Shh, es un secreto
PAREJA: Neteyam x reader
ADVERTENCIA: Escritura oscura | violencia | sangre | situaciones incómodas | fluidos.
Capitulo dos:
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Nota: fue lento, pero ahora ya estará centrado. Ustedes ya pusieron en su punto de mira a Neteyam. Y Neteyam ya se siente culpable así que. Guiño, guiño. Se viene lo tóxico.
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CAPITULO TRES
"EL DEMONIO"
Neteyam sonrió burlón a su padre. Apuntando con sus cejas a su hermano Lo'ak. Jake también sonrió asintiendo, observando como el menor comenzaba a tejer lo que parecía el top de sus vestimentas. Kiri se sentó al lado de Neteyam con su plato lleno de comida.
-----Vaya hermano, en verdad le estás poniendo esmero.
Lo'ak sonrió sin dejar de poner cuentas en el top.
Neteyam metió una fruta a su boca observando como la cola de su hermano se movía de un lado a otro demostrando lo emocionado que estaba.
Últimamente Lo'ak salía más.
Se perdía por el bosque y ya no paseaba tanto con Neteyam intentando hablarte, no después de lo que ocurrió con el ikran. Lo'ak lo intentó una vez mas, acercarse para convivir contigo nuevamente y Neteyam no lo permitió. Entonces su hermanito encontró en qué entretenerse después de tres días de insistencia y que Neteyam rechazara su compañía.
Tú, como siempre, no dijiste nada. Solo viste a Lo'ak con una suave sonrisa mientras Neteyam te arrastraba lejos de su hermano por completo. No permitirá que lo de su momento tan íntimo volviera a ocurrir. Entonces ahora solo se trató de ustedes dos y simplemente no ocurría nada. Seguías con tu rutina aburrida de siempre y él se centraba en cuidar sus armas. Por las noches te miraría ansiosa, mirándolo fijamente para que saliera de la carpa y te dejará dormir. Neteyam no dudaría en irse, debido a que la atención lo ponía demasiado incómodo y daba por terminado el día.
Entonces, después de estos días donde no convivió con su hermano de repente se encontró con él haciendo este top, recuerda haber preguntado de qué se trataba eso ganándose un siseo avergonzado de Lo'ak haciéndolo reir. Eso significaba que ya estaba interesado en alguien más, que en estos días alguna Na'vi había llamado la atención de su hermanito.
Notó cómo por las tardes se la pasaba haciendo pulseras, collares e incluso tocados para el cabello. También notó cómo su hermano cada vez tenía más y más pulseras viéndolo jugar con ellas con una suave sonrisa, intentando distraerse con todo lo que pasaba a su alrededor.
Su madre se sentó, haciendo que Tuk también se sentará para poner un plato frente a ella.
----Vamos Lo'ak, a comer deja eso ahí.
----Un momento, ya casi termino.
---- Me pregunto quién será la afortunada ---- soltó Jake bromeando.
Kiri rodó los ojos, mordiendo su fruta mirando a su hermano crear la prenda muy tranquilo.
---- Uy, yo sé para quién es ---- festejó Tuk con una sonrisa traviesa.
Lo'ak la miró ceñudo. Diciendo que guardara silencio con la mirada.
----Hmm, seguro esa Na'vi acepta gustosa todo los regalos de tu hermano ----. Bromeó su madre mirando a Lo'ak con una suave sonrisa.
Tuk murmuró algo mordiendo su fruta mientras sonreía a Kiri. Quién le negaba suavemente.
Neteyam frunció el ceño mirando el top que su hermano hacía, prestó atención a los detalles hasta notar que era más pequeño de lo que una Na'vi usaría. Neteyam se sintió ansioso pensando en que tal vez ese top no era para una omaticaya, sino para un persona que estaba prisionera siendo vigilada por dos Na'vi en este preciso momento. Una persona no bienvenida por nadie, alguien a quien su mamá odiaba.
----¿Dónde está la humana...? --- preguntó Neteyam a la nada.
El silencio se extendió en la mesa y pronto su madre dejó la fruta con molestia en su plato.
----No hablamos en la mesa de ella, Neteyam.
----Lo siento, madre.
Sus ojos miraron a Lo'ak quién movía su cola interesado en la conversación.
---- Aún así, ella está con la abuela Mo'at. Esta enseñándole a hacer brebajes para curación ----. Murmuró Kiri ---- dijo que si va a estar en el clan por lo menos debe aportar algo.
Neytiri soltó un suspiro molesto.
---- Es como si fuera a quedarse viviendo aquí.
----Solo será poco tiempo, mi amor ----. Tranquilizó su padre tomando la mano de su madre ----. Solo hasta que descubramos quién fue el Na'vi.
----¿Porqué es tan importante eso, maJake? ----pregunto Neytiri ----. No le debes nada a ella, no hay porque mantenerla aquí
---- Es peligroso. Una humana que no es del laboratorio de Norm, embarazada de un Na'vi. Puede que haya más humanos cerca, y ella es la clave para saberlo ----. Su padre soltó un suspiro para tranquilizarse ----. No discutamos de esto ahora, ¿si?
