Tumgik
#cabezazos
welele · 1 year
Video
734 notes · View notes
viejospellejos · 16 days
Text
Pintaza el trailer de Joker 2:
30 notes · View notes
onlythehopeless · 10 months
Text
y esta es la cara de alguien que sabe que es guapo Y que sabe que solo basta un video de 10 segundos vibing to la peor canción q ha hecho harry styles en su vida para q se me prenda el c0ño como si fuera la catedral de notre dame el 15 de abril de 2019
10 notes · View notes
helenawa-art · 1 year
Text
No he llegado ni al 8/10 de la nota del trabajo que casi me mata
Tumblr media Tumblr media
8 notes · View notes
julianalvarez9 · 9 months
Note
qaiiiit what header?
he scored a header today!!!!!
2 notes · View notes
remicilline · 8 months
Text
no y la nueva propuesta constitucional niña
0 notes
armatofu · 10 months
Text
Tumblr media Tumblr media
0 notes
payazox · 1 year
Text
bighead pescaditou
Tumblr media
0 notes
flowercentipede · 2 years
Text
my cat was raised with a dog, so now all the love she can give is in form of punches with her head and going to the dirt to pee, sometimes, I can hear her bark
0 notes
welele · 5 months
Text
A comer.
152 notes · View notes
jartitameteneis · 2 months
Text
Caimán noquea de un cabezazo a su captor cerca de Orlando, Florida, luego de haber sido objeto de burlas.
60 notes · View notes
wosohavemyheart · 2 years
Text
Es la primera historia que subo así que espero que os guste.
Tumblr media
MINI PUTELLAS
POV Alexia
Estamos en el túnel esperando salir al campo para jugar un clásico y estoy nerviosa, pero no por el partido, sino porque mi mujer está embarazada y en cualquier momento puede ponerse de parto.
Yo esta mañana, ya tenía un presentimiento nada más despertar negándome a venir al partido, pero T/n, mi mujer, me insistió y prácticamente me obligó a venir.
Hacemos la fila, chocamos la mano con el rival, foto de equipo y me voy con la árbitra para elegir.
El balón empieza a rodar a favor del Madrid y hago el esfuerzo mental de enfocarme al 100% en el partido.
La árbitra pita el descanso quedando 2-0 a favor nuestra.
Una vez en el vestuario, Jonatan se puso a dar indicaciones y decir las cosas que estaban mal, las que había que mejorar... Pero yo ignoré a todos y cogí el móvil para llamarla.
La llamo 3 veces y no me contesta, preocupada, me doy un cabezazo contra la taquilla y hace que todas me miren.
-¿Qué pasa Ale?- Pregunta Leila.
-No me coge el móvil
-No están tu madre y Alba con ella?- Dice ahora Irene y asiento.
Decido llamar a mi madre y tampoco. Por último, Alba sí da respuesta al primer tono.
-Est...
-Ale, estamos en el hospital ha roto aguas hace 40 minutos- Me dice interrumpiéndome- Así que ya te puedes dar prisa porque está como loca- Suelta una risita y yo me vuelvo un fantasma.
-Ale... Ale... Alexia!- Reacciono cuando Mapi me da un golpe en la nuca y coge mi móvil para hablar con Alba.
Miro al entrenador y asiente.
-Mapi, ves con ella que así como está no va a poder ni arrancar el coche- Ordena Jonatán y todas me dan palmaditas en la espalda dándome ánimo.
Mapi y yo salimos y en 10 minutos estamos en el hospital.
-Perdona- Llamo la atención de la recepcionista que estaba concentrada en el ordenador.
-Si? Oooh… Tú eres Alexia y tu Mapi, mi hija está loca con ustedes... ¿Podrían hacerse una foto?
Iba a seguir hablando pero la corto.
-Mira señora, luego tengo todo el tiempo del mundo, ahora mismo mi mujer está de parto y si de verdad quiere esa foto es mejor que suba si no me mata.
-Si si si, claro lo siento. El área de obstetricia está en la planta 5.
-Gracias, pásese mañana con su hija- Salgo corriendo con Mapi detrás y subimos por las escaleras para llegar antes.
Al llegar a la planta visualizo a mi hermana.
-¿Cómo está?
-Hola hermana, qué alegría verte. Estoy bien y tú? - Dice con sarcasmo y también para que me tranquilice.
-Hola fea
-Está en esa habitación con mamá- Señala la que está enfrente- Le han puesto la epidural, pero todavía tiene que dilatar unos centímetros más para poder llevarla a quirófano.
-Vale, voy a entrar
-Solo... No te pongas nerviosa ni te desmayes que sé cómo te pones con ella...
Mi hermana me advierte porque sabe cómo soy con ella. En el campo los nervios no existen ni me ponen nerviosa aunque tenga a 3 encima mío siempre pienso en frío, pero con esta situación la palabra nervios es poco para lo que siento.
Abro suavemente la puerta y veo a T/n suspirando y agarrando fuerte las sabanas y a mi madre quitándole el sudor de la cara.
-Donde está esta mujer?- Medio grita T/n en una contracción
-Estoy aquí cariño- Me hago notar y le cojo la mano.
