#El hecho es que debí ser menos fría | Explore Tumblr Posts and Blogs

tengomilpalabrasparati · 2 months

Text

No permitas que la indiferencia destruya tu oportunidad de amar

Nunca voy a comprender porqué después de haber tenido una de las mejores citas con el hombre que desearía que se convirtiera en el amor de mi vida, de pronto todo se torna sombrío, y él ahora me ignora y desaparece del mapa. En unas cuantas horas, mis sentimientos parecen una rueda de la fortuna y paso de ser la mujer más feliz, a mirarme en el espejo y notar todos mis defectos.

Mi autoestima esta por los suelos, pienso en todo lo negativo que hay en mi y encuentro mil razones del porqué nunca le voy a gustar. Al siguiente día tomo fuerza y espero desesperada a que me envíe un mensaje, una llamada, algo que me haga sentir deseada y entender que solo fue mi miedo, pero no, el tiempo pasa y no hay ni una señal de vida.

¿Qué hice mal? Fácil, yo también actué con indiferencia, no di muestras claras de que sintiera algo por él. Iniciamos una contienda por ver quién es el más fuerte dentro de este juego del amor. Por supuesto, si él no me llama, yo tampoco lo voy a hacer. ¿Qué caso tiene? Pronto se dará cuenta de que me gusta demasiado, mis sentimientos estarán servidos en bandeja de plata para que los destruya y me deje con el corazón roto.

Pero esto es un error, porque mientras más lo niegue, más me va a gustar, y entonces su indiferencia me va a doler más de lo que imaginaba. El hecho es que debí ser menos fría, tomar en cuenta que tal vez le gusto o tal vez no, pero que debo decir lo que siento porque no merezco vivir en la incertidumbre de saber si le intereso a alguien o no, porque entonces el juego se prolonga más de lo deseado.

Con lo fácil que sería hacer a un lado el orgullo y ser yo quien diga cuánto me ha gustado estar a su lado, ser yo la que envíe ese mensaje, no dejar que surjan malos entendidos y simplemente ser honesta con lo que deseo; pero no, algo me detiene, estoy dentro de un estira y afloja porque no quiero perder. ¿ Y qué gano? Al final tal vez él se aleje de mi lado por no haber expresado mis sentimientos de manera adecuada.

No es sencillo: se forma un nudo en la garganta, los nervios me ganan y no sé cómo decir lo que siento. Me detengo por un momento a analizar hasta donde puede llegar el daño, y sin embargo, qué simple sería si todos tuviéramos el valor de decir lo que realmente deseamos. No detenernos por miedo al rechazo, sino hacer las cosas con precaución con la certeza de que aunque no pase lo que deseamos, por lo menos hicimos el intento. Tal vez saldríamos menos dañados de esa forma, en lugar de tratar de esconder nuestros sentimientos, esa actitud duele más. Después de todo, como dicen por ahí, una cicatriz es solo prueba de que estamos vivos.

ℜ𝔬𝔰𝔞🖤

#No permitas que la indiferencia destruya tu oportunidad de amar #El hecho es que debí ser menos fría #una cicatriz es solo prueba de que estamos vivos #frases #citas #texto #foto

7 notes · View notes

soloandresg · 2 years

Text

Pensamientos nocturnos

Debo dejar de pensarte, eres parte de mi, parte de lo que soy ahora, te lo debo a ti pero el pasado es pasado y no puedo cambiarlo, es raro sabes, unos días siento que te extraño, otros me dan igual, a veces siento rabia, no pensé que una ruptura amoroso fuese una montaña de emociones, supongo y me hago la ilusión que tu duelo lo haces en las noches o cuando estas sola, y tu mente juega contigo y lo único que hace es que pienses es en mi o el otro lado de la moneda, el mas realista, no estas teniendo un duelo, estas siendo feliz y tienes eso que tanto le pediste a la vida, alguien que te admire, te tomes fotos, que quiera estar contigo las 24/7, alguien que te lo demuestre, un verdadero compañero sentimental siendo formales, no como yo que de cierto modo hacía eso pero no con la suficiente fuerza, me odio por ser frio, tan cuadriculado, tan inseguro para decir y hacer lo que quiero, odio ser una persona inmadura en las cuestiones del amor, la vida, en todo, y ahora debo cargar con el peso de saber que estas con otra persona, odio ser tan pensativo, crear tantos escenarios de ti con él porque antes esos escenarios que creo en mi mente, son los que pensaba para nosotros 2, solamente que el protagonista de tu vida ya no soy yo, eres fría, calculadora, y sabes controlar tus emociones, la vida misma se encargo de hacerte una persona dura, pero en el fondo eres esa niña tierna, caprichosa que desea que la traten como una.

Creo que simplemente me hiciste caso y estas haciendo lo que te pedí y es que pretendas que no existo, supongo que no estábamos hechos para estar juntos, recuerdo lo que una vez me dijiste que tus parejas o exparejas mas bien, siempre encontraban al amor de sus vidas luego de estar contigo, supongo que en esta ocasión la vida fue justa contigo o quiso tener un detalle lindo hacía ti por primera vez en tu vida y es que esta vez yo fui el viaje y no el destino, con el dolor del alma y luchando por no romperme en mil pedazos cada vez que pienso esto, mereces esa paz, esa tranquilidad ese amor que me parece que estas recibiendo, espero algún tener de nuevo.

No se si sea por la melancolía del momento pero siento que solo tenia una bala, un cartucho para eso y no lo supe aprovechar, escuche varias veces de diferentes profesores, aprovechen la universidad porque quien quita que aquí encuentren a su futuro socio, sus futuros amigos o que encuentren el amor de su vida pero ese tren ya partió para mi, pero al menos acabé la universidad sabiendo que es el amor o una pizca de lo que puede darte. No tengo la menor idea si en alguna ocasión por error vas a leer esto pero deseo que sepas que estoy bien y simplemente me estoy desahogando por acá podría hacerlo llamando a un amigo pero no quiero, simplemente por el hecho que me dirán lo típico ‘Ud vale mas que esa vieja, ella se lo pierde, ud es un gran partido, hay mas culos que estrellas, cualquiera mujer estaría feliz de tener a alguien como ud’ pero no me puedo sacar esa idea de la cabeza que tu eras la indicada y confirmo que debí hacer lo que tanto rondo por mi mente, ser mejor persona, haberte dicho eso que te prometí que siempre tuve en la punta de la lengua y era volver a ser novios pero siempre me estaban persiguiendo esas inseguridades, los fantasmas del pasado, sabía que no te quería ver con otra persona que no fuera yo pero no cambie, no salí de mi zona de confort y ahora debo pagar el precio, cargar esa cruz y pues Ya no somos, ni seremos.

13 notes · View notes

hojaenblanco · 3 months

Text

Lo he estado pensando mucho y creo que no fue ella el amor de mi vida, si aprecio muchas cosas que me hizo sentir pero entre más la pienso y trato de pensar en cosas buenas siempre estaba más mi esfuerzo por mantener la relación pero ella casi nunca se le notaba el esfuerzo ni para estar conmigo.

Recuerdo la vez cuando discutimos y le dije que dejaramos todo así, fue la única vez donde por chat me pidió rogando que no la dejara y accedí a no terminar la relación y me seguí esforzando por que tuvieramos algo bien; pues fue un error, luego de eso siempre que me hacía sentir la peor mierda decía "es que yo una vez te rogue y yo no valgo tan poco como para hacer eso", parce, yo más de una vez le rogue por amor, porque me tratara bien cuando discutíamos, porque no fuera fría y distante, porque de verdad no me dejara cuando le daban sus crisis raras…

Ahora después de tanto tiempo y luego de ver un vídeo de unas señoras de edad hablar del amor de sus vidas y si lo seguían amando todas dijeron que sí, que aún los amaban y los iban a seguir amando. Pero yo no sé si podría al menos volverla a ver con amor, es sido la forma en que incluso me contó que ya se estaba acostando con el tipo "nada que ver" si que me destrozó el alma, fue ahí donde me hice mierda y nunca más quise saber de ella. Yo aún tenía fe de volver a verla y darle su anillo de compromiso…

Como sea, supongo que "el amor de la vida no es el amor para toda la vida" o el amor de mi vida no fue ella y nunca debí haber considerado que fuera ella. A este punto pienso más en la segunda opción, no quiero ni saber si esta viva o muerta, para mí ella es una basura y se merece nunca ser amada, el único problema es que los hombres somos pendejos y ella si es muy linda físicamente, ojalá nunca nadie la tomara para algo serio porque ella no es el tipo de mujer que uno puede tomar para algo serio… al final cuando tú estés hecho mierda es cuando se va a ir y más mal te va a dejar sin ha energías para continuar amando, es un maldito vampiro energético.

1 note · View note

eternaobsesion · 8 months

Text

"El principio del final". Siempre me han gustado los inicios, te permiten crear una nueva realidad en donde tu vida no se esté desmoronando y dejas atrás todo aquello que te atormentaba. La cuestión es que, cuando el inicio es el principio del final, es precisamente todo lo contrario, entre más tratas de correr, más te persigue todo aquello que te duele, te atrapa y te devuelve al lugar más recóndito de tu mente donde no quieres estar.

Debo admitir que me permití imaginarme escribiéndole las mejores cartas de amor, pero nunca escribiéndole una de despedida y, debe saber que el hecho me ha caído como un balde de agua fría, pues siento que he caído de un edificio de treinta pisos y me he desplomado en el concreto del piso únicamente con mi corazón, convirtiéndose en polvo al instante. Te veo demasiado lejana, aunque te tengo cerca. Solía pensar que seríamos eternos, debí saber que te perdería en algún momento, soy incapaz de mantener algo bueno entre mis manos, yo fui un error para ti, aunque tú fuiste para mí el sueño de mi vida, uno que me trajo a la vida y también me llevó a la muerte. Un amor que amé con toda mi alma y mi ser, pero que cada vez que te observaba iba más abajo, es porque por amor estaba cayendo, y el mismo amor que alguna vez me hizo florecer, es el mismo que ahora me está matando, y no es nada más que mi culpa, porque donde antes se escuchaba el sonido de tu risa, ahora lo inunda un profundo e inquietante silencio.

Debo confesarle que había noches en las que me encontraba pensando y sonriéndole al techo al imaginarme toda una vida a su lado y, quizá piense que soy un romántico empedernido al imaginarla de esa manera, usted con arrugas, pero tan hermosa como siempre y yo todo un viejo con una vida plena, pues no había mejor premio que envejecer con la persona que había tenido su corazón desde joven. Más que decepcionante, es doloroso saber que se quedará en un simple deseo de medianoche.

Te amé de una forma en la que no había amado antes, me enseñaste que te pueden doler los huesos al amar con tanta intensidad, y aprendí que también es posible que te duela el alma. Amarte fue un dolor que se extendió por todo mi cuerpo y también fue sentir la calidez de tus besos que calmaban toda tormenta en mi mente. Amarte fue un oscuro silencio y una luz llena de risas. Me llenaste de la dicha de ser un hombre emocionalmente libre, de no comerme ningún sentimiento, y fue así, a tu lado me sentía libre. Te quedaste con cada parte de mí, con mi corazón, mi alma, mis pulmones y me he quedado solamente con un vacío lleno de lo que alguna vez fuimos.

Ya no eres mía, y no te siento mía, no me siento con el derecho de hablarte, ni de besarte, ni de tocarte, menos de mirarte. Siento que, como te perdí, perdí también cualquier derecho sobre tu persona.

