Municipios del Estado de México
Municipio Cabecera Municipal Municipio Cabecera Municipal
001 Acambay Acambay 064 El Oro El Oro de Hidalgo
002 Acolman Acolman de Nezahualcóyotl 065 Otumba Otumba de Gómez Farías
003 Aculco Aculco de Espinoza 066 Otzoloapan Otzoloapan
004 Almoloya de Alquisiras Almoloya de Alquisiras 067 Otzolotepec Villa Cuauhtémoc
005 Almoloya de Juárez Villa de Almoloya de Juárez 068 Ozumba Ozumba de Alzate
006 Almoloya del Río Almoloya del Río 069 Papalotla Papalotla
007 Amanalco Amanalco 070 La Paz Los Reyes Acaquilpan
008 Amatepec Amatepec 071 Polotitlán Polotitlán de la Ilustración
009 Amecameca Amecameca de Juárez 072 Rayón Santa María Rayón
010 Apaxco Apaxco de Ocampo 073 San Antonio la Isla San Antonio la Isla
011 Atenco San Salvador Atenco 074 San Felipe del Progreso San Felipe del Progreso
012 Atizapán Santa Cruz Atizapán 075 San Martín de las Pirámides San Martín de las Pirámides
013 Atizapán de Zaragoza Ciudad López Mateos 076 San Mateo Atenco San Mateo Atenco
014 Atlacomulco Atlacomulco de Favela 077 San Simón de Guerrero San Simón de Guerrero
015 Atlautla Atlautla de Victoria 078 Santo Tomás Santo Tomás de los Plátanos
016 Axapusco Axapusco 079 Soyaniquilpan de Juárez San Francisco Soyaniquilpan
017 Ayapango Ayapango de Gabriel Ramos Millán 080 Sultepec Sultepec de Pedro Ascencio de Alquisiras
018 Calimaya Calimaya de Díaz González 081 Tecámac Tecámac de Felipe Villanueva
019 Capulhuac Capulhuac de Mirafuentes 082 Tejupilco Tejupilco de Hidalgo
020 Coacalco de Berriozábal San Francisco Coacalco 083 Temamatla Temamatla
021 Coatepec Harinas Coatepec Harinas 084 Temascalapa Temascalapa
022 Cocotitlán Cocotitlán 085 Temascalcingo Temascalcingo de José María Velasco
023 Coyotepec Coyotepec 086 Temascaltepec Temascaltepec de González
024 Cuautitlán Cuautitlán 087 Temoaya Temoaya
025 Chalco Chalco de Díaz Covarrubias 088 Tenancingo Tenancingo de Degollado
026 Chapa de Mota Chapa de Mota 089 Tenango del Aire Tenango del Aire
027 Chapultepec Chapultepec 090 Tenango del Valle Tenango de Arista
028 Chiautla Chiautla 091 Teoloyucan Teoloyucan
029 Chicoloapan Chicoloapan 092 Teotihuacán Teotihuacán de Arista
030 Chiconcuac Chiconcuac de Juárez 093 Tepetlaoxtoc Tepetlaoxtoc de Hidalgo
031 Chimalhuacán Chimalhuacán 094 Tepetlixpa Tepetlixpa
032 Donato Guerra Villa Donato Guerra 095 Tepotzotlán Tepotzotlán
033 Ecatepec de Morelos Ecatepec de Morelos 096 Tequixquiac Santiago Tequixquiac
034 Ecatzingo Ecatzingo de Hidalgo 097 Texcaltitlán Texcaltitlán
035 Huehuetoca Huehuetoca 098 Texcalyacac San Mateo Texcalyacac
036 Hueypoxtla Hueypoxtla 099 Texcoco Texcoco de Mora
037 Huixquilucan Huixquilucan de Degollado 100 Tezoyuca Tezoyuca
038 Isidro Fabela Tlazala de Fabela 101 Tianguistenco Santiago Tianguistenco de Galeana
039 Ixtapaluca Ixtapaluca 102 Timilpan San Andrés Timilpan
040 Ixtapan de la Sal Ixtapan de la Sal 103 Tlalmanalco Tlalmanalco de Velázquez
041 Ixtapan del Oro Ixtapan del Oro 104 Tlalnepantla de Baz Tlalnepantla
042 Ixtlahuaca Ixtlahuaca de Rayón 105 Tlatlaya Tlatlaya
043 Xalatlaco Xalatlaco 106 Toluca Toluca de Lerdo
044 Jaltenco Jaltenco 107 Tonatico Tonatico
045 Jilotepec Jilotepec de Molina Enríquez 108 Tultepec Tultepec
046 Jilotzingo Santa Ana Jilotzingo 109 Tultitlán Tultilán de Mariano Escobedo
047 Jiquipilco Jiquipilco 110 Valle de Bravo Valle de Bravo
048 Jocotitlán Jocotitlán 111 Villa de Allende San José Villa de Allende
049 Joquicingo Joquicingo de León Guzmán 112 Villa del Carbón Villa del Carbón