-Ya era ho... Aaaaaaaaah- Contracción y no veas como me está apretando la mano
-Voy a llamar a la doctora-Informa mi madre y sale.
-Debería haberme quedado en casa contigo- Le doy un beso en la frente lamentándome.
-Cariño... No empieces.
-Pero... -Me interrumpe
-Pero nada Alexia, sé lo importante que son los Clásicos para ti y si yo no puedo jugar ahora por razones obvias y una de las dos si, entonces juega. No quiero lamentos ni nada Alexia, estás aquí ahora. Eso es lo que importa. -Dice demasiado sería como para llevarle la contraria.
-Vosotras sois lo más importante- Le dejo claro por sí tiene alguna duda.
-Lo sé, mi amor- Tiene otra contracción- ¿Cómo va el partido?
-Cuando vine íbamos 2-0 y ahora... -Lo miro- ha marcado Patri, 3-0.
-Dime que has metido uno por lo menos
-Si y una asistencia- T/n tiene otra contracción y hago una mueca por la fuerza que hace sobre mi mano. -Joder, ¿cuándo va a venir la doctora?
En ese momento aparece junto a mi madre.
-Muy bien, ¿cómo está la futura mamá?
-Nerviosa
-Por lo menos todavía estas en pie- Bromea- No todos consiguen eso.
Ruedo los ojos, pero en verdad no sé ni como lo estoy haciendo.
-Vamos a ver si ya estás lo suficientemente dilatada- La doctora mira. Espero que si porque necesito que saque a la niña para que deje de hacerle daño.
-Parece que ya es hora, chicas. Voy a llevármela a quirófano y de mientras Alexia afuera una enfermera te dará las cosas para ponerte.
Asiento mientras T/n se va
-Estaré afuera esperando con tu hermana y Mapi. ¿Vas a estar bien? -Cuestiona mi madre.
-T/n se enfadaría si te escuchará porque es ella la que va a sacar una cabeza por su vagina, pero sí, estoy preparada.
-Guárdate bien este momento porque es único y te va a pasar pocas veces en la vida- Hace una pausa- A no ser que tengas 20 hijos- Bromea y sonrío.
-Qué va, solo 11. Para tener mi propio equipo de fútbol- Le guiño un ojo y se ríe dándome una palmadita en la espalda.
-Suerte.
Una vez en quirófano veo a las enfermeras y la doctora preparada y me asiente como diciéndome que hay que empezar. Voy a mi lugar dándole la mano a mi mujer que enseguida la agarra fuerte mientras tiene contracciones.
-Muy bien, T/n , vamos a empezar. Cuando te diga tienes que pujar fuerte.
Afirma y le doy un besa en la sien.
-Vamos amor, en poco la tendrás en tus brazos.
-1, 2, 3 puja- Ordena la doctora y lo hace
-Aaaaaahhhhh
-Otra vez
-Diossssss- Puja y si antes me quejaba de como me apretaba la mano ahora ni se compara a lo de antes. En cualquier momento me desgarrará la mano.
-Vamos, mi amor. Un poco más...
-Jodeeeeeer, no te me vuelves a acercar en la vida- Dice haciendo referencia al sexo.
-Mi amor, ojalá tuviera, pero no tengo dedos mágicos- Digo obvia y todos se ríen menos mi mujer.
-Pues si quieres otro hijo te sentarás tu aquiiiiiiii- contracción
Pues nada, adiós a la idea de tener un equipo porque no me veo pariendo la verdad.
-Claro que si mi amor.
-T/n, dos pujadas más ya tiene la cabeza fuera.
De un momento para otro se escucha un llanto fuerte.
-Hora del nacimiento las 11:11 am-Dice un enfermero mientras apunta en un papel.
-Vaya, tiene unos buenos pulmones. ¿Quieres cortarle el cordón?- Me pregunta y yo me acerco insegura viendo a mi hija por primera vez.
Siempre he pensado que todos los bebés son feos por lo menos los primeros meses, pero mi hija es preciosa, normal tiene mis genes.
-Segura?
-Sí, toma- Me da unas tijeras y con su ayuda se lo corto.
La doctora coge a la bebé en brazos y se acerca a T/n.
-Aquí está tu hija. Te la voy a poner en el pecho para que vuestro primer contacto sea piel con piel y escuche tu corazón para crear el vínculo.
Yo estoy todavía un poco apartada para que tengan su primera acción madre e hija.
Se me escapa una lagrimilla cuando las veo a las dos juntas pensando en la suerte que tengo de tener a mis dos chicas.
-Enhorabuena, chicas- La doctora me da una suave apretón en el hombro y se va dejando a una enfermera.
-Ven aquí Ale- Me tiende la mano y la cojo- Mira qué bonita es
-Es preciosa, como tú- Digo embobada, acerco mi dedo índice tocando su carita y ella me lo agarra con su manita.
-Mía, Mía Putellas T/a
Me encanta- Le doy un suave beso en los labios, pero me separo por un carraspeo
-Siento interrumpir, pero debemos llevarte a una habitación y llevar a esta pequeña a bañarla, pesarla... Cuando terminemos os la traeremos a la habitación.