No sé si estoy cometiendo un error al desaparecer de esta forma, como tampoco sé si es un error el quedarme y observar cómo nos destruimos mutuamente, porque, amor, tú dejaste de ser tú y sé que no puedo tenerte de vuelta, estás aquí, pero sé que no estás aquí, y aunque decidas quedarte, ya te he perdido. Alguna vez te conté que yo no podía vivir sin tu presencia, pues es verdad, porque estoy experimentando lo que es estar muerto en vida, lo que no es poder respirar sin tu calor cerca, me falla el cuerpo y temo quedarme así por el resto de mis días y, debes saber, dueña de todo mi ser, que mi promesa sigue en pie y voy a amarte hasta que mi corazón deje de latir. Te has convertido en la mujer de mi vida y el amor de absolutamente todas mis existencias, nadie podrá hacerme lo que tú me hiciste sentir y tampoco nadie podrá quitarme tu recuerdo de mis pensamientos. Me cautivaste como nada, ni nadie lo ha hecho, viviré amándote y adorándote por la eternidad, porque una mujer así no se olvida, ni se supera, fue lo mejor que pudo pasarme en la vida y la amé, la amo y la amaré sin importar la distancia, las horas, los días e incluso los años. No te dejo ir porque no te amé, porque es justo que te dejo ir porque te amo como no he amado, ni amaré, pero a mi lado, ya no tienes luz y temo dejarte en una oscuridad. Me salvaste, y siempre estaré agradecido por la forma en que me acogiste cuando no tenía nada y mi mente me mataba día con día. Y aunque ahora esté muerto, tú estás viva en mi corazón.

Te amo, espero que en algún momento puedas recordar y entender que mis intenciones fueron rotundamente buenas y que te amé y te seguiré amando como recito en esta carta.

Tú, afuera, radiante, hermosa y ufana, y yo, destruido, enloqueciendo y con un hoyo gigante en el alma.

Hasta siempre y siempre tuyo, Zeús

0 notes

olaiguantisyu · 1 year

Text

no es como que no me duela, simplemente es que ya no encuentro con quien conversar de esto, por que cuando si sucedió solo me hacían sentir que estaba mal llora y que todo lo hacía mal, pero solo necesitaba a alguien que se quedara, esto me pesa todos los días y mi personalidad ha cambiado por completo ya no confío tan fácil en la gente y me he vuelto más fría, pero me prometí que iba a dejar todo lo que tenía construido para salir a buscar eso que le llamamos un día hogar, que no es algo físico, son las personas que hacen más linda la vida, así que cerré ese librito de sueños que algún día nos prometimos y lo guardo con todo mi amor, pero no hace bien quedarse recordando, no quiero enfermarme de nuevo, y lo único que pido es que me dejen de llegar de vez en cuando mensajes de terceras personas creyendo que tienen el poder en sus palabras diciendome como debí haber hecho las cosas, como si ya no viviera con una culpa por todo, cuando el ego y el corazón se rompen todo deja de ser tan importante y te alegras de cosas que los demás ya no ven o no les hacen sentido, si quiero cerrar este año como el comienzo de algo que se que no es lineal, pero por lo menos no lleno mi vacío dañando el camino de alguien más y he crecido mucho emocionalmente para entregar incluso el cariño que yo necesite y no tuve, este año lo quiero cerrar con las palabras desapego y agradecimiento, ya que tiene que haber una razón por la cual sigo acá intentándolo todo los días.

0 notes

miprofeguiadijoquehicieraunblog · 1 year

Text

Porque la paso bien contigo

Me doy cuenta ahora del craso error de mis acciones. La falta de lógica me pasó la cuenta y no evalué bien el caso cuando debí haberlo hecho. Igual el inicio fue hace años y entiendo que puede haber sido algún remanente de otro punto en mi vida donde fui menos consciente conmigo misma y me regí sólo por el miedo al abandono, y espero esta sea la última pena que tenga que pasar por ese motivo.

Si lo pienso con la cabeza fría tiene sentido; nunca ninguna acción indicó lo contrario. Siempre era tibio y no caliente… tampoco frio, pero para algo que requiere punto de ebullición, tibio es suficientemente helado.

Yo había preguntado esto antes, me había olvidado. Por qué yo? Por qué allá? Por qué no otra persona? Para lo que necesitas te sirve cualquiera, por qué tengo que ser yo. Tú respuesta siempre fue vaga, y yo creía que sólo no querías admitirlo, o no lo habías pensado de esa manera, pero me doy cuenta ahora que tu respuesta vaga era sólo honestidad, es que no habían mayores razones a por qué debía ser yo, yo sólo caía bien, no sé, habré sido simpática, servicial, siempre trataba de llevar algún regalito y no me quejaba por las condiciones.

“No sé, porque la paso bien contigo” me dices.

Y entonces pienso, bueno, y eso es? Eso ha sido todo este tiempo? Cómo no lo procesé cuando me lo dijiste? Por qué puse palabras en tu boca e intenciones a tus acciones? Claro, claro que sí, eso era todo.

Nunca me habías hablado de alguien tan así, que te sacara de onda, que te “envolviera”, tan noble, tan interesante. Y por lo mismo yo pensaba, bueno, quizá no experimentas esos sentimientos con nadie, quizás te has cerrado a sentirlos, quizás no estás disponible emocionalmente. Pero ahora me fijo que era yo, yo no evocaba nada de eso, y durante estos años justo nadie más lo había evocado tampoco. Yo evocaba la buena onda, el buen rato, y nunca iba a evocar nada más.

Me dijiste que hace años nadie te decía que te amaba, a mí tampoco, desde el 2016 para ser exactos. El 2016 empecé a ser alguien para “pasarla bien un rato” y nada más, y me da una pena inmensa pensar que yo no soy la que cohíbe, la que atrae, la que mueve el piso; yo soy la que va, la que atiende, la que llora. Yo no sé si la magia la perdí o me la quitaron, pero me siento vacía, a medias, y esto es un vistazo más a mis insuficiencias, siento que después del abuso dejé de ser mujer y ya nunca volveré a serlo.

Quién diría que [...] no me amabas.

Quién diría

Todos

Menos yo

0 notes

pseudoafrodita · 3 years

Text

Deseo que alguien te ame como yo.

¿Por qué lo terminaste?

¿Nunca te diste cuenta?

Yo te tenía para mí y tú me tenías para ti: lo teníamos todo.

A mí no me hacía falta nada más. Me bastaba con tenerte a mi lado, con saber que me querías igual que yo a ti.

Para mí la felicidad se resumía en mirarte a los ojos, tus preciosos ojos que me hacían ver otros mundos, que me llevaban a conocer el universo.

Para mí el Amor era mirarte y saber qué pasara lo que pasara tú estarías ahí para sostenerme, para decirme que ningún problema iba a tirarnos.

Para mí el cielo se sentía como recostarme en tu pecho y escucharte respirar.

Todos los días me preguntaba que había hecho bien para merecerte.

Para que alguien como tú me correspondiera con tanto amor, le daba gracias a la vida por haberte encontrado, por tener conmigo al hombre más maravilloso porque caminar de tu mano me hacía llenarme de orgullo cuando nos miraban, porque pensaba que al mejor me lo había quedado yo.

Quisiera volver el tiempo.

Quisiera que pudieras mirarte como yo te miraba, que te dieras cuenta que para mí eras lo más hermoso que pudo existir. Lo mejor que me pudo pasar.

Admiraba al hombre, al amante, al hijo.

Cada faceta tuya.

Los errores y tus cicatrices del alma que te hicieron ser quien eras.

Respetaba tu pasado y podía con él.

Ahora te veo en todos lados y me imagino que somos esos que van de la mano, o los que discuten sobre algo tonto en el auto para después besarse. Te veo en el hombre enamorado que carga flores y pregunta sonriente si quiere chocolates, los que entran a hurtadillas a casa y se preocupan por la hora de llegada, nos veo en la chica molesta por celos y el chico que la abraza tan fuerte que la hace reír y entonces vuelven a amarse.

Nos veo por todos lados.

Pero no somos ni tú ni yo, son otros que sí quisieron luchar para estar juntos.

Son otros que envidio.

A veces me culpo a mí, pienso que yo pude detenerte, que pude demostrarte más, que debí decirte más cuánto me hacías falta, a veces creo que me faltó más decirte te amo, que te hizo falta escucharlo más, que en lugar de escribirlo debí recordarte cada día lo importante que eras para mí.

Y pienso en que quizá si hubiera sido más romántica, más entregada, menos fría, más expresiva, más amorosa, tú nunca te hubieras ido — y no me refiero a tu presencia porque antes de irse tu cuerpo, tu corazón y tu mente ya estaban en otro lugar—.

A veces creo que fuiste tú, que la culpa no fue mía y que debiste hablar más, decirme la verdad y no callarte cuando tu silencio me dolía, que debiste darme el lugar en tu vida que decías que tenía, debiste responder más, darme más tiempo, hacerme parte de tus prioridades.

A veces creo que fuimos los dos, que nunca dejamos hablar al amor y el orgullo opinó por nosotros.

A veces creo que alguno de los dos debió detener al otro.

A veces pienso que ya no teníamos solución.

Y la mayor parte del tiempo, pienso que todo acabó por esa historia.

Como sea, me arrepiento.

Porque cuando me preguntan si estoy soltera pienso inmediatamente en ti y cuánto te habría molestado que me coquetearan, en cambio sólo sonrío y digo que sí. Aunque quisiera responderles que no, que todavía estamos juntos, y que te amo mucho como para dejarte ir.

La vida social se ha resumido a pláticas vacías y fines de semana en compañías que me parecen aburridas pero prefiero eso a quedarme a pensar en ti. “Una mente ocupada no extraña a nadie”, ¿recuerdas?.

Que tristes nosotros.

Porque yo sé que te pasa lo mismo que a mí; buscamos en otros lo que teníamos juntos: algo bonito, real, incondicional.

¿Por qué no te diste cuenta que lo teníamos todo?, ¿por qué quisiste vernos como algo pasajero?

Verdad o no, ya todo se terminó.

Me decepcionaste porque te creí cuando me decías que tu corazón estaba libre.

Que podía estar a gusto dentro de él porque había espacio suficiente para mí, que no tenías amores del pasado ni arrastrabas con recuerdos.

Te creí cuando dijiste: es tuyo y tú estás en él.

¿Recuerdas esas preguntas que te hacía llena de miedo? —¿Qué voy a hacer con todos los recuerdos bonitos cuando ya no estemos juntos?—.

Todas las veces que te pedí sinceridad —por favor nunca me dejes de querer, y si lo haces, dímelo. No quiero vivir con alguien que ya no siente amor por mí—.

Y todo lo que juraste que no iba a pasar.

Pasó.

Se acabó.

Todo se ha vuelto difícil para mí, hay tanto que hubiera querido decirte, tantas palabras que me faltaron pero entonces entiendo que nunca pude decirlo con palabras pero lo hice con hechos —y cuentan más—.

Yo estaba dispuesta a dejarlo todo por ti, por ser nosotros juntos y hacernos un futuro.

Te idealicé, tanto...

Me alegraba por ti y todos los proyectos que tenías en puerta o apenas en mente porque quería que llegases más alto, que nunca dejarás de volar por tus sueños porque siempre supe que podías llegar más lejos.

Me preocupaba por ti, tanto, más que por mí. Siempre fuiste mi prioridad, antes que nadie te elegí a ti. Y te amé a pesar del peligro que represaba hacerlo, aunque no sabía nada del amor.

Tú, fuiste mi amor más bonito.

Y aunque nunca fui entregada, contigo no tuve reservas.

Te compartí mi cuerpo, mi mente y mi alma.

Te entregué mi vida con miedo a que me lastimaras.

Estoy segura de que nadie te quiso como yo a ti te quiero, nadie te volvió poesía, yo te dejé entrar en mi ser, completamente desnuda a tu escrutinio.

Conmigo tenías estabilidad, yo quería acompañarte por el resto de nuestros días.

Nada funcionó, porque no era yo. Eras tú que no sabías qué necesitabas, fuiste tú quien me vió como un pasatiempo y se le olvidó ser claro.

Fuiste tú quien nos jugó mal.

No diré que te amo aunque te ame porque decirlo no cambiará el hecho de que ya no podemos estar juntos pero deseo que alguien te ame como yo.

96 notes · View notes

books-blue-salaz · 4 years

Text

Deseo que alguien te ame como yo.

¿Por qué lo terminaste?

¿Nunca te diste cuenta?

Yo te tenía para mí y tú me tenías para ti: lo teníamos todo.

A mí no me hacía falta nada más. Me bastaba con tenerte a mi lado, con saber que me querías igual que yo a ti.

Para mí la felicidad se resumía en mirarte a los ojos, tus preciosos ojos que me hacían ver otros mundos, que me llevaban a conocer el universo.

