Te entiendo,caminar sola por el  sector 4 tampoco es miel sobre hojuelas, como ya sabrás. —sonrió. — El gusto es mío. —luego miro la hora. — Creo que deberíamos irnos ya antes de que se haga más tarde.

[Sector 3]

—No tienes que agradecer —Comentó —Créeme, vivo aquí desde siempre y aun así no me gusta salir sola en las noches porque me siento desprotegida. Un gusto, soy Dawn

  Perfecto. — Dijo mientras tomaba los libros y los cobraba. — Si consigues una de esta ficha, se te hará descuento en cada compra de libros. — dijo sonriendo mientras mostraba una de las fichas, luego se acercó al muchacho y susurro. — No me creas, solo lo hago porque es mi trabajo decirlo, estas fichas perjudican más que dar algún beneficio.

[Sector 4]

Le devolvió la sonrisa, pero después lo miro curiosa. —  No eres de este sector, verdad? —  dudo un momento. —   No me lo tomes a mal…es que…no luces como si fueras del sector 4.

[Sector 4]

Cierto. —rio un poco y luego lo miro con cara seria. —No me burlo, bueno un poco. Y personalmente, a mí no me gusta este libro, no encuentro nada interesante en él, para serte honesta.

[Sector 4]

Muchas gracias. —sonrió. —Eso es cierto, las calles son peligrosas y más aún cuando es tarde, como tú acabas de decir. Por cierto, soy Rosalie.

[Sector 3]

— Claro, yo te acompaño no hay problema, además es tarde y es peligroso andar sola por las calles —  Comentó encogiéndose de hombros

Rose había decidido ir al sector 3 por pura curiosidad, su trabajo hoy en la librería empezaba más tarde y no tenía más que hacer. Cuando iba caminando pudo ver como alguien intentaba llegar a un banco y después se quitaba los tacones. —Disculpa, estás bien? — preguntó preocupada.

Sector 3

Uno, dos, tres. La cantidad de pasos que pudo dar fue aquella, luego de una torcedura de tobillo, decidió tomar asiento en un pequeño banco—. No deberían llamarlos zapatos, deberían llamarlos armas del mal. —Murmuró, soltando un suspiro de impaciencia. Debía de usar de aquellos para una nueva propuesta de trabajo, y esperaba que valiera la pena. Decidió sacarlos, observando sus pies descalzos, era como el paraíso, un paraíso que terminaría una vez que se los vuelva a poner—. Segundo intento y no me van a ganar por segunda vez. 

Eso es cierto, este empleo es mil veces mejor que el último. —sonrió. — Y claro, yo te aviso cuando encuentre el libro. No te preocupes to secreto está a salvo conmigo. —rio. — Nadie lo sabrá.

[Sector 4]

. — Sonrió. —  Mmmm…Esta bien, Y estaría muy agradecida si me acompañaras. — dijo dudosa. —  Claro, si es que puedes.

[Sector 3]

Dawn se quedó pensando un poco, estaba segura que conocía una tienda donde vendían cosas de jardinería y si bien no sabía que eran esas supuestas “pinzas” probablemente allí habría un par — No se que son esas pinzas, pero creo a tres calles de aquí hay una tienda de jardinería, te puedo acompañar si lo necesitas —Sonrió levemente a la chica esperando una respuesta —Entonces, fue un gusto ayudar

Por nada, en realidad, este libro no está popular, jamás se ha vendido bien, ni si quiera en este sector, Y su precio no están alto. —suspiró. — Tal vez tu padre lo necesita para algo de trabajo, aunque no es un libro muy extenso sobre el tema, así que no sé si le vaya a servir de mucho.

[Sector 4]

—Asintió a su comentario y decidió apoyar los antebrazos en la encimera de la Biblioteca, bajo la atenta mirada de la otra Bibliotecaria, la cual la miraba sorprendida, pues se veía de lejos que la rubia era de otro sector. Noelle le dedicó una sonrisa irónica y la mujer volvió a su labor con los papeles. Cuando la joven que había pedido ayuda regresó con el libro, extendió su mano para tomarlo.— Vaya, gracias. No sé para qué querrá esto mi padre pero me insistió mucho.  ¿Tan complicado es de encontrar? No entiendo entonces por qué lo tienen en este… sector.

Tienes razón. —rio. —Para la próxima tendré más cuidado, como tú dices no todos tendrán la amabilidad de gritarte en medio de la calle. — estrecho la mano de este. — Mucho gusto Xavier, yo soy Rosalie, aunque personalmente prefiero Rose. —suspira. — De todos modos te lo agradezco.

[Sector 4]

Sonrió. —No te preocupes no todos somos expertos en cada cosa, no deberías avergonzarte. Bueno, esto más bien es una librería, aquí debes comprar el libro que necesites, en una biblioteca, el libro lo lees en esta misma o con un permiso te lo llevas a tu casa,entiendes?