Neteyam comió en silencio. Sabiendo que no solo era eso. Notaba como su padre te miraba, era esa melancolía que lo abarcaba cada que veía algún objeto humano de su pasado. Alguna vez escuchó una conversación privada entre Norm y su padre, recordaba que había mencionado algo de lo que se sentía solitario y abandonado. Tan frágil antes de llegar a Pandora.
Mencionaron algo del cuerpo débil de su padre.
Entonces, Neteyam entendió poryque te mantenía cerca, porqué su padre te tenía tanta empatía sin siquiera convivir tanto contigo. Algo así como verse a si mismo en ti.
Neteyam a veces podía ver a su padre mirando en tu dirección. Cuando te veía tropezar o de repente caías debido a tu cuerpo débil su padre ya estaba cerca. Preguntando si te encontrabas bien, si necesitabas ir con Mo'at
A veces su papá lo relevaba ciertas noches entrando a tu carpa para sentarse en la entrada y simplemente mirarte llorar entre sus sueños soltando palabras al azar. Sabía que su padre a veces simplemente no podía conciliar el sueño y decidía pasar la noche vigilándote con esa suave mirada melancólica.
Eras tan solitaria en la aldea, solo estabas en la carpa durmiendo como si realmente no te importará nada, podías pasar horas y horas ahí sin decir palabra alguna o convivir con algún Na'vi. Eras un fantasma abandonado en el clan, un fantasma que solo existía y no tenía relevancia para nadie, porque realmente no hacías nada.
Sabía que su padre veía al Jake humano en ti e intentaba protegerlo, tal vez hacer que sientas lo que en su momento tanto deseaba, un poco de compañía en su solitaria vida humana.
Solo que había una clara diferencia.
Neteyam sabía que eras distinta, parecías no lamentarte por ser débil en este distinto y peligroso planeta. Era como si lo aceptaras por completo, dejándote arrastrar a cualquier lugar que quisieran, como si simplemente fueras una muñeca a la cual podían manipular como fuera posible. Neteyam recuerda que cuando apretó demasiado tu cintura no te quejaste en mucho tiempo hasta que fue demasiado y él estaba seguro de que ni siquiera le dirías que te estaba lastimando, solo lo aceptarías y te quejarías hasta que él se cansara. A veces Neteyam te veía hacer muecas cuando un niño chocaba con tu cintura. Sin embargo, no evitabas que los niños tocaran está parte lastimada, te daba igual. Solo lo aceptabas.
Sinceramente, Neteyam te describía como un ser miserable. Un ser miserable que Eywa había acunado en sus brazos y aún no entendía porqué. ¿Porqué Eywa tendría está compasión por una raza que la había intentado destruir? No comprendía ni un poco está situación y eso le daba dolor de cabeza.
Miró a Lo'ak, sin entender la necesidad de su hermano de mantenerse a tu lado, como si fueras un imán atrayendo todo a su paso con solo una mirada, como si consolaras cualquier signo de soledad que alguien estuviera sintiendo.
Neteyam huyó de eso sintiéndose en peligro y bajo amenaza constante cuando estaba bajo tu mirada. Eras como una serpiente que se arrastraba a su alrededor e intentaba apresarlo entre tú cuerpo. Tus ojos miraban fijamente los suyos esperando algo, deseando algo y Neteyam no podía saber qué era.
No atacabas, esperabas tranquilamente en tu escondite solo mirando. Esperando atacar e inyectar tu veneno en su piel.
Una humana débil que no era capaz de hacer nada le aterraba.
Neteyam se paralizó cuando sus ojos se encontraron con los tuyos, casi chocando contra tu cuerpo debido a su repentina aparición en tu carpa. Tú ibas a la entrada encontrándote con él de golpe, Neteyam te miró sospechoso, preguntándose porqué estabas apunto de salir de la carpa.
----¿A dónde ibas? ---- cuestionó bruscamente.
Diste unos cuantos pasos hacia atrás. Negando con tu cabeza sin dejar de mirarlo, tus hombros tensos lo hicieron sospechar y pronto el Na'vi miró toda la carpa. Sus orejas se movieron curiosas cuando observó un cuenco en el suelo llena de piedritas. Piedritas para hacer pulseras, tus ojos siguieron su mirada y pronto te agachaste llevando el cuenco lejos de su vista, guardándolo con cuidado en un baúl que Jake te había traído junto con Norm. Algo así para que guardes tus vestidos blancos y las batas que usabas como vestimenta.
Neteyam estaba a punto de cuestionar de dónde habías sacado ese cuenco, de no ser porque una gran mano tomó su hombro. Neteyam se giró observando como su padre le sonreía, mirándote suavemente para apuntar fuera de la carpa.
----Andando.
Neteyam te miró, observando como no dudaste ni un segundo en ir detrás de su padre. Neteyam caminó detras tuyo, observando la espalda de su padre mientras los guiaba hacia la ramada para que tú pudieras bajar de tu prisión.
Cuando llegaron al suelo Neteyam miró a su padre confuso.
----Am... ¿Señor?, ¿Ocurre algo?, ¿a dónde vamos? ---- cuestionó sin entender nada.
Tú miraste a Toruk Makto curiosa.