Para mí el Amor era mirarte y saber qué pasara lo que pasara tú estarías ahí para sostenerme, para decirme que ningún problema iba a tirarnos.

Para mí el cielo se sentía como recostarme en tu pecho y escucharte respirar.

Todos los días me preguntaba que había hecho bien para merecerte.

Quisiera volver el tiempo.

Quisiera que pudieras mirarte como yo te miraba, que te dieras cuenta que para mí eras lo más hermoso que pudo existir. Lo mejor que me pudo pasar.

Admiraba al hombre, al padre, al hijo.

Cada faceta tuya.

Los errores y tus cicatrices del alma que te hicieron ser quien eras.

Respetaba tu pasado y podía con él.

Nos veo por todos lados.

Pero no somos ni tú ni yo, son otros que sí quisieron luchar para estar juntos.

Son otros que envidio.

A veces creo que fuimos los dos, que nunca dejamos hablar al amor y el orgullo opinó por nosotros.

A veces creo que alguno de los dos debió detener al otro.

A veces pienso que ya no teníamos solución.

Y la mayor parte del tiempo, pienso que todo acabó por esa decisión.

Como sea, me arrepiento.

Que tristes nosotros.

Porque yo sé que te pasa lo mismo que a mí; buscamos en otros lo que teníamos juntos: algo bonito, real, incondicional.

¿Por qué no te diste cuenta que lo teníamos todo?, ¿por qué quisiste vernos como algo pasajero? ¿por qué tiraste a la basura dos años donde te amé más que a mí misma?, ¿por qué no me quisiste como yo a ti?.

Confiaba en ti. ¿Y qué me diste?. Mentiras, engaños, más desconfianza.

Si de por sí esto era difícil...

Todos dicen que te acostabas con otras, que me tenías a mí para engañarme, y que los días en que te ausentabas y esos viajes de trabajo los ocupabas para estar con ellas, yo nunca lo creí pero ahora que lo pienso, quizá tenían razón o quizá sólo quisieron que esto se terminara.

Supe muchas cosas de ti, cosas que en verdad me hicieron desconocerte, en nada se parecían al hombre del que me enamoré.

Verdad o no, ya todo se terminó.

Me decepcionaste porque te creí cuando me decías que tu corazón estaba libre.

Que podía estar a gusto dentro de él porque había espacio suficiente para mí, que no tenías amores del pasado ni arrastrabas con recuerdos.

Te creí cuando dijiste: es tuyo y tú estás en él.

¿Recuerdas esas preguntas que te hacía llena de miedo? —¿Qué voy a hacer con todos los recuerdos bonitos cuando ya no estemos juntos?—.

Todas las veces que te pedí sinceridad —por favor nunca me dejes de querer, y si lo haces, dímelo. No quiero vivir con alguien que ya no siente amor por mí—.

Y todo lo que juraste que no iba a pasar.

Pasó.

Se acabó.

Yo estaba dispuesta a dejarlo todo por ti, por ser nosotros juntos y hacernos un futuro. Y la familia que nunca había deseado pero que sí quería tener contigo.

Te idealicé, tanto...

Me preocupaba por ti, tanto, más que por mí. Siempre fuiste mi prioridad, antes que nadie te elegí a ti. Y te amé a pesar del peligro que represaba hacerlo, aunque no sabía nada del amor.

Tú, fuiste mi amor más bonito.

Y aunque nunca fui entregada, contigo no tuve reservas.

Te compartí mi cuerpo, mi mente y mi alma.

Te entregué mi vida con miedo a que me lastimaras.

Estoy segura de que nadie te quiso como yo a ti te quiero, nadie te volvió poesía, yo te dejé entrar en mi ser, completamente desnuda a tu escrutinio.

Estuve dispuesta a darte la familia que siempre te hizo falta, conmigo tenías estabilidad, yo quería acompañarte por el resto de nuestros días.

Nada funcionó, porque no era yo. Eras tú que no sabías qué necesitabas, fuiste tú quien me vió como un pasatiempo y se le olvidó ser claro.

Fuiste tú quien nos jugó mal.

No diré que te amo aunque te ame porque decirlo no cambiará el hecho de que ya no podemos estar juntos pero deseo que alguien te ame como yo.

— Mariana Salazar

#blue salaz #confesiones #fragmentos #en tu orbita #mientras no estabas #sentimientos

456 notes · View notes

kuroimiyukatz · 3 years

Text

DabiHawks week 2021

Luego de mucha desidia me animé a participar en la @dabihawksweek20 de esta semana.

Espero les guste 💕💕

Día 1 Vampiros / Monstruos

El fuego que cruje en la chimenea poco a poco va propagando su calor por toda la habitación. Pronto esa calidez logra contrastar con la lluvia fría de esta noche. Al otro lado de la ventana empañada, aún distingo la calle apenas iluminada con la luz de una farola. No hay un alma, no hay nadie que quisiera estar afuera ahora mismo.

La soledad de la calle me estruja por dentro convirtiéndose en un escalofrío que se expande por mi cuerpo y me lleva a sujetarme a mí mismo en un intento de abrazo.

—Pensé que el fuego sería suficiente —dices rodeándome sorpresivamente por la espalda.

Mis manos se posan sobre las tuyas y me dejo contagiar por tu propio calor corporal.

—Ya sabes lo que recuerdo en noches como esta, Dabi…

Esas manos largas, quemadas, me hacen girar para mirarte de frente, toman mi rostro con una delicadeza propia de la de un maestro artesano que contempla su creación; y muy despacio, me besas en los labios.

—¿Cuánto ha pasado desde entonces? ¿Casi ochenta años?

—Se cumplirán ochenta este otoño.

Tantas décadas a tu lado y a mí me parece que apenas fue ayer cuando yo mismo deambulé desesperado por esas calles obscuras mientras perseguía un aroma que la lluvia difuminaba minuto a minuto.

Por aquél entonces yo no era más que un monstruo, un aterrado fenómeno de circo que se había dado a la fuga. Pocas veces había estado afuera de la caravana y ahora, de un momento a otro me encontraba libre, pero sin saber a dónde ir.

Prácticamente todos mis recuerdos son en cautiverio, en mi jaula o en el escenario, con público o sin público pero siempre recibiendo órdenes, sin ninguna otra función que acatarlas y ser exhibido, como el resto de los animales que ahí había.

Pero yo era la atracción principal: Mitad humano, mitad bestia alada, que en su estado más salvaje hacía crecer plumas en lugar del vello corporal en brazos y piernas. Estando así, mis pupilas también se alargaban y afilaban.

En ese estado era prácticamente indomable, por eso, el capataz intercalaba su látigo con una tabla con púas. Ese desagradable hombre y sus asistentes me amarraban y golpeaban hasta la inconciencia. Por eso debía estar siempre encadenado, con un grillete en el tobillo que me hacía sangrar con frecuencia. Mi comida y bebida eran también adulteradas con drogas sedantes para mantener mi juicio nublado.

Pero una noche de otoño lo cambió todo. Justo iniciaba mi acto con el público a reventar en el circo, cuando percibí un olor particular, como de sangre y ceniza mezclada, nada similar a ningún humano o animal que conociera. Siguiendo mi rutina alcé el vuelo lentamente, aproveché la altura y agudicé mi vista de halcón hasta que di con la fuente del olor. Provenía de una figura con sombrero de copa sentada en el rincón más obscuro de la carpa. Observaba mi acto con atención pero casi inmóvil.

Movido por la curiosidad, quise acercarme aprovechando que durante mi acto era el único momento en el que no estaba encadenado. Por supuesto, todo el público gritó de espanto al verme aproximándome; todos menos ese par de ojos relucientes que no parecían intimidados en lo absoluto.

El miedo se hizo presa de un grupo que comenzó a lanzarme botellas y otros objetos para que me alejara, a lo que como era de esperarse, protesté con violencia.

El pánico se generalizó y pronto sentí el látigo del capataz atrapando mi tobillo lastimado. Me devolvió al suelo de un tirón y sus asistentes me encadenaron tras una golpiza innecesaria.

—¡No se asusten, damas y caballeros! —anunció el capataz—. ¡La bestia está bajo control! ¡El show debe continuar!

La gente aplaudió y vitoreó aliviada mientras la sangre me nublaba la vista. Sabía que mi error me costaría más golpes al final de la función.

Me llevaron de vuelta a mi jaula y escuché:

—¡Hoy no le den de cenar! —dijo la ronca voz del capataz—. ¡Ese animal debe aprender a comportarse!

Limpié lo mejor que pude la herida de mi cabeza e hice presión con un jirón de ropa. Tenía demasiado dolor y miedo cuando escuché los pasos del capataz viniendo hacia mi jaula de madera y hierro. Generalmente, cuando sabía que me encontraba ante una golpiza inevitable, ponía mi mente en blanco, como si así aminorara el ardor que me dejaban los azotes. Esa vez repetí el patrón, vacié mi mente esperando lo peor, pero cuando el cerrojo se corrió, nadie entró.

Un golpe seco y un grito ahogado interrumpieron todo.

No había forma de mirar hacia fuera, debía ponerme en pie y asomarme a través de la pequeña rendija de metal para ver lo que sucedía.

Sin embargo, antes de que pudiera reaccionar, el peso del cuerpo de capataz chocó contra la puerta haciendo que se abriera. Se encontraba inerte, con los ojos abiertos pero sin vida. Mi terror aumentó al percatarme del charco de sangre que comenzaba a formarse a la altura de su cuello gordo. No me atreví a mover un músculo, mucho menos al levantar la vista para encarar con el dueño de la sombra que se alzó sobre el cadáver del capataz.

—Qué puto asco…—le escuché decir tras lanzarle al cadáver un escupitajo sangriento.

Finalmente, en medio de la obscuridad, alcé la cabeza y distinguí ese par de ojos azules que me observaron en la carpa, esa figura de ropas elegantes y sombrero de copa se aproximó hacia mí. Con el pie apartó al capataz muerto y se arrodilló.

Mi instinto habló por sí solo, antepuse los brazos y me cubrí con mis alas en un intento por protegerme. Temblaba esperando lo peor. Si ese sujeto había matado al capataz, seguro iría también sobre mí.

En apenas unos segundos escuché un sonido metálico y la sensación del metal caliente alrededor de mi tobillo lastimado me desconcertó haciendo que por fin saliera de mi escondite.

Lo primero que vi fue el fuego azul que emitía la punta de su largo dedo índice fundiendo los eslabones de mi cadena en apenas un instante.

—Lárgate, cerebro de pollo, lárgate antes de que alguien note la ausencia de este bastardo —dijo la figura lanzándole al cadáver una mirada del más puro desprecio. Hecho esto, como si se tratara de una alucinación, desapareció fundiéndose con la oscuridad de la noche.

Quedé inmóvil ante la puerta abierta. Dude por un segundo si todo aquello había ocurrido; pero el cuerpo muerto del capataz frente a mí, la cadena rota y aquél olor a sangre y ceniza en el ambiente eran totalmente reales.

El ruido y la música que salía de la carpa de los cirqueros me recordaron las palabras de la figura sombría, debía salir de ahí antes de que se percataran de la ausencia del capataz. Si me quedaba, yo sería al único que culparían. Ahí me di cuenta de que era una situación de vida o muerte.

Atravesé la puerta y corrí bajo la lluvia fría. Aún sentía el dolor de los golpes y las cadenas, pero sobre todo, el miedo a que vinieran tras de mí. La desesperación me invadió, no tenía idea a dónde ir, mis pasos descalzos tan solo me llevaban lejos del circo por ese camino que no me resultaba en absoluto familiar. Sobreponiéndome al dolor, apreté los dientes y alcé el vuelo para evitar ser visto, tenía que aprovechar la obscuridad de la noche.

De pronto, mi olfato percibió aquél olor de la silueta obscura, evocando el recuerdo de sus ojos azules y el calor de su fuego. Era tenue pero debió haber recorrido el mismo camino hacía poco tiempo.

Comprendiendo que no tenía más opción, decidí seguirlo a toda prisa, pues la lluvia lo disolvía rápidamente.

