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Letras en el agua.
Un espacio y refugio de liberación de sentimientos guardados durante muchos años y en donde se narra la experiencia que se vive dentro de la cabeza de 🦋 en el💧 acompañada de su hobbie favorito; la escritura.
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Buscando agua
Tus cartas estaban bajo el efecto del polvo, no puedo negarlo. Intenté buscarlas con el propósito de confundirme. Sin embargo, cuando me encontraba sumergida en mis pensamientos quería convencerme de ocultar la verdad y deseaba con unas fuerzas falsas negarla, pero la respuesta siempre estuvo ahí: el motivo se había desvanecido.
Me quedé sin versos, sin risas, sin esperanzas, anhelos, deseos, me quedé sin respiración que arrastraba mi esencia.
El miedo se disfrazaba de terquedad y confusión, no era justo para ninguno de los dos compartir rupturas que aparentaban estabilidad, cuando se encontraban pegadas con soledad.
Algunas canciones me recordaban a ti, eras diferente, lo sé, yo también. La noche era tu momento favorito, esa es la razón por la que me encuentro con lágrimas que emanan de mis glándulas hasta bajar por mis mejillas, pues es la única forma que puedo sobrevivir para mantenerme hidratada en esta relación.
domingo, 17 de diciembre 2023.
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Hay una interminable lista de anhelos en mi corazón,
todos ellos fueron capturados en algún momento sobre una caja de esperanza...
"La esperanza muere al último", dicen por ahí pero yo no sé si todavía la guardo, pues parece que cada día se depositan llantos de mi alma desesperada... Desesperada de las voces que retumban mi cabeza y que me he adueñado de ellas.
¿Serán ciertas todas esas palabras?
-Marie, jueves 4 de agosto del 2022. 1:43 p.m
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Fragmento a la depresión.
Y como una hoja de otoño que el viento arrojó hacia el ventanal te aparecer y
sacudes mi bienestar emocional, haciéndote huésped de mis sentidos y latidos
personales.
Parecer prófugo de la soledad...
En mi ser de paz quieres estar
Y te acurrucas...
Como un buen niño sintiendo el calor de mamá
Pero Pía, ella no está... Y tu aroma allí está... Dios mío, cuándo es que acabarás?
Mi mano pesada ya está y mi cabeza y mejillas rosadas con los dientes filosos ya estás
Por favor Dí, déjame descansar...
23 de febrero del 2022 8:45 a.m
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El tinto de sus labios.
La noche ya se había apoderado y el sonido de la música que comenzaba
a resonar fue lo que captó la atención de Mariposa,
que inmediatamente una copa de Merlot llevó a deleitar a su paladar
saboreándolo con la lengua hasta llegar a la faringe y esperando que su aparato digestivo cumpliera su función.
“Pero que bonito tus tintos labios llevas el día de hoy, ¿no quieres el sabor terroso como postre? Te prometo que embelesarás con mi sabor y textura...”
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Paciencia, ola.
Fragmento a Mariposa:
Mariposa, sé que ya quieres sumergirte atrás de la ola pero aún tienes pendientes con T y no puedes abandonarla. Está cansada, por favor ayúdala. Ayúdala, te necesita. Te prometo que vamos a nadar las cinco juntas, nos faltan dos más y necesitamos buscarlas para comenzar el viaje.
Sé paciente con nosotras.
29 de enero del 2022.
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En la búsqueda de vivacidad.
“Okay... eso suena a realizar muchos cálculos matemáticos ¿verdad? Sí, ehm... Bueno, realmente no esperaba su visita hoy” Habló Mellea, luego de recoger una blusa que el felino había estropeado. Cruzó sus manos en forma de oración pero lo que en realidad los cruzó y llevó sus pulgares hacia su boca, tratando de pensar con claridad lo que Telxie y Chamiré acaban de decirle.
“Bueno, ¿y en dónde está Aluzza?” Preguntó la mayor (Mellea)
“N-no q-quiso ve-venir e-es...” Ambas se quedaron calladas, dejando que Chamiré articulara bien sus palabras, las dos sabían que era lo que ella quería: que no se le juzgara y que le tuvieran paciencia.
“Es que se sentía mal” Dijo rápidamente, avergonzada.
“¿Cómo vas con la escuela?” Preguntó Mellea, mientras se sentaba a lado de la infante.
“¡Mellea! ¿Quieres, por favor... No sé, concéntrarte a lo que vinimos? ¡A nadie le impor-!” La mayor no dejó que Telxie escupiera la oración, pues no era bueno para Chamiré ni para ninguna de las tres entrar en discusión.
“¡Está bien! Pero Chamiré me debe una platica pendiente, ¿a que sí?” Le guiñó un ojo a la pequeña. Ya no iba a permitir hacerla sentir más. Ni siquiera de ella misma.
“¿Cuándo fue la última vez que la vieron? ¿Qué ocurrió?”
“Estaba nadando”
“Gracias, Chamiré” Le sonrió a la mayor, mientras que la joven sacaba un libro con fotografías antiguas.
“Supongo que así se hace este ritual, la verdad nunca puse atención a clase de brujería avanzada II” Rio por lo bajo.
“¿En dónde estaba nadando?” Preguntó. restándole atención a lo que Telxie decía, teniendo consciencia de que no se sentiría mal por querer ir al grano.