Jake sonrió hacia su hijo comenzando a avanzar sin dudar.
---- Voy a llevarla a volar en ikran ¿Quieres acompañarnos?
Neteyam abrió sus ojos con sorpresa, pasando su vista de su padre a ti y de ti a su padre.
----¿Solo... Nosotros? ---- preguntó aún extrañado.
----Si, te dije que ella debía salir de vez en cuando ---- su padre lo miró con una sonrisa divertida, haciendo que Neteyam lo imitará ---- y eso voy a hacer, seguro que el ikran le emociona.
Neteyam recordó cuando casi mueres por culpa de ellos al subirte a un ikran. Sin dudar te miró, esperando que no lo metieras en problemas encontrándose con una sonrisa de emoción mientras tarareabas. Él suspiró aliviado sin dejar de seguir a su padre de cerca.
----¡Oye hermano!
Neteyam miró a su hermano menor quien se acercaba curioso a los tres.
Su cola se movió con emoción cuando sus ojos se encontraron con los tuyos y Neteyam pudo ver ese saludo que ustedes dos tenían de su hermano.
----¿A dónde van? ---- preguntó Lo'ak ya a su lado.
Neteyam miró a su padre, el cuál ya miraba a Lo'ak.
---- A volar.
---- Señor, déjeme ir ---- pidió Lo'ak, colocándose al lado de su padre por lo tanto cerca de ti ---- ¡Me comportaré, lo prometo!
Jake soltó un suspiro sonriendo a su hijo menor.
----Bien, pero nada de problemas.
Lo'ak asintió mirándote de reojo con una sonrisa. Neteyam frunció su ceño molesto, acelerando su paso para ponerse entre ustedes dos. No quería una escena frente a su padre.
Cuando llegaron con los ikran Toruk Makto llamó al suyo rápidamente, sus hijos ya estaban ansiosos encima de los suyos esperando a su padre para empezar el vuelo. Tú miraste como un ikran azul descendía del cielo colocándose frente al Olo'eyktan, te acercaste rápidamente sintiendo como las enormes del Na'vi tomaban tu cintura para subirte al Banshee. Saltaste en tu lugar con una enorme sonrisa expectante. Cuando el Na'vi conectó su trenza rápidamente saltó y emprendió vuelo. Un chillido de emoción salió de tu garganta observando como poco a poco las nubes parecían más cercanas.
Los gritos de Lo'ak de emoción te hicieron reír y pronto observaste como los hermanos se perseguían con sus Banshee como una especie de juego. Miraste hacia atrás cuando la risa de Toruk Makto acarició tus oídos, su mano sostenía las riendas aprisionando tu cuerpo para que no cayeras.
Decidiste asomarte, mirando el enorme bosque bajo tus pies con una enorme sonrisa, sintiendo como el viento soplaba contra tu cabello volviéndolo salvaje.
----¿Que tal la vista, niña? ---- preguntó el Olo'eyktan con una enorme sonrisa.
----¡Grandiosa! ---- exclamaste soltando una risa.
----¿Qué tal unos trucos?
No esperó a que contestarás porque en poco tiempo su ikran ya estaba dando vueltas en el cielo. Su firme mano te mantenía contra la silla de montar mientras que tu boca dejaba salir risas de emoción. Levantaste las manos sintiendo como tu corazón se aceleraba debido a la anticipación de verse desprotegida. Toruk Makto te tomó con más fuerza, riendo cuando lanzaste un grito Na'vi de victoria.
Él te imitó, sus hijos pronto contestaron con el mismo grito.
Reíste cuando Toruk Makto hizo que el ikran pasará entre los dos Na'vi menores con una sonrisa.
---- ¡Una carrera, mocosos!
Reíste cuando ellos lo miraron ofendidos, comenzando a seguir a su padre con una enorme sonrisa.
---- ¡Eso es trampa, anciano! ---- gritó Lo'ak, provocando que una enorme carcajada abandonará tus labios.
----Este grosero ---- negó divertido Jake ---- ¡Vuelve a llamarme anciano y no volarás por un mes!
Neteyam carcajeó ante la mirada ofendida de Lo'ak. Sus ojos amarillos miraron como su padre por primera vez se relajaba con ellos, dejaba de comportarse como un padre estricto y simplemente jugaba con ellos como en los viejos tiempos. Neteyam debía admitir que a veces extrañaba estos momentos.
Neteyam miró como te levantabas en el ikran asomando casi todo tu cuerpo para mirar debajo de tus pies, por un momento se asusto pensando que volverías a caer hasta que vio como su padre te tenía tomada del vestido firmemente, dejando que te asomaras tanto como quisieras mientras él te sostenía con una gran sonrisa.
---- ¡Déjese caer! ---- exclamaste emocionada.
Toruk Makto te miró con una ceja alzada, su sonrisa aun no desaparecía de su rostro.
----¿Qué?
----¡Si, señor haga que el ikran caiga en picada!