Atravesé un campo de trigo seco y después, el rastro del olor me llevó hasta una casa en las afueras de un pueblo, parecía abandonada. Aterricé y sin pensarlo dos veces, empujé la enorme puerta de madera. Aunque adentro hacía frío también, definitivamente era mejor que estar a la intemperie bajo la lluvia.

Dejando un rastro de agua y barro, crucé el recibidor y llegué a la sala, donde todos los muebles estaban cubiertos por sábanas blancas. No obstante algo llamó mi atención. En medio de la penumbra, distinguí un cuadro en el piso, recargado contra la pared.

La poca luz que se colaba entre los gruesos tablones que bloqueaban la ventana, me permitió apreciar que se trataba del retrato de un apuesto joven de cabello blanco, elegantemente vestido con ropas que jamás había visto, pero que me recordaban a las de los actores del circo cuando hacían su acto disfrazados de piratas.

Contuve la respiración al mirar la expresión melancólica de sus ojos azules, tan parecidos a los que me habían liberado esa misma noche.

—Mierda. Debí suponer que pasaría esto… —dijo detrás de mí una voz que reconocí al instante.

No supe qué responder a esa figura que terminó de revelarse a la luz de un relámpago que hizo retumbar esa noche tormentosa. Por fin lo vi, su rostro intimidante por las quemaduras, de las que sobresalían unas facciones hermosas, idénticas a la del joven del cuadro. No obstante, el cabello que sobresalía bajo su sombrero, era negro.

***

—¿Sigues pensando en nuestro primer encuentro, Hawks?

Me sonrojo un poco porque aunque no puedes leer la mente de otros vampiros, pareces saber lo que pasa por mi cabeza.

—Pienso en lo mucho que cambié gracias a ti.

Ahora eres tú quien carraspea un tanto nervioso, pues no te gusta recordarlo. No te gusta recordar las mil veces que dijiste que jamás crearías un nuevo vampiro y aún así ese día, apenas un par de años después de que me tomaras como tu protegido, lo hiciste, me diste a beber de tu propia sangre.

—Ese día, que estabas tan enfermo… Pese a ser un monstruo, como yo, me di cuenta de la fragilidad de tu existencia —tu mano se encuentra con la mía para enlazarse firmemente—. Pero de que también yo mismo soy patético y cobarde… porque no soportaría verte morir.

Soy yo quien ahora busca tus labios, emulando aquel beso sangriento que me salvó de la muerte y me transformó en un no muerto. Ese día gané la inmortalidad a cambio de no volver a ver la luz del sol y depender de la sangre para subsistir.

—Así te amo, Dabi, patético y cobarde.

—También te amo, cerebro de pollo.

Nuestros labios se funden en un beso ardiente, que como siempre, sabe a sangre y ceniza.

A tu lado, la eternidad se siente como un largo suspiro.

——————————————————-

FIN DEL DÍA 1

Muchas gracias por leer!

Nos vemos mañana!

-MiyuKatz

#bnha fic #spanish fanfiction #yaoi #bnha fanfiction #hotwings #dabihawks #dabi touya #takami keigo

11 notes · View notes

clickxclicks · 3 years

Text

Querido amigo.,

Hola, ¿cómo estás? Te cuento que hace ya cuatro meses que he estado en terapia con un siquiatra que hace cuadritos mientras le cuento mis historias, mis penas y mis alegrías. Me llama la atención como ha pasado el tiempo con él y las cosas que he concluido con él y conversado con el @manu-prune . Recuerdo que las primeras sesiones me asustaban porque creía que el siquiatra iba a ser un viejo cuadrado, con esa mente fría que no iba a saber como yo me sentía porque yo iba ser igual. Siempre fui un sujeto extraño amigo, y creo que tu bien lo sabes; porque fuiste testigo de este desarrollo, aunque a veces sí me sentí refugiado en estos escritos. Me acuerdo que anteriormente me sentía solo, que no había gente con quién pudiese tener la confianza de hablar de mis asuntos y ahora creo que ya no me siento tan solo, aunque a veces pasa por mi mente que si lo estoy, pero yo mismo me siento acompañado conmigo mismo.

El @manu-prune una vez me dijo que no debería sentirme así, aunque si era difícil. Las heridas abrían de vez en cuando porque todo era dolor, aunque tú no la hayas entendido en ciertos momentos. Todo me dolía tanto que me refugiaba en mis escritos y a veces cuando yo me cortaba los brazos era un castigo y una satisfacción de sentir un dolor propio, porque nadie más lo estaba haciendo. Creo que fue el único momento donde yo necesitaba de ese dolor para darme cuenta que lo que estaba haciendo era para demostrar que sí estaba sufriendo por algo que podía llegar a morir en cualquier momento y que nadie iba a saberlo con claridad, salvo @manu-prune que estaba ahí tan pendiente de lo que hacía.

Creo, y mantengo la convicción de que con el siquiatra a medida que iba escribiendo en la ficha clínica que estaba ya muy loco y que estaba a un punto dé mandarme a una clínica siquiátrica para realizar un tratamiento más duro , yo podía sacar el provecho el hecho de conversar mis cosas más intimas y podía decirle lo enchuchado que me sentía por tomas pastillas sabiendo que no las quería y que aún cada mañana la tomo, siento que no quiero más, aunque se deba dejar por un año y espero que ese año pase rápido.

Rápido, ¿para qué? Para no darme cuenta de mis avances, porque si los he tenido, aunque a veces si me dan ganas de no hacer nada y de atentar contra mi vida aunque cada vez menos. No sé si es bueno indicarte esto, pero hace una semana atrás pensé en cortar mis brazos porqué me sentía colapsado, y poco preocupado de mi mismo y mi mente sintió que ya no podía soportar tantas cosas.

La ida al sur me sirvió para que pudiese reflexionar y decir qué toda persona que no me esté aportando no será parte de mi vida, persona que no está interesada en mi, se elimina y cuanto menos piense en esas personas, mejor.

Querido amigo, no todos los momentos pueden ser tan felices. Pero creo que siempre hay posibilidades que eso surja y creo que @manu-prune muchas veces me dio la oportunidad de verlo aunque la misma enfermedad nos decía lo contrario. Porque pucha que es complicado ver las cosas así cuando ves que la nube la vas deshaciendo con la llama de tus dedos.

Han sido 4 meses, altos y bajos, saludos y despedidas, y aunque casi fui parte de una despedida, me arrepiento aunque creo que con eso aprendí que los que quedan en tierra no deben llevar esa carga tan pesada que yo debí ir aliviandola. Creo que aprendí también que por casi llegar a esa clínica me hizo un suitch en mi mente y me hizo decir que no era bueno, porque harto miedo me daba.

Amigo, si lees esto, sabes que fui un idiota, no quiero que me lo reproches. Gracias por darme tu abrazo y tu consejo de pedir ayuda en enfrentar la enfermedad silenciosa.

#fucking depression

3 notes · View notes

natashasempaii · 4 years

Text

La Diabla Venezuela ㅅ5ㅅ

recuerdas el deseo? la venganza la ira ... el rencor... ... el día que dejaste esos sentimientos de lado ese día tu alma dejo de ser mía ¿sera esta la cura para mi mal?

[ ... ]

las cosas de verdad no pueden volver a ser tan simples después de ese punto que quiebre. Eres mi punto de inflexión, la razón de mi cambio, lo siento Luis.

— no puedo juzgarte Luis... no estoy aquí por ti. El motivo por el cual vengo a ti... no es por que me llames es por que... sin duda alguna tienes motivos validos para que tu alma sea mía, cumples los requisitos al pie de la letra... eres un digno candidato... — respondí sin muchas ganas viendo en las expresiones del mortal, la confusión total, por que simplemente cambie el tema de conversación, no quiero pasar por ese terreno. El pasado.

después de un momento en el cual ambos meditan mutuamente por lo incomodo que se torno todo, finalmente Luis abre la boca — lo que quieres decir... es que soy digno pero... pero pero PERO ¡no entiendo tus malditos Peros! — su impaciencia hace que cometa el error de alzarle la voz a la deidad equivocada, ella se mueve rápido, lo sostiene del cuello, sus dedos presionando su cuello apenas dejando pasar el aire por su traquea, mirándolo a los ojos, con una mirada de esas que hiela la sangre y te paralizan, que llega a lo mas profundo de tu alma. Un rápido movimiento de su cola en forma de flecha que se clava a un lado de su oreja cortando un mechón de cabello perteneciente al muchacho. La respiración del mortal es interrumpida temporalmente, sus miradas cruzadas por segundos que se extienden hasta que Luis lucha por respirar aferrándose al brazo de la diabla que notando su lucha por respirar, ella responde subiendo la altura del brazo alzando al chico en el aire contra la pared, cortando las opciones para sobrevivir.

miradas que se llenan por la locura del momento, una buscando vivir y la otra cuyas intenciones parecen claras, dar una lección muy especifica y clara. Luis finalmente empieza a sentir su cuerpo rendirse, sus lagrimas de terror absoluto caen por sus mejillas, sus últimos pensamientos son tan mundanos, el pensar que acabara así, su mente acepto la muerte, no... solo pidió un descanso por que trata hasta el ultimo segundo volver a respirar, sus pies buscan aferrarse de la pared para tratar de subir y poder dar un respiro, sigue luchando aun cuando sabe que no puede ganar.

Así como la diabla lo tomo del cuello lo soltó dejándolo caer al suelo, el mortal toce y bocanadas de aire son robadas para devolverle la vida al mortal, y una duda se hizo presente en el muchacho. ¿porque?. Una ves que tiene la fuerza para subir la cabeza y ver a la deidad que lo observa desde arriba, se topa con sus ojos con esa mirada sombría, como si le despreciara, dejando ver tal ves su verdadero ser, un demonio después de todo, y si tal ves ella es la que se equivoca, Luis no podría saberlo, lo sospecha pero lo mas seguro es que jamas lo sepa, quiere saber que significa esto. quiere entender a la figura frente a el. Con dificultad, se logro poner de rodillas en frente de la silueta frente a el, su cuerpo no deja de temblar, sus pensamientos buscan un razonamiento lógico; tal ves fue un castigo, una humillación, ¿el propósito realmente importa? . No ah encontrado el propósito de esto, quiere saberlo pero teme preguntar.

— te preguntas por que lo hice... si no lo hicieras serias un idiota, y no lo eres... la respuesta esta en ti Luis; cuando ibas a rendirte... volviste a luchar, estas listo para vivir. Aceptar un trato conmigo es renunciar a esa fuerza para vivir, ¿vas a darme eso luis? si tu venganza vale ese coraje... entonces ¿de que valió que lucharas hace un momento? jamas cuestiones mis 'peros'... no vuelvas a subirme la voz, lo peor que te puede pasar no es morir Luis, lo peor que te puede pasar de hecho es que caigas en mis manos... hacer un trato conmigo... es aceptar la fría muerte y revivir una y otra ves tu pecado, sin descanso. — deja la duda en el aire pero no da tiempo a que el chico habrá el pico para decir nada — ¿aprendiste la lección? ... si es así, no me llames de nuevo Luis. Gracias por ser una agradable compañi-. una voz rota la interrumpe, ese instante ella se detiene después de darle la espalda al mortal, lo escucha.

— ¡espera! no quiero que te vallas... no para siempre... — una petición escuchada, la diabla pretende irse cuando el chico continua — quiero saber... que paso en Chernovil... no creas que no note que evitaste el tema — la diabla se detuvo, no hizo nada; no respiro, suspiro, se voltio, solo se quedo paralizada reviviendo los recuerdos vividos en ese lugar.

— Luis... deja que el pasado se quede atrás, que el tiempo sane tus heridas... así como sano las mías — el silencio reino el cuarto unos segundos hasta que finalmente las garras de las patas de la diabla delatan sus pasos en el piso acercándose al toma corriente, antes de apagar la luz decide decirle algo — ... no soy doctora pero... si dejas atrás la ira, el rencor... el deseo de venganza, no me necesitas nunca como tu medicina... podrás vivir plenamente, podrás vivir por que una ves que terminas de aceptar el contrato conmigo... no habrá vuelta atrás — apago la luz, se pierde en la oscuridad, para irse nuevamente de ese lugar sin despedirse.

