Tumgik
#un invierno eterno cartas
un-invierno-eterno · 3 months
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Domingo 18 de febrero del 2024 (02:20 am)
Querido invierno eterno:
No se como comenzar, es de madrugada, hace un calor del infierno y tengo los ojos llenos de lágrimas de tanto llorar.
Han sido días difíciles en donde lo único que pienso es en como me voy a sui****r.
Estoy cansada y esta carta la escribo porque si llego a cometer ese acto y no me acuerdo de hacerla.
Sólo quería ser una persona que recibiera amor y que las personas que me atraían también quisieran conmigo.
Recuerdo como hace 10 años le rogaba al universo con que fuese mi año y encontrara al amor de mi vida porque a mis 16 años era el año en el que quería comenzar a pololear. Moría por sentir amor, por dedicar canciones de amor o las de Justin Bieber en ese entonces. Siempre quise ser una chica menos solitaria, yo también quería tener mi primera vez y comentarlo con mis amigas. Pero no me quedo nada más que ser la virgen del grupo y seguir siéndolo.
Esperé por años a un amor que sólo yo sentía cosas por él, él por mi... la nada misma. Lo esperé muchos años, cuando lo tuve cerca por un día hace casi 3 años sentí la tierra en mis pies, sentía la gravedad otra vez, volví a respirar y tenía muchas ganas de vivir. Sentía que por fin iba a poder hablar con él más seguido, creía que tenía posibilidades, pero pasaron como 2 meses y supe que tenía novia, me quería morir. Sentía que la vida era asquerosa, que mis sentimientos estaban muertos, que todo dolía y era horrible. Casi me suic*** en marzo del siguiente año. El dolor era tan grande e insoportable. Me daba hasta asco comer ese día. Lo esperé tantos años para que mi recompensa fuese verlo con otra.
Al año siguiente, un chico del cual me enganche muy rápido. Decidí confesarme porque la primera cita me había gustado mucho y me rechazó. Me quería morir, porque hace años que no sentía algo por alguien diferente. Ni dormí ese día y al rato cuando sacaba a mi perrito a pasear veo a esta otra persona con su pareja y me saluda por primera vez en la vida. Creo que como ese día nunca había tenido tantas ganas de morir. Me entré a la casa y lloré desconsoladamente en mi pieza. No podía soportar tanto dolor en mi corazón y mi alma. Sentía que todo era demasiado para mi, sentía que podía morir del dolor, aún recuerdo ese suceso y aunque ya se va a cumplir un año siento que el dolor sigue ahí. Sentía que dios se ensañaba conmigo y mis sentimientos. Me habían rechazado haces unas horas y después ver a la persona que esperé durante años con el amor de su vida fue la herida más dolorosa jamás existente.
¿Acaso me merecía todo ese dolor en mi alma?
No lo creo.
Después de intentar buscar el amor hace un año. Sólo pude comprobar que quizás no sea tan fácil para alguien como yo. Y que lo único que gane de todo eso fue un poco de experiencia, una baja autoestima, muchos kilos y una dismorfia extrema.
Anoche soñé con el Benja y no se en que época estábamos, pero en el sueño aún me sentía enamorada de él y trataba de darle en el gusto o tratar de llamar su atención mientras conversábamos. Me parecía tan lindo, gracioso, espíritu libre y esa vibra que emanaba la cual me volvía loca. Sentía su aroma y no me molestaba. En el sueño rogaba en mi mente en que fuese mío. Porque yo lo amaba tanto.
Después de pensar en todo eso. Sólo llegué a la conclusión de que yo soy una persona que quería amor, quería ser amada, quería besar hasta desgastar mis labios y que me besaran con la misma pasión, quería dar la mano, sentir abrazos, dormir al lado de la persona que amo, quería hacer el amor y que me hicieran sentir tan enamorada al punto de entregar todo de mi. Quería tanto ser amada, pero también quería casarme, tener hijos y estar con la persona que amo. Yo anhelaba enamorarme, compartir cosas tan básicas y humanas.
Yo sólo quería sentarme en aquella banca con una persona. La banca donde escribí que sólo quería estar con alguien, que me acompañará y que conversábamos de la vida, la misma banca donde escribí aquella carta a mis 21 años donde me sentía tan sola y sin amigos.
Quería salir, quería que me sacaran a ver atardeceres que tanto me gustan y en especial los de invierno porque el cielo se torna rosado y a veces cuando va llover pasa de un azul clarito a un azul oscuro precioso. En el que cada vez que miraba me imaginaba a un chico que me abrazaba o me besaba con el frío congelando mi nariz. Me encanta el invierno, pero no porque ame el frío, el frío me congelo un poco los sentimientos la primera vez que me enamoré con locura. Lo único que podía sentir más fuerte que mi enamoramiento era el frío, las heridas de mis manos y el dolor que el frío provocaba en mis huesos. Por eso me volví fan del invierno. Sentía que podía dormir un poco el amor que tanto quería entregar.
Yo sólo quería amar y ser amada por alguien que me gustará física y psicológicamente. Anhelaba con fuerzas ser amada. Yo lo quería a él y siempre quise que fuera él. Yo me veía una vida entera, pero lamentablemente tengo que vivir con el dolor del cual sabré que si llegara a pasar algo siempre estará el recuerdo de una que lo calo más fuerte.
Siempre quise besar a mis crushes, recuerdo como miré a cada uno en diferentes épocas de mi vida y lo único que quería era que fuesen parte de mi vida por lo menos un ratito.
De todos estos años, sólo a dos crushes logré besar y a los dos se los pedí de una forma bastante similar. Porque o si no jamás lo hubiesen hecho. El Benja dijo que había querido besarme desde antes, pero no lo dejé y nunca supe si era tan real o lo dijo por pena. Al Leo literalmente se lo pedí, por él nunca me hubiese ni tocado. Hasta creo que me tenía asco y me tenía demasiado odio. Le jodía que hasta le hablara o le contará algo sobre mi. Y a pesar de que aún no lo supero, tengo un lado consciente que me recuerda el asco y las cero ganas que me tenía. Pero era un tanto empatico y al tenerme lastima se presto un poco.
Y es que eso aprendí, no soy lo que ellos quieren. Tengo una cara de discapacidad horrible, no hablo coherente y por más que me esfuerce no soy o no fui lo que ellos querían. Siempre les gustaron mujeres completamente diferentes a mi. Pequeñas, delgadas, facciones bonitas, bonito color de piel, voz culta e interesante, inteligentes, experimentadas y llenas de vida.
Yo sólo tengo la inteligencia, soy mediana, gorda, deforme, un tono se voz horrible del cual todos los hombres que me han gustado o atraído se han burlado. Todos los chicos que me gustaron me hicieron sentir estúpida, inutil, fea, asquerosa y dos me hicieron sentir demasiado pendeja virgen.
Me usaron, humillaron, me ilusionarnos y me botaron porque que asco salir con una persona como yo.
Anhelaba con mi alma enamorarme algún día y ser correspondida.