El Olo'eyktan ladeó su cabeza con una ligera sonrisa. Cumpliendo tus deseos mientras te sostenía firmemente contra su pecho, en cuestión de segundos el ikran caía en picada, tus gritos de emoción resonaron por todo el cielo. Lo'ak te siguió, dejándose caer en picada mientras reía y poco después Neteyam imitó la acción. Los cuatro reían cómo locos sintiendo como la adrenalina invadió cada rincón de sus cuerpos y justo cuando estaban a punto de tocar el suelo volvieron a elevarse orgullosos. Tus manos se soltaron de la rienda elevándose al cielo mientras festejaban en grande.
Jake soltó una risa mientras sus hijos gritaban victoriosos.
Por Eywa, en verdad difrutabas estás salidas.
Cuando los juegos terminaron se dedicaron a simplemente volar por los cielos en calma, Neteyam hablaba con su padre de quién sabe qué, tú estabas demasiado ocupada mirando el atardecer de Pandora, hasta que una risa encima tuyo llamó tu atención. Tus ojos miraron hacia arriba, Lo'ak volaba encima suyo. El ikran daba vueltas alrededor de su hermano y padre para simplemente llamar tu atención. Tus ojos se encontraron con los suyos y sin dudar le dedicaste una suave sonrisa, la cuál fue recibida con una de vuelta. Cuando Lo'ak desapareció de tu vista miraste hacia abajo, el ikran ya estaba preparándose para dar otra vuelta y con una sonrisa seguiste su recorrido, sonriendo cuando el ya estaba nuevamente encima tuyo de cabeza, estiró su mano y tú lo imitaste sus dedos se rozaron con suavidad cuando una voz los interrumpió.
---- Lo'ak, basta.
Tus ojos miraron los de Toruk Makto, su mirada era severa observando como su hijo menor miraba a otro lado debido a la reprimenda. Cuando volviste a mirar a Toruk Makto tragaste pesado, sintiendote pequeña ante su mirada intimidante. Tu vista fue al frente sintiendo como tus hombros se tensaban debido a la mirada penetrante del navi.
A veces lo olvidabas. Olvidabas que eras una prisionera y debías comportarte como tal.
Miraste de reojo a Lo'ak quién movía su meñique disimuladamente. Sonreiste con cuidado, deseando que la noche llegara ya.
Cuando llegaron a casa, Toruk Makto hizo que Neteyam llevará a Lo'ak a casa y él te llevó a tu carpa con calma, en un silencio cómodo. Miraste de reojo, temerosa de recibir un castigo que no podrías soportar. Al menos no ahora que tú herida de aborto estaba tan reciente. Lo escuchaste soltar un suspiro y cuando levantó tu su mano no pudiste evitar encogerte de hombros, esperando el puñetazo de su enorme mano.
No llegó, no llegó y eso te puso más nerviosa. Tus ojos lo miraron temblorosos, la mirada extrañada del Olo'eyktan te hizo ponerte roja de la vergüenza.
----¿Estás bien?
Asentiste rápidamente, acelerando tu paso para comenzar a subir por la ramada a toda velocidad. Él te siguió de cerca entrando después de ti a la carpa, observando como te cubrías con un pedazo de tela y cerrabas los ojos rápidamente. Toruk Makto sonrió ante eso sentándose en la entrada para comenzar a recorrer con la mirada toda la aldea.
----Perdón si te hizo sentir incómoda lo de atrás ----. Miraste a Toruk Makto quien aún miraba el exterior dándote la espalda ----. Pero son mis hijos y voy a protegerlos si siento que es necesario.
Miraste al suelo pensando en qué podrías hacerles a dos Na'vi que eran mucho más grandes que tú.
No podrías hacerles nada, nada sin acabar muerta.
Nada sin terminar gravemente herida y eso era frustrante.
---- No sabemos nada de ti, niña ---- Toruk Makto te miró. Sus ojos amarillos miraron fijamente los tuyos ---- y eso es peligroso.
Cerraste los ojos, recordando el pasado sintiéndote desconsolada. El recuerdo de unos brazos aferrandose a tu cuerpo logró arrullarte y deseaste por un momento que estos fueran reales.
Esperaste paciente a que Toruk Makto se fuera de tu carpa y llegará la media noche para volver a despertar.
Tus ojos por un momento vieron unos punto brillantes color verdes fuera de tu carpa, causando que tú corazón entrara en pánico. Cuando volviste a parpadear la sonrisa de Lo'ak en medio de la noche te dio la bienvenida.
Sonreíste comenzando a sentarte en suelo mirando como el se adentraba silencioso.
El Na'vi comenzó a buscar debajo de la carpa de prisioneros, esperando que nadie lo hubiera visto subir. Sin dudarlo se adentró, cerrando detrás de él para acercarse a ti con una sonrisa.
----Hola ---- saludó sentándose a tu lado.
---- Hola ---. Saludaste de vuelta con una sonrisa.
Cómo todas las noches.
Adorabas a Lo'ak. Era como un dulce vaso de miel que se derramaba por tus papilas, envolviendo tu cuerpo de una manera tan dulce y suave que te hacía temblar. Deseabas tanto que te apretara y quebrara tus huesos, que abandonará toda esa dulzura y maltratara tu deseoso cuerpo, odiabas la expectativa, la incertidumbre de cuál sería su siguiente movimiento contra ti. Entonces siempre estabas intentando provocarlo desde el momento en que él decidió que era una buena idea colarse en tu carpa en medio de la noche para hablar contigo sobre todo lo que quisiera.
