Machu Picchu, ese pueblo escondido en la cima, la ciudad perdida en medio de montañas, la mayor atracción turística del Perú, una de las 7 Maravillas del Mundo moderno. Trabajé y ahorré para permitirme conocer este lugar. No quería ir a Perú y perdérmelo, había conocido a 3 viajeros que no fueron porque rechazaban el hecho de pagar una entrada para conocer algo que “nos pertenece”, tal vez no sé cómo sea tu pensamiento al respecto pero yo sí estoy de acuerdo con el cobro del ingreso a este parque, porque no se mantiene solo, genera muchos trabajos directos e indirectos. Si bien la empresa que maneja toda la administración de esta Maravilla, es rechazada por muchas personas por el cobro excesivo de la entrada para algunas nacionalidades, cabe aclarar que hay todo tipo de descuentos para países de la Comunidad Andina (Colombia, Ecuador, Perú y Bolivia) también hay descuentos para todo el mundo si eres estudiante. Y encuentro cómico ir a Perú y perderte Machu Picchu, o sea, eso no se hace.
Ir al pueblo de Machu Picchu, llamado Machu Picchu Pueblo (obvio, no como muchos lo llaman, Aguas Calientes). No tiene muchas alternativas para llegar, yo había conocido a un grupo de chicos que viajaban en automóvil desde Tucumán, y se ofrecieron a llevarme a la HIdroeléctrica -que es hasta donde se puede llegar por tierra, por si no sabes, a este pueblo sólo se llega en tren y tiene el módico precio de sólo 60 USD para extranjeros, aquí no vale de nada Comunidad Andina ni ser estudiante, eso cuesta y punto. A menos que seas peruano y te vale solo s/10 pero sólo si eres residente de Machu Picchu Pueblo- Cuando se llega a la HIdroeléctrica se camina por un paisaje que te deja sin aliento por las vías del tren al lado del río. Es mágico, nosotros salimos de Cusco a las 22 hrs y llegamos a la Hidroeléctrica a las 06:00 a.m del día siguiente y empezamos a caminar. No se imaginan la sensación que da ver el amanecer en este camino, la naturaleza, el río, la energía, el clima, todo.
Caminando sobre las vías del tren
Cuando llegamos inmediatamente nos instalamos en un camping, 1 km antes del pueblo, justo en la entrada del parque.
El primer día que estuve conseguí trabajo como cajera en un bar cerca de la plaza de armas, era temporada alta y necesitaban gente para trabajar. Me pareció buena la oferta así que no dudé en tomarla y accedí a quedarme en este lugar en el medio de la nada por 20 días hasta que bajaran los turístas; algo que deben saber es que en este pueblo de 10 calles es tan caro como hermoso. Por ejemplo, 1 kilo de lavandería en Cusco cuesta s/2.50 y en este lugar cuesta entre s/5 hasta s/8. Es entendible, viven del turismo. Así que se gana bien pero gastas el doble de dinero.
En la entrada de Machu Picchu Pueblo
En el bar Big Brother’s bar Free Pool para el que trabajé de cajera
En fin, para los que me leen y se preguntan el valor de las entradas, acá les dejo el link a la página donde puedes ver los precios según tu país y tu condición: Página de Machu Picchu
Para mí, por ser colombiana me salió el tiquete en sólo s/64. Me pareció barato para conocer el lugar por el que había esperado mucho tiiempo de mi vida. Al principio pensé que no lo iba a lograr pero cuando me enteré que había descuento para colombianos fue como una explosión de felicidad.
Experiencia en Machu Picchu:
Ahora viene mi relato sobre el día que fui a Machu Picchu, hice este texto tan largo para que mucha gente ya se cansara y no leyera la vergonzosa/innolvidable experiencia que tuve. Pero no puedo empezar por el día que fui, sino por la noche anterior que fue donde todo empezó.
Empiezo aclarando que no bebo mucho, aunque fotos y videos en Facebook digan lo contrario, si he empezado a saber divertirme es viajando. Tal vez muchos de ustedes, sobretodo los que conocí en Cusco, van a querer llevarme la contraria en cuanto a eso.
Pero, si algo tengo claro, es que desde que trabajo en bares, es que el no-beber es más difícil que el si-beber. Y como me dijo un cliente francés: “Cuando eres bartender es casi una obligación emborracharte todos los días”. Y creánlo o no, tiene razón.
Hace parte del trabajo, digamoslo así. Y había comprado mi entrada con dos días de anticipación para asegurarme que no me iba a quedar por fuera. Es muy común que las personas madruguen para ir, o sea, se levantan muy temprano para comprar la entrada o los que ya la tienen comprada, se levantan muy temprano para entrar; eL parque lo abren a las 5:30 a.m y muchos madrugan para poder ver el amanecer. Si ustedes me conocen, digamos que yo no tengo fama de levantarme temprano, no soy una earlybird, para nada. E incluso si alguien que conocí en Cusco me está leyendo, puede decir que incluso me vieron durmiendo días enteros sin ver el rayo del sol en ningún momento los 30 días que estuve.