[...]

los humanos creen en el paraíso y en el infierno, me gustaría saber si existen, por que de existir no los conozco... pero siendo honestos lo mas cercano al infierno en este mundo se encuentra bajo mi control, el castigo "divino" el eterno tormento... ¿no es ese mi trabajo? por que siempre olvido esto... la mala de la historia... la bruja del cuento, el villano a vencer, el enemigo final, esa soy yo. El castigo por los pecados del hombre pasan entre mis dedos... soy el archivo expiatorio de las demás deidades, los demonios se ríen de mi por soportar esto, ¿que les importa en realidad? hablar con ellos es lo mismo que relacionarte con un niño mimado, imposible no sentir que mueres un poco cada ves que estas con ellos, la lastima que dejan ver me da muchísimo asco. Estamos tan llenos de mentiras.

Hipócrita

Ellos no pueden lidear con estos sentimientos humanos, no los conoces ni los entienden, tan frágiles como una pluma de cristal. Es tan fácil tomar el papel e interpretar tu lugar, o ¿es que este papel me queda como anillo al dedo? ... entonces... ¿los demás están mal? Es lo malo de pensar de que eres el mejor, admitir eso hace ver que los demás están mal. La paradoja es, que ellos son lo mejor de lo mejor y lo peor de lo peor, mientras soy la oveja negra entre las marrones, no tienes forma de huir de ese hecho, soy lo mejor y lo peor de este mundo, el recuerdo del castigo y que aun sumida en la desgracia, el deseo de ser mejor que esto, aun no muere, tener todo y nada a la vez, estoy lista para lo que sea que se venga.

¿cuando empece a auto compadecerme?

[ ... ]

Meditando sobre lo que paso con Luis se pregunta si sera castigada por lo que se negó a hacer, pero finalmente llega a concluir de que no rompió ninguna regla, por que si bien se negó, el chico al final tampoco renuncio a su alma, de no ser así lo habría tomado finalmente, pero este humano parece decido a vivir, es un alivio al menos para la Diabla, que cansada se recuesta pensando en todo lo que perdió a lo largo de su larga vida, también lo que gano. Con cuidado saca de un estuche un instrumento singular, uno que conserva muchas de sus memorias, una singular Zanfona, un instrumento peculiar, le quita el polvo y revisa las cuerdas, incapaz de hacer girar la manivela para hacer sonar las notas, la deja de nuevo en el estuche.

— la noche anterior al desastre... fue ese el ultimo día que me atreví a tocar este instrumento... se siente como un pecado el tocarlo, por que no lo puedes escucharme tocar sus notas — se dice a si misma en un intento de monologo, imaginando que se lo dice a alguien mas, alguien que no esta en su cercanía hace mucho — ... debí deshacerme de ella... de cada uno de tus regalos pero son mis tesoros mas preciados ¿como podría deshacerme de ellos? cada uno de estos tesoros tiene un recuerdo precioso, es lo que me mantiene cuerda últimamente. aun me sigo preguntando ¿cuando dejaste de ser un niño enojado y pasaste a ser un hombre?... el hombre que debías... imagino que fue mi culpa después de todo... fue un final amargo para los dos. aun te sigo extrañando...— guardando la zanfona junto al resto de sus tesoros, guarda silencio recordando con cariño esos momentos.

aun estoy aquí... aun lucho todavía soy digna de tu cálido amarillo

#country girls #countrygir #Countryhumans #venezuela #countryhumans venezuela #countryhuman venezuela #diabla #diablita #au

30 notes · View notes

miss-thunderst0rms · 4 years

Text

Carta no enviada no. 155.

Hace poco una amiga me platicó sobre como alguien se aprovechó del trabajo que alguien más hizo en un examen de titulación.

Y recordé que él no quiso poner mi nombre porque no lo creyó profesional y porque le daba pena poner algo tan personal en una tesis, y porque "el no es así". Le ayudé con su tesis porque pues quién no haría eso por su pareja, le ayude todo lo que pude y todo lo que el necesitó de mi parte estuvo ahí.

O al menos eso creo.

Ahora que su nombre va en uno de mis trabajos para el congreso y que su nombre va en mis dedicatorias y agradecimientos me doy cuenta que siempre hice más, siempre tuve que conformarme con lo que él podía hacer, siempre acepté, nunca negocié algo que nunca debía pedir o negociar.

Creo que lo amaba demasiado para darme cuenta, y creo que aún lo amo lo suficiente para "entender" por qué nunca quiso presumirme como lo hice yo con él.

Ahora que las cosas recobran un sentido más estricto de solidaridad y de sensatez, me doy cuenta que lo di todo en esa relación, te esperé, fui paciente, me amoldé a quererte como querías, como necesitabas, siempre te hice sentir seguro, intenté nunca hacer nada que alertara tus miedos.

En casi 3 años te cuide con el amor más noble que he podido sentir, y aún así dudaste de mi.

Que hayas dudado de mi terminó por cansarme y agotar las ganas de entenderte, porque al menos parecía que te costó mucho quererme como yo necesitaba, a pesar de que te lo pedía.

Te llevé a muchas aventuras, a conocer la ciudad, me adapté a tus hobbies y actividades para pasar tiempo contigo y terminaron gustándome, te saqué de la ciudad, te llevé a comer, te abrí las puertas de todos mis departamentos, te expliqué las historias de los fantasmas que me acechan, te hice crecer, traté de enseñarte todo lo bueno que pude. Nos encontramos en muchos sitios, recorrimos la ciudad juntos, me volví vulnerable a ti y al mismo tiempo tú me hacías querer ser más fuerte y valiente.

Creo que llegaste al punto de amarme cuando yo ya había agotado todas las oportunidades que te había dado para darme un lugar en tu vida, no sé por qué te costó tanto tenerme confianza, darte tiempo para mí. Me dolió mucho que me empezaras a querer después de que ya me habías roto el corazón 3 veces. Creo que siempre pensé que podríamos ser el hogar uno del otro, y en el último año, las cosas mejoraron, te esforzaste, fueron los meses más bonitos.

En ese año te titulaste, tú bien sabes que te ayudé y en qué te ayudé, siempre me adapté a tus medidas y formas de quererme, aunque a veces no me gustarán porque se sentían frías o sin interés. Creo que en los últimos días por fin pude explicarte cómo me habías hecho sentir con tu desconfianza y con las cosas que habías hecho en el pasado.

Te amé demasiado como para pedirte el tiempo de alejarnos para que me extrañaras, para que crecieramos y no nos volviéramos una pareja dependiente, después de todo, yo no me sentía bien porque me sentía una carga.

Y cuando un profesional me explicó que había hecho un acto de amor, por darte tu lugar, para hacerte crecer independiente de mi, me di cuenta de lo mucho que te amaba y de que no podía alejarme tanto de ti.

Y te busqué, y entonces no respondiste, me evadiste, cómo cuando no sabes cómo decir que no.

Y lo entendí, creo que al final, fue como lo había pensado, nuestra historia empezó como si te hubieses acostumbrado a mi cuerpo y poco fuiste queriendo a la persona que contenía ese cuerpo. Y supongo que cuando te di oportunidad de escapar de todo lo que nos pasaba, aprovechaste para crecer, y me dio gusto.

Solo que no estaba preparada para darme cuenta que no me necesitabas, o al parecer parecía que yo y mis problemas eran demasiados. Y pues nadie quiere estar con una persona así.

Me parece que siempre confundí las atenciones que tenías como amor, cuando en realidad solo era cariño, un cariño que le guardas a alguien que no eres capaz de amar.

La verdad es que aún se me hace un nudo en la garganta cuando repaso como había señales tan obvias que ignoré, porque siempre me detenias cuando me enojaba, porque "no querías armar escenas en la calle", porque a veces te olvidabas de avisarme que no ibas a llegar o que llegarías tarde, o cuando me pedías hacer ejercicio para verme mejor, cuando te daba pena que subiera fotos de nosotros, cuando te dio pena presentarme con tus amigos, la verdad es que en muchas ocasiones tu sí me hiciste sentir insegura, y debí decírtelo más claro.

En fin, las cosas pasaron, las veces que te disculpaste por ello fue suficiente para dejar el tema atrás, pero supongo que guardaba esas cicatrices que no sanaban bien.

Ahora que no te veo, y que he estado completamente sola por mi cuenta, me di cuenta de la resiliencia que tengo y de lo mucho que te di, que doy sin pedir más que cariño a cambio.

Recuerdo todo lo que me diste, tu cariño y tú tiempo porque siguen siendo para mí tesoros invaluables, pero ahora entiendo que ya no voy a dejar que me den menos amor del que merezco.

Aún sigo soñando contigo y sigue existiendo esa casa con un perrito Golden y patos, te sigo extrañando, te sigo queriendo y te imagino viniendo al departamento a pasar el rato, me sigo imaginando e idealizando una relación perfecta porque así se sentía contigo y a pesar de todo, lo fue, porque al menos estoy satisfecha en que lo di todo.

Francamente ya no quiero extrañarte ni pensar en ti, ya no quiero sentir que te veo en otras personas, y ya no quiero verte, porque me da miedo correr a tus brazos y también me da miedo que solo me saludes como si nada, así que espero morir pronto jaja.

Y no porque me muera por ti, aunque sí en un sentido metafórico, solo estoy cansada de todo y siento que no voy a volver a sentirme así como me sentía contigo. No me dan ganas de conocer a nadie, no tengo ganas de involucrarme sentimentalmente con nadie y no sentir ganas de eso es como estar muerta. Afortunadamente, ya controlé mi depresión y ahora me enfoco en crecer profesionalmente, porque si tengo que vivir y no me casaré con nadie, pues quiero viajar.

Es verdad que siempre te dije en broma que nos casáramos, y me da mucha risa recordar todas las veces que te lo pedí porque en parte era verdad, pero no quería hacerlo en ese momento, siempre fue una idea a un futuro lejano.

Si el cáncer de ovario o de estómago no me mata pronto, espero no morir asesinada. Tomo mi medicación y procuro enfocarme en ser funcional y poco a poco voy sintiéndome mejor, así que sé que quizás ya no intente auto morirme, pero no sentir nada y sentirte como un robot es como es como si hubiera muerto mi alma o algo.

No tengo ningún problema con dejarte de ver ahora, con no saber nada de ti, aunque quiera, pero sí espero, que si algún día te vuelvo a ver, voy a evitar saludarte, porque no quiero quedar en ridículo.

Espero no verte en mi examen, espero que tus padres no te digan nada, porque aunque me gustaría que estuvieras ahí, sentiría feo darme cuenta que aunque siempre pensé que estaríamos juntos en ese momento, no sería justo ver cómo aceptas que yo sí te haya dado un lugar en mis logros académicos entre otros, y tú nunca me hayas buscado un espacio en lo tuyos.

Estaré siempre agradecida con todo lo que compartimos, con las cosas que me regalaste, tu tiempo, tú ser, las cosas materiales y las memorias. Como dije en mi tesis, son mis tesoros, pero así como hacen en las películas, debes enterrarlos para que se conserven.

Voy a enterrar todo en mi memoria, para mantener todo eso bello y decepcionante fuera de mi cabeza, fuera de mi vida porque solo estoy pensando en cómo quisiera regresar a eso o generar nuevas experiencias contigo. Pero también me doy cuenta que tú estas en un punto diferente y yo en otro, y probablemente ya no nos vamos a encontrar porque así es la pinche vida.

Te amo y te voy a dejar de amar muy pronto, lo presiento, espero que ahora sí pueda avanzar sin sentir miedo o ganas de buscarte. Deseo con todo mi ser que tú y tu familia siempre estén bien, todos. Y que tú crezcas y seas el hombre que deseas ser, que superes tus miedos y a ti mismo.

Si te veo en las publicaciones de artículos, no diré que fuiste mi ex para no quedar como tonta jaja.

En fin, por favor cuídate mucho, gracias por todo, por ejemplo, gracias por esa foto.

9 notes · View notes

46snowfox · 4 years

Text

Black Wolves Saga Last Hope Memory 37: El sabor del estofado [Historia General 1]

La protagonista quiere saber la opinión de Rath luego de no haber comido algo decente luego de tanto tiempo.