Anhelaba verme bonita al menos una vez para ellos.
Anhelaba haberlos besado para haber quedado tranquila.
Anhelaba que me buscaran, siempre pensé que sucedería.
Anhelaba tener amigas y salir a miles de lugares, en especial ir a discotecas a bailar toda la noche.
Anhelaba verme bonita y deseable para los chicos.
Anhelaba tanto ser delgada, pero cada año subí y subí más de peso, nunca he logrado bajar más de 20 kilos :(
Anhelaba tener amigos a esta edad y salir a cuanto lugar.
Quería conocer más gente y lugares.
Quería salir, quería comer, quería enamorarme, quería besar y quería casarme.
Quería tantas cosas, sólo quería vivir maldita sea.
—Winter🌨
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caostalgia · 1 year
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Carta para un amor avellana.
Ciertamente te conocí en un otoño cálido, con hojas cubriendo calles y vientos estampados en sonrisas. Pero tú fuiste un cúmulo de estaciones.
Conocí tu risa, llena de un verano infinito. Calentando huecos que no sabía que estaban congelados, entrando en hipotermia. Calentando un corazón que dejaba de latir de amor.
Conocí tu sonrisa, llena de una primavera eterna. Me daba alergia, porque la mía iba en respuesta. Llenaba de color un cielo gris eterno, llenaba huecos profundos. Hacia florecer sentimientos de amor, de ti.
Conocí tus demonios, siempre en un invierno helado. Llenos de aristas y rotos, llenos de autenticidad y copos. Hiciste tu sufrir el mío, hiciste nevar en un suspiro.
Conocí tus ojos, avellanas de otoño. Tan vivos, tan tuyos. Unos que reconstruyeron cimientos y llenaron de colores los cielos. Unos que hicieron que el amor adquiera un matiz nuevo. Un matiz de ti, avellana. Un matiz de sentir(te).
Katastrophal
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caminamiriam · 1 year
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Querida Miriam:
¿Cómo te va? A mi mejor que hace unas semanas, aún me estoy recuperando, pero me siento inserta en la realidad, los días pasan más lento y no tengo borrones de memoria.
La lluvia se hizo presente hace unas semanas, siento que eso fue lo que me despertó del sueño eterno llamado metropolis, recordé que el agua también cae del cielo, la planta del balcón fue testigo de todo. La Marti me dijo que la quebrada se ve preciosa después de la lluvia, aumenta el caudal del río, nos prepararemos para la proxima y subiremos, estoy emocionada por eso.
Hace unas semanas ya que empecé a registrar las letras cuando salgo, me refiero a los carteles que me llaman la atención y las portadas de libros o revistas en la feria, comencé a recoger basura al final de la feria, llego tarde a proposito, para lograr sacar lo que pueda, mucha gente lo hace me he dado cuenta, estoy obsesionada con la idea de rescatar algo de toda la basura, me desespera saber que irá a basurales y afectará la vida de las poblaciones aledañas, ¿cómo será vivir en la basura? Es una experiencia que no tengo, no sé si logre entender lo que significa, pienso que nunca lo entenderé. Me lo cuestiono todo, cada acción que hago, me deprime claramente, pero no puedo evitarlo, a veces llego a cosas buenas.
Los materiales que encuentro me gustan mucho, me siento cómoda ocupandolos, la emoción de encontrar lo hace mil veces mejor, lo bueno es que lo he ocupado, hice mi libro de artista con esa basura, quedé destruida completa y absolutamente después de terminarlo, el tema era el dinero, me deprimió y afectó de maneras que no esperaba cuando empecé el proyecto, me pregunto si debí haber hecho otra cosa, mucha gente se sintió identificada con el trabajo, puede generar emociones fuertes a las personas que lo vieron, a veces pienso que vale la pena si puedo afectar a otras personas de esa manera. Pero me pregunto si esta forma de expresarme es sustentable a lo largo del tiempo o acabará por destruirme y acabar con mi vida literalmente.
Termino esta carta preguntandole sobre su vida Mirita, invitandola a recorrer ferias conmigo si es que quiere, no tiene que recoger basura si no quiere, ni siquiera tiene que comprar, solo su compañía bastará para sanarme un poco. Espero que el fríola despierte igual que a mi, que tenga una estufa y un té caliente para sobrevivir este invierno, la quiero mucho, se cuida.
Con cariño, iriel.
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recklesssoulthoughts · 2 months
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Encuentrame que te encuentro
Si no me encuentras en las hojas de tu cuaderno encuentrame en el recuerdo. En esas memorias llenas de risas y orgasmos que nos hicieron tocar el cielo, en ese invierno donde nuestros cuerpos conocieron lo eterno, por un instante en la zona de los recuerdos.
Mira, no nos hagamos esto que yo te pienso y te pienso, vos por tu lado ya me confesaste que no me podes soltar, y yo tampoco, no lo puedo negar, y entonces que hacemos perdiendo el tiempo? Mejor ven para aca que no tengo otra intencion que no sea amar, de sentir el murmullo de voz al susurrar, de abrazarte y que toda esa inteligencia que te desborda le aporte una bomba atomica a psiquis narcisista, porque no es tan narcisita como vos, cerota, que asi me encanta.
Y que te digo, no puedo hacer una nota tan larga, mejor te escribo una carta, que un verso no me alcanza, tampoco me hace falta el universo porque se queda chico al lado de tu risa, esa que me paraliza y me hipnotiza, no me hace ver colores pero hace alivianar todos mis dolores.
Sus mentiras ya no se si existian o solo eran cosa mia por mis problemas de confianza,y es que sin eso ambos sabemos que nossa situacion no avanza, no avanzar, no importa como querramos hacerla danzar.. y aqui estoy en mi cuarto, evitando a toda costa que se me suba el gato, porque hasta ese pirobo me recuerda vos.
El punto es que ya perdi el punto como perdi la cabeza porque la usaste como un revolver, ahora de la nada siento el golpe, de tu ausencia, de tu falta pero quiero tratar de pensar que es porque mucho nos aguarda
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puchesauria13 · 8 months
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Miércoles 27 de septiembre
El invierno, volvió a ser frío con su partida. Transcurren las horas en el reloj que poco a poco se ha de volver más lento, no estoy segura si su razón es porque las baterías ya no le funcionan o es porque quiere acompañarme en mi agonía de vivir en medio del frío clima que se siente aturdidor porque ya no está él, me gusta creer que el compañero que me acompaña con su melodía irritante, también fue dejado por alguien que aún espera. Peor aún, ya se le acaba su tiempo estimado para aquel regreso y desea extender el transcurso de las manecillas con el fin de que llegue a tiempo. Quién ha de saber.