Bufo mientras quito mi dedo de su manita y veo como se la llevan.
-Mientras te suben a planta voy a avisar a Alba, Mapi y a mi madre, pero conociéndolas ya está todo el equipo en el pasillo haciendo de las suyas.
-Ves a poner orden... Mami- Con una sonrisa burlona me da un último beso y salgo hacia el pasillo de maternidad donde escucho mucho ruido.
-Por favor ya os lo he dicho unas veinte veces y no lleváis ni 2 horas. Podéis bajar más la voz y no entorpecer el paso del pasillo-Dice una enfermera ya enfadada.
-Pufffff cuanto tarda en salir un bebé por un coño?- Como no, Leila pregunta.
-Leila!- La regaña Irene mientras las otras se ríen- Técnicamente llevan poco tiempo, Mateo tardó 10 h en salir.
-Si, yo estuve con Alexia 10 h y con Alba 13 h. Solo llevan 5 h- Dice mi madre.
-Normal, así de lenta ha salido- Se mete Patri con Alba y recibe una patada en la espinilla.- Auuu que mis piernas son valiosas... tortuga
Alba le da otro golpe más fuerte y termino por reír a carcajadas, sobre todo por la cara de la enfermera haciendo que me noten.
-Alba como me la lesiones te pongo a ti a correr y chutar balones eehh- La pico y me saca la lengua cruzándose de brazos.
-¿Cómo está? - Pregunta mi madre.
-Si eso, como está nuestra chica favorita- Apoya Aitana
-Pensé que yo era vuestra chica favorita- Dice Claudia con un puchero.
Todas rodamos los ojos divertidas.
-Está bien, agotada pero bien. Ahora la subirán a una habitación y supongo que podré verla.
-¿Cómo que podrás? Podremos- Dice Mapi y todas están de acuerdo con ella.
Ruedo los ojos con fingida irritación y voy a un enfermero a preguntar en qué habitación está.
-¿Y la niña?- Pregunta Sandra.
-También está bien, se la han llevado a limpiarla, vestirla, pesarla... Luego la traen cuando terminen.
Voy a la habitación tocando la puerta suavemente y abro encontrándome con el amor de mi vida.
-Amor, las chic... - Soy interrumpida por una avalancha de personas entrando en la habitación.
-Hola chicas- Saluda T/n
-Joder, te ves en la mierda- dice Leila e Irene le da un golpe en la nuca.
-Gracias, amiga, yo también me alegro de verte- Rueda los ojos, pero acepta un abrazo de Lei y todas una por una van a hacer lo mismo.
-Oye, no me robéis a mi mujer.
-T/n me prefiere a mí, solo que no te lo dice para no hacerte daño- Dice Patri sacándome la lengua
-No, me prefiere a mí- Leila se mete
-No, a mí- Esta vez Jenni
Y se monta un alboroto entre Pina, Leila, Patri, Jenni, Mapi, Aitana y aunque no se crea, mi madre.
Riéndome me siento en la cama cuando T/n me lo pide para apoyarse contra mí. Le doy un beso y sigo mirando el espectáculo.
-Son increíbles- Comenta T/n en voz baja.
-Me prefieres a mí ¿verdad? - Digo bajito y bufa rodando los ojos.
El alboroto se detiene de golpe cuando la puerta de la habitación se abre y entra un enfermero con una cuna.
-Os traigo a vuestra hija.
Todas hacen un pasillo dejando que el enfermero se acerque a la cama. Todas tienen cara de idiotas mirando a Mía y yo la primera.
-Gracias- Agradece mi mujer y se incorpora un poco para cogerla.
-No creo que deba haber tanta gente en esta habitación...- Comenta el joven enfermero. Normal hay más de 20 personas dentro de la habitación, no sé ni como cabemos.
-Créeme que no se moverán todavía, aunque traigas a los seguratas. Pero no te preocupes, luego las saco a todas.
-Vale, pero por favor, cuando termine el horario de visita que salgan- Asiento y se marcha.
-Wow qué pequeñita- Susurra Leila
-Es un recién nacido idiota- Le da un golpe Alba y todas se ríen.
-Qué bonita- Esta vez es Sandra la que susurra.
-Normal, si se parece a su tía favorita- Patri presume
-No, yo soy su favorita- Jenni dice
-No, lo soy yo, que para eso soy hermana de esta idiota- Ahora Alba se mete.
Ahora se forma una discusión entre todas menos mi madre sobre quien es la tía favorita. Con el ruido que están haciendo a Mía se le empiezan a poner una mueca en los labios y llora.
-Chicas, parad- Las regaño y enseguida paran apenadas.
-Ya elegirá ella quien es su favorita, pero seguro que todas lo sois- Dice mi mujer en un intento de consolar a todas.
-Pero yo lo seré más- Susurra Jenni y les doy a todas una mirada molesta haciendo que no sigan hablando.
-¿Cómo se llama al final?- Pregunta Claudia después de que T/n logre tranquilizar a la niña.
Miro a mi mujer y asentimos
-Mía, Mía Putellas T/a- Digo con orgullo
-Wow te queda perfecto Putellas, un nombre posesivo- Se burla Mapi y yo le sacó la lengua.