Estos eran unos de esos momentos. Lo'ak te mencionaba cómo hacía la siguiente pulsera que se uniría a tu colección mientras tú estabas sentada entre sus piernas trenzando su cabello suavemente.
---- Entonces, tal vez te agregue unas piedra azules y una verde, digo, combinan bien y uh, tal vez algo del color de mi ikran.
Te sentaste por completo en el suelo, mirándolo fijamente parpadeando lentamente, dejando que una de tus mangas resbalara por tu hombro. Asentiste sonriendo mientras tu mano acariciaba su rostro. Lo'ak te dirigió una sonrisa cuando tu dedo pulgar acarició sus labios.
Había sido tan complicado cuánto más lo alejaban de ti Toruk Makto y Neteyam.
Su cola se movió con interés y cuando tu mano paseo por su muslo Lo'ak supo que ya estabas teniendo esas actitudes que de repente te llegaban.
Apartó tu mano suavemente, observando como tus ojos se volvían decepcionados cuando colocó la manga de tu vestido en su lugar.
---- Tonta, deja de hacer eso. Haces el ambiente incómodo --- regañó con su dedo golpeando tu frente.
Soltaste un suspiro frustrado, acostando tu cuerpo en el suelo mientras tu cabeza descansaba en su muslo. Tus manos comenzaron a jugar con su cola con un ceño fruncido.
----Vamos, no te molestes... ---- su gran mano acarició tu cabello ----. Eres mi amiga y la única que me escucha, no voy a tratarte mal, cariño.
----Skxáwng... ---- murmuraste con un suave puchero.
Lo'ak te miró con sorpresa a la primera palabra que era dirigida directa a él, no a su padre no a la Tsahik.
A él.
Soltó una risa emocionado ante tu berrinche.
Cierto, Lo'ak era como el sol, cálido y abrazador te brindaba calma en la tormenta y estabilidad en el frío. Pero quemaba, quemaba cuando no hacía lo que ansiabas, lo que esperabas que un Na'vi hiciera. Por eso mismo te asustaba cuando tu cuerpo se relajaba, cuando tu cuerpo veía a Lo'ak cerca se permitía calmarse. Sentir todo a tu alrededor y no preocuparte por sobrevivir. Era un sentimiento peligroso que hace tiempo habías abandonado al llegar a Pandora.
Miraste los ojos de Lo'ak quién estaba muy concentrado en jugar con tu cabello.
Era tan lindo y amable.
Ojalá pudieras amar eso, en un pasado probablemente hubieras caído rendida a sus brazos y aceptarlo. Ahora no era suficiente, no podías vivir con esa calma, siempre necesitarías más. Tu cuerpo pediría más, más dolor, más ansias, más incertidumbre, más adrenalina. Era como una droga que necesitabas para sentirte viva.
El tacto de quién amaste llegó a tu mente.
Era tan firme y seguro que a veces pensabas que morirías en su agarre. Deseaste tanto caer en el sueño profundo cuando sus manos te tocaban y lo único que ganabas era dolor. Un dolor intenso y palpitante que se encajaba en tus entrañas.
Volviste a la realidad cuando una mano tocó suavemente tu vientre y aquello te hizo soltar un suspiro doloroso.
Te habías sentido tan muerta después de la perdida.
Sin nadie que cuidara de ti en tu tristeza, tragándote cada sollozó cuando mirabas a los niños correr. Evitando que cada lágrima escapara por tus ojoss cuando un niño pedía que lo tomarás en brazos.
Te permitías llorar cuando Lo'ak llegaba a consolar por las noches.
----¿Cómo has estado? ---- preguntó con suavidad.
Negaste. Poniendo tu mano encima de la suya, buscando el calor que sentías cuando tu vientre estaba inflamado.
Lo'ak limpio tus lágrimas y tú cerraste tus ojos lista para dormir. Lista para soñar con esos brazos que tanto extrañabas.
Lista para que apretaran tus huesos hasta que doliera.
Hoy no hubo un Neteyam en tu carpa, no había nadie. Te dirigiste hacia la entrada asomándote por el camino de tela observando como Toruk Makto preparaba a los guerreros. La palabra demonio del cielo se repetía cada vez más en su discurso. Tragaste pesado observando como Lo'ak y Neteyam estaban en las filas de guerreros. Miraste atenta como cada uno eran formados, y como la pintura de guerra adornaba sus rostros con cuidado.
Te iba a dejar sin vigilancia.
Un buen momento para huir de esta aldea. Tus ojos perdidos en la nada se centraron nuevamente encontrándote con una mirada amarilla penetrante. Toruk Makto te miraba desde abajo, advirtiendo con la mirada que no vayas a hacer una estupidez. Tus ojos miraron a Lo'ak, quién se despidió con un movimiento de meñique.
Sonreíste con cuidado.
No, no podías huir ahora. Volviste dentro de tu carpa, volviendo a dormir con tranquilidad esperando a que volvieran y pidiendo a Eywa que llegaran con victoria.