Realmente quise intentarlo, lucharlo, entregarme al amor de lleno, pero a veces sentir demasiado puede resultar un problema, incluso para quienes te aman. Dicen estar ahí y trabajarlo, pero aquí va la verdad: todos se van. Es que piénsalo, nadie se jugará su salud mental por ti, nadie querrá convivir con una persona altamente sensible y no arrepentirse en el intento. Absolutamente nadie se pondrá en tus zapatos para detenerse a pensar "cómo lo está sintiendo ella", ese sólo ha de ser un cruel sueño que no llega a tu realidad. Jamás. No importa cuando lo veamos en las películas o lo leamos en libros, muy pocas veces esa utopía es nuestra utopía.
Pero bueno, tienes el "vivieron felices por siempre" o tienes una buena obra de arte. La vida ha de ser todo un juego de azar para aquellos que se creen artistas. Ya pasó más de 15 minutos en este eterno reloj, vamos a ver cuanto pasó de verdad: ¡47 minutos! Malditos 47 minutos donde sólo hablé de mis desgracias y absolutamente nadie cruzó las puertas de esta cafetería, bueno, aunque qué esperanzas tengo si ya van a ser las 23:00, todos quieren ir a sus casas, hablar con esa persona que le revuelve la vida o soñar una vida juntos. Yo en cambio, evito a toda costa dormir, si lo hago, sueño con él, veo sus bellos ojos café cobrizo cuando son bañados por el sol mismo, veo su sonrisa y cómo tienen texturas muy bellas en sus labios, veo sus manos que tienen multiples caminos trazados, veo las ondas de sus cabellos alborotados, veo su torzo y luego veo el conjunto de lo que es para recordar porqué me he enamorado.
Maldito 3 de marzo, la verdad maldigo ese día por querer soltar una carga emocional que me abrió las puertas de par a par para permitirme sentir de nuevo, para permitirme entregar y para decidir ser. A veces, creo que todo estaba tan bien así, confesandole mi amor cuando estaba ebria o diciendo que quería un chico como él de pareja, pero nunca le decía que lo que más yo quería era a él. Porque me conzco, y él también me conoce, podría destruirme con unas cuantas palabras cuando fuese el momento necesario. Y llevar al limite a una persona puede hacer que si tiene los medios te desruya en cuestión de segundos. Esto poco a poco se vuelve una carta de despedida, porque ya no quiero pensarle, mucho menos quiero sentir que lentamente se me es clavado espinas en el pecho esperando una respuesta que jamás llegará. No sé si me despido de él o de la vida misma, pero de algo me tengo que despedir, porque a decir verdad, este dolor en cuestiones de soportar, no estoy soportando. Pero vamos un día a la vez.
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alexzander97 · 9 months
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Y el amor que transforma la ceniza en madera BENJAMÍN PRADA.
Cartas para un amor eterno
Imagino otra vez tus labios tapándome los te amo con un beso,
tus manos tocando ahí, justito donde nadie más me tocara,
las caricias que se dan con tu nombre y apellido,
amar es querer correr en dirección contraria a los olvidos,
despertar un día y ver tu rostro y saber que así sonríe el amor,
que dulce sabe el café con dos cucharaditas de ti,
saber que el invierno que viene tiene tus formas,
hay adjetivos dedicados a tu nombre volando de aquí a allá,
poemas que escribir de solo uno de tus cabellos y todo un libro de poemas dedicados a tu piel,
pareciere que el tiempo se detiene siempre en el tono de tu voz,
y haces girar mi mundo con tan solo una sonrisa,
imagino que un día, sea real, sueño o fantasia te veré entrar de nuevo,
mirándote más hermosa que nunca y sonriendo,
diciéndome te amo sin mencionar palabra alguna.
-Dharius Vidal
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poetamudo · 2 years
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Cuando termine el verano
El tiempo es tan relativo, tan medible y a la vez tan subjetivo, dos años o tres, ya no recuerdo hace cuanto miré tus ojos por última vez. El último beso, un beso sin ganas, la última caricia, una forzada.
Es hermoso y doloroso recordarte, las lágrimas quieren salir pero solo consigo arder mis ojos. Maldita memoria, una enemiga en común, al menos es algo que compartimos, aunque pensándolo mejor no puedo condenar mis últimos recursos para pensarte, para traer a mi mente una vez más tus finos labios, tu piel blanca como la nieve, tu cabello mas oscuro que la noche.
Se que te dejé, y esperé que me buscaras, espere que uno de los dos admitiera su error pero no aposté por mi, porque sabía que no había marcha atrás, si volteaba a mirarte, no sería con los ojos de siempre, no serían mis brazos recibiéndote, tal vez solo quise cambiar tu último recuerdo de mi, tal vez me rendí antes de tiempo, cuando entre mi sueño y la vigilia me debatía a muerte con mi mente jurarte amor eterno, y aunque las hojas de mis cartas ya estén quemadas, aunque las letras en tinta ya son cenizas, la única verdad que mereces, la que sigue abriéndose un hueco en mi corazón es que no hay lugar para alguien más, hace tiempo lo supe, que era una pérdida de tiempo buscar amor, porque ya lo tenía todo en ti, una casa, un patio enorme y unos pequeños idiotas jugando en los columpios, uno con tu carita y mi nariz, otra con mis cejas y tu boca, y esa imagen tan vívida, tan real e imaginaria fue lo que entendí, los sueños caen como gotas en mi frente y solo tienen tu nombre impreso, es así como te veo cada día sin tenernos.
Te dejé una letra en invierno, un último adiós, o tal vez se la llevó el viento y no la leíste, fue mi forma de decirte que te amo, que no hay nada entre nosotros que sea mas grande que ese lazo creado, el que intente cortar con tijeras tantas veces y solo me hice daño en las manos. No importa si pasaron dos o tres años, no importa si se apaga el sol y esta ciudad cae en nuestros pies, no importa si renuncio a mi ego, porque tu siempre fuiste lo más importante, no importa si estas besando otros labios, juro que te llamaré cuando termine el verano.
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neuroconflictos · 3 years
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... Congelado, tal lluvia que ha de caer en la noche más fría de un invierno eterno. Mi corazón se fue en un viaje sin retorno al jardín del olvido más profundo; ella fue la ilusión de un mañana sin grises, y la razón de un sol naciente sobre las montañas. No fui más que un juego de tres, en un marchitar infinito del desamor más desagradable. Mi vida se partió sobre un cuchillo de doble filo que desangró de mil maneras mi añoranza. 
Yo, tal que frío en las madrugadas de diciembre; ella, tal que sepultura en campo santo. 
Despedida sabor amargo, destilado con lágrimas saladas y tinta sangrienta corriendo por venas palpitantes a la luz de una vela a medio apagar. 
Amor... ¿Amor? Nada. Nunca fue, nunca será.
Prometí dejar el licor, prometí guardar mi maldad en un rincón a que se desarmara mientras miraba de cerca mi esperanza. Ya no doy más en un cuarto a punto de marchitar en una oscuridad absoluta.
La vida... En este punto sin retorno no fue más que momentos desenfocados en una mente a punto de reventar. La miseria del pasado fundido en un deseo incontrolable de volver, y una frustración incontenible de la fatal imposibilidad. 
Ella, yo; otro. 