Pero yo les juro que tenía la intención de madrugar como todo el mundo lo hace, mis metas para el 2016 eran viajar más y dormir menos (o levantarme temprano). Y había colocado mi alarma a las 05:00 a.m y calculado 1 hora en caminata. Pero un día antes en el bar donde trabajaba como cajera empecé a ser invitada a tragos, muchos tragos, se suponía que a las 02:00 a;m yo iba a dormir después del turno. Pero después de las 02:00 a.m no me fui a la cama sino que me fui a Cupido (La única discoteca del pueblo) con mis colegas a celebrar yo-no-sé-qué y la fiesta acabó a las 06:00 a.m. Mi estado no era el mejor así que ya iba tarde para el parque arqueológico y no podía ir como estaba, volví a mi cuarto para cambiarme, y ver si el alcohol salía de mi cuerpo. LLegué a mi cuarto y me di cuenta que no podía hacer mucho con los tragos encima, fijé una alarma para una hora después y cerré los ojos por solo 15 minutos según yo. SUPER NUNCA HAGAN ESO!
Desperté a las 12:45, era medio día, es una hora caminando hasta la cima y no permiten el ingreso después de las 14:00 horas. Cuáles eran mis chances de que llegara, de cambiarme e ir y lograrlo? Pocos. Además, la resaca era sin lugar a dudas la peor resaca de mi vida. Pero aún así casi dormida/borracha salí corriendo en dirección Machu Picchu, literal, corriendo. Llegué a la entrada para empezar a subir por las escaleras, temblando, amarilla, sudada, con dolor de cabeza y mal, muy mal. Entro al parque y voy subiendo las escaleras que son como 1km, no suena pesado, pero en la altura las escaleras son aniquiladoras y ni hablar si tienes una terrible resaca. Pero yo quería darme una lección, quería castigarme por ser una irresponsable, que no debía tomar si sabía que al día sigueinte tenía una cita para realizar uno de mis más grandes deseos. Y la pasé muy mal, ya todo el mundo bajaba las escaleras cuando yo las estaba subiendo, se supone que a esa hora ya no hay nadie arriba y todo el mundo baja porque todo el mundo madruga para entrar, menos yo.
No podía más y no había ni subido 20 minutos, fue terrible, deseaba que el tiquete se pudiera cambiar. Pero le recé al Dios de Los No Fracasos tanto, que seguramente escuchó mi súplicas. Para subir, tienes sólo dos opciones: por las escaleras o en bus, por escaleras implica sólo esfuerzo y por bus implica sólo dinero (12 USD). Hay momentos en que las escaleras se encuentran con el camino del bus -el cual es más fácil de hacer, pero te demoras una eternidad haciéndolo porque va en zig-zag hasta la cima- yo podía hacer el camino del bus a pie si hubiese tenido tiempo y sin resaca.
Pero, la escalera en algunos momentos se encuentra con el camino del bus, como ya dije, y en el segundo encuentro me quedé sentada casi rindiéndome de conocer ese día Machu Picchu, cuando pasa uno de esos buses y supongo que me vio la cara trágica y que por eso el conductor se detuvo a preguntarme si quería que me llevara hasta arriba. Oh, tú Gran Dios de los No Fracasos que nunca me fallas. Yo me subí a ese bus sin pensarlo, emocionada, el bus iba vacío (porque a esa hora nadie sube, como ya lo dije)
Llegué a la entrada del parque, ahorrandome un montón de tiempo, de cansancio, esfuerzo y todo gracias al buen hombre que me llevó gratis hasta arriba.NO lo podía creer.
Entré a eso de la 13:45 y comencé a disfrutar… Pero la emoción no me duró mucho cuando mi cuerpo empezó a reaccionar a toda la mezcla de alcohol que había hecho un día antes, justo cuando ya estaba dentro del parque arqueológico. Fue tanto lo expulsado por mi boca, me sentía avergonzada con todos los que pasaban y me veían en esa horrible situación. Incluso un hermoso matrimonio chileno se acercó y me ayudó, me dieron alcohol, hojas de coca, dulces de coca, galleta de coca, cereal de coca y agua. Yo me sentía muy mal, no podía dar un paso más. Después de unos 30 minutos así, seguí y me dirigía al punto donde se toman las fotos. Aquí están las pocas fotos que me pude sacar:
Omitir mi cara trágica
Era terrible la sensación, sentía vértigo, cansancio. Pero yo me lo busqué. Lo importante de todo es que antes de ir yo había visto muchos documentales sobre Machu Picchu y el significado de la mayoría de cosas que allí se encontraban, así que como ya había investigado antes, en un momento me arrecosté sobre el pasto para apreciar este momento sin saber cuando lo podría repetir. A pesar de la resaca me arrecosté, SUPER NUNCA HAGAN ESO TAMPOCO. Yo estaba cansada y no había podido dormir bien así que la arrecostada terminó en dormida de 1 hora. Me levantaron los guardias-guías turísticos del parque a decirme que el parque lo iban a cerrar. Yo miré a mi alrededor y me di cuenta que era la única que quedaba, ya eran las 16:40 y yo aún estaba ahí. Me había quedado dormida, la resaca, la tembladera y el cansancio aún estaban, eso sí, siempre estuvo.