050 Juchitepec Juchitpec de Mariano Rivapalacio 113 Villa Guerrero Villa Guerrero
051 Lerma Lerma de Villada 114 Villa Victoria Villa Victoria
052 Malinalco Malinalco 115 Xonacatlán Xonacatlán
053 Melchor Ocampo Melchor Ocampo 116 Zacazonapan Zacazonapan
054 Metepec Metepec 117 Zacualpan Real de Minas Zacualpan
055 Mexicaltzingo San Mateo Mexicaltzingo 118 Zinacantepec San Miguel Zinacantepec
056 Morelos San Bartolo Morelos 119 Zumpahuacán Zumpahuacán
057 Naucalpan de Juárez Naucalpan de Juárez 120 Zumpango Zumpango de Ocampo
058 Nezahualcóyotl Nezahualcóyotl 121 Cuautitlán Izcalli Cuautitlán Izcalli
059 Nextlalpan Santa Ana Nextlalpan 122 Valle de Chalco Solidaridad Xico
060 Nicolás Romero Villa Nicolás Romero 123 Luvianos Villa Luvianos
061 Nopaltepec Nopaltepec 124 San José del Rincón San José del Rincón Centro
062 Ocoyoacac Ocoyoacac 125 Tonanitla Santa Maria Tonanitla
063 Ocuilan Ocuilan de Arteaga
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Jose Redondo Rubio
Mujeres en la Memoria….. (I)
Periodistas, maestras, políticas, médicas, escritoras… y no menos significativas, sastras, limpiadoras, campesinas, pastoras, amas de casa… todas ellas con un denominador común, defensoras de la libertad, la democracia, la justica y la igualdad, que dejaron su vida y para otro momento sus propias demandas, para hacerlo por otras prioritarias y comunes.
Vamos a abrir una sección y poner en el lugar que se merecen a las mujeres luchadoras antifranquistas “Mujeres en la Memoria” hará una pequeña biografía de todas aquellas que por su compromiso y entrega constituyen un ejemplo y referente.
¿Por qué en grupos de 21?
En 1907 el médico Duncan Mac Dougall (Massachusetts USA) intentó pesar el alma, con una cama que a manera de balanza era sensible al peso más insignificante. Entonces llevó a seis moribundos que accedieron participar en el experimento; los observó antes, durante y después de sus respectivas muertes, y midió en cada etapa, su peso. El resultado fue asombroso y coincidió en todos los casos, con un número exacto: 21,262142347500003 gramos fue la diferencia entre el peso del cuerpo viviente y del cadáver. ¿Es entonces ese el peso del alma? El experimento y el resultado del mismo, demostró, según muchos, que el alma existe y que tiene masa y / o peso; y que la gravedad posiblemente, actúa en ella.
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Amada García Rodríguez estaba embarazada y sus verdugos decidieron esperar a que naciera el niño para ejecutarla a sus 27 años en el Castillo de San Felipe en la ría de Ferrol. Acusada de roja, de revolucionaria, de haber bordado y escondido en su casa una bandera comunista con la hoz y el martillo. Amada vecina de Mugardos, era una de tantas mujeres que florecieron con la República. Comunista, buena oradora, luchadora en favor de los derechos de las mujeres, de la libertad y la justicia.
Aurora Picornell Femenías fue la primera mujer en militar en el Partido Laico de Mallorca. Organizó el “Sindicat de Sastresses” de la capital balear, denunció la explotación laboral en primera persona desde la práctica y denuncia a los explotadores con nombre y apellidos. Su padre Gabriel Picornell , sus hermanos Gabriel e Ignasisus, y su compañero Heriberto Quiñones fueron también asesinados. La noche del 5 de enero de 1937 fue brutalmente torturada, para después ser fusilada esa noche de reyes frente a la fachada del cementerio de Porreras, tenía 24 años.