-Ahora puedo decir que es Mía- Y todas se ríen.
Todas pasan por la cama para acariciar y coger a Mía hasta que T/n llama mi atención.
-Amor, ¿quieres cogerla?
La miro y niego con la cabeza insegura. Me da miedo que se me caiga o pueda hacerle daño o algo así...
-No me digas que la gran Alexia "la reina" Putellas tiene miedo de coger a un bebé- Se mofa Andrea Pereira y le saco el dedo.
-Amor, acércate aquí porfa- Me pide y lo hago enseguida- No tienes que tener miedo cariño.
-Pero y si la cojo y se cae o le hago daño en la cabeza o empieza a llorar porque no le gusto o... -Me interrumpe
-Amor, también es la primera que cojo un bebé y no a pasado nada. Estoy segura de que Mía está ansiosa por conocer a su mami.- Dice sonriéndome tiernamente
Mi madre me ayuda a colocar los brazos correctamente dándome aliento y T/n me la da suavemente.
Una vez esta en mis brazos siento que me he enamorado más de ella si es posible. Se acurruca en mis brazos y me aprieta el dedo quedándose dormida.
-Al final no te ha comido- Se burla Leila, pero no le presto atención, ya que solo tengo ojos para esta cosa tan delicada que ahora depende de mi, mi hija.
Levanto la cabeza y miro a mi mujer que está sonriendo dulcemente como solo ella sabe.
-Te amo, mi amor.
-Yo te amo mucho más- Le doy un suave beso lleno de amor y agradecimiento.
-Ja, tengo todo grabado. Voy a volver loca a las fans- Dice Patri.
Sonrío sin poder evitarlo.
Doy gracias de tener a mi increíble mujer y a estas chicas en mi vida sabiendo que siempre van a estar ahí para mi y estoy superagradecida de poder criar a mi hija con ellas, a mi alrededor, mi familia.
124 notes · View notes
chubbky · 1 year
Text
Tumblr media
🌻
Vuela alto abejorro, trota fugas por los prados mi cordero, recuestate en mi regazo minino.
Pega cabezazos a quien te moleste o los tuyos, se merecen tu castigo tiernamente feroz.
No dejes que corten tus alas otra vez, no dejes que esquilen tu esponjosa lana ni que saquen tus finos bigotes.
Vuela, corre, escabullete por los prados y sueña libremente, que nada te rocíe por ser feliz lejos de lo que conocemos y mas haya de la comprensión del resto.
Vive y deja vivir, que no tener alas no signifique el descenso si no el ascenso, que sea una nueva oportunidad para ti y para quien tu elijas.
Mi abejorro, con bella nariz y bellos ojos, demuestra tu extravagancia a este plano mundo.
Tumblr media Tumblr media Tumblr media
21 notes · View notes
seddenostalgia · 5 months
Text
Fue un buen cabezazo encima. Totalmente fuera de contexto nunca más va a meter un gol así
6 notes · View notes
yinnydegoxs · 8 days
Text
¿Amor o amistad? Parte 42
Despertó de un momento a otro, desorientado y adolorido, cuando abrió sus ojos se encendieron para ver de nuevo, todo se veía negro, podía suponer que estaba con las cuencas cubiertas, al mismo tiempo podía notar una mordaza en su boca cuando se orientó lo suficiente y unos fuertes amarres que sujetaban sus muñecas, rodillas y tobillos, al punto de ser más que incomodo, quizá esa sensación dolorosa fue la que poco a poco lo fue despertando, intento invocar sus manos, pero al tener las reales completamente restringidas las réplicas no parecían coordinar para poder moverse, sin mencionar que el calor que sentía interfería con sus señales mágicas.  
Intento forcejear las ataduras, si aún fuera un esqueleto, deshacer los nudos sería pan comido incluso estando en celo, pero esa opción ya no era viable; recordando aquello, su alerta volvió a saltar, ¿cuánto tiempo estuvo inconsciente? ¿Habían pasado horas, días? Aún sentía el horrible calor en su vientre, así que no podía haber pasado mucho tiempo, sin embargo, que sintiera aquello con mucha más fuerza indicaba que aún estaba en esos días probablemente en los que empezaba a ser mucho más insostenible.  
—Oh, tanto movimiento, ¿se ha despertado doctor?  
Se quedo quieto en el lugar, alzando la cabeza levemente hacia donde había oído a quien lo había atado, aún si quisiera, pelear no era una opción, escucho los pasos de quien venía, con un leve chapoteo, lo que le hacía entender que posiblemente su andar fuera imperceptible si no ponías atención. De un momento a otro la venda de sus ojos fue retirada de sus cuencas, las entrecerró un poco, sin poder ver mucho al inicio por el cambio de luz, pero una vez enfoco la vista, pudo ver esa figura harapienta, desalineada y desagradable de su captor.  
—Ha pasado tiempo doctor~ un placer volver a vernos cara a cara~ —sonrió de lado, tomándolo bruscamente del mentón —Debo suponer que el espléndido y prestigioso doctor Gaster aún me recuerda.  
Apretó sus dedos, clavando las garras por el cuello logrando que el otro se quejara levemente.  
