Tumgik
Text
Intento entender qué es lo que hago mal y no puedo. Doy siempre lo mejor de mí, me desvivo por las personas al punto de dejarme a un lado y aún así nunca alcanza. Realmente siento que nada vale la pena, que yo no valgo la pena, que tengo algún problema.
Cuando siento que soy feliz, viene algo que arrasa con todo lo bueno y deja solo lo malo. Y es triste. Es triste ver cómo la gente se caga en todo lo que vos das por ellos. Ya no se cómo hacer para estar tranquila mental y sentimentalmente.
¿Qué tengo de malo? ¿Por qué nadie me valora de verdad? Cuando siento que encontré al amor de mi vida, con quien quiero pasar mis días y mis noches, mis tristezas y alegrías, va y me decepciona. Una y otra vez.
Quizás debería aprender a ser peor persona, a no brindar tanto, porque al final, no sirve para absolutamente nada.
7 notes · View notes
Text
Irse de la vida de alguien con el amor intacto es peor que irse odiándolo.
1 note · View note
Text
¿Cómo te hago entender que no me hiciste ningún mal? Al contrario, me salvaste.
1 note · View note
Text
Duele ver como no me extraña en lo más mínimo
0 notes
Text
Se estará riendo con la otra de mí
0 notes
Text
Tal vez no soy un 10, pero no merecía que alguien me haga sentir un 0
0 notes
Text
Hiciste lo que me prometiste que no ibas a hacerme nunca
0 notes
Text
No entiendo como el amor puede llegar a doler tanto
1 note · View note
Text
Tumblr media
12K notes · View notes
Text
No se ruega amor, tiempo, ni lealtad.
2K notes · View notes
Text
Poco a poco veo como te desenamoras de mí
0 notes
Text
Ya no es como antes ni ahí
0 notes
Text
Tenías razón, no me merecías. Nunca te mereciste todo el amor que te di.
0 notes
Text
¿Qué hago con mis labios si me ruegan tus besos?
0 notes
Text
Entraste como un rayo de luz, ¿y ahora qué hago yo?
0 notes
Text
Cuando decidis contarle los problemas personales a una persona que no es tú novia, y todavía la alejas, ya no sé puede buscar más nada ahí. Aunque duela.
0 notes
Text
Rota pero aprendiendo a amar.
Perdón por ser insegura. Es un gran defecto que tengo. Desde chiquita cada persona a la cual quería con todo mi corazón, me los remarcaba constantemente.
Los "estás más gordita" no faltaban en ningún cumpleaños, el "deberías dejar de comer", cuando solo había probado mi primer pedacito de comida, caía sin aviso.
Hacerme comidas diferentes al resto, que no me incluyeran porque "seguramente no puedas ni llegar al arco con la pelota", "seguro te cansas antes", "es para niños más flaquitos", eran las cosas que me empezaron hacer sentir así.
Con la adolescencia eso fue empeorando, cada vez subía más de peso- por problemas personales que nadie conocía- pero que parecía que sí lo hicieran, por las cosas que me decían en los largos recreos.
Mi "mejor amiga", que hasta cinco años después no supe o no me quise dar cuenta, era la primera en minimizarme, en rebajarme, en hacerme sentir insuficiente. Me hizo sentir que nadie me iba a querer, que no iba a conseguir tener amigas porque ¿Quién querría ser amiga de alguien como yo?
Los amigos varones que tenían se fueron alejando, quizás porque pensaban que iría atrás de ellos, porque como nadie se fijaba en mí, comenzaría a gustar de ellos. Y no era así, solo necesitaba a alguien que me escuchara, necesitaba a alguien que, por un momento, se parara a pensar ¿Cómo estará Sil?
Porque yo no me consideraba importante en absoluto, ni tampoco quería serlo, solo que, en el fondo de mí, quería interesarle a alguien realmente, quería que dejaran de ver mi físico, querían que me quieran por como era mi persona.
Cuando llegaron mis 15, creo que fue lo peor. Mi papá dejó a mi mamá por otra mujer, ahí empezó mi miedo al abandono- miedo que hasta el día de hoy tengo- y en mi fiesta de cumpleaños, invité al chico que me gustaba, y que según él, gustaba de mí.
Claramente no era así, a mitad de la fiesta me preguntó por el nombre de mi mejor amiga, y ella parecía emocionada por esto- aún sabiendo cuánto me gustaba él- no sé porqué lo hice, pero terminé pasándoles sus números entre ellos, y yo quedando aún más atrás en aquel huequito que había creado para esconderme cuando me sintiera triste.