[Sector 4]

Suspiró. —Tienes razón, para la otra tendré más cuidado, ya es muy tarde y debería poner más atención por donde voy. —Lo miro con cara dudosa. — Podría saber tu nombre? , así podre agradecerte de forma más “formal”. — rió ante aquel estúpido comentario. —

[Sector 4]

Esta vio como la miraba y se sintió algo cohibida, pero luego le dio una pequeña sonrisa. —Sí, no te preocupes estoy bien, no hay muchos carros por aquí a estas horas. — dijo mientras veía la calle. — Ha lo olvidaba, Gracias, como te habrás dado cuenta no estaba poniendo mucha atención. 

[Sector 4]

Escucho que alguien le gritaba mientras iba caminado, luego vio que alguien se acercaba, le hizo caso y se hizo a un lado, haciendo caso a sus palabras, estaba tan sumisa en sus pensamientos que no se había percatado por donde había estado caminando. —Vaya que soy distraída. — dijo esta.

[Sector 4]

Cada vez estaba más cerca de su casa, aunque siempre tomaba un atajo para llegar más rápido, noto que cerca de este había un grupo de gente, asomo un poco la cabeza para ver de qué se trataba pero luego la agacho y se dijo a sí misma “No es de tu incumbencia Rosalie”,para luego seguir caminando.

Sector 4

— No hace falta que vayas la productora está dispuesta a… — Mallory le clavó la vista a su manager mientras cerraba la botella de sprite. El hombre de unos cuarenta años suspiró — haré que varios policías nos escolten y no aceptaré un no — dicho esto se retiró de la cocina dejándola sola. Tomó un sorbo de la gaseosa y miró por la ventana. Deleitándose por los paisajes que está le ofrecía. Entendía la preocupación de George, pero él debía entender que realmente necesitaba conectarse con el ambiente. Sus personajes por lo general se caracterizaban por lo reales que podían llegar a ser y eso lo lograba gracias a esa modalidad que tenía.

A ella siempre le sorprendía cuan distintos podían ser entre si los sectores, y no es que nunca saliera de su casa, no, gracias a su carrera los había visto a todos, desde el más rico hasta el más pobre. Pero aun así dolía ver a niños pequeños con padres que tenian muy poco tiempo de vida. Luego de un largo trayecto en auto por fin llegaron a destino, en la puerta del gran galpón donde se filmaría la película los esperaban varios grupos de policía, el director de la película y la productora — Mallory — saludo está última cuando ella bajo del auto, pero la joven lejos de devolverle el saludo, le dio la espalda y observó lo que tenía en frente, cerro sus ojos y respiro el aire. En su mente visualizó a su personaje, sus distintas secuencias, poco a poco se estaba interiorizando. Cuando por fin estuvo satisfecha se volvió hacia el grupo de gente y saludo uno por uno disculpándose con la muchacha.

[Sector 4]

Después de un largo día al fin había terminado de trabajar, termino de ordenar algunos libros que dos niños habían dejado en el piso y luego se dispuso a tomar su bolsa. — Buenas Noches. — Le dijo al muchacho que le tocaba cerrar la librería, esté le dedico una sonrisa y luego siguió con lo suyo. Salió del local y luego comenzó a caminar, haciéndose un montón de preguntas sin contestar.

Dejo de ordenar los libros para poder ayudar a la persona que la llamaba. —Mmm….déjame ver. —dijo mientras tomaba el papel de sus manos. — Creo que si lo tenemos, pero dentro de los libros viejos, los que ya no se venden, iré a ver si puedo conseguirlo para ti. — le sonrió y luego se dirigió a la puerta que estaba alado del baño, el lugar estaba enterregado y la falta de luz no ayudaba mucho, esas eran una de las consecuencias de ser parte del sector 4, tomo una de las lámparas que se encontraban en los banquitos y comenzó a buscar, después de unos momentos salió de ese pequeño cuarto y de dirigió a la muchacha. — Me costó mucho encontrarlo pero aquí esta. —sonrió. —

[Sector 4]

—La joven estaba inspeccionando la Biblioteca del Sector 4, necesitaba encontrar un libro en especial que su padre le había pedido y ella no comprendía por qué no mandaba a alguien para que lo llevara hasta su casa, que no, era más fácil lanzar a su hija con sus tres o cuatro guardaespaldas a llamar la atención en el Sector 4. Furiosa por no encontrar el libro, se acercó a una de las encargadas.— Perdona, ¿sabe dónde puedo encontrar éste libro? —Le enseñó el título en el papel que le había escrito su padre.— No logro encontrarlo por ninguna parte.