— . . . —frunció el ceño molesto, volviendo a forcejear.  
—Oh, seguramente me recuerda, aunque ha pasado tanto… de verdad extrañaba verlo… tan cerca… —rio relamiéndose.  
Gaster intento retroceder la cara al momento que el maldito gato pasaba la áspera lengua por una de sus mejillas, apenas lo consiguió uso el peso de su cuerpo para darle un cabezazo al hocico, haciendo que casi cayera hacía atrás por el golpe. El captor solo se llevó la mano a la nariz, gruñendo por lo bajo antes de recomponerse.  
—Realmente quería ser amable doctor… pero parece que aún no entiende su posición.  
Dicho aquello, sin ningún tipo de miramiento volvió a sujetarlo del mentón y uso la mano libre para pegar con el puño cerrado contra su vientre con bastante fuerza, como reflejo el científico tosió aún con la mordaza puesta, apenas tomó algo de aire miró con furia al otro. Esto solo hizo crecer la sonrisa siniestra que con poco esfuerzo había ocultado, araño su mentón con clara intención de hacer daño y luego saco de uno de sus bolsillos la pequeña pero perjudicial picana eléctrica lo que hizo al contrario tensarse al momento.  
—Me alegra taaaanto haberlo estado vigilando en las sombras, uno aprende a ser… invisible con mayor facilidad cuando está en la lista negra de nuevo, ¡y esta preciosura que encontró hace un tiempo es muy útil! ¡Tomar una caja cuando se fue! No sabe lo fácil que es robar comida y lo que sea desde que la tengo y sabe, —la apoya contra uno de los hombros —no solo es que de un shock que inmoviliza, puede hacer mucho, pero muuuucho daño~  
—¡. . .! —se retorció, intentando alejarse de aquello.  
Gaster solo apretó con fuerza los dientes contra la mordaza, ahogando un gemido de dolor cuando aquello volvió a darle una descarga, pero esta vez no dejo que lo noqueara, no, eso sería demasiado fácil; Jack solo rio y cambio de lugar el aparato para dar otra descarga aleatoria, cuando veía que estaba llegando al límite simplemente lo alejaba. Cuando aquellas descargas comenzaban a ser un peligro real, cuando bajaban un pequeño porcentaje de vida, era cuando debía parar, al menos para no terminar por desmayarlo de nuevo.  
Jugó durante unos minutos más hasta que se acabó la batería, Gaster jadeo fuertemente contra la mordaza, el gato solo arrancó el trozo de tela enrollada, mirándolo unos momentos mientras recobraba un poco de aliento.  
—¿Duele doctor? Es un monstruo jefe después de todo, ¡esto no es nada! ¿verdad? —le levanto la cabeza —¿Sabe que si duele doctor? ¿Sabe lo que he tenido que pasar? Me he convertido en una basura para todos los monstruos, ¡ir por segunda vez a la lista negra! Todo porque no me acepto, ¿por qué no hacerlo? ¡Dejó que me acercara tanto…!  
—Tks —le escupió en la cara —ya eras… una… maldita basura… desde el inicio, Jack.  
—¿Sigue sin comprender en que posición esta? —se relamió donde había manchado —bueno, esa terquedad suya es lo que siempre lo hizo malditamente atractivo, —volteo y se acercó a una mesilla destartalada —no sé qué hizo en este tiempo, pero debo decir que actualmente tiene un cuerpazo, mucho más sólido… y sensual.  
Gaster se sobresaltó al ver unas tijeras en sus manos, Jack se acercó de nuevo a donde estaba, agarrando la tela de la camisa y pasando sin el menor cuidado las hojas oxidadas, destrozando la ropa superior para dejar su pecho al descubierto, se tensó completamente cuando puso una mano por uno de los costados de su pecho y dio un arañazo sorpresivo, yendo de un lado a otro.  
A pesar de que podía sacar una mueca de dolor, él resistió a no soltar ningún sonido.  
—El rey va a asesinarte por esto.  
—Oh, es cierto, cierto —golpeo delicadamente la tijera contra su cara —pero a estas alturas ¡qué importa! —tiró la tijera a un mueble al azar del lugar —lo tengo solo para mí, el resto de las cosas se pueden ir al diablo.  
Dicho aquello agarró por el pecho a su presa, apretando en distintos lados, rompiendo de un par de arañazos las tiras que cubrían sus pezones y claro que fue directo a ellos; Gaster maldijo por lo bajo, aquella sensación de tener a otro tocándolo lo repugnaba, además de sentir como pequeñas pero dolorosas puntadas le daban por el cuello cada que tocaba sus áreas sensibles, un monstruo con marca solo puede sentir placer con su pareja, así que cualquier otro que le pusiera las manos encima, hacía que aquello fuera un sufrimiento.  
No es como si eso le fuera a importar a ese gato obsesionado con su persona.  
—Deja de tocarme… —apretó los dientes cuando sintió una mordida en su pecho.  
—Quizá debí dejarlo con la boca tapada si de todos modos no va a gemir para mí.  
—Una basura como tú… —Afiló la mirada.  
