Domingo, 23 de julio

Querido J:

"Lo he intentado, lo he intentado. Escribí un montón de respuestas a tus mensajes, pero luego... no fui capaz de enviarlas. Pensé que te harían odiarme. Y, a medida que pasaba el tiempo, la cosa fue haciéndose mucho peor, y fui convenciéndome cada vez más de que me odiabas y que nada de lo que dijera podría hacer que me perdonaras. Pensé que sería mejor si no decía nada".

Tuyo

Jueves, 20 de julio

Querido J:

Seré completamente sincero contigo. Sí, si he estado leyendo los mensajes que me mandas. Incluso a veces solo me conecto a telegram con la esperanza de ver en la bandeja de entrada algún mensaje tuyo. Pero nunca contesto (es evidente) y lo marco como no leído. Puedes estar enojado conmigo, yo también lo estaría. Sé que no es muy agradable saber que te ignoro, y que perfectamente podría contestar tus mensajes. Tampoco es agradable no saber nada de nada de mi, así como lo dices, capaz me muero y nunca te enterarías. Pero, no estoy preparado.

Es como una valla que me divide entre mi, y el mundo real. Odio el mundo real, es doloroso. Me hace sentir dolor, y lo que yo más odio es sentirlo, entonces constantemente huyo de eso. Sé que no es sano, mucho menos bueno. Si sigo así, en algún punto terminará de aislarme por completo de la vida real y viviré solo en mi cabeza, con escenarios ficticios que pueda controlar a mi antojo, y dónde por supuesto, no existirá el dolor. Ahí es donde me perderé por completo, y nadie podrá rescatarme ni hacerme volver.

Soy muy pesimista, lo siento. Me hago líos mentales imaginando los peores escenarios posibles. Hace un par de años lo negaba, pero soy consciente de eso ahora, que mi fatalismo y los peligros ficticios en mi cabeza me llevarán a la ruina. El cerebro no distingue del peligro real e imaginario, mi visión de las cosas es distorsionada, así que con frecuencia caigo en sus redes.

Lamento si estoy más pesimista de lo normal, hoy fue un pésimo día.

Tuyo

16 de julio, 2023

Querido J:

Aquí estoy de nuevo yo, escribiendote. Aunque aún no se si llegues a leer esto algún día, o mis cartas se reducirán simplemente a misivas perdidas en el aire. Cómo sea, pongo todo mi dedicación y mi esfuerzo en esto, en estos últimos tiempos no tengo a nadie con quien pueda hablar, tú eres una de las únicas personas que me quedan, y que sé que me escuchan, sin juzgarme.

Ahorita, estoy leyendo un libro. Se llama Tokio Blues, es probable que hayas escuchado hablar de él, es un libro bastante famoso. Si no lo conoces, pues bueno, básicamente habla sobre la vida de un ejecutivo de cincuenta y tantos años, que rememora sus años de adolescencia por allá de los años sesenta y setenta. De sus venturas y desventuras. Siendo sinceros, es muy deprimente, y no estoy seguro si debería leer ese libro, dado mi estado actual. Todos ahí tienen problemas mentales, los personajes se suicidan, el protagonista lleva un vida más vacía incluso que la mía. Pero, por otro lado, he encontrado un poco de consuelo en ese libro. Saber que no soy la única persona que se siente así, en un "lodazal estancado incluso en mi propio tiempo" es reconfortante. Deprimente, pero reconfortante. Casi a todas las chicas del libro se les ha zafado un tornillo y habla mucho de sexo. No me encanta leer las relaciones sexuales, es algo que me trae sin cuidado, creo que el libro podría ir perfectamente sin esas páginas. Pero igual, lo sigo leyendo. Ciertos pasajes es como leer una descripción de mi mismo. Por ejemplo:

"Hacía tiempo que todos habían emprendido la marcha, y yo y mi tiempo seguíamos arrastrándonos con torpeza por aquel lodazal".

"Sólo sabía que tenía que dirigirme a alguna parte y, por ese motivo, movía los pies"

No sé si recomendarte el libro. No es un libro que recomendaría a cualquiera, dado el tipo de temas que trata, y como todo gira en torno a la muerte. Es un poco raro, ver el tipo de libros que últimamente he estado leyendo; no hay punto medio. O leo una historia súper homosexual y cursi y romántica (RBRW) o una historia con matices oscuros y psicólogicos (Cadáver exquisito, por ejemplo. Es otro libro que leí hace un tiempo).

En fin. Leer estos libros hacen que huya de mi tristeza tormentosa y patética realidad. Si tuviera que ponerle un nombre a esta mierda que llevo por vida sería "patética" porque eso es lo que es. No tengo tragedias para ser tan lastimera, pero tampoco es interesante. Sencillamente es patética. Hace más de tres horas que estoy sentado en el mismo banco de un parque a dónde vine a parame. Me corrieron del trabajo, y he tenido que fingir que sigo yendo a trabajar pese a que es una total y grande mentira. No daré muchos detalles respecto a lo primero, entré a trabajar a un negocio de comida y me corrieron porque no parecía ser lo suficientemente eficaz para la dueña. En fin, que eso me da igual. Podría meterse su aceite por el culo, no me importa. Pero he vuelto a mentir a todos, eso de que estoy yendo a trabajar normalmente. Hubo un tiempo que mentía tanto, que pensé que tenía un problema. Hablé de eso con la psicóloga y ella me dijo que mentía para protegerme. Aún no se exactamente para protegerme de que, pero es cierto lo que ella dice. Es probable que mienta para evitar conversaciones incómodas y señalamientos a mi persona. Soy tan estúpida que no puedo conservar un trabajo por un tiempo decente. Ellos piensan que fui a trabajar, pero en realidad estoy matando el tiempo yendo a plazas, cybercafes, eventos y comparsas. Verás, que este mes está lleno de fiesta en mi estado (se celebra la Guelaguetza, puedes buscarlo en Google si no sabes que es) entonces los lugares a donde pueda ir no faltan. El problema es que no importa a donde vaya, lo que haga, o cuanto quiera sentirme bien. No puedo. Me rodeo de tantas personas pero no lo logro, es como estar separado del mundo por una muralla invisible. Todos son estúpidos y yo estoy sufriendo.