Fiona: Fu-... Es agradable bañarse luego de tanto tiempo...

Cuando estaba en el bosque limpiaba mi cuerpo con un pañuelo humedecido en agua caliente...

Pero en verdad es relajante poder bañarme así.

Fiona: (Ha pasado tiempo... desde que volvía a la vida humana.)

Gracias a que logramos vender los animales que había cazado Rath y las hierbas que yo había recolectado conseguimos suficiente dinero para relajarnos durante todo el día en una posada.

Al parecer logramos tener una cantidad de dinero razonable para gastar al agregar nuestras ganancias junto al dinero que Rath traía consigo.

Fiona: (Y así... de paso terminé comprando algo.)

Ropa nueva. Logré engañar a las personas diciendo que mi vestido lo usaba para llamar la atención...

Fiona: (...Pero era difícil moverme con ese y destacaba.)

Afortunadamente una aldeana me vendió ropa barata para poder usar todos los días.

Es un vestido de una pieza que usan chicas que viven en las aldeas, pero es completamente diferente a los que he usado hasta ahora.

Fiona: (...Fufu. Es bastante lindo.)

Empiezo a torcerme levemente para realizar una pose en frente del espejo... ¿Me estaré halagando demasiado si digo que se me ve bien?

Fiona: ...Listo.

Salí del baño tras haber comprobado mi apariencia frente al espejo.

Lugar: Habitación

Fiona: Ah, el baño fue agradable, deberías pasar Rath.

Rath: Iré luego de comer.

Fiona: Ah, ¿ya trajeron la comida? Lamento haberte hecho esperar.

Rath: No, no esperé tanto.

Había una bandeja encima de la cama.

Probablemente porque al ser esta una habitación de un lugar que solo está destinada para que la gente se quede a dormir no tenía una mesa.

En la bandeja había estofado, ensalada, y pan, todo lucía delicioso.

Antes de entrar a bañarme le pedí al dueño de la taberna que se encuentra abajo comida para dos personas y que nos la llevara a nuestra habitación.

Fiona: (Aah... huele bien.)

El suave aroma del estofado parecía producirme hambre.

Fiona: Luce muy delicioso...

Rath: ...Pero si en tu castillo de seguro comías cosas más deliciosas.

Fiona: Puede que sea cierto... Pero la comida que he comprado con el dinero que he conseguido por mi cuenta es la más lujosa.

Rath: ...No puedo decir... que no lo entienda.

Rath: Por cierto... no imaginé que sabrías sobre hierbas medicinales.

Fiona: Fufu, es que la persona que está a cargo de cuidarme...

Fiona: Esto, ya sabes, entre las personas que te perseguían ese día había un conejo, ¿no?

Rath: ...Ahora que lo dices, sí.

Fiona: (...Jaja. Claramente acaba de fruncir el ceño.)

Parece que el haber sido perseguido por Nesso y los demás en Scharlmessen no es un buen recuerdo para él.

Fiona: (Aunque es normal.)

Fiona: Él se llama Zara... Tiene mucho conocimiento en medicina y me ha enseñado bastante.

Fiona: Como no podía salir de la torre me gustaba ver libros ilustrados, gracias a ello pude recordarlas.

Rath: ...También sabías bastante sobre nueces y frutas...

Rath: Como pensaba que eras una joven ignorante criada aislada de los demás... me sorprendí bastante.

Fiona: Fufufu, ¿verdad? Es porque soy consciente de que soy una joven aislada e ignorante.

Fiona: Por eso a menudo leía libros. Ya que es aterrador el no saber nada, ¿no lo crees?

Rath: ...Puede ser. Pero... también hay cosas a las que no le tememos porque no las conocemos, ¿no?

Fiona: ...Tienes razón. Puede que sea mejor no conocer aquellas cosas aterradoras o dolorosas.

Fiona: (...Pero el que aún así piense en querer conocerlas, ¿será debido a que he crecido aislada?)

En vez de vivir una vida relajada con los ojos vendados prefiero conocer la realidad tal y como es.

Estoy segura de que un lobo como Rath a quienes han catalogado como seres que atacan y maldicen a las personas ha sufrido mucho más de lo que puedo imaginar.

Debe ser por eso que me dice que sería más feliz si no conociera algunas cosas.

Fiona: ...

Fiona: (...Por más que lo piense es inevitable.)

Al fin y al cabo yo soy yo y no puedo ser alguien distinto.

No puedo entender el dolor y sufrimiento de Rath.

Fiona: (Pero aun así no quiero rendirme a la idea de poder comprenderlo.)

Incluso si solo aquel que ha experimentado ese sufrimiento es capaz de entenderlo,

dudo que pueda permanecer eternamente con los brazos cruzados.

Fiona: ...Bueno, por ahora comamos.

Rath: Sí...

Fiona: ...Fufu. Es algo extraño.

Rath: ¿...El qué?

Fiona: Hasta ahora solo hemos podido comer carne asada en la fogata...

Fiona: Y ahora estamos comiendo encima de una cama... Al pensar en ello me resultó curioso.

Rath: No habrá problema mientras no ensuciemos nada.

Fiona: Me refiero al ambiente, a eso.

Fiona: (Estoy acostumbrada a comer en mi cama porque a menudo me quedo dormida, pero...)

Eso también es distinto. Es diferente a que me lleven la comida a la cama porque estoy enferma.

En este momento somos dos personas sentadas en la cama de una posada comiendo la comida que hay en una bandeja.

Estoy segura de que si las damas y los caballeros de la aristocracia nos vieran terminarían frunciendo el ceño.

Es posible que yo también hubiera reaccionado de esa forma al escuchar algo así de otras personas.

Fiona: (Y aun así, al hacer esto me termina resultando divertido.)

Es como si estuviera realizando alguna travesura.

Coloqué la bandeja sobre mi regazo y llevé el pan hacia mi boca.

Fiona: ¡Hace tiempo que no comía un suave pan...!

Rath: ...

Luego comí un bocado del estofado.

Fiona: ¡Delicioso...! Es salado y en verdad logra calentar a uno. Las papas están suaves y también son deliciosas.

Rath: ...

Fiona: ...

Rath: ...

Fiona: ...

Rath: ¿...Qué?

Fiona: ¿Tú no lo crees así Rath? Estás comiendo en silencio.

Rath: No tiene nada de malo... que no diga nada.

Fiona: Lo sé, pero... ¿No te parece que ha pasado mucho tiempo desde la última vez que comiste una comida digna y cálida?

En el bosque teníamos el pan duro que Rath traía consigo, los animales que había cazado y las nueces que yo había recolectado.

Incluso si cocinábamos eso, lo único que hacíamos era asar todo sobre la hoguera, casi ni tenían condimentos.

Fiona: (Aunque tampoco podía decir que no se aprovechaba bien el sabor de los ingredientes...)

Fiona: (Pero como pensé, ¿no le aliviará comer comida de verdad?)

Rath: ...

Mientras miraba a Rath, luego de un rato empezó a abrir la boca tras no soportar mi mirada expectante por sus impresiones.

Rath: Es cálida.

Fiona: ...Eso ya lo sé. De hecho, no es como que la comida que consumíamos en el bosque estuviera fría.

Fiona: (...Ah.)

Puede que fuera un error el esperar una impresión decente de parte de Rath.

Fiona: (Puede que la comida no le interese en el sentido de si es deliciosa o no.)

Muchas de las comidas que tuvimos en el bosque simplemente estaban asadas. Y tampoco parecía importarle mucho el sabor...

Empiezo a preguntarme si está acostumbrado a comer así porque vive en el bosque...

Es posible que no esté interesado en la comida en general.

Rath: ¿...Qué?

Fiona: A pesar de que estamos comiendo algo delicioso.

Fiona: (...Me hubiera gustado que Rath también se alegrara de poder comer algo delicioso.)

No conseguí el dinero yo sola, así que no puedo presumir demasiado...

Pero pensé que Rath se alegraría más al poder comer tras haber ganado dinero con nuestro negocio en la aldea.

¿Acaso Rath percibió esos sentimientos míos? Rath parecía incómodo y se inclinó.

Rath: ...Perdón, no sé distinguir muy bien entre algo que sepa bien y algo que sepa mal.

Fiona: ¿...Eh?

Rath: Debe ser... porque he tenido que comer de todo en el bosque... No soy muy consciente del sabor.

Fiona: No puede ser...

Rath: ...Pero sería peligroso que me enfermara del estómago y no pudiera moverme.

Rath: Así que al menos puedo saber cuando algo está o no podrido.

Fiona: ...

Fiona: (...Me desprecio.)

Siento como si los sentimientos que tenía antes hubieran sido atados.

Fiona: (¿Cómo se sentirá no tener gusto?)

Fiona: (No ser capaz de saber cuando comes algo delicioso.)

Ahora que sé su condición, siento que fue muy cruel pedirle a Rath su opinión sobre el estofado.

Debí haber sabido que Rath y yo crecimos en entornos completamente diferentes y aun así le estaba imponiendo mis estándares.

Fiona: ...

Rath: ¿...Por qué pones esa cara? Eso sabe bien, ¿no?

Fiona: ...Sí, es delicioso. Pero... lo siento.

Rath: ¿Ah? ¿Por qué te disculpas?

Fiona: Porque no sabes cómo sabe... y aun así me escuchaste decir una y otra vez que el estofado era delicioso.

Fiona: Lamento... haberte hecho sentir mal.

Rath: ...Eres tonta.

Fiona: ¿Eh?

Rath: El que no sepa distinguir sabores es mi problema.

Rath: No entiendo por qué tienes que disculparte.

Fiona: ...

Cuando me pregunta el motivo por el que me estoy disculpando me vuelvo incapaz de responderle.

En especial porque Rath no lo dice con la intención de perdonarme, sino porque en verdad no entiende.

Rath: ...Pero.

Fiona: ¿...Qué?

Rath: ...De algún modo.

Fiona: ¿...?

Rath: ...Este estofado... se siente nostálgico.

Fiona: ¡...!

Fiona: ...Fufu.

Rath: ¿...Por qué sonríes? Es desagradable.

Fiona: No tiene nada de malo. ¡Es porque estoy feliz!

Fiona: (Así que... nostálgico.)

Antes de que empezara la cacería de lobos.

Cuando los lobos todavía coexistían con la gente de Weblin, es probable que él viviera como un niño normal durante esa época.

Fiona: (Cuando pienso en eso... me pregunto cómo serán las cacerías de lobos...)

Fiona: (¿Por qué los lobos empezaron a ser cazados de forma indiscriminada?)

Los lobos esparcen una enfermedad como maldición. Los lobos atacan el reino de Weblin.

Esas son las razones por la que se ordenó cazar a los lobos. Pero...

Fiona: (¿En verdad los lobos son una especie tan peligrosa?)

Tras estar durante tantos días junto a Rath he comenzado a preguntármelo.

Anterior: [36 Sombras persecutorias]

Siguiente: [38 Ataque]

[Masterpost]

#black wolves saga last hope #black wolves saga #fiona galland #rath vogart #traducción al español #mi traducción #memory 37

13 notes · View notes

moov-bianco · 3 years

Text

Rosa 5. “Lugar y momento equivocado”.

Soy una nómada y nunca tengo un lugar donde quedarme por mucho tiempo, y solo terminé aquí como siempre termino en cualquier lugar: accidente, coincidencia, suerte. Pueden llamarlo como quieran.

Eso bastardos, estaban ahí y yo solo iba de paso. Pero quisieron hacerse los rudos y fuertes conmigo, como cobardes me rodearon y me inmovilizaron; pude haber respondido, de verdad lo hubiera hecho... pero, no quiero tener que meterme en problemas innecesarios y mucho menos que tenga que dejarme llevar por mi fuerza.

Soy pacifista y odio los pleitos.

Pero ellos, malditos bastardos, lograron llegar a tocar un nervio sensible. Ahora es tan insignificante que no debí haberme enojado por nada. Terminé hiriendo a muchos de gravedad, no creo haberlos matado, pero es algo que no puedo asegurar.