María Domínguez Remón. Obrera, autodidacta, periodista, socialista, republicana, literata y primera mujer alcaldesa en la Segunda República. Aplicó la legislación republicana, constituyendo bolsas de trabajo. Se preocupó por la educación en Gallur. Instituyó una escuela unitaria de niños y niñas, reportando una partida económica para que la limpieza de la escuela no la hiciesen los maestros y los niños, acondicionó las dependencias educativas. En 1933 publicó “Opiniones de Mujeres” donde revela su feminismo, defensa de la ley del divorcio, la igualdad y el perfeccionismo democrático. Con 54 años, en septiembre de 1936 fue fusilada por un grupo de elementos franquistas en las tapias del cementerio de Fuentejalón.
Antonia Torre Yela tenía 18 años, fue condenada a muerte por estar "complicada en el trabajo clandestino de la organización delictiva de las JSU". Se le acusaba de ser responsable de un delito de adhesión a la rebelión, previsto y penado en el artículo 238 del Código de Justicia Militar, con la agravante de la "trascendencia de los hechos y peligrosidad. Considerada la “decimocuarta Rosa”, fue fusilada el 19 de febrero de 1940. José Rodríguez Vega, coincidió con ella en la misma comisaría poco después del final de la guerra, y dijo: “unos gritos desgarradores salían de las gargantas de las mujeres, estaban siendo cruelmente maltratadas. Poco después aparecieron con las ropas destrozadas y señales en sus brazos y en su cara de los golpes que habían recibido”. Las apalearon hasta dejarlas sin sentido, fue fusilada en las tapias del cementerio de la Almudena sin haber cometido más delito que el de figurar en los servidos de cocina y limpieza de una organización libertaria de Madrid. Contra la pena de muerte, no valía ya la juventud o incluso la minoría de edad -legal, que no judicial- como defensa.
Amparo Barayón Miguel. “ Ramón, no perdones a mis asesinos que me han robado a Andreína, ni a Miguel Sevilla que es culpable de haberme denunciado. No lo siento por mí, porque muero por ti. Pero ¿qué será de los niños? Ahora son tuyos. Siempre te querré”.
Fue la carta de despedida a su marido.
Acusada de espía, fue fusilada por falangistas en el cementerio de Zamora el 11 de octubre de 1936 con 32 años. Era pianista, activista anarquista, republicana y feminista. Formó parte y fundó varias asociaciones culturales en Zamora, promovió la creación del Ateneo de Zamora, colaboró con la revista Juventud, el Mercantil y el Heraldo de Zamora con el seudónimo de Miguelina Ascona.
Su trabajo en Telefónica le permitió trasladarse a trabajar y vivir en Madrid. A partir de ese momento su participación sindical fue creciente, se afilió a la CNT y perdió su empleo por participar en la huelga de la Telefónica de 1931. Para sobrevivir le toco hacer trabajos de mecanografa e impartía clases de piano.
En Madrid, asistiendo a una tertulia literaria conoció al que sería su marido, Ramon J. Sender. Tuvieron un hijo, Ramón, nacido en 1934, y una hija, Andrea, en 1936, con la que fue encarcelada en la cárcel de Zamora hasta ser separada para trasladarla al hospicio. Los hijos (que habían quedado en zona fascista), fueron recuperados por Sender.
Sus hermanos Antonio y Saturnino también fueron asesinados. Los tres hermanos Barayón fueron sometidos tras su asesinato a expedientes abiertos por la Comisión Provincial de Incautación de Bienes, que pasaron a la jurisdicción de Responsabilidades Políticas.
Pocos años más tarde, sus restos fueron recuperados de la fosa común y trasladados al panteón de la familia de su hermana Magdalena.
Nicolasa Blas Santamaría era natural del barrio de la Prosperidad de Madrid. Miliciana Comunista y Republicana, fue enfermera durante la guerra. Participaba abiertamente en las manifestaciones y estuvo muy significada por su intervención en luchas políticas. Una vez iniciado el golpe de estado fascista de 1936 y en los primeros momentos, intervino directamente alentando el asalto al Cuartel de la Montaña. Luego marchó a la sierra como miliciana.
Tras la guerra, Nicolasa fue encarcelada en las prisiones de Ventas, Saturrarán, Amorebieta y Málaga condenada a 30 años de cárcel por un delito de auxilio a la rebelión.