Mis palabras quedarán manchadas con la vergüenza de ser y no haber sido suficiente, ni para ella, ni para mí. Y así, yacerá el testamento del retorno de lo guardado en una esquina, de la maldad contenida, y el irremediable devenir. 
Vida, muerte; frío será el final, igual que este pequeño cuarto al borde de caer en la nada, sin una vela que lo ilumine más. 
... (Carta jamás leída, presagiando el horrible deceso de los involucrados.)
- Mr. Cat
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danielac1world · 3 years
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Pienso sobre las personas, las que vienen a tu vida llenándote de enigmas, plantando interrogantes, sembrando signos de pregunta, para que cada afirmación se destruya con la misma intensidad que una copa de cristal contra el suelo; pienso que los enigmas existen, y a veces tienen nombre y unos ojos intensos, te susurran cosas que no entiendes del todo, y plantan un universo a tu alrededor, que resulta un carrusel sin frenos, y aunque te dejen mareada y desordenada, la adrenalina de estar de nuevo en el suelo es la misma que una montaña rusa de emociones… una y otra vez se te erizara la piel con el viento.
Luego están las tormentas naturales, esos tornados que vienen para arrasar desde la primer mirada con tus cimientos, desacomodando ladrillos como un juego en el olvido, para que recuerdes que las cosas tenían un orden pero ya no es el mismo; vientos huracanados con aroma a paz, pero solo en promesa, ¿ y lo peor?, es que no se llevan nada, y te dejan con las sillas fuera de la casa, los papeles regados en un intento de collage futurista… y cuantas veces habré preparado la escoba para barrer de a poquito los destrozos, pero ya no soy una casa sino un campo estrellado, y los tornados ya no pasan cuando te has acostumbrado a no crear cimientos. Aunque con los terremotos no me sucedió lo mismo, porque hay personas que te hacen temblar desde el por qué hasta el cómo, te miran a los ojos y son capaces de justificarte el mundo… ya hubiera querido yo tener el universo en la palma de mi mano, pero a veces los movimientos son tan fuertes que te arrebatan hasta las constelaciones de la mirada; hay temblores humanos que te abrazan sin gracias y te consumen como el fuego, o quizás esos eran los incendios, porque las personas se te mezclan, después de los primeros torbellinos.
Y pienso en las personas, porque me había acostumbrado a clasificar verdades absolutas, a crear mis propias reglas de soledad conservadora, y divagar sobre cuánto dura la eternidad si no agarras una mano con otro ritmo de tiempo, hasta que, no, no me sujetaron de la mano a la primera, pero si me miraron a los ojos, y entonces no hubo fuego ni viento, entonces no era un campo desierto, ni un mareo instantáneo, y mi alma era una casa con los cimientos tranquilos, y tu mirada era un mar sin sal y con calma, que yo podía, puedo, beber de tus labios cuando la sed que tengo en mente es un te extraño, y no queda gota en mi cuerpo que no quiera ser un tsunami de caricias, sin dejar de sumergirme en el mar de tu mirada.
Pienso, pienso en las personas porque todo era algo hasta que me encontré despierta en medio de la oscuridad, y te tenía a mi lado, y entonces todo era nada, porque los pensamientos se disipan buscando los lunares de tu espalda o las marcas que aún no he detallado, como si no supiera que la gente puede ser un mapa de misterios oculto a plena vista, hasta que mis ojos dieron con el lunar que siempre señalo, en algún momento de tu cuerpo en reposo.
Y para mi el invierno era invierno, y las personas eran estaciones fijas, como yo en eterno otoño, pretendiendo ser primavera, hasta que supe que tus besos traían la energía del verano, tus manos la vitalidad de la primavera, y tus palabras nocturnas la poesía que rescato del frío, entonces las personas podían ser lo que quisieran, porque supe que me seguiría importando más saber de que color es lo que piensas, cuando mis palabras son verdes, de que aromas son tus sueños cuando yo me obsesiono con metas entre rosas con espinas, de que valor es la paciencia cuando mis manos están heladas y entre regaños cariñosos me envuelves del frío y mi terquedad es igual a la naturaleza de un niño curioso; de que sabor es la empatía cuando mi melancolía equivale a un trozo de chocolate semi amargo para una noche larga, y tus abrazos son la sonrisa después de una taza de café que promete esperanza… entonces, las personas pueden ser lo que quieran, porque yo no sé quien eres, ni como somos, pero sé que te quiero, como tú me enseñaste a querer, y planeo aprender en ese laberinto, lo que dure la curiosidad con la sed de mi ser, por el mar sin sal de tu mirada en calma, y el calor de tu piel, reavivando entre risas mis manos heladas.
-danielac1world ~Carta al querer~
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miscartasdeamor · 3 years
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Resumen de esta historia contada en cartas
Justo en abril, el 11 de abril para ser exacta, por la mañana, todo parecía un día más, estaba resignada a iniciar un nuevo trabajo, algo inferior a mis habilidades y conocimientos, a mi experiencia profesional, pero que me daba libertad, anonimato, un ocultamiento del mundo para proteger mis sentimientos, sin la carga de un pasado momentáneamente, la oportunidad de reinventarme e iniciar una etapa nueva.
Salí de casa con desgana, arrastrando los pies en cada paso, deseando no llegar, sentía un poco de recelo a lo que podría encontrar al llegar, la gente no se me da y seguro habría muchas personas, definitivamente debería tener interacción con los demás de una u otra forma, asi que tarde demasiado en caminar las 6 calles del paradero al lugar, y solo note que era primavera por el calor que hacía, estaba escurriendo en sudor, tanto que aun después de entrar al edificio con aire acondicionado seguía sudando, que al llegar a la sala de capacitación me causo que todos me notaran, lo cual no me agrado, era justo lo contrario a lo que quería; y entonces paso algo totalmente inesperado, alce la vista justo a mi lado izquierdo y la vi, su silueta se clavó en mis pupilas, empecé a sudar de nuevo pero esta vez por nervios, euforia y adrenalina, fue solo un instante, casi lo que dura un parpadeo, el tiempo que la mire, como el espejismo de un oasis en el desierto, ella era tan hermosa, imperfectamente perfecta para mí, delgada, cabello castaño, una cara muy linda y me dio la impresión de que tiene una linda sonrisa, muy tierna, aunque estaba muy seria en ese momento, sus manos delgadas casi frágiles, los ojos cafés y de mirada profunda, creo que también me miro un instante, pero el miedo se apodero de mí, era imposible, se parecía tanto, pero definitivo no era ella, esta chica era real, y los sueños… bueno; me impresiono tanto que mi cerebro se colapsó y apenas y preste atención a todo lo demás, las palabras, personas dejaron de tener sentido, mi concentración era para no mirarla, no pensar, no sentir eso que sentía, podía caer en el más inesperado y exquisito peligro, los japoneses le llaman “koi no yokan” que es la sensación de cuando conoces a alguien y sabes que te vas a enamorar irremediablemente de esa persona. Como cuando una canción desconocida se aloja en tu mente y suena una y otra vez entre los pensamientos, se vuelve suspiros y se armoniza en los latidos del corazón.