Llevo casi 3 meses sin probar ni una gota de sangre, aún por la adrenalina que fluía en mis venas, no pude hacer mucho contra ellos y tampoco peleé en serio. Se que eso pudo costarme la vida...pero…..quería ahorrar una pelea, es todo. Y pudieron herir me de gravedad demasiado fácil, escapé de milagro gracias a mis enredaderas y me adentre al bosque.

Tengo un amigo, que es un murciélago igual, y me creo una campana que puede desorientar a cualquier murciélago y fue eso lo que terminó salvando la vida.

Esto que les cuento ahora fue hace casi un mes. Por supuesto abandoné Inglaterra y me vine en el primer vuelo que pude comprar, terminé en New York y de ahí seguí con mi vida cotidiana; hasta hace apenas unos días.

En el hotel que me hospedaba jamás imaginé que ellos terminarían ahí, y nada fue casualidad, volvieron a inmovilizarme y el líder de este grupo estuvimos cara a cara, de manera injusta sus hombre me impedían moverme y él podía pasearse enfrente de mí con grandes aires de grandeza. No dejó de presumir me como colgaría mi cabeza como uno de sus trofeos y yo solo pude responderle un claro.

– vete al infierno.

Y me escape nuevamente. Mis enredaderas agarraron a los hombres y yo pude escapar; pero había más en esta ocasión. Muchos arqueros que no noté hasta que varias de esas flechas terminaron en mi cuerpo, además de francotiradores que no me tuvieron piedad. La suerte por primera vez se puso de mi lado, había niebla y además otro bosque terminó salvando mi vida, otra vez.

Ni siquiera yo sé cómo pude llegar tan lejos antes de colapsar en los columpios de esos juegos. Pensé que moriría…

Isabel clavó la mirada en Mavro y sus más cálida sonrisa, dedicada hasta ahora solo para sus dos mejores amigos, ahora la dedico para la persona enmascarada que tiene enfrente y desde lo más sincero de su corazón.

– si no me hubieras encontrado, hubiera muerto. Gracias, Mavro

El mitad bestia sus cristales se tornaron de un amarillo cálido como el de Isabel y asintió.

Aún cuando ella piensa en el suicidio desde que inició su eternidad, no podía menospreciar este gran gesto por parte de este chico que no dudo en ayudarla y ahora está dispuesto a brindarle aún más ayuda. Aún sin haber hecho nada todavía por esa ayuda.

Aún con su sonrisa, su mirada se agachó y su sonrisa se volvió en una tan fría y melancólica, que hizo que ambos cazarrecompensas se miraran y luego regresaran la mirada preocupada hacia la pelirroja.

– es un grupo vengativo y muy peligroso, aún con eso consciente y sabiendo que hay un niño de 5 años de por medio, ¿Aún quieren meterse en esto?

Luna ahora era ella quien regalaba una sonrisa hacia la pelirroja y sin dudarlo por un segundo.

– no vamos a dejarte sola en esto, además, ¿Cómo quieres que me quedé de brazos cruzados viendo cómo atacan a una de mis pacientes?

Isabel sonrió y soltó varias risitas. Y vaya sorpresa por parte del mitad bestia, llama la atención de ambas chicas y mostró lo que escribió durante esta linda plática.

Puedes quedarte en mi casa, y no debes preocuparte que te hagan daño. No voy a dejar que pelees de nuevo sola.

Era inevitable, un nudo se formó en la garganta de Isabel. Tan lindos gestos que era muy bueno para ser verdad.

Demasiado.

– gracias Mavro. Estaré encantada de seguir viviendo contigo.

De las muchas mentiras, esto era lo más sincero que podía decir y sin tener que escuchar su voz de la razón que no debe confiar en nadie que ella misma y las únicas personas que tiene en sus lista de contactos.

– entonces está decidido – Luna se levantó de la silla y se puso en medio de la habitación, para que ambos pares de ojos puedan concentrar sé mejor en ella – vamos a contactar a mi padre, vas a vivir con Mavro y les pondremos un alto a esos murciélagos – con emoción, Luna deja salir su mejor motivadora personal.

Contagiosa, los ojos de Mavro se pintan de un intenso amarillo y en Isabel se le forma una amplia sonrisa. Y ambos sin darse cuenta, asienten al mismo tiempo.

Lo sé, lo sé, ni pa' la ma muela. Pero para compensar vengo con un "Sombrero mágico 🎩💫" de esta noche, además de aclarar unas palabras. Así pueden armar un poco más el rompecabezas 👀✨

La tarea de hoy mis juniors 📒

¿Isabel mintió? Nombre, esa mujer terminó con una enorme nariz de pinocho.

Entonces.

¿Que ocurrió verdaderamente esa noche? Vayan a ⬇️

Lean y verán.

No tengo más ideas. Pero...

MUCHAS GRACIAS POR LEER 💜💙

Nos leemos. BYE BYE 💖

Sombrero mágico 🎩💫

🎩

Recuerdan las negritas, bueno aquí las utilice para remarcar como nuestra linda ojiverde mintió hacia Luna y Mavro. Algunos dirán que fue injusta, además de meterlos en este pleito, tiene el descaro de mentir.

Es válido sus quejas. Pero mis sombreritos, ella confío en un cazarrecompensas y termino con más cadáveres arrastrando en su espalda. También Isabel está en su derecho, en cierto punto.

🎩🎩

Una verdad a medias 👀✨

Su llega fue todo menos casualidad, ni ella entiende como fue que hizo caso a su melancolía y termino llendo de vuelta a su hogar. Fue crudo darse cuenta que ahora era la guarida de unos malditos cazarrecompensas, y como malditos que son, se aprovecharon de su vulnerabilidad y la amarraron con la intención de llevarla a plaza plata.

Iba a irse pacíficamente, no tenía que haber un baño de sangre. Pero ese maldito hijo de perra pateaban los cráneos como pelotas y se divertía en hacerlo que era lo peor.

Por eso, ella no dudo en unirse ahora al juego. En realidad propuso uno nuevo, un tierno juego de muñecas y él cuerpo bañado de sangre era el muñeco de trapo más bonito de todos.

#dos gotas de lluvia #Mavro #Isabel #Oc #Historia

5 notes · View notes

mypatchseries · 4 years

Text

Silence - Prólogo

TRES MESES ANTES

La noche se encontraba fría y silenciosa. Sobre mi cabeza se elevaba una delgada luna creciente, que a vista profunda parecía un párpado caído. Mi espalda reposaba sobre la lápida de Emma White. No sabía quién demonios era, pero supuse que no le molestaría servirme de apoyo en estos momentos.

Al igual que en los últimos tres días, sentía que mi cabeza iba a estallar de la preocupación, la ira y la culpa. ¿Dónde podría estar Nora? Había barrido la ciudad entera, y no pude dar con su paradero. Maldición.

Vi a Hank acercarse y me enderecé. Parecía disfrutar de mi facha devastadora. Apreté los puños.

—Luces un poco peor que desgastado, Patch… ¿lo estás? —Hank dijo, deteniéndose a unos pies de distancia.

Sonreí, pero no era agradable. Estaba pensando en las miles de maneras que tenía de separar la cabeza de su cuello.

—Y aquí estaba pensando que tal vez tendrías unas cuantas noches sin sueño. Después de todo, ella es tu propia carne y sangre. Por como luces, has tenido sueños de belleza. Rixon siempre dijo que eras un chico lindo. —Escupí.

Hank dejó pasar el insulto. Rixon era el ángel caído que solía poseer su cuerpo ada año durante el mes de Jeshvan, y él era tan bueno como la muerte. Con él fuera, no había nada más que quedara en el mundo que asustara a Hank.

— ¿Y bien? ¿Qué tienes para mí? Es mejor que sea bueno—Dijo.

—Fui a visitar tu casa, pero te escondiste con el rabo entre las piernas y llevaste a tu familia contigo. —Dije en voz suave, en el medio entre desprecio y… burla.

—Sí, pensé que tratarías algo imprudente. Ojo por ojo, ¿ese no es el credo de los ángeles?

Imaginé que él deseaba ver la desesperación y la sed de sangre que sentía por dentro, pero tenía que esperarse un momento. Sabía que había traído a sus hombres, Hank no era de los que se encontraba a solas con su propia muerte.

—Cortemos las cortesías. Dime que me trajiste algo útil—demandó.

Me encogí de hombros.

—Jugar con ratas me parece sin importancia aparente, al lado de encontrar donde has escondido a tu hija.

Los músculos en la mandíbula de Hank se tensaron.

—Ese no fue el trato.

—Conseguiré la información que necesitas —respondí, estando seguro que la única parte de mi cuerpo que reflejaba todo mi enojo era mis ojos negros—. Pero primero libera a Nora. Pon a tus hombres en el teléfono ahora.

—Necesito asegurarme de que cooperaras a largo término. La tendré hasta que lo haga bien en su lado del trato.

Resulta, que estoy acostumbrado a hacer las cosas a mí manera.

—No estoy aquí para negociar.

—No estás en posición de hacerlo —Hank alcanzó el bolsillo de su pecho y recuperó su móvil—. Estoy perdiendo la paciencia. Si me has hecho perder mi tiempo esta noche, va a ser una desagradable noche para tu novia. Una llamada, y ella se va…

Antes de que tuviera tiempo para cumplir su amenaza, estiré mi brazo para golpear su pecho con fuerza y lanzarlo al suelo. Todo el aire se escapó de Hank en un apuro. Su cabeza golpeó una de las lápidas, y corrí para ponerme sobre él.

—Así es como va a funcionar —siseé. Hank trató de emitir un grito, pero mi mano estaba cerrada en su garganta. Hank golpeó mi puño, pero el gesto fue sin sentido; yo era demasiado fuerte.

En un arrebato de desesperación, Hank invadió mi mente, desentrañando los hilos que forman mis pensamientos, concentrándose fijamente en redirigir mis intenciones, intentando redirigir mi motivación, al tiempo que susurraba un hipnótico:

Libera a Hank Millar, libéralo ahora.

—¿Un truco mental? —desdeñé, y casi reí a carcajadas—. No te molestes. Haz la llamada—ordené—. Si ella no sale libre en los próximos dos minutos, te mataré rápidamente. Más tarde que eso, y te haré pedazos, una pieza a la vez. Y créeme cuando digo que disfrutaré cada último grito que pronuncies.

—¡No puedes matarme! —Hank ahogó.

¿Estaba retándome? Apreté su hombro con fuerza, con tanta fuerza que terminé por desprenderle un trozo de piel. Él aulló, pero el sonido nunca pasó de sus labios. Su tráquea estaba aplastada bajo mis manos.

—Una pieza a la vez —siseé, sosteniendo la piel frente a él. —Llama a tu hombre.

—¡No puedo-hablar! —Hank gorgojeó.

>>Haz un juramento para liberarla ahora, y te dejaré hablar.<< dije en la cabeza de Hank. >>Estás cometiendo un error, chico<< Hank disparó de vuelta. Sus dedos rozaron su bolsillo, deslizándose dentro. Apretó un dispositivo que tenía en el bolsillo. Debí suponer que de esa manera llamaría a sus hombres. Maldito cobarde.

Hice un sonido gutural de impaciencia, le arranqué el dispositivo y lo arrojé en la neblina. >>Haz un juramento o tu brazo es el siguiente. <<

>>Mantendré el trato original<< Hank devolvió >>le perdonó la vida y renuncio a toda idea de vengar la muerte de Chauncey Langeais, si me traes la información que necesito. Hasta entonces, me comprometo a tratarla con compasión. <<

¿Compasión? Por favor. Golpeé la cabeza de Hank contra el suelo.

>>No la dejaré contigo cinco minutos más, y mucho menos por el tiempo que me llevará conseguir lo que quieres…<<

Él curvó sus labios y me miró.

>>Nunca olvidaré cuán fuerte ella gritó cuando la arrastré lejos. ¿Sabías que ella gritó tu nombre? Una y otra vez. Dijo que irías por ella. Eso fue los primeros días, por supuesto. Creo que finalmente está aceptando que no eres competencia para mí.<<

Maldito. Mil veces maldito. ¿Quería jugar sucio? ¿Le gustaba la agonía? Muy bien. Le daré agonía pura.