—Parece que tendré que adiestrarlo, es decir, es un orgulloso monstruo jefe después de todo… pero parece tener periodos débiles, ¡lo he visto por años! ¡Como viene a New Home y se queda aquí en ciertas fechas! Y sé de sobra que ahora es una de esas fechas.  
—Eres un maldito enfermo, ¡¿me has estado vigilando como un puto acosador?!  
—Que palabras tan crueles, solo soy un pobre monstruo enamorado… y no aceptare que otro lo haya marcado, haré lo que sea necesario para borrar esa marca~  
Dicho aquello lo levanto de la silla donde lo tenía atado, solo para tirarlo a una cama de acero que arriba parecía tener como colchón un montón de pasto marchito rejuntado y una sábana sucia encima, sin perder mucho tiempo, tomo un par de sogas hechas de telas rotas para atarlo a su gusto en la parte inferior y una cuerda por el cuello para mantener la cabeza en el sitio, al momento que intento resistirte, tomo con fuerza la soga y apretó alrededor de cuello. Para el científico era una experiencia nueva todavía la de necesitar aire y era mucho peor la sensación de la asfixia, sintió que por un momento su visión se ponía borrosa y el ahogo casi lo hace perder la consciencia, más consiguió una bocanada de aire cuando lo soltó de golpe, tosiendo un poco por el lado.  
—¿Apesta tener que respirar no doctor?  
—Eres un… jodido… desquiciado… —jadeo recuperándose un poco.  
—Oh sí, tal vez —agarro con su larga cola otro objeto al azar —pero bueno, si coopera conmigo estoy seguro de que… la experiencia no será tan dolorosa.  
Luego de ello, simplemente trajo un viejo cuchillo con el mango atado en varios lugares por telas, pero con un filo demasiado bien conservado, lo deslizo por el pecho hasta el vientre del otro, haciendo una fina línea de corte con apenas apoyarlo contra su piel, para luego pasarlo y cortar las ropas aún intactas, luego subió el filo por todo el largo hasta el cuello, cortando parte de las vendas que cubrían la marca.  
Claro que Gaster sabía a donde iba con todo eso, no era solo palabrería.  
—Cooperar… ni lo sueñes…  
—Es tan terco, pero adoro eso de usted querido doctor~  
Hizo un corte más profundo por la altura del vientre, lo suficiente como para hacer que tuviera un ligero sangrado, aquello fascinaba al desequilibrado monstruo, por supuesto que lo había visto antes, uno de los pocos de su especie que podían tener algo parecido a la sangre en lugar de solo polvo o con un descuento en su barra de vida, relamió los restos que quedaron en el cuchillo para limpiarlo y volver a pasarlo esta vez por sus muslos, llevándose la poca tela que aún le cubría, Gaster no tenía intenciones de quedarse quieto por demasiado tiempo, pero cada que se inquietaba demasiado, el gato procedía a apretar la venda de su cuello hasta dejarlo semi consciente.  
—Debe disculparme doctor, estoy realmente emocionado y no puedo controlar mi pulso~  
—Vete al diablo…  
El monstruo rio jocoso y tiro de las cuerdas que ataban desde las rodillas al científico haciendo que no pudiera mantenerlas juntas, aquello lo alerto demasiado, más solo consiguió hacerse daño intentando alejar al otro de él; Jack solo sonrió con cierta malicia, pero sobre todo con superioridad mientras presionaba con sus dedos alrededor de su entrada, clavando con cierta impaciencia sus garras y abriéndolo para notar el calor y el olor dulce que desprendía de por sí, hacerlo con más fuerza desde ese punto.  
—Parece que está impaciente doctor, no pensé que fuera de esos que les gusta el dolor~  
—Por supuesto que no me gusta, lunático.  
—Si, pero esta más que listo, como aquella vez en el laboratorio, si ese maldito rey no hubiese intervenido habríamos tenido una noche esplendida~  
—¡No hables así del rey! —gruñó molesto, apretando fuerte las manos.  
—¿O qué? ¿Me acusara de nuevo? Ya estoy en el fondo, no me importa lo que suceda, aún con marca o no, seguro que si yo también lo “marco” de otra forma, lo recordara.  
Dio una fuerte mordida a una de sus piernas, pasando la lengua por arriba de la marca que soltaba pequeñas gotas de su sangre, tal como dijo, ya estaba en el fondo así que solo se deshizo de la parte de debajo de la ropa, él de verdad estaba emocionado con la idea, con lo suyo completamente listo, el científico miró aquello con horror, más no iba a pedir o rogar que no lo hiciera, de nada serviría, solo volteó la cara y cerró fuerte los ojos al notarlo con la punta frotarse por la zona.  
Aquel gato solo sonrío de nuevo y sin nada de preparación, lo metió hasta el fondo.  
Gaster solo tuvo medio segundo para asimilarlo, justo antes de una oleada mágica de puro dolor recorriendo toda su columna, como si muchos pinchos se hubiesen clavado hasta el fondo del interior de su vientre, apretó los dientes con fuerza, no iba a darle el gusto de escucharlo, al menos, eso era lo único que podía hacer en ese momento; pudo notar con los ojos entrecerrados como el otro parecía fascinado, en otro mundo si se podía decir, con esa sonrisa de absoluto éxtasis.  