No fue hasta que salí de esa introducción del trabajo para volver a casa, que logre calmarme y logre centrarme en mí, el plan que tenia que seguir para tratar de no recaer, encontrarle un sentido a todo y lograr superar mi apatía, entonces la volví a ver, esta vez caminaba frente a mí, su andar me hipnotizo, mis pasos se sincronizaron con los suyos sin darme cuenta, hasta que note la cercanía entre las dos y antes de poder reaccionar termine en el mismo cruce a mitad de la avenida, el semáforo estaba en rojo y los autos pasaban a nuestro lado, era consciente y no al mismo tiempo de todo, mire a mi derecha para ver si habría posibilidad de cruzar después del siguiente coche, en ese momento ella me miro, y cuando su mirada y la mía se cruzaron me sonrió, ese simple gesto me deslumbro, su sonrisa era muy cálida, como el sol de la primavera, algo en mi se descongelo, miles de mariposas subieron desde mi estómago hasta mi garganta y la respuesta lógica de mi cuerpo fue la sensación de correr, pero no podía moverme, no quería dejar de verla sonreír, y me di cuenta enseguida, me gustaba, en verdad, sin razón alguna, sin lógica, y sentí miedo por todo lo que eso podría implicar, así que intente correr pero seguía sin poderme mover, no sé cuánto tiempo paso, porque fue como si el tiempo se hubiera detenido, para el mundo fueron segundos entre el cambio de las luces del semáforo, pero para mí fue un eon, tan pronto comenzó a caminar me moví también e intente caminar más rápido para tratar de alejarme, tenía que huir, pero ¿Cómo corres de tu propio corazón?
Al llegar a la esquina cerca de la avenida y el paradero, me di cuenta que caminaba casi junto a mi lado, la mire muy rápido y me pareció que me sonrió de nuevo, mi corazon se detuvo y se acelero, esa sensación cálida de nuevo, entonces cruce la calle tan rápido como pude, como conejo asustado, del otro lado mire de nuevo y estamos a lados opuestos, fue similar a ver un reflejo. Desde la parada del camión la mire hasta que se fue.
Me propuse que los siguientes días de la capacitación trataría de sentarme cerca, pero con cierta distancia, pasar inadvertida, quería conocerla, observarla, ¿saber quién es? ¿Cómo es? Quiero conocerla.
El primer día se grabó en mi memoria de por vida, porque paso lo más inesperado que podría pasar, descubrí que tenemos el mismo cumpleaños, fue algo tan raro, hacían la clásica lista de asistencia donde debías dar tu nombre y fecha de cumpleaños, todos lo decían sin la mínima importancia, pero cuando me tocó a mí, ella … estaba sentada justo frente a mí, que al escucharlo se giró 180 en la silla tan rápido que cuando me di cuenta me sujeto las manos entre las suyas estaba sonriendo emocionada y me dijo “yo también cumplo años ese día, tenemos que hacer algo juntas para festejarlo”, esa cara tan linda y esa sonrisa tan tierna y cálida que brillaba con los braquetes , toda llena de emoción, que con esa frase terminaron de clavar la flecha que cupido había lanzado el día anterior.
Y sin más me deje llevar, nos comenzamos a tratar más, yo me sentaba más cerca de ella, en la salida caminábamos juntas hasta el paradero del camión, teníamos platicas de cosas tan cotidianas y simples que me permitían conocerla un poco más, me sorprendió su inteligencia, su madures, su forma de ver algunas cosas del mundo, la fluidez con que desarrollaba un tema, sus pensamientos, como el hecho de trabajar en el cine por las tardes y querer hacer este trabajo en la mañana para poder ahorrar y comprarse un coche, además que admito me encanta el tono de su voz, podía escucharla todo el camino hablar de lo que sea, tanto que se volvió una costumbre de todos los días, la plática en esa caminata hacia que el tramo de 6 calles que una vez me pareció eterno, ahora fuera tan breve, que deseaba se alargara más, que me quedaba con ella acompañándola hasta que se subía a la combi para ir a su casa, y me daba un beso en la mejilla en la despedida.
Las mañanas se volvían tan esperadas, era la única razón que tenía para levantarme, enserio me daban ganas de llegar a trabajar, solo para verla aunque solo tuviera esa platica del camino a casa, afortunadamente pasábamos más tiempo que solo ese, poco a poco nos llevábamos más y mejor, que un día me dijo “ven más temprano yo llego muy temprano porque desayuno aquí”, y lo empecé hacer, me levantaba antes y al bajar del camión casi corría para llegar, a veces ella ya estaba allí y otras yo llegaba antes, en ocasiones la veía tan cansada que me moría de ternura con su cara adormilada, cuando un día me vio y se me tiro encima, su brazos alrededor de mi cuello, me estaba abrazando, pero se dejó caer sobre mí, pensé que pesaría más, pero no sé si enserio es tan flaquita o yo estaba tan eufórica de la emoción que la sentía tan ligera entre mis brazos, la abrace con toda la ternura que me fue posible, pero aun sentía miedo, no sé porque, es tan raro, quería quedarme así con ella, abrazándola, cuidándola, sosteniéndola con todo mi amor, pero temía lastimarla, a veces soy un cactus, un monstro.
Sin darme cuenta empecé a llevarle chocolates, sin falta cada mañana, pasaba al oxxo y compraba dos, esperaba verla para dárselo, llenaba mi termo de café para compartirle porque imaginaba que tendría sueño y lo necesitaría, realmente compartíamos todo, papitas, refrescos, era lindo, de repente ya no era mío o suyo sino que todo era nuestro, me gustaba, enserio que si.
Cada uno de esos momentos tan rutinarios eran especiales, porque cada día descubría algo nuevo de ella, y entonces me di cuenta, que desde el momento en que me sonrió ese primer día, empecé a notar las flores, muchas casas tenían arboles con flores de mayo, blancas y rojas, había otros tipos de flores moradas, una buganvilia por allí, las casas eran coloridas, había pájaros de tantos tamaños, desde los clásicos negros hasta unos pequeños con plumaje azul, los arboles de diferentes tonos de verde en sus follajes, y no solo en allí, en toda la ciudad, desde cuando había tantos colores, todo era más brillante, como cuando en una película estas en una secuencia de blanco y negro y por un efecto de énfasis en las escenas clímax cambia a color, lo más extraño es que yo sonreía, ya no era fingido enserio sonreía, tenía ganas de hacerlo.
No sé si ella sea esa chica con la que una vez soñé, que desee conocer, lo que si se es que quiero pasar tanto tiempo con ella como sea posible, por primera vez no siento necesidad de nada más que estar con ella, de esos momentos, no creo que sea la cura a mi oscuridad, eso me corresponde a mí, pero sin duda saca algo de mí que no sabía que podía volver a surgir, tanta luz, esperanza, alegría, ella trajo la primavera consigo, y quisiera estar cerca las 4 estaciones aun cuando me sea difícil resistir el invierno.