Eso hasta que alguien abrió la tela de tu carpa furioso. Te levantaste de golpe, observando a un Neteyam iracundo. Sus ojos te miraron rabiosos y tú solo te encogiste de hombros mientras tu garganta se cerraba de los nervios. No entendías por qué estaba aquí, pensabas que él estaría en el ataque de los humanos.
Lo viste sentarse bruscamente en el suelo, sacando su daga para comenzar a afilarla sin dejar de mirarte. Culpando con su mirada a tu persona, sin entender realmente de qué te estaba culpando.
----Me dejaron aquí por tu causa.
Abriste los ojos sorprendida. Mirando al suelo apenada colocándote detrás del palo donde encadenan a los prisioneros para darte un poco de seguridad. Neteyam no dejó de mirarte enojado y tú simplemente observaste el suelo en todo el rato que él estuvo ahí.
Poco después te sacó de la carpa, diciendo que te llevaría de paseo. No pusiste excusas ni le diste trabajo, probablemente este paseo era más para él que para ti así que lo seguiste. Adentrándose al enorme bosque que tanto te encantaba, sin embargo, está vez estabas más atenta a la actitud del Na'vi para correr si finalmente intentaba desquitarse.
Neteyam estaba completamente harto y cansado de esta situación. Cansado de tener que seguirte y no poder centrarse en sus cosas de futuro Olo'eyktan.
¡Su padre le había dicho que no iba ir a la batalla para poder cuidarte!
Lo hizo enojar tanto eso.
Estaba tan concentrado en terminar con tu situación que se volvía insoportable. Su padre cada día se alteraba más debido al cercano avistamiento de humanos. Pensando en que tal vez estaban buscándote y sería fácil si simplemente te entregaran a ellos, el problema era ese maldito bebé Na'vi, la desesperación por saber de quién fue ese niño es lo que estaba volviendo loco a su padre. Si el macho volvía a buscarte y embarazarte sería un problema, un problema que incluiría a su clan.
Tarareaste suavemente sacando a Neteyam de sus pensamientos. Frunció su ceño molesto al ver cómo estabas tan tranquila y feliz tomando las frutas en tus manos inspeccionando con mucho cuidado para después dejarlas en el suelo para ti.
Realmente él no se esforzaba en hablar contigo. Tú hacías tus cosas mientras él te vigilaba y comenzaba a afilar sus armas, su padre había intentado convencerlo de que intentará entablar conversaciones contigo, la idea le disgusto por completo, sintiendo que no tendría qué hacer eso puesto que no eras tan relevante e interesante y lo confirmó cuando la única vez que lo intento tú contestaste con monosílabos o negabas con la cabeza.
Neteyam ladeó su cabeza curioso, analizando como seguías tarareando ignorando todo a tu alrededor. En realidad, casi nunca hablabas. Ni siquiera cuando su hermano hablaba hasta por los codos, solo estabas ahí escuchando.
Sus orejas se movieron cuando escuchó movimiento a su lado, sus ojos amarillos observaron como un niño Na'vi del clan se acercaba con timidez, era de apenas cinco años. Se acercó a ti con una sonrisa mientras en su mano extendía una pequeña flor. Neteyam observó como le sonreías, tomando la flor para acercarlo a ti en un abrazo, el niño comenzó a reír cuando restregaste tu cara contra la suya.
Neteyam solo observó atento a que no hicieras nada contra el niño, observó como lo cargaste y comenzaste a arrullarlo para después darle un fruta.
No lo entendía muy bien, no entendía la conexión que tenías con todos los niños del clan. Te buscaban como si fueras un caramelo, todos rodeando tu cuerpo mientras que tú atiendes a cada uno de sus llamados. Me curioso cómo el niño se alejó feliz dando saltitos de nuevo hacia la aldea.
El Na'vi ladeó su cabeza. Pensando en cómo sería cuando formara una familia y lograra tener a sus hijos. Esperaba poder ser como su padre, solo que tal vez menos estricto y más cariñoso, un Olo'eyktan que pudiera proteger a cada uno de sus hijos.
Eso le recordó a como te encontraron, sus ojos amarillos te miraron y pronto una expresión de pena invadió su rostro. Ahí frente a él tocabas tu vientre mirando en dirección al niño que se fue. Sus ojos decidieron mirar a otro lado sin soportar los sentimientos que comenzaban a desbordarse a tu alrededor, el ambiente se sintió incómodo para él y pronto quizo huir.
----Vamos ----. Llamó él, levantándose del suelo para comenzar a alejarse de ahí.
Escuchó tus pasos detrás de él, un suave toque rodeó su muñeca causando que sus hombros se tensaran y no dudó en mandarte una mirada de advertencia. Estaba a punto de alejarte de no ser por la sangre que comenzó a salir de tu boca. Mordías tu labio con tanta fuerza mientras soportabas las lagrimas.
Neteyam guardó silencio mirando tu mano.
Ahí es cuando descubrió algo.
Una pulsera. Una pulsera que vio a Lo'ak hacer estaba en tu muñeca y eso alteró a Neteyam.
Su hermano te estaba cortejando.
El Na'vi te dejó en la carpa huyendo rápidamente hacia su padre en cuanto llegó de la cacería.