Tal vez pienses que estoy fetichizando mi propia infelicidad. Que mi tristeza y depresión me hacen sentir especial. Eso también lo he pensado, y me aterra que pueda ser realidad. Una parte de mi puede que lo sienta así, mi inconsciente. Pero mi parte consciente quiere salir de esto, quiero sentirme bien. Puede que le mienta a todos, incluso a mi mismo. Pero necesito reafirmarme esto, o de lo contrario caeré en un pozo de victimización insalvable. Como dicen los gringos "fake it til you make it".

En mi cabeza tejo e hilo ideas e ideas para contarte. Constantemente. Estás constantemente en mis pensamientos, como una forma de aliento quiero decir. Pero supongo que es momento de irme a casa, fingiendo que llegué de trabajar. Ando en el centro y si no me apuro, no conseguiré taxi (el bus ya no está a estas horas de la noche). Y si, tal vez pienses que es irresponsable de mi parte andar por ahí a estas horas de la noche, pero en teoría salgo a las diez de la noche de trabajar. Así que, mato el tiempo por ahí. Quería irme al cine, pero ayer me robaron 200 pesos cuando estaba viendo un desfile (como 20 dólares) y se me quitaron las ganas. Últimamente he tenido sueños extraños relacionados con caca, fuego, personas enojadas y mucha violencia. Pero no creo que signifique algo respecto a que ando por ahí en las calles a altas horas de la noche, solo es mi preocupación exteriorizandose en mis sueños.

Ya me voy, que ya me duele el culo de tanto estar sentado. Y unos policías están aquí al lado de forma sospechosa.

Tuyo

12 de julio, 2023

Querido J:

Hace un tiempo que no hablamos. Quiero decirte que te extraño.

Y realmente no sé si en algún momento te haga llegar mis cartas. Aunque muero de ganas de hablarte y contarte todo lo que me ha pasado los últimos tiempos, aún no estoy listo. Sé que suena un poco tonto, pero siento que ya estoy lidiando con demasiadas cosas dentro de mi cabeza, cosas que necesito resolver, y no debo distraerme.

No quiero decir que seas una distracción para mí (ejem) pero tanto tú cómo yo sabemos que podríamos pasar horas y horas hablando sin parar de tonterías. Eso me encanta, por supuesto, pero el tiempo apremia.

Tantas cosas han pasado que no sé por dónde podría empezar para contarte. Si en algún momento agarro valor para hacerte llegar esto, me gustaría que supieras lo que pasa en mi vida. Bueno, ahorita estoy escribiendo esto desde el hospital. Y no, aunque pienses que me internaron por estar loca, en realidad eso no es lo que pasa😆. A mí mamá la internaron porque la operaron, y yo vine junto con mi papá al hospital para turnarnos y cuidarla. Aunque solo serán un par de días, espero que mañana la den de alta. He estado durmiendo en una silla más dura que el suelo, así que no he dormido nada. Hace mucho calor, y cuando empiezo a conciliar el sueño, llega una enfermera a interrumpir. Tengo que decir que el hospital es deprimente; estar aquí, escuchando las quejas de los demás pacientes, el olor a estéril y los uniformes blancos de las enfermeras, sinceramente me marea. Pero hago el esfuerzo por mi mamá.

El año antepasado también la operaron, pero de la cabeza. ¡Imagínate! Le abrieron el cráneo. Fueron tiempos difíciles para la familia, aunque tengo que decir que esas épocas no las recuerdo con claridad. Es como si viera a través de un velo, por esos tiempos yo vivía prácticamente en mi cabeza, huyendo de la realidad AS ALWAYS.

Hablando de eso… ¿Recuerdas que mi mamá y mi tía me metieron a un centro de rehabilitación? Pues hace tiempo me dieron el resultado del diagnóstico. El día que me lo dieron quería hablarte inmediatamente, pero, algo me detenía. No sé cómo explicarlo, pero desde entonces siempre escribo mensajes para ti que jamás llego a mandar. Grabo audios y los borro de inmediato. Supondrás, entonces, que los resultados del diagnóstico no son buenos. Pues así es, tengo más problemas mentales de los que pensaba (¡y eso es decir mucho!) aunque en mi defensa puedo decir que no es únicamente culpa de mis circunstancias, también mi sangre me ha maldecido a esto desde que nací.

Me explico: tú sabes que la genética y la herencia es (en ocasiones) fundamental para definir cómo será un niño. Pues eso ha sucedido, hoy hablando con mi mamá, hemos debatido y ella me dijo que en la familia hay un largo historial de enfermedades mentales, intentos de suicidio y drogadicción. Que yo no supiera nada de esto se debía al tabú que gira en torno a las enfermedades de este tipo (por lo general, tratan de esconderse) y mi falta de interés en los demás miembros de mi familia. Así que, mi familia solo me hereda enfermedades mentales, nada de dinero ni terrenos. 😑

Que desgracias. Asumo que tú me entiendes perfectamente. Estamos rotos y descosidos desde que nacimos. Otra razón por la que estoy feliz de conocerte: un roto para un descosido. Nos merecemos mutuamente.

Tuyo