No tuvieron necesidad de fusilarla, falleció en prisión el 25 de junio de 1945 con 29 años reventada a palizas, ciega y medio loca. Siete energúmenos se la llevaron a un local de Falange y allí la molieron a palos. La vista le volvió poco a poco aunque no del todo, pero jamás pudo andar erguida, iba encorvada como una vieja.
Tenía ataques de locura de cuando en cuando y gritaba “¡Cobardes, que os ponéis 7 para pegar a una mujer!”
Julia Lázaro Echevarría nació en Pamplona en 1916, era sastra de oficio. Perteneció al Partido Comunista y Unión General de Trabajadores. Como tantas otras mujeres se alistó en el 5º Regimiento de las Milicias Populares para hacer frente al golpe de estado fascista.
Julia sufrió torturas en los brutales interrogatorios de los calabozos de Gobernación en la Puerta de Sol de Madrid por la temida Brigada Político-Social. Allí la violaron nueve indeseables policías. Volvió a la cárcel en un estado lamentable e inmediatamente la llevaron a juicio y la condenaron a muerte.
A los 3 meses, mientras esperaba la ejecución se dio cuenta de que está embarazada de sus violadores. Su ejecución se retrasó esperaron a que diese a luz a un niño, Juan Emilio, del cual poco se sabe. Era la época cuando los hospicios se llenaron de hijos de asesinadas luchadoras por la libertad.
Julia fue la única mujer de su “saca”. El 24 de agosto de 1940, a las siete semanas del parto, junto a otros presos fue conducida a las tapias del Cementerio del Este de Madrid donde fue asesinada con 24 años.
Milagro Almenara Pérez, feminista y progresista, nació en Santander en 1900. Hija de madre soltera, malvivía cosiendo, barriendo y haciendo todo el trabajo que nadie quería. Era muy brillante en los estudios.
Se matriculó en la Facultad de Farmacia en 1916, su expediente de Licenciatura de Farmacia tuvo premio extraordinario en todas las asignaturas de la carrera. Activista universitaria, delegada de varias asociaciones de mujeres siendo una de las pocas mujeres de la época en cursar estudios superiores.
Su primer trabajo como farmacéutica fue en el término costero de la Rábita y fue la última titular de la “Farmacia de la Compañía”, la más antigua de Granada hasta el golpe de estado y la guerra, cuando fue destruida.
La tarde del 20 de julio de 1936 un piquete de guardias de asalto se presentó en la farmacia con una orden de detención de Milagro Almenara Pérez emitida desde el Gobierno Civil, su trayectoria personal y política la ponía en el disparadero.
Con 35 años, el 2 de noviembre de 1936 fue llevada al frente de Víznar y fusilada por agentes asesinos franquistas muy cerca de la tumba de Federico García Lorca.
Fue enterrada en los Pozos de Viznar donde se concentraron todos los fusilamientos y sepulturas, la tumba ya estaba repleta de obreros de la Fábrica de Pólvoras de El Fargue, fusilados los días anteriores y cubiertos de cal.
En 29 de julio de 1943 el tribunal de responsabilidades políticas acordó investigar sus propiedades para incautarse de ellas. “Se cumplió lo ordenado”, borrar su rastro y su memoria. Parece que la tierra se ha tragado a esta mujer de la memoria de los granadinos. La orla de su promoción (1916-21) desapareció del archivo fotográfico; de su expediente no hay rastro en Farmacia. Ni una sola mención a ella. No hay ni rastro de Milagro en la Facultad donde estudió sola entre una docena de hombres.
La historia de Maravillas Lamberto fue una de las más espeluznantes de la masacre de 1936 en el acto de Sartaguda. Nació el 28 de junio de 1922 en la localidad de Larraga.
A las tres de la mañana del 15 de agosto de 1936, una pareja de la Guardia Civil del puesto de Artajona acompañada de dos civiles miembros de Falange y los requetés, se presentó en su casa para detener a su padre Vicente Lamberto con el propósito de llevarlo a la casa consistorial e interrogarlo por su pertenencia a la UGT.
Maravillas, su madre y sus hermanas más pequeñas que ella se encontraban en la casa, Maravilla tenía 14 años y pidió acompañarle, a lo que los asesinos accedieron; “Yo voy con mi padre, quiero saber que le hacen”. Maravilla no quiso separarse de su padre aunque le costara la vida.