Un momento Hank estaba a punto de desmayarse por el dolor al rojo vivo de su cuerpo golpeado, y al siguiente estaba mirando mis puños, pintados con su sangre.

Un desafiante aullido salió del cuerpo de Hank. El dolor explotó dentro de él, casi noqueándolo inconsciente. Desde algún lugar distante, escuché los pies corriendo de sus hombres Nefilim.

—Sáquenlo-de-encima-de-mí —gruñó mientras rasgaba su cuerpo con dolorosa y placentera lentitud. Cada terminación nerviosa explotando con fuego. Calor y agonía brotaban por sus poros. Él miró su mano, pero no había carne, sólo hueso destrozado. Iba a destrozarlo en pedazos. Sus hombres trataban de apartarme, pero les costaba. La ira me dominaba. Iba a matar a este maldito imbécil y luego los cazaría a todos, uno por uno.

Hank soltó brutalmente:

—¡Blakely! ¡Quítenlo ahora!

No lo suficientemente rápido, fui arrastrado lejos. Hank tendido en el suelo, jadeando. Estaba mojado con sangre. Haciendo a un lado la mano que Blakely ofrecía, Hank con esfuerzo se puso de pie.

—¿Lo encerramos, señor?

Hank presionó un pañuelo contra su labio, el cual estaba abierto y colgaba de su rostro como un pulpo.

—No. No nos servirá encerrarlo. Dígale a Dabber que la chica no tendrá nada más que agua por cuarenta y ocho horas. —Su respiración era entrecortada—Si nuestro chico aquí no puede cooperar, ella paga.

Con un asentimiento, Blakely se fue de la escena, marcando en su móvil.

Hank escupió un diente ensangrentado, lo estudió detenidamente, luego lo metió en su bolsillo. Él puso sus ojos en mí, cuyo único signo exterior de furia vino en forma de puños.

—Otra vez, los términos de nuestro juramento, así no hay más malentendidos posteriores. Primero, te ganarás de nuevo la confidencialidad de un ángel caído, reincorporándose a sus filas…

—Te mataré —dije, con una calmada advertencia. Aunque estaba sostenido por cinco hombres, ya no luchaba. Me quedé sepulcralmente quieto, con una sed de venganza que punzaba en mi interior.

—…siguiendo, los espiarás y me reportarás sus negocios directamente a mí.

—Juro ahora —dije, mi respiración controlada pero elevada, ignorando sus palabras—, con todos estos hombres como testigos, no descansaré hasta que estés muerto.

—Una pérdida de aliento. No puedes matarme. ¿Tal vez usted se ha olvidado de que una Nefil reclama su derecho de nacimiento inmortal?

Un murmuro de diversión rodeó a sus hombres, pero Hank les hizo callar.

—Cuando determine que me ha dado información suficiente para exitosamente prevenir que los ángeles caídos posean cuerpos Nefilim para el próximo Jeshvan...

—Cada mano que ponga en ella la devolveré multiplicada por diez—continué.

La boca de Hank se retorció en una sugestión de sonrisa.

—Un sentimiento innecesario, ¿no crees? Para el momento que terminé con ella, no recordará tú nombre.

—Recuerda este momento —dije con vehemencia helada—. Volveré para asustarte.

—Suficiente de esto —Hank espetó, haciendo un gesto de disgusto y mirando hacia el coche—Llévenlo al Parque de Diversiones Delphic. Lo queremos entre los caídos tan pronto como sea posible.

Y así, para cerrar el juramento…

—Te daré mis alas.

Hanks se detuvo en su partida. Él ladró una risa.

—¿Qué?

—Haz un juramento para liberar a Nora ahora mismo, y son tuyas. —sonaba demacrado. Música para los oídos de Hank.

—¿Qué uso tendría con tus alas? —replicó sin gracia, pero sabía que había capturado su atención. Por lo que él sabía, ningún Nefil había rasgado nunca las alas de un ángel. Lo hacían entre su propia clase de vez en cuando, pero la de idea de un Nefil teniendo ese poder era la novedad. Bastante tentación.

Historias de su conquista pasarían por las casas de los Nefil cada noche.

—Estás pensando algo —dije, con una fatiga incrementada.

—Juraré liberarla antes de Jeshvan —Hank contrarrestó, suavizando toda la impaciencia de su voz, sabiendo que revelar su placer sería desastroso.

—No lo suficientemente bueno.

—Tus alas podrían ser un lindo trofeo, pero tengo una agenda más grande. La liberaré al final del verano, mi oferta final. —Él se volteó, caminando lejos, tragándose su codicioso entusiasmo.

Maldición.

—Hecho —dijé con una amplia resignación, y Hank dejó salir una lenta respiración.

Él se volteó.

—¿Cómo se hará?

—Tus hombres las sacaran.

Hank abrió su boca para discutir, pero lo interrumpí.

—Son lo suficientemente fuertes. Si no peleo, nueve o diez de ellos podrían hacerlo. Volveré a vivir debajo de Delphic y le haré saber a los arcángeles que me arrancaron las alas. Pero para este trabajo, no podemos tener ninguna conexión —advertí.

Sin demora, Hank lanzó unas cuantas gotas de sangre de su desfigurada mano al césped debajo de sus pies.

—Juro liberar a Nora antes de que el verano termine. Si rompo mi promesa, declaro que debo morir y retornar al polvo del cual fui creado.

Bien, aquí vamos.

Tiré de mi camisa por la cabeza y apoyé las manos sobre mis rodillas. Mi torso subía y bajaba con cada respiración.

—Manos a la obra—Dije.

A Hank le habría gustado hacer los honores, pero mi advertencia había ganado.

—Arranquen las alas del ángel y limpien cualquier desastre. Luego lleven su cuerpo a las puertas Delphic, donde va a asegurarse de ser encontrado. Y tengan cuidado de no ser vistos.

Y así, siendo estas sus últimas palabras, se marchó.

Sus hombres se marcharon minutos luego detrás de él, dejando dos enormes heridas abiertas en mi espalda. Con la sangre bañando mi espalda y cayendo al suelo, yo también dije unas últimas palabras:

>>Si no cumplo mi juramento, el fuego eterno será mi propio castigo<<

------------------------------

PD: Con “Fuego eterno” se refiere al infierno chicas. Espero que les haya gustado este primer cap^^

5 notes · View notes

hologramasblog · 4 years

Text

¿Demonios?...

Hoy un día cualquiera, en una vida de una persona totalmente normal.

_Hola, soy nuevo en esto_ ¿?

Hoy personas mueren frente a mis ojos, ¿Por qué?...

-¿Por qué nadie hace nada?-

Día dos de una persona normal.

_Hola de nuevo, ayer no pude dormir, tal vez sólo de 3 a 5 minutos, dormí un poco hoy en la mañana pero... A qué costo?

Día tres de una persona.

_....Hol.. perdón, ¡ya no puedo seguir con esto!.

Día cuatro de alguien.

_Las imágenes cada vez se vuelven más y más fuertes, intenté olvidarlo... Pero... ¡No!.

¡Estoy hecho añicos!, Los individuos a los que ustedes llaman personas... Perdón, no debí decir nada de esto.

Día dieciséis.

_Hola, estoy un poco mejor, por fin dormí hasta la mañana. Me siento... "Bien", supongo...

Día veinte.

_Hola de nuevo, cada vez veo más relacionada mi vida con un cuento de terror de esos que te contaban cuando te llevaban a acampar, te sentabas en una hoguera y corrías directo a los brazos de tus padres porque temblabas de miedo.

Día cincuenta.

_Estoy empezando a creer que lo de redificar mi alma... No será mala idea.

Día sesenta.

_Soy normal de nuevo, no saben lo feliz que me siento, por fin puedo salir y conocer indi... Personas.

Día sesenta y seis.

_¡Conseguí un empleo!.

Día ochenta.

_Mi jefe dice que quiere hablar conmigo...

Día ochenta después de hablar con mi jefe.

_Me despidió.

Día ochenta y siete.

_No saben lo difícil que es empezar solamente con lo que tienes en tus bolsillos... Creo que no debo rendirme, aunque... Tal vez sea una buena idea.

Día cien.

_La vida me sonríe de nuevo, ¡Conseguí un empleo en una fábrica de...

Día ciento cincuenta.

_¡Pude pagar un apartamento!

Día ciento cincuenta en la noche.

_Desde hace media hora un sonido extraño proviene de la alacena, espero sea sólo una pequeña rata.

Día ciento cincuenta después de revisar la alacena.

_Lo que encontré fue totalmente inesperado, no sé aún sí debo contarles, sinceramente, tengo miedo porque lo que acabé de ver...

Día ciento setenta.

_Hace unas semanas, llamé a un clérigo, me dijo que debía confesar mis pecados... No sé a qué se refería.

Día ciento noventa.

_Hoy me sucedió algo extremadamen... No sé, creo que es normal.

Día ciento noventa y dos.

_¡No!, ¡Otra vez no, por favor!.

Día ciento noventa y cinco.

_Hola, soy yo de nuevo...

Día ciento noventa y siete.

_La fábrica en la que trabaja quebró. Nuestro jefe despidió a todos. Otra vez empezaré desde cero.

Día doscientos.

_Esto es cada vez más extraño, ya no sabré lo que es real o no.

Día doscientos...

_¡HOLA!.

DÍA DOSCIENTOS... Uno.

_Hola. Las puertas se abren, las ventanas se cierran, saluda o será tu último día...

Día dos.

_¡He vuelto!...

Día menos uno.

_Asesiné.

Día trescientos.

_Hola, ¿de qué te sirve tener ojos y no poder ver?.

Día trescientos de un...

_Mi padre vino a verme, supongo que estoy bien ahora.

Día trescientos seis.

_Mi padre falleció.

¡Le dije que venir a visitarme era mala idea!

_Dia trescientos doce.

_Ja ja ja!.

Día trescientos cincuenta.

_Estoy viviendo en una cueva.

Día trescientos sesenta.

_Los murmullos de almas en pena me siguen, veo una luz a lo largo de un lago lleno de pequeños sueños; los individuos se cansan de ellos mismos, sus almas están perdidas, no saben lo que les espera después de... JA JA JA!.

Día trescientos ochenta.

_Hola de nuevo.

Día cuatrocientos.

_No se han preguntado, por qué vivimos en una realidad creada subconscientemente por un hombre?... Ah, no... Olviden lo que acabo de decir... El loco soy yo.

Día cuatrocientos cuarenta.

_La empuñadura de mi espada es fría y desesperante, los sinónimos de muerte cruzan por mi cabeza... Me pregunto... ¿Quién soy?.

Día quinientos.

_acabo de ver una sombra en el bosque, creo que es mi padre en busca de su liberación y con sed de venganza.

Día quinientos cuarenta.

_Me puse a pensar, ¿por qué estoy aquí?, ¿A caso sirvo para algo?, ¿O simplemente soy un ser con carencia de alma?

Día quinientos setenta.

_¡Escapé!.

Día ochocientos.

_Encontré un abrazo de fuego.

Día ochocientos tres.

_Carezco de esperanza y espíritu, me aterroriza pensar en quién soy y qué hice.

Día ochocientos cuatro.

_¿Qué somos?

Día ochocientos cuatro cinco uno.

_Los días continúan, y ¿qué hago mientras no hago?.

Día dos.

_¡¿Por qué siguen conmigo?!

Día seis.

_Hola.

Día tres.

_Recuerdo lo que viví cuando estuve en el orfanato, nunca me adoptaron, jamás tuve una familia.

Día cero.

_Hoy me encontré a uno de mis mejores amigos en el reclusorio. Intentó asesinarme. Me ama.

Día... Los días retroceden o sólo avanzan?

_Hola, soy yo de nuevo, les presento a mi hermano, se llama...

Día... ¿Recuerdan lo anterior?.

_Mi hermano intentó asesinarme, no debí darle su dosis.

Día otro cualquiera.

_Mi padre dijo que lo llamara, no sé qué quiere ahora, simplemente no lo haré.

Día trescientos ochenta.

_El alma carente de sentido sin sentido aparente hace perfeccionar al ser de una difusión entre tú cuerpo y tu sed de tí...

8 notes · View notes