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un-invierno-eterno · 19 days
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Lunes 22 de abril del 2024 23:42pm
Querido Niño:
Ya van casi 2 semanas sin ti, mañana se cumplen las 2.
Hace 2 semanas te tenía durmiendo a los pies de mi cama y te extraño tanto.
Ayer sentí tu olor al despertar, creí que todo había sido una maldita pesadilla y que estabas conmigo sano y salvo. Pero no, solo me viniste a visitar unos segundos.
Últimamente le hago cariño a los gatos y lo único que hacen es hacerme daño, el Vicente se engancho de mi cuello el otro día y la Mimi me mordió la mano por querer abrazarla. Tu nunca me hubieras hecho eso.
Dios sabe que le gritaría al cielo para que te traiga conmigo otra vez.
Creeme no quería dormirte, TE LO JURO QUE NO, YO TE AMABA CON MI VIDA, MI ALMA Y MIS PUTOS HUESOS.
Eras mi día, mi tarde y mis noches. Estuve contigo cuando ya no dabas más y creía que te traería de vuelta a la casa y saldrías a pasear, te daría de comer e iríamos a dormir juntos. Pero ya no estabas quieto, estabas sufriendo por la bronquitis crónica al no llevarte a tiempo al veterinario. Y es que los papás no me hacían caso, mamá te quiso medicar a la mala y yo sólo me deje influenciar por pobre y por miedo.
Te mejoraste, te bañé y de caiste de nuevo pero para peor, luchaste con tu resfriaste una semana y media hasta que notaron que de verdad era grave cuando tú quisiste irte a la pieza con ellos y pedirles ayuda.
Ahí por fin entendieron.
Pero ya era demasiado tarde.
Y yo juro que hice de todo para que me creyeran, pero sentía que está vez ya no mejorarias, que quizás ya tendrías que irte.
Viví toda tu enfermedad, tus días respirando de la mierda, viéndote caminar por la casa enojado, con dolores a mil en tu cuerpo, con tu corazón a punto de explotar, con tu alma lejos de tu cuerpo y haciendo pipí a cantidades que ya no eran normales.
Buscabas frío y calor, no querías beber agua, no querías comer pero te ayude a que lo hicieras, te vi sangrar por las narices, te vi vomitar sangre, te vi vomitar flemas, mocos verdes, rojos y rosados de tu nariz. Vi como hasta hacías sangre.
Las secreciones en tu cuerpo ya no eran normales, te vi llorar del dolor y un día te escuché quejarte en medio de tu respiros ahogados. Ese día quería morirme porque no soportaba la forma en la que dios te había elegido para morir.
Nunca quise que sufrieras y lo hizo con todas las de la ley, ví como te dolía todo, y nunca me pusiste un diente encima. Te abrazaba y me lo aceptabas aunque te dolieran los pulmones, los bronquios y el corazón. Porque me amabas tal y como yo lo hacía.
Dios, te eligió de esta forma porque ninguno de los dos nos queríamos soltar y fue cruel. Te dio metástasis, en el veterinario no lo quisieron aclarar así, pero al ver tu radiografía supe que ya no eras mío y que se venía lo peor.
Quería que te fueras solito, pero ya no respirabas, te estabas haciendo pipí solito y tenías mocos verdes horrorosos. Ni siquiera dormías.
Yo creía que ese día estarías de vuelta conmigo en la casa, pero no. Tuve que dejarte ahí porque te dormi y elegí la opción de incinerarte, ya que no iba a poder soportar el poner tu cuerpo en la tierra.
Me daba pánico.
Después de nueve días llegaste otra vez, pero en una caja, con una placa ordinaria con tu precioso nombre, sin fechas de nada como habían prometido.
Pero por fin tenía algo de ti cerca de mi.
Te he llorado todos los días, cada vez que te recuerdo porque extraño abrazarte y sentir tu olor a perrito viejo. Ese aroma dulce con olor a perro. Era cálido, era acogedor y me hacía sentir tranquila.
Pero no estás y me duele cada segundo, escribo esto llorando con los mocos colgando, acostada en mi cama en posición fetal en dirección hacia la ventana. Me imagino que estás en la curvita de mis piernas dándome calor, pero no estás.
Eras tan calentito, tan acogedor, tan reconfortante, que hasta pienso en tener otro perro pero tengo miedo de que sea traicionero y no me dé el mismo amor que tú me entregaste.
Tu eras maravilloso, me amabas y me respetabas.
Te hiciste cargo de mi con meses de vida, hiciste que mi hermano no me volviera a poner una mano encima, me defendías con tus 80 cm de largo y tus 45 cm de largo.
Eras un petizo precioso, rubio, coludo, de patitas chuecas, orejas grandes y peluditas. Cómo un cocker, pero mestizo ajajajaja.
Te tuve que dormir con 14 años y 7 meses.
Fue duro, te juro que no quería, pero estabas hasta la mierda de mal.
Extraño tu calor, tu vibra, tus chistes, tu buena onda, tu alma de niño, tu respeto, tu amor incondicional, tu amistad, tu fortaleza, tu compañía y tu fidelidad.
Eras el ser más puro de mi vida, contigo por fin sentí que un ser en todo el mundo tuvo piedad de mi, de mis sentimientos, de mi sensibilidad y de mi forma de querer.
Me amaste con paciencia.
Y te juro que eres el unico que hizo eso.
Ya no se a quien contarle mis cosas y sentí que me escuchan, que me quieren y que me acompañan en todo. Tu estabas en todos lados conmigo, hasta cuándo almorzaba sola. Cuando mis papás se iban al sur, ahí estabas tu a mi lado durmiendo y acompañándome. Ahora no estás y siento frío, una pena enorme, me siento vacia, incomprendida y enfurecida.
Eras mi alma, el calor que siempre me había faltado de niña, la compañía y el amor que nadie me daba. Te cuento que otra vez le temo a la oscuridad, me volví ansiosa e insegura al igual como solía ser antes de que estuvieras en mi vida. Cómo que volví a tener 10 años. Te fuiste y en vez de evolucionar me hice pequeña e indefensa otra vez.
No estás y otra vez soy miserable, vacía y sin amor suficiente.
Se que estás descansado y lo siento por molestarte tanto. Pero te extraño tanto, la casa se siente una mierda fría y vacía sin ti.
Te amo tanto mi bebé.
Espero que cuando me vaya de aquí me recibas en el cielo, porque contigo lo sentiré un cielo seguro. Fuiste mi pilar fundamental en mi niñez, adolescencia e iniciada adultez.
Fuiste la luz de mi camino y la crianza que tanto necesitaba.
Muchas gracias por tu bendita existencia.
Te amo demasiado.
Sé que lo diste todo para quedarte, pero lamentablemente ya no se podía hacer nada más.
"con besos de amor llenos de agradecimiento y mucha pena..."
–Winter❄️
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xluisxalvarezx · 3 years
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¿Te puedo alcanzar?