No sabía si contarle lo que había descubierto y como un mundo de nuevas sospechas se abría a su paso. Jake estaba tan estresado con esto de los humanos invadiendo el bosque, que no quería informarle acerca de que su pequeño hermano intentaba unirse a la humana invasora.
Neteyam mordió su pulgar. Recordando las interacciones que su hermano y tú han tenido.
El recuerda que su hermano había estado reacio a matarte, incluso señaló que debían ayudarte cuando te vio luchar por aire.
Sabía que su hermano simpatizaba mucho con ciertas situaciones. Pero... ¿Llorar por una desconocida?
Recuerda como lloró cuando se enteraron que tu bebé no había sobrevivido. No era normal, al menos no para Neteyam, su padre no lloró y él estaba más cercano a la humana debido a que el en un pasado fue de la misma raza. Que tal si realmente Lo'ak era quien se había apareado contigo. Su hermano se escapaba de vez en cuando lejos de la aldea
Entonces qué lo hacía dudar.
Porqué dudaba tanto si su hermano desde en un principio actuó cercano a ti. Como si te conociera de hace meses.
Neteyam comenzó a respirar pesado. Su hermano era un enamoradizo, qué le hizo pensar que no dudaría en formar una familia con un humano.
De repente sintió las náuseas por todo su cuerpo al recordar el olor de aquel bebé Na'vi muerto que había salido de tu vientre.
Era perturbador.
No solo había sido eso, habías tenido más en un pasado. ¿Por qué seguir intentando si siempre terminaba en la muerte de ellos? Su hermano siempre estuvo tan desesperado por la calidez de una familia que no dudaría en hacer la suya propia. Era tan imprudente que sería capaz de poner en riesgo a su clan simplemente porque sentía la necesidad de sentirse amado.
Jake golpeó sus hombros, sacándolo de sus pensamientos de golpe, haciendo que brincara en su lugar.
Su padre tenía el rostro lleno de sangre, le sonrió intentando tranquilizarlo.
--- fue una victoria contundente, Neteyam. Gracias por entender y cuidar de la niña ---. Neteyam asintió.
----¿Y Lo'ak, señor? ---- preguntó ansioso.
Una necesidad de estar al lado de su hermano invadió todo su cuerpo. Los pensamientos de ese bebé muerto y su hermano sosteniendo el cadáver comenzaron a invadir cada rincón de su mente.
----¿Mm? Me dijo algo de visitar a alguien. Probablemente a la Na'vi que está cortejando.
Neteyam corrió de vuelta a la carpa del prisionero, su respiración se descontroló cuando encontró vacío el lugar. Tú no debías salir de la carpa sin la escolta de su padre o Neteyam. Pero quién podría ser tan imprudente para sacarte de la maldita carpa y no ver los problemas que eso podría traer.
Neteyam maldijo, bajando por la ramada para recorrer la aldea con la mirada. Kiri estaba sentada junto a Spider hablando tranquilos.
----¿Dónde está Lo'ak? ---- interrumpió bruscamente la conversación.
----Buen día a ti también, hermano ---- habló sacastica, con una sonrisa.
----Kiri. ¿Dónde está Lo'ak? ---- volvió a preguntar tenso.
---¿Estás bien? ---- preguntó ya preocupada intentando revisarlo, él negó desesperado tomando las manos de su hermana rogando que le respondiera con la mirada ---- él dijo algo sobre llevar a la humana a pasear ¿Porqué?
Ahí estás. Tú junto con su hermano. Neteyam asintió apresurando su caminar al bosque, buscando con la mirada cualquier rostro de su estúpido hermano o algo que le dijera dónde está. Se adentro aún más, desesperado por encontrarlos rápidamente. Llegó a un punto donde se estaba volviendo totalmente loco mirando a su alrededor desesperado.
Entonces sucedió.
Ese silencio del bosque se presentó y Eywa le dio la misma señal cuando te encontró, algo está mal.
De repente lo escuchó. Su oreja se movió atenta escuchando nuevamente esa risita que conocía bien, su hermano estaba haciendo de las suyas. Se acercó lentamente al sonido, alerta y dispuesto a atacar si estaba ocurriendo algo grave.
Casi vomita.
Su hermano frente tuyo, levantandote el vestido lentamente dejando tu cuerpo desnudo. La imagen del bebé muerto en las manos de Lo'ak invadió su cabeza y Neteyam actuó rápidamente, lanzándose a su hermano para alejarlo de ti.
Lo'ak siseó. Abriendo sus ojos asustado al ver a su hermano furioso.
----¿¡Qué mierda te pasa!?---- preguntó su hermano menor ---- ¡ Me asusté como el demonio, skxáwng!
Neteyam le siseó obligándolo a qué guardara silencio.
----¿¡Y a ti!? ¿¡Meterte con la humana!? ¿¡Eres idiota!?
----¿Q-qué? ---- preguntó Lo'ak extrañado ----. ¡No me estoy metiendo con la humana, maldito idiota! ¡Además, tiene nombre!
Neteyam se levantó furioso, acercándose a ti de manera peligrosa. Tus ojos lo miraron aterrada, intentando alejarte del peligro que Neteyam representaba, sus manos tomaron tu cuello con brusquedad y tu mano se dirigió a su muñeca intentando alejarlo.