El dolor lo hizo volver a no fijarse en los detalles cuando comenzó a moverse como una bestia salvaje, clavando fuerte las garras en su cadera, a pesar de que estaba lubricado debido a los fluidos del celo, su interior estaba completamente tenso, como si aquello pudiera hacer que retrocediera, pero eso fue tomado como un reto para el otro, golpeando contra su cadera y tomando el bailarín cuchillo enrollado en su cola para clavarlo a un lado de la cara del científico, más cerca de su cuello que otra cosa, cortando sin cuidado las vendas restantes para descubrir la marca.  
Gaster solo apretó con fuerza las manos, intentando desviar la señal de dolor a otra ubicación más tolerable, más era completamente inútil, sentía como si su interior estuviese siendo arañado y pinchando, además de la frustrante sensación de desgarre de aquello que punzaba su interior, el gato llevo el puño cerrado arriba y golpeó el vientre con bastante fuerza, apenas arrancando una queja suprimida, mantuvo presionando con el puño contra él. Al golpear sus puntos sensibles internos, el dolor no hizo más que aumentar.  
Aun así, estaba determinado a no darle el gusto de oírlo.  
—Ah, a pesar de estar marcado sigue siendo alguien muy estrecho doctor —lamió un lado de su cara.  
—Nh…—volteo la cara, asqueado.  
—Realmente está probando mi paciencia, me asegurare de “marcarlo” bien, creo que sabe a lo que me refiero.  
— ¡. . .! —se retorció al entender esas intenciones.  
No, ni siquiera Asgore había hecho eso, él no podía ir más lejos.  
Jack aumento la intensidad, arañando el vientre con rudeza clavando los dedos para hacer que apretara más mientras empujaba lo más profundo que podía, Gaster intento con las pocas fuerzas que tenía romper las ataduras de sus manos, antes de sentir una de las zarpas del otro, tirando de golpe la soga que lo ahorcaba, haciendo que su cuello se cerrara casi por completo, inevitablemente comenzó a jadear en busca de oxígeno pasado cerca de un minuto sin poder respirar, el otro solo se deleitaba con el hecho de que se pusiera muy apretado así que ahogo más a su presa antes de terminar con ganas hasta lo más profundo.  
Cuando sintió que había soltado hasta la última gota, lo saco.  
—Oh sí~ que bien se siente soltarlo todo, ¡venía guardando magia por semanas! —soltó la cuerda para dejarlo respirar de nuevo.  
—¡Agh! Ughhh…  
No pudo contener los quejidos por la nueva y horrible sensación, su interior ardía, pero de una manera muy diferente, incluso peor que cuando había tomado toda esa determinación concentrada, su cuerpo rechazaba por completo la magia que intentaba inseminarlo a la fuerza, su vientre parecía agonizar con la sensación de quemadura interna y como si no bastara con que su mente se rehusaba a aceptarlo, su cuerpo instintivamente intentaba expulsarlo todo. Claro que eso no le gusto demasiado al otro monstruo que con el cuchillo hizo una línea gruesa en el muslo.  
—Parece que me tomara un par de intentos que me acepte doctor, pero tiene suerte, necesito recargar fuerzas, —tomo la mordaza y después de algo de forcejeo, logro ponerla —así que le dejare pensar si realmente no quiere cooperar.  
Tomó el cuchillo en sus manos y lo clavó con fuerza en un mueble astillado que estaba a poco más de un metro de la cama, a pesar de todo, el gato realmente estaba en las nubes, ahora solo tenía que enseñarle a su exjefe quien tenía el mando. Con una risa mal contenida, desapareció en las sombras con la segunda picana cargada.  
Gaster respiró hondo, intentando no perder la calma, la sensación de ardor del celo estaba completamente opacada por la repugnante magia de su captor, ahora que se había ido tenía que centrarse en lo importante, se podía permitir mirar alrededor, examinando alguna posible salida o al menos una forma de cortar sus ataduras, el lugar parecía un sector oculto de las cañerías bajo tierra de New Home, no había otro lugar con alcantarillas, era el único que necesitaba redirigir las aguas al núcleo.  
Agitó la cabeza, su mente estaba intentando divagar para no pensar en el dolor y no podía concentrarse, cerró los ojos y volvió a respirar, recuperando del todo el aliento, ahora, no podía dejar que lo quebrara, en el momento que pasara, se había acabado el juego. Tenía que resistir todo lo posible hasta que su celo desapareciera, que era algo que solo podía cortar con Asgore y lo acababa de comprobar de la peor manera imaginable; de todos modos, si lograba soportar su celo entero con ese desquiciado y volver a tener control total en su magia, lo haría pagar con su vida.  
Lo que no sabía era que estaría con esa clase de “tortura” por los siguientes días iban de mal en peor, escalando en daño y agregando nuevas cicatrices a la par de pérdida de puntos en su barra de vida; por alguna razón, no quería dañar su rostro, no demasiado, quizá por el hecho que era lo único que prácticamente no había cambiado o porque en su retorcida cabeza, era su parte favorita y no quería arruinarla. Aunque eso no le impidió obligarlo a tomar su miembro con la boca, a cambio de dejarle unas horas de descanso si lo dejaba satisfecho, la única razón por la que no se lo arranco al momento de aceptar ese trato era por el hecho de que mantenía peligrosamente cerca el cuchillo en su miembro, a cualquier amago y los dos saldrían perdiendo.  