Encerraron a su padre en el calabozo de la planta baja del Ayuntamiento y a ella la hicieron subir a las dependencias superiores. Todos los presentes la violaron repetidamente sin escuchar los lloros de la niña y sin sentir compasión por ella ni el más mínimo remordimiento por lo que estaban haciendo, ellos mismos lo iban pregonando por los bares del pueblo. El primero que lo hizo fue el propio secretario del Ayuntamiento.
Sobre las cinco de la madrugada los sacaron del Ayuntamiento y los llevaron a la “cuneta del Moro». Maravillas destrozada no dejaba de llorar. Los llevaron a un bosque, la desnudaron y repitieron nuevamente la violación delante del padre.
Luego hija y padre fueron fusilados, el cuerpo del padre sigue desparecido en alguna cuneta después de tantos años y el cuerpo de Maravillas fue encontrado por unos pastores; sus asesinos dejaron su cadáver desnudo sin enterrar para que sirviera de alimento a los perros.
Carmen Gómez Galindo. Sindicalista, indomable y valiente, perteneció a la Agrupación de Mujeres Antifascistas de Melilla, asociación que promulgaba la unión de todas las mujeres para luchar contra la guerra y el fascismo. Reivindicaban la igualdad de hombres y mujeres en la lucha contra la amenaza del fascismo.
Llegó el golpe de estado fascista y la muerte se cebócon Carmen y su familia.
Carmen fue asesinada el 14 de agosto de 1936 en el paraje conocido como Huertas del Real con 19 años por miembros de la Falange, que la sacaron de la prisión de Victoria Grande de Melilla donde fue torturada, “¿Adónde me lleváis verdugos?” les dijo desafiante. Carmen nunca calló lo que pensaba no se acobardaba ante nadie, sabía su destino y como se las gastaban estos asesinos. Sueños rotos y su cuerpo violentado.
“¡Cómo se ha defendido la zorra!” dijeron sus asesinos cuando volvieron al coche, que a modo de denuncia conservaban fotos de la manifestación del 1 de mayo con Carmen a la cabeza de los gremios obreros, puño en alto cantando la internacional.
Tres días antes de asesinar a Carmen fue asesinado su hermano Manuel de 25 años, otro de sus hermanos Francisco, estuvo tres años preso en Melilla, cuatro en Alicante y huyó de Tánger a Francia de donde nunca volvió y José, secretario del Partido Comunista fue fusilado el 23 de febrero de 1937.
Daría y Mercedes Buxadétenían 22 y 18 años de edad. Eran residentes en Barcelona y se ofrecieron como enfermeras; pensaban que por su nacionalidad mejicana y trabajar para Cruz Roja no tendrían riesgo alguno si eran capturadas. Llegaron a Mallorca en barco desde Barcelona el 16 de agosto de 1936 como enfermeras voluntarias en una expedición Republicana, que pretendía combatir el golpe de estado en la isla.
Fueron detenidas cuando estaban al cuidado de heridos republicanos y humilladas, torturadas y violadas repetidamente durante semanas por falangistas, legionarios incluso clérigos en Manacór, que las consideraron como unas prostitutas milicianas. Las pasearon en un camión al descubierto y exhibidas por todas partes como trofeos de guerra.
Las autoridades fascistas que controlaban la isla con la ayuda de los italianos y de su jefe militar, el infame «Conde Rossi», no hicieron nada para evitar las innumerables atrocidades que se cometieron con ellas.
Los fascistas sabían perfectamente que las enfermeras del Cuerpo Sanitario no habían cometido ningún crimen. Las volvieron a vejar incluso momentos antes de su fusilamiento en los primeros días de septiembre de 1936 con el beneplácito del clero. Se sospecha que hasta un capellán llamado «Barraquetes» colaboró en la gesta. A pesar de todo, se dice que Daría y Mercedes se enfrentaron a la muerte con aplomo y dignidad.
Matilde Zapata Borrego, nació en Sevilla el 30 de noviembre de 1906. Tras el asesinato de su marido Luciano Malumbres por un pistolero falangista, se convirtió en la directora del periódico santanderino «La Región» hasta su cierre en 1937, redactando artículos de prensa de esta tribuna para dar voz a los trabajadores más desprotegidos. Sería conocida como La Pasionaria de la Montaña por su verbo encendido, su decidida defensa de los derechos de las mujeres, de la igualdad en el ámbito laboral y cultural, y por su actividad política.
