y eso no podía ser nada bueno. Justo cuando endurecí mi cuerpo para resistir el inminente impacto que haría al chocar con nosotros, escuché una voz que me decía: “Sophie, despierta.”

Y abrí los ojos.

Continuará...

Literary posters: Edgar Allan Poe.

(de Evan Robertson)

Oh, yes. Please!