Los choques de magia que mandaba la marca de su nuca al resto su cuerpo cuando realizaba algún acto sexual o jugueteo le impedían sentir cualquier tipo de placer, lo cual irónicamente agradecía, jamás se perdonaría a si mismo de sentir placer con otro monstruo que no fuera el rey.  
—No suele hacerlo muy seguido, ¿uh? Bien, le enseñare como.  
Lo cazo por la cabeza y lo metió entero hasta golpear su garganta, notando su lengua tener ligeros rasguños cuando comenzó a embestir su cara, no tardando demasiado en conseguir que el otro terminara en su boca a propósito para que saboreara aquello, lo sacó antes de que quisiera morderlo de todos modos y le tapó la boca hasta que finalmente tragara.  
—¡Cof! —tosió ahogado, al final lo hizo solo para poder respirar.  
—No sabe tan mal, ¿verdad? Tomándolo directamente no lo escupes.  
—Tks… —lo miró furioso, sus ojos brillaban en rosa casi rojo.  
—Sigue haciendo la ley del hielo, ¿sigue molesto porque sigo rellenando su vientre?  
—. . .  —solo lo fulmino con la mirada.  
—Su alma es tan terca como usted mismo, pero mi magia tarde o temprano la alcanzara doctor… aunque empieza a ser molesto… si pudiera encargarme de quien hizo la marca…  
Gaster lo miró un poco alarmado un momento, pero luego de unos segundos, no pudo hacer otra cosa que reírse a carcajadas en su cara, después de días de solo chasqueadas de lengua y gruñidos.  
—¿En serio has estado vigilándome bien? ¿realmente eres estúpido no es verdad?  
—No me ha hablado en días ¿y eso es lo primero que se le ocurre decir?  
—Debo decir que, como acosador obsesivo, dejas mucho que desear, ¿de verdad no sabes a estas alturas? —lo miró como basura.  
—¡Nadie del maldito subsuelo lo sabe!  
—Oh, claro que algunos lo saben ¿quieres que te facilite el trabajo? Esta marca, quien me la hizo…  
El gato empezó a molestarse al notar que no había podido quebrarlo ni un poco.  
—¡¿Quién es?!  
—Es el mismísimo rey… —sonrió de lado —Asgore me marco.  
—¿Qué…? —lo miró estupefacto unos segundos, procesando aquello —Je… Ja…—comenzó a reír nervioso —¿Cree que soy idiota? El rey esta locamente enamorado de la reina, usted podrá ser realmente un monstruo muy atractivo, pero… ja, por favor doctor, ¿es por qué le gusta el rey cierto? Ese hombre no tiene ojos para otro.  
Aquello se sintió como un viejo puñal, pero mantuvo una sonrisa de lado mientras lo veía.  
—Puedes pensar lo que quieras, si el rey aún piensa en la reina, probablemente puedes verme como un simple juguete de la realeza entonces.  
—Tiene que ser una jodida broma, no es cierto.  
—Es muuuuy cierto, nunca me ha interesado tener pareja, sin embargo, haría lo que sea por Asgore, así sea ser solo un aliviador de estrés para toda mi vida.  
—No… no… —se llevó las manos a la cabeza.  
—¿Qué pasa? ¿Te comiste la lengua?  
Jack perdió completamente los estribos y llevó sus manos al cuello del científico, apretando más fuerte que otras ocasiones, clavando las garras con rudeza contra la piel, solo había un maldito monstruo del que no podía encargarse en todo el subsuelo y ese era el rey; mientras más lo aprisionaba, los puntos de vida empezaron a bajar, haciendo que rápidamente la barra comenzara a verse negra.  
—¡¿Por qué?! ¡¿Por qué el rey?! ¡Podría haber sido yo! ¡YO habría dado todo! ¡¿Es por su estúpida lealtad?! ¡¿Ser el juguete del rey es a todo a lo que aspira?! ¡Yo lo amaría más de lo que el rey nunca lo hará!  
—Ack… en… tus… su… sueños…  
Apretó los dientes con fuerza, furioso de esa soberbia que tenía al mirarlo en esos momentos, sabiendo que nunca tuvo oportunidad en primer lugar, aquello le hizo gritar con frustración y tomar el cuchillo con tal fuerza que rompió el mango, pero no le importaba. Gaster pudo notar a duras penas con los ojos apenas abiertos, de forma muy borrosa la forma del arma y sabía que había jugado demasiado con fuego, más no se arrepentía de nada de lo que había dicho.  
Terminó por cerrar fuerte los ojos cuando el filo atravesó su hombro hasta traspasar de un lado a otro, perdiendo mucha vida de golpe, ni siquiera tenía el aire suficiente para quejarse del dolor, sentía los gritos, ahora indescifrables para su nivel de consciencia.  
—¡Hey!  
Parte 41
Parte 43
2 notes · View notes
armatofu · 1 year
Text
Tumblr media
0 notes