Matilde marchó a Asturias a alentar la resistencia frente al fascismo que continuaba avanzando. Al intentar huir a Francia en barco fue detenida por la flota fascista y, en Santander fue sometida a un Consejo de Guerra que la condenó a muerte por apoyar la causa marxista y arengar a las masas en la calle. En la cárcel Matilde fue testigo del sufrimiento colectivo, ayudando a que los ánimos no decayeran en aquellas mujeres sujetas al rigor de unas leyes que se disponían a castigar cualquier huella de signo republicano.
Fue ejecutada el 28 de mayo de 1938 con 31 años en el cementerio de Ciriego. Aunque hay otra versión que indica que fue asesinada a garrote vil después de sufrir torturas reiteradas. Lo que si está documentado es que en este cementerio estarán sus restos en una fosa común junto a los de más de un millar de víctimas de la terrible represión de los primeros años de la victoria de las tropas fascistas
Amalia Gonzales Guerra. Vecina de Carmona y sindicalista de la CNT, fue asesinada por los disparos de unos falangistas cuando tenía 42 años en aplicación del “Bando de Guerra”, una especie de carta en blanco que permitía al ejército golpista de Franco “liquidar” físicamente a cuantas personas hubieran apoyado el legítimo gobierno de la República.
Su cuerpo, junto a las de otras personas asesinadas igualmente esa madrugada, quedó a la vista de cuantos pasaron ese día por la carretera que lleva de Carmona hasta El Viso del Alcor, lugar donde se produjeron los hechos, luego fueron arrojados a una fosa común.
Amalia, dirigía una agrupación de mujeres que trabajaban como sirvientas en las casas de los señoritos del pueblo. Fue una mujer comprometida con la dura realidad de estas trabajadoras que desarrollaban su labor bajo un duro régimen de explotación con salarios de hambre.
Dejó 3 hijos de corta edad: Rafael, de 10 años, Carmen, de 7 y Antonio, de 5.
Encarnación Magaña nació en Tabernas y fue la única mujer fusilada por el franquismo en Almería en 1942, tenía 20 años
Trabajaba en la “Librería Inglesa” y se encargó de traducir y copiar los partes de las noticias de la BBC británica sobre la II Guerra Mundial que después distribuían en Almería y Gibraltar dentro de la publicación antifranquista “El Campense”. La victoria de los aliados en la 2ª Guerra Mundial era una esperanza para los republicanos
Luchadora republicana, destacó por sus inquietudes políticas e intelectuales desde temprana edad cuando estalló la guerra. Con 15 años ingresó en las Juventudes Libertarias, fue secretaria de “Mujeres Libres”, realizó actividades de agitación, propaganda y apoyo en los frentes. Organizó en el Teatro Cervantes de Almería el festival benéfico de la Solidaridad Internacional Antifascista, y visitaba a los milicianos anarquistas en los frentes de Granada para llevarles prensa y comida. El 3 de agosto de 1939 ingresó por primera vez en la cárcel provincial de mujeres de Almería, la llamada “Gachás colorás”, donde sufrió todo tipo de torturas y desde donde continuó con su actividad política al servicio del Socorro Rojo Internacional. Fue puesta en libertad durante la primavera de 1940.
Inculpada y acusada en el “Parte Ingles” de “querer favorecer la victoria de Inglaterra y la URSS en la II Guerra Mundial, para propiciar un cambio de régimen en España” y de ser «autora de un delito de adhesión a la rebelión, como parte de una organización clandestina de tipo marxista para la propaganda, la agitación, acción y el socorro rojo».
El 11 de agosto de 1942 llegó «La Leona», el camión de transporte de presos para su fusilamiento en las tapias del cementerio de Almería. Llegado el momento Encarna Magaña se negó a recibir la comunión, besó uno por uno a sus siete compañeros, se alineó junto a ellos, y sus últimas palabras fueron» ¡Tirad al corazón! ¡Matadme! Los cadáveres fueron arrojados a una fosa común.
Mercedes Romero Abella nació en Cee (A Coruña) el 27 de junio de 1907, estudió magisterio y ejerció como maestra en el barrio de Monelos. Era miembro del Sindicato Provincial de Maestros (FETE-UGT) de La Coruña del cual fue presidenta, y ejerció como apoderada de la candidatura del Frente Popular en las elecciones de 1936.