---- ¿y tú? ¿Quién te crees? No puedes ir por ahí seduciendo a mi hermano y pensar que serás intocable. No eres bienvenida aquí, los Na'vi no te quieren aquí, podrías morir y lo que tú cerebro te dice es meterte con Lo'ak.
----¡Neteyam, dejala ya! --- intentaba alejarlo de ti ----. ¡Neteyam la estás matando, porfavor hermano! ¡No quiero lastimarte!
Tus ojos miraron fijamente a Neteyam.
Ibas a morir, ibas a morir a manos de el hijo mayor de Toruk Makto. Aquel que te había dado cobijo y lo único que podías pensar era en esos ojos aterradores que te obligaron huir. Comenzaste a hiperventilar dejando que los recuerdos te invadieran.
Recuerdas cómo ella te cortaba la respiración, cómo su cuchillo amenazaba a tu bebé, cómo sus enormes colmillos estaban a centímetros de tu rostro
Él no estaba, no estaba para protegerte, necesitaba que te protegiera, necesitabas que te salvará
----Y-yawne...--- llamaste dificultosa. Con las lágrimas saliendo de tus ojos.
De repente ya no era Neteyam, ya no eran ojos color amarillos sino unos verdes brillantes. El pánico invadió cada centímetro de tu cuerpo cuando sentiste que tu cuello estaba doliendo horriblemente, casi como si fuera a quebrarse. Intentaste tomar bocanadas de aire, las lágrimas corriendo por tu rostro mientras tu vista se volvía borrosa, el dolor de cabeza comenzaba a ser insoportable y desapareció.
Tu cuerpo golpeó bruscamente el suelo mientras tu nariz intentaba tomar todo el oxígeno que tus pulmones permitieran. Lo'ak ya estaba a tu lado dando palmaditas en tu espalda mientras te ayudaba a respirar.
Neteyam se alejó de ti perturbado ante su arranque de ira, sus ojos amarillos miraron tu cuerpo aterrado. Su garganta se cerró al ver cómo estabas llena de mordidas, tus pechos, tu estómago, tus muslos, todo. Como si la persona que lo hizo quisiera arrancarte un pedazo de la piel cada que te mordía.
Él desvío la mirada, sintiendo que estaba mirando algo que no debía. Perturbado ante sus acciones.
Lo'ak tomaba con fuerza tu mano mientras tocabas tu cuello con suavidad, intentando alejar el dolor y olvidar el persistente recuerdo de la muerte. No estabas preparada. No deseabas morir, no de nuevo.
Neteyam te extendió tu vestido siendo arrebatado bruscamente por su hermano el cuál no actuó posesivo ante tu desnudes.
Neteyam miró al lado el top que Lo'ak tanto había estado creando. Cerró sus ojos pensando en que su hermano era tan sentimental que el mismo habría querido ponértelo.
----Vistete --- murmuró Neteyam mirando al suelo.
Tus ojos lo miraron. Observaron como su cola se escondía entre sus piernas y como sus orejas estaban agachadas debido a la vergüenza. Tu mano tomó la pequeña prenda de las manos de Lo'ak quién te ayudó a ponértela y cuando Neteyam te miró un pequeño segundo tu corazón latió emocionado.
Tus ojos miraron fijamente al hijo mayor de Toruk Makto, quién movía ansioso su cola detrás de él mientras sus ojos observaban cómo Lo'ak te vestía.
Lo habías entendido todo mal.
Siempre fuiste por el hermano equivocado, aquella persona que estaría dispuesta a matar por su familia, por su clan. No era nada más que Neteyam. Tus ojos lo miraron esperanzados y tú estómago se revolvió debido a las ansias.
Era el hijo adorado.
Lo'ak era bueno, si. Pero no estaría dispuesto a lastimar a su familia, a volver a decepcionar.
Neteyam haría todo. Todo por los que más quería. Y si sus ojos insistentes en tu persona y la actitud tosca no significaba nada estabas dispuesta a hacer que significará algo. Tus dedos picaron y el recuerdo de sus manos en tu cuello dispuesto a matarte invadió tu mente.
Adrenalina.
La adrenalina recorría cada centímetro de tu cuerpo y finalmente volviste a sentirte en casa cuando cada uno de tus sentidos se agudizó alrededor del Na'vi mayor.
Relamiste tus labios ansiosa levantándote del suelo con la ayuda de Lo'ak. El Na'vi menor te cargo en sus brazos caminando detrás de un alerta Neteyam quién no dejaba de lanzar miradas a su hermano menor.
Lo'ak estaba enojado. Tal vez decepcionado de la actitud de quién admiraba y sentía celos.
---- Gracias por el regalo, Lo'ak... ---- murmuraste dificultosa. Lo'ak te sonrió mientras su cola se movía.
----De nada, cariño.
Tus ojos miraron a Neteyam quién miraba de reojo tu cuerpo maltratado.
Sonreíste para ti. Al fin podrías vivir en esta aldea.
Si tan solo Neteyam se dejará sucumbir, si tan solo se dejara atrapar por tus encantos.
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