Después de ese desamor, vinieron varios. Emmanuel no quería mostrarme nunca al mundo, que es respetable, lo que me dolió no fue eso, fue que al bloquearme sin razón, dio a conocer su relación con una chica de mi misma ciudad. Por dos largos años me pregunte ¿Por qué con ella sí y conmigo no? ¿Qué me faltaba? Claramente mi conclusión fue que no era suficiente, que nunca nadie me querría así como era, y que solo podría cambiar si adelgazaba de peso.
Sergio me juraba amor todos los días de los 365 que llegamos a hablar, pero la cosa cambió cuando le dije que quería conocer a la familia. El fin de semana siguiente, me mandó una carta diciendo que no queríamos las mismas cosas y que yo no era alguien a quien quisiera presentar a sus padres. Bolita me hice.
En el verano del 2017, lo hice. Comencé a vomitar cada vez que comía, hacía 10 km por día en bicicleta y a veces, hasta me acostaba pensando en que podía desmayarme- otras veces, me pasó-.
En 68 días, había adelgazado 20kg, y lo peor no fue la forma ni lo rápido, era que no había sido por mí. Todos me alagaban, me decían cuál hermosa estaba, lo bien que me había hecho adelgazar, yo me miraba en el espejo y no veía cambio alguno. Veía mis fotos y me sentía la persona más fea y reemplazable del mundo.
Pero lo bueno y lindo de adelgazar- según los que me rodeaban- era que iba a tener más "ganado", más "pretendientes", y es verdad. Tuve novio, perdí mi virginidad, terminé con él por inseguridades mías. Volví a bajar más de peso.
Entré a cursar mi carrera, comencé a tener amigas de verdad, me distancié de esas que me hicieron tanto daño. Conocí personas hermosas, comencé a amar lo que hacía, me empecé a sentir bien conmigo misma, esta vez de verdad.
Pero cada vez que quería estar con alguien, estar con alguien establemente, mi mente no me dejaba, se encargaba de arruinarme todo lo lindo que había formado. La ansiedad de pensar en cómo me podían cambiar, reemplazar de un día a otro por no ser suficiente, me carcomía todo el tiempo, y me obligaba a alejarme de ese vínculo, porque sin querer, me hacía mucho mal.
Y estuve muchos meses pensando que nunca más iba a poder amar a nadie, porque mi frase favorita era: "Amar es destruir y ser amado es ser destruido", pero en plena cuarentena apareció la persona más importante que tengo en mi vida.
Tan importante que ni siquiera puedo explicar con palabras lo bien que me hace sentir. Solo digo que, sus brazos son la calma que nunca antes me habían dado y sus mimos me hacen querer estar con él para siempre. Él me hace olvidar lo mierda que puede ser el mundo, con solo darme un beso.
Y se que muchas veces soy insegura, que vuelvo a caer en el mismo tema que me has dejado 1342 veces en claro, te pido perdón y ojalá pudiera prometerte que nunca más lo haría, pero debes entender, que es sumamente difícil. Es un monstruo con el cual lucho desde los seis años.
Pero eso no quiere decir que estar contigo no me haga bien, al contrario, es lo que más bien me hace. Lo que siento es miedo a perderte, miedo a que me cambies por alguien mejor, que te pueda dar quizás lo que yo no tengo- aunque te prometo que te doy y daré siempre todo de mi-.
Estar contigo me ayuda, me ayudó muchísimo, he cambiado para mejor, y todos los días agradezco que me elijas, que me ames tal cual soy, que no me intentes cambiar, que me intentes entender y acompañar en el cambio que yo realmente quiero.
Vos no sabes cuánto yo te amo. De verdad. Te quiero ahora, en mi presente, te quiero en la entrega de mi título, te quiero conmigo para irnos a vivir juntos, te quiero para ir a comprar al súper por las tardecitas, para tomar mate en el sillón, para mirar películas comiendo hamburguesas, para estar en nuestra futura pieza de computadoras juntitos y pasar tiempo en silencio pero juntos, te quiero para escucharte putear cada vez que te matan en tu jueguito favorito, te quiero para cuidarte cada vez que tengas alergia o te sientas mal, te quiero para tener un gatito o un perrito juntos, te quiero para que salgamos de vacaciones bien lejitos de todo el ruido que muchas veces nos cansa, te quiero para le pongas una nota distinta a la que les puse a mis alumnos, te quiero para que me hagas rapiditas con jamón y queso, te quiero para rezongarte un poco, te quiero para que peleemos un ratito, te quiero para tener que decirte las cosas 10 veces porque te las olvidas, te quiero para tener a Mía y también a alguno más. Te quiero para amarte toda la vida como nunca antes amé a nadie.
38 notes · View notes