Su marido Francisco (con el que tuvo un hijo y una hija) participó en la resistencia al golpe militar y fue por ello detenido, condenado a muerte y asesinado el 31 de agosto de 1936, con 32 años.
Tras la muerte de su marido, Mercedes solicitó el pasaporte para embarcar hacia América, y cuando intentaba hacer gestiones no pudo emprenderlo. El 19 de noviembre llegaron unos falangistas a su casa en un coche oscuro, uno de ellos se quedó en el coche y otros dos subieron a la casa diciendo a Mercedes que tenía que acompañarlos a declarar.
La respuesta de Mercedes fue que “a esas horas nadie va a declarar a ningún sitio”. Sabía lo que le esperaba, por eso pronunció además una frase terrible: “mañana me encontrarán muerta en cualquier carretera”.
La encontraron en el pozo del Puente de la Castellana de Aranga, cerca de la carretera de Ferrol. Su cadáver había sido arrojado al río Mandeo. Mercedes había sido violada y torturada, apareció con los dos pechos seccionados y finalmente acribillada a balazos. Se ignoraba cuanto tiempo llevaba muerta, iba vestida con bata de casa y fue inscrita en el libro de defunciones del Registro Civil de Aranga con fecha 19 de noviembre de 1936 como desconocida. Posteriormente el 12 de febrero de 1937, fue identificada y enterrada en una fosa común en Vilarraso, la fosa común más grande de Galicia. Tenía 29 años
Mercedes fue exhumada, identificada por el ADN, y su familia tiene sus restos.
Fidela Díez Cuevas, con 17 años fue encarcelada en la cárcel de Torrelavega por pertenecer a una familia republicana de izquierdas y recitar versos de Lorca, Machado y Cancio. Heredó de su padre las aficiones al verso dando recitales por toda Cantabria, esos fueron sus delitos. Y por ello fue encarcelada, rapada para ridiculizarla y torturada, aunque este castigo no doblegó su espíritu.
Una noche, un grupo de falangistas en complicidad con las guardianas de la cárcel se llevaron a Fidela y la devolvieron hecha un despojo humano, había sido violada y maltratada por una manada de falangistas. Solo podía repetir “fueron cinco, fueron cinco”, al poco tiempo murió.
El fascismo mataba y asesinaba la cultura y quien la ejercía. El 26 de junio de 1938 sería enterrada en el cementerio de La Llama, muy próximo a donde residía con su familia. Su padre pasó muchos años en prisión hasta conseguir la libertad condicional del Penal de Alcalá de Henares en 1954, mientras que, a su madre Eloína Cuevas, le fue denegada la licencia para poder vender en la calle como única forma de subsistencia.
Matea Luna Alarma nació en 1879 en Villalpando (Zamora), madre de 6 hijos. Fue encarcelada acusada de “confeccionar la bandera republicana que ondeó en el balcón del ayuntamiento el 14 de abril del 1931”. Era la hermana mayor de Salvador Luna candidato por el PCE en las elecciones generales de 1933.
Ella y muchas mujeres de clase obrera protestaron en 1933 porque las Hijas de la Caridad se apoderaron de un colegio que ocupaba un local de propiedad municipal, mientras que la escuela pública se encontraba en un estado deplorable, sin capacidad para atender a las necesidades educativas.
Tras el golpe de estado el gobernador civil dio orden de detener y dejar muertos en el cementerio “a todos los individuos que se hubieran destacado por extremistas y contrarios al Movimiento”. Matea fue asesinada en el cementerio de Zamora el 27 de octubre de 1936, con 57 años que había cumplido en la cárcel.
Carmen Mora Marín era natural de Málaga, tenía 22 años y era hija de Amador Mora Rojas, alcalde socialista de Tarifa que consiguió escapar de los golpistas. En diciembre de 1936 la policía franquista trasladó a ella y a su hermana Antonia, de 16 años, a la comisaría para ser interrogadas. Antonia fue liberada. Pero Carmen siguió presa, fue considerada por el instructor “Peligrosa extremista”.
Carmen pertenecido a las Juventudes Socialistas Unificadas (JSU), había ejercido en Tarifa como tesorera del PSOE, y era ferviente defensora y difusora de las ideas socialistas participando en actos por los campos. Se le achacaba una actuación calificable con carácter de autora, de “inducción clara a la rebelión” ya que había participado en la “gestación de la actual subversión marxista”.