Mis palabras son cortas y el tiempo vuela, los días pasan y yo no encuentro la forma de hacerlo, tengo tanto que decirte pero me pierdo en el camino, quizá tu foto en mi fondo de pantalla sea la que provoca esta necesidad de tenerte aunque sea un segundo más, te necesito
Miro por la ventana en este invierno pasajero que se vuelve eterno por tu ausencia, siento tu piel aunque no estás, saboreo tus besos pues los grabaste en mi piel, y recuerdo la última caricia, tu mano entre la mía antes de la partida; mis palabras son cortas y son entre la distancia de un amor eterno, no te quería perder.
Mis cartas ya no sirven de nada, ni las veces que te dije cuánto te amaba al oído, ya no te puedo llamar, ni contarte cuentos en la cama de aquel triste hospital, mis días y noches se van entre una condena eterna, mirar tus fotos sonriendo es mi único consuelo, pero te extraño tanto que no puedo soportar el duelo.
No pueden pedir que no extrañe a quien llegue a amar, entre estas cartas llenas de amor, nuestra cama de secretos, nuestras historias y momentos, solo te puedo preguntar ¿te puedo alcanzar?
¡Mírame y apiadate de mi Dios!
Luis Alvarez
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"Querido amor:
He madurado y crecido al compás del tiempo, al compás de las temporadas, pero amor, no puedo llamarte ex-amor, porque no he dejado de amarte y creo que nunca lo haré... que loco eres amor, yo antes me conformaba con el por siempre pero ahora me conformo con una vez más, con una tarde o día o noche, donde éramos ingenuos y nos reíamos de la vida, que loco eres amor, porque antes no luchaba por lo que me hacía bien, me conformaba y ahora, lucho por un final que solo los cuentos de hadas hablan, y suena loco pero tu eres la magia que todo el mundo habla, que solo lo decimos pero nunca vimos, y yo lo veo en ti, veo la magia y lo maravilloso.
Pero querido amor no vine a despedirme, por que eso es imposible, siempre estarás; el amor no tiene forma, no tiene olor, ni tampoco nombre, pero es mentira, porque lo encontré, se como es, se como huele y se como se lo llaman, no hablare de su amor porque es un enigma, pero yo si hablaré del mío y de lo orgullosa que estoy de él, de lo encantada que estoy, que cuando lo miro es el mismísimo universo quedo perpleja, que cuando estoy cerca de ese amor me agarra electricidad y cuando pienso en el todo mi cuerpo siente conquillas, pero no mentiré, llore por el, pero no puedo odiarlo, ¿como podes odiar a alguien que amaste y amas?, sonara mentira pero nunca me pasó esto, un amor como el que siento por el es inigualable, pero tampoco quiero odiar porque nunca me a hecho daño, siempre me hizo bien, solo que ahora es distinto, como el tiempo y como el. Te prometí no hacerte cartas amor, prometí encerrar todo este sentimiento, ¿pero como se puede guardar tanto amor?, el luchar no siempre significa perder, siempre ganas algo, juro que lograre tenerte de nuevo, no creo ya en frases clichés que leo por todos lados, porque el amor nunca se explica y lo que uno siente nunca será igual para el otro.
Así que, querido amor, no eres ex-amor, eres amor eterno que te prometí en aquel invierno, eres la risa que cuando veo me dan ganas de bailar, porque eres loco amor, pero siempre enamorada de amor, vos, de que siempre hable y hablo con ternura y que, aunque no quieras que esté enamorada de vos y sufra o no se, lo estoy, un amor que es verdadero ni el tiempo ni distancia se deshacera , seguirá presente. Hoy te escribo estas palabras sin esperar nada a cambio, solo con una condición o dos, no me mires diferente por el simple echo de quererte, porque negar y negarle el sentimiento de una persona que te quiere, deja que te amen y que seas el ser maravilloso de la otra persona; y dos, ama, que sean el nuevo comienzo, nada que ocurrió por destino será disuelto en un momento, nada puede suceder de nuevo solo si aprender andar juntos... el nuevo comienzo es conocerse y amarse de nuevo, es la oportunidad que siempre dijiste y que quedo en el olimpo de las palabras. Crea el nuevo comienzo si sabes y se ve que te ama.
Querido amor deja que te ame, deja de protéjanme de algo que nunca sucedió, olvida los miedo y arriésgate nada se pierde, la vida es corta o puede ser larga tu decides, te quiero amor."
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diarioerrante · 2 years
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A ella - primera carta
Medellín, noviembre de la década sin pandemia
Mi querida amiga, perdón por escribir nuevamente, pero temo que nos está asaltando el olvido...
Han pasado tantos años que el tiempo y la distancia no me permiten recordar tu última carta. La historia que aún recuerdo, fue aquella que vivimos una noche de noviembre en esas lejanas tierras. Me cuesta imaginar los detalles, sin embargo, no olvido esa larga y desenfrenada actitud aventurera con la que llegaste a mi vida. Nunca llegue a ser bueno con el humor, pero logre que sonrieras durante esa extendida noche de invierno. Las horas fueron tan frágiles que nos asaltó la madrugada, y al final, sin refugio certero, terminamos por amanecer frente a las bancas de ese centro comercial. Ahí, en el norte de esa ciudad ajena y que no descansaba, fuimos dos almas viajeras que estaban por iniciar una historia que terminaría pronto.
Tiempo después, en diciembre, solo lloraste en silencio al ver mi partida. Las pocas memorias que aún conservo no dejan de mostrarme que ese día no pronunciaste ninguna palabra, te sentaste a despedirte con el rostro empapado
La historia... nuestra historia, fue temporalmente injusta, pero suficientemente inigualable para recordarla en este momento. Un día de estos escribiré nuestros relatos, quizá y tan solo quizá, con el fin de que conozcas mi versión de ese encuentro. Me parece, a juzgar por la distancia y el olvido, que terminaste por escuchar palabras que nunca dije... lamento eso, muchas veces los silencios crean versiones injustas que terminan por crear verdades irreales. Sin importar lo detalles, lo único real es que esa la larga interpretación del silencio creo narrativas ficticias que nos llevaron a esto... palabras inexistentes, silencios eternos y una amarga sensación de no saber en dónde estás.
Me escribiste para decirme que te irías a Israel, tal vez para forjarte un camino o un destino. Luego, la pandemia abordó cualquier realidad conocida y perdí toda comunicación contigo. Duele desconocer si estás bien y si el viento aún sigue enredando ese cabello rojizo con el que te conocí. Hasta ese año, solo conservaba de ti un número telefónico que quedó descontinuado. Ahora, durante algunas madrugadas en el que el insomnio me asalta no dejo de pensarte, aún me pregunto si emprendiste ese viaje a Capadocia y Estambul que tanto deseabas, o si te viste forzada a regresar a la tierra en donde dejaste el ombligo.