Tengo estas últimas selfies de cuando ya no había nadie y se veía la luz del sol del tono que siempre está cuando se acerca el atardecer:
La cara, por favor omitirla
Así que de 4500 personas que entran diario a una de las 7 Maravillas del Mundo moderno, yo fui la última en salir ese día. Ya este punto del día después de los casi 3 litros de agua que tomé ya me sentía mejor aunque mi semblante dijera lo contrario. Y bueno, así empecé a descender las escaleras y me di cuenta que no era muy largo después de todo. Obviamente es más fácil bajarlas que subirlas. Y cuando bajaba simplemente estaba conmovida
O sea, no podía creer que había logrado ir a Machu Picchu, lástima el estado de salud que tenía yq ue la altura me lo empeoró, pero fui a este lugar que por siempre quise ir. Cuando bajaba las escaleras tenía una mezcla de emociones, le prometí a los apus que no volvería a tomar en un largo tiempo. Así fue mi experiencia. Espero que la tuya sea aún mejor.
Machu Picchu: toda una vida esperando este día. Machu Picchu, ese pueblo escondido en la cima, la ciudad perdida en medio de montañas, la mayor atracción turística del…
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Cuando entras a la ciudad de Baños de Agua Santa en Ecuador, te recibe un letrero que dice: “Bienvenidos al paraíso de sensaciones”. Y no está muy alejado de la realidad porque es el lugar idóneo tanto para descansar un fin de semana o incluso, hacer deportes extremos todos los días del año.
Es una ciudad que ofrece muchas alternativas en actividades deportivas, de diversión y de esparcimiento, yo nunca había hecho ningún trekking o alguna otra de las opciones que encuentras en este paraíso. Mi idea era hacer algo diferente antes de irme porque sabía que no iba a volver en mucho tiempo y me quería despedir de la mejor manera.
En este lugar, como en cualquier otro sitio turístico, existen muchas oficinas y agencias de turismo que tienen paquetes para cualquier gusto, en el tiempo que había estado en Baños busqué muchas opciones y encontré una agencia llamada: Ultra Motos & Expediciones. A mi parecer, esta agencia tiene paquetes muy completos para que la experiencia que vayas a escoger sea inolvidable; con precios accesibles si tenemos en cuenta todo lo que incluye (guía, equipos, transporte, fotos, vídeos y un pequeño snack).
No sabía cuál actividad realizar, y fue el último día cuando me decidí; es difícil elegir en medio de actividades como Jungle Tours, Rafting, GoKarts, Volcano climbing, Waterfalls Route, Canyoing, etc.
En el hostal donde me hospedaba conocí a Paulina quien trabajaba en el mismo lugar, ella me recomendó hacer canyoing, yo no tenía ni idea de qué se trataba pero accedí a hacerlo. Además, su novio es guía turístico en la misma agencia que yo había escogido.
Ultra Motos & Expediciones
Sin saber qué esperar del canyoing, llegué a la agencia, y ellos se encargan de darte todo lo necesario, te ayudan en mantener guardadas tus cosas personales, darte un traje cómodo, zapatillas, casco y un bolso impermeable, yo recomiendo llevar una toalla. Cuando todo el grupo estuvo listo el guía, Cristian, se encargó de llevarnos al lugar donde se va a llevar a cabo la actividad. Fuimos a una cascada llamada Chamanapamba, y nuestro guía se encargó de darnos cada detalle e instrucciones muy claras para hacernos sentir que es 100% seguro, divertido y fácil.
Te encuentras con una cascada ensordecedora y un paisaje inigualable, yo compartí la actividad con un chico de Tandil, provincia de Buenos Aires. Estaba más asustada que él, yo me preguntaba que pasaría si no lo podía hacer bien, si me caía, si no hacía bien todas las instrucciones que Cristian nos había dado antes, etc. Confieso haber tenido mucho miedo pero en cuanto empiezas a descender tu corazón se llena de mucha intensidad y adrenalina y cuando empiezas ya no quieres parar.
Lo que me gustó de esto, es que son varios tramos que se hacen, aquí comparto unas fotos que hablan por sí solas:
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Lo que más me gustó de la experiencia es que en la última etapa te lanzas a una altura de 40 metro, les debo decir que en este momento mientras bajaba a toda velocidad grite como nunca antes había gritado, mi corazón estallaba de felicidad.
Gracias a la agencia por una experiencia tan completa, la amabilidad con la que me atendieron fue sensacional. A Cristian y Paulina, fue la mejor manera de despedirme de esta ciudad que tanto amo ¡gracias a ustedes!
Si te encuentras en esta ciudad te recomiendo visitar esta agencia y dejarte llenar por la maravilla de opciones que tienen.
Canyoing: venciendo mis miedos Cuando entras a la ciudad de Baños de Agua Santa en Ecuador, te recibe un letrero que dice: "Bienvenidos al paraíso de sensaciones".
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