El policía que la detuvo declaró que había recibido la confidencia de una vecina que afirmaba que Carmen se había mostrado agresiva con los que llamaba fascistas, que era socialista y estaba dispuesta a morir por sus ideales.
La sentencia daba por demostrado que pertenecía a las JSU, propagaba sus ideas “extremistas”, había “albergado” en su casa de Cádiz a 63 jóvenes tarifeños para asistir a un mitin extremista, y no era favorable al golpe de estado. Era autora de un delito de rebelión porque su propaganda activa y actos políticos habían favorecido la resistencia al golpe.
Los tribunales de guerra estaban facultados para imponer las penas en “la extensión que consideren justa”. En el caso de Carmen, era condenada a muerte por un delito de “rebelión militar por adhesión” con agravante de significativa peligrosidad.
El 19 de abril de 1937 en el foso de la Puerta de Tierra, un piquete de guardias civiles fusiló a Carmen junto a 3 sindicalistas. La venganza se volvió hacia su familia. Su hermano Miguel que estuvo defendiendo el Gobierno Civil, había sido asesinado en agosto de 1936, y un mes después su madre, Antonia Marín Muñoz, fue asesinada en Facinas. Su padre Amador, murió combatiendo en el frente de Córdoba en 1937.
Carmen Luna Alcázar. Conocida como “La Luna”, republicana, feminista, activista de la CNT, defensora de los derechos de los trabajadores, y luchadora contra las injusticias cometidas por la oligarquía agraria. En su casa se celebraban reuniones de miembros del anarcosindicalismo cenetista para conversar sobre sus ideales políticos y sus actividades sindicales. Hablaban de la lucha contra el analfabetismo, para que el pueblo pudiera defenderse.
Su padre era zapatero, Carmen vendedora ambulante de frutas y verduras tuvo 3 hijos y 5 hijas de dos matrimonios, vivían en una humilde choza en el campo, cerca del Cortijo de Ulloa.
El golpe de estado el 18 de julio precipitó los acontecimientos en Utrera. La guardia civil dio muerte esa noche a un obrero. El 26 de julio, la ciudad fue tomada por las tropas del criminal Queipo de Llano.
Carmen fue detenida, encarcelada, humillada y vejada por los falangistas, que la pasearon por el pueblo atada a la cola de un caballo, colgado un letrero que decía «La Luna», rapada la mitad de su cuero cabelludo, la otra mitad con trenzas tricolores republicanas.
Fue fusilada el 18 septiembre de 1936 contra una pared cerca de la puerta del cementerio municipal de Utrera. Allí dejaron su cuerpo como ejemplo hasta el final del día antes de enterrarlo en una fosa común. Tenía con 48 años
Los fascistas querían a Luna muerta, para que su muerte enviara un mensaje a otros activistas y así disuadirlos de que hablaran.
Ricarda Ana Cobacho Cañete , 36 años, republicana convencida, hacía de maestra particular en el Centro Obrero Socialista y ayudaba a la gente que necesitaba cualquier gestión administrativa. Aunque su familia vivía de una tienda de comestibles. Tuvo 4 hijos el mayor de 13 años.
Jauja era un pueblo tranquilo a pesar de la guerra, no hubo desorden, ni ataques, ni muertes pero los falangistas de Lucena llegaron y desencadenaron una represión durísima.
Campesinos, hombres y mujeres, fueron detenidos. El cuartel de la Guardia Civil y la antigua Casa del Pueblo socialista se convirtieron en cárceles y hubo una terrible ola de fusilamientos.
A finales de octubre de 1936, fue arrestada junto a su madre y hermanas. Las raparon, obligaron a tomar aceite de ricino y las torturaron en el cuartel durante 4 días. Querían que Ricarda desvelara el paradero de sus hermanos Juan y Manuel, afiliados al sindicato socialista UGT, que habían huido del pueblo. Ricarda fue llevada sola a una casa de campo, donde fue torturada y sometida a un calvario. A los pocos días apareció su cuerpo en el “Arroyo La Coja” , estaba semienterrada y destrozada, al parecer había sido violada y le habían mutilado los pechos. La encontró un conocido de la familia, y la acabó de enterrar. El marido enfermó, perdió la razón y murió 7 años después. Tras su muerte, expoliaron su tienda y su casa.
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