Sea cual sea el trayecto, en el fondo espero que puedas leer estas letras. Un inmenso abrazo.
youtube
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diablosans · 3 years
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No soy la misma, ya no me emociona que alguien llegue a mi vida, por ahora estoy muy bien así en mi propia compañía. Y es que algo muy adentro de mi se fracturó, se rompió; murió cuando el hombre que más amé me engañó. Yo... que todo lo di, todo lo hice. Yo... que me había enamorado hasta los huesos, hasta llegar a sentir esas putas mariposas revoloteando en mi interior, todo iba bien, ¿no sé qué pasó? Ni en que momento me dejó de amar, pensé que era mi culpa, pensé que merecía la traición, me hizo creer que la culpa la había tenido yo. Tanto dolor me causó que me anestesió el corazón, se volvió frío, impenetrable, creo que hasta de acero porque ya no volví a ser la misma, aquella mujer que creía que el amor era eterno, la que pensaba que si mostraba su mejor versión le corresponderían de la misma manera, aquella mujer que era de escribir cartas, dedicar canciones y hasta escribir poemas... Era una romántica sin remedio... ¡Una soñadora! Pensé que seríamos esa pareja por la que pasan los años y se fortalece más el amor, pero su amor por mi terminó en medio del camino, justo cuando yo planeaba todo un futuro y aventuras a su lado; yo vivía para él, florecía aún en invierno porque él cuidaba con esmero mi ser, regaba mi alma con amor, mis raíces encontraron su hogar entre sus tierras y él las recibió y me llené de flores, pero un día de tajo todo se quedó desierto, todo se volvió árido y seco, me arrancó de raíz, sacó de golpe mi amor de su corazón, dejó de regar mi alma y se marchitarron mis pétalos; se secaron mis flores.
Todo lo destruyó el día que descubrí su traición, me jugó de la peor manera, no me habló claro (que fácil era hacerlo) prefirió callar y hacerme daño con sus acciones, no tuvo el valor de decirme que había dejado de amarme y que estando conmigo ya estaba con otra. Llegaba de verla a ella, de besarla y traer su sabor en su boca, su aroma entre sus prendas, su piel impregnada de sus fluidos; venía de hacerle el amor y aún así se atrevía a decirme que me amaba (con esos mismos labios con los que se lo decía a ella) a acostarse en nuetra cama y manchar las sábanas con su traición. Lo estaba compartiendo y no lo sabía, pero ella si sabía que él no era libre y no le importó, los dos me destruyeron, los dos fueron culpables; él por no respetar nuestra relación y ella por tenerse tan poco amor propio que aceptó las mijagas que él le ofreció. Estuve... aún estoy dolida, pero no los odio, nunca le reclamé a ella, nunca fui a buscarla y jamás quise vengarme. En estos momentos de mi vida ya no lloro al recordarlo porque ya he sanado, ya no me hago la pregunta, ¿en qué fallé? Porque yo no fui la que falló, ya no me siento culpable como en su momento me lo hizo sentir él porque la que traicionó no fui yo. Le di más de lo que se merecía, (no salió a buscar afuera lo que ya tenía en casa) porque afuera solo le daban las mismas mijagas que él ofrecía. Se conformó con tan poco que lo perdió todo. Ahora me busca, ella lo engañó y se fue con un hombre que le ofreció mucho más. Hoy no soy la misma, pero estoy en paz y tranquila y no... no lo quiero de regreso porque dejé de amarlo y jamás le daría otra oportunidad al hombre que tanto daño me hizo; él no me merece.
No soy la misma, ahora me encargo yo de mi propio jardín, ahora florezco diferente, me ocupo de mi porque me di cuenta que nadie cuidará mejor mis flores que yo. En manos ajenas tu jardín tarde o temprano se seca.
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poeta-g · 4 years
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Despedida (te lo dedico mi eterno amor)
Conque entonces, adiós. ¿No olvidas nada?
Bueno, vete... Podemos despedirnos.
¿Ya no tenemos nada qué decirnos?
Te dejo, puedes irte... 
Aunque no, espera, espera todavía
que pare de llover... Espera un rato.
 
Y sobre todo, ve bien abrigada,
pues ya sabes el frío que hace allí afuera.
Un abrigo de invierno es lo que habría
que ponerte... ¿De modo que te he devuelto todo?
¿No tengo tuyo nada?
¿Has tomado tus cartas, tu retrato?
 
Y bien, mírame ahora, amiga mía;
puesto que en fin, ya va uno a despedirse.
¡Vaya! No hay que afligirse;
¡vamos!, ¡no hay que llorar, qué tontería!
 
¡Y qué esfuerzo tan grande
necesitan hacer nuestras cabezas,
para poder imaginar y vernos
otra vez los amantes
aquellos tan rendidos y tan tiernos
que habíamos sido antes!
 
Nos habíamos las vidas entregado
para siempre, uno al otro, eternamente,
y he aquí ahora nos las devolvemos,
y tú vas a dejarme y yo voy a dejarte,
y pronto partiremos
cada quien con su nombre, por su lado...
Recomenzar... vagar...
vivir en otra parte...
Por supuesto, al principio sufriremos.
Pero luego vendrá piadoso olvido,
único amigo fiel que nos perdona;
y habrá otra vez en que tú y yo tornaremos
a ser como hemos sido,
entre todas las otras, dos personas.
 
Así es que vas a entrar a mi pasado.
Y he de verte en la calle desde lejos,
sin cruzar, para hablarte, a la otra acera,
y nos alejaremos distraídos
y pasarás ligera
con trajes para mí desconocidos.
Y estaremos sin vernos largos meses,
y olvidaré el sabor de tus caricias,
y mis amigos te darán noticias
de "aquel amigo tuyo".
 
Y yo a mi vez, con ansia reprimida
por el mal fingido orgullo,
preguntaré por la que fue mi estrella
y al referirme a ti, que eres mi vida,
a ti, que eras mi fuerza y mi dulzura,
diré: ¿cómo va aquella?
 
Nuestro gran corazón, ¡qué pequeño era!
Nuestros muchos propósitos, ¡qué pocos!;
y sin embargo, estábamos tan locos
al principio, en aquella primavera.
¡Te acuerdas? ¡La apoteosis! ¡El encanto!
¡Nos amábamos tanto!
 
¿Y esto era aquel amor? ¡Quién lo creyera!
De modo que nosotros -aún nosotros-,
cuando de amor hablamos
¿somos como los otros?
He aquí el valor que damos
a la frase de amor que nos conmueve.
¡Qué desgracia, Dios mío que seamos
lo mismo que son todos! ¡Cómo llueve!
 
Tú no puedes salir así lloviendo.
¡Vamos!, quédate, mira, te lo ruego,
ya trataremos de entendernos luego.
Haremos nuevos planes,
y aun cuando el corazón haya cambiado,
quizá revivirá el amor pasado
al encanto de viejos ademanes.
Haremos lo posible;
se portará uno bien. Tú, serás buena,
Y luego... es increíble,
tiene uno sus costumbres; la cadena
llega a veces a ser necesidad.
 
Siéntate aquí, bien mío:
recordarás junto de mí tu hastío,
y yo cerca de ti mi soledad.
- Paul Géraldy
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