“Leona Mielosa y Peluchito de Miedo otra vez se fueron para El Dorado” Se encogió de hombros, haciendo una mueca.
Si era cierto lo que su hermana decía entonces probablemente Negya esté haciendo de las suyas lo que está provocando una sensación de incomodidad y vacío en Aluzza, ¡Argh, maldita sea!
“Ya veo, está bien. Espérenme aquí...”
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“¿De qué es tu sándwich?” Preguntó curiosa a la niña con peinado trenzado y lentes oscuros.
“De nutella”
“Ah” Se dio media vuelta, sin decir nada más. Se sentía espectacularmente fresca. Estiró sus piernas, brazos y cualquier otra parte del cuerpo que el instructor de natación les pedía a las niñas para comenzar con su clase.
“¿A qué es una casa embrujada verdad? ¡He leído sobre ella! ¡La hicieron por allá del siglo dostrescuatro!” Se rio, mientras aventaba una chancla y corría por el jardín, hasta que tropezó con una pequeña piedrita que sin lugar a dudas se llevó a la boca.
“Guacala, sabe a tierra. ¡Sirena protectora, sirena protectora! ¿Tú que vas a hacer hoy?” Preguntó.
“Hoy voy a jugar basquetbol. Pórtate bien, ¿eh? Va a estar Sirena libre contigo, no te apartes de ella”
“Sí, adiós” Se aventó a la agua posteriormente, sentía que no podía respirar bien y que no podía controlarlo... porque ni siquiera estaba consciente de que esa era la razón. Comenzó a sentirse mareada pero ella se sentía libre dentro del agua.
“Ojalá fuera una Sirena... como ellas” Pensó debajo del agua.
Su cuerpecito sumergido debajo del agua nadando por horas, dejando al aire libre su cabeza para poder tomar aire y poder volver a su hogar: allí sentía calor. Comenzó a nadar, hasta acercarse a un orificio... parecía que una mujer grande en forma de Mariposa y Mar se aparecía en frente de ella pero una voz la llamó, entonces no tuvo opción más que salir del agua.
Era Peluchito de Miedo.
Él sonrió y saludó, ella.. Ella lo ignoró y se volvió a sumergir al agua.
“¡Vuelve allá arriba!” Ordenó la mujer, lo que provocó un susto en la pequeña.
“¡Ahhhhhhhhhhhh! ¡Ahhhhhhhh!” Gritó, saliendo del agua.
“¿Qué? ¿Qué pasó?” Preguntó Sirena libre.
“¡Tú seguramente tienes amigas del más allá, bruja! ¡Fuiste tú!”
“¡Oyeeeee!” Rezongó la Sirena, hasta que la Protectora se metió entre ambas.
“No, no, está bien, Libre. Vamos a cambiar, ya llegaron por ella ¿vale? ¡Hola, Peluchito y Mielosa!” Saludó alegre, mientras se alejaba con su igual.
Un golpe fue lo que arruinó el plan.
Para Negya y Mellea.
“Hey, hey, para, para... Dame eso, ¿qué estás haciendo?”
“¡ESTABAS REGAÑANDO A NEGYA! ¡ME ESTABAS LASTIMANDO!”
Cerró sus ojos, tratando de calmarse. Era la mayor y estaba tratando también de ayudarse a ella misma, no era tarea fácil.
“Telxie y Chamiré fueron a buscarme porque Negya está pasando por un mal momento ¿okay? Es por eso que te has sentido mal últimamente... Quiero ayudarlas a las dos”
“¡DEJA DE QUERER HACERLO, MALDITASEA! ¡TÚ NO ERES NUESTRA MAMÁ!”
No. Pierdas. El. Control. Es una adolescente. Ya pasaste por eso.
“Aluzza, baja el volumen de tu voz ¿de acuerdo? Podemor alterar el tiempo”
“Pues ojala y sí, ojalá porque ya estoy harta”
“Lo sé, sé que sí. Pero ya las encontré a las cuatro”
“¿Y eso de que malditasea sirve, eh? Hace 8 años te lo hubiera agradecido quizás” Dijo, tratando de no sollozar.
“Conmigo no puedes... Es decir, soy tú. P-puedes llorar conmigo”
“No seas rídicula” Rodó los ojos la adolescente, mientras aventaban el objeto que traía en sus manos.
Objeto curioso. Era solo una pala, de la cocina de Leona Mielosa, con ella hacia exquisitas recetas culinarias.
“¿Quieres ir a con nosotras?”
“¡QUIERO QUE TE DESAPAREZCAS! ¡GRACIAS POR DESAPARECERTE TANTOS AÑOS, MELLEA! ¡GRACIAS POR DEJARME SOLA!” Volvió a gritar, tenía tanto que reclamarle que le era casi imposible evitar que alzara la voz.
No era Negya quien la necesitaba con urgencia.
Era Aluzza.
Negya podía resisitir un poco más con las Sirenas y Florentina Diamante.
Aluzza la necesitaba.
“Telxie, cuida a Chamiré... Tengo que buscar a Aluzza” Avisó, mientras recogía ropa en su mochilita rosita. Dejó caer un suspiro antes de aparecerse en el lugar en el que sabía la adolescente se iba a refugiar.
La atisbó a unos pocos metros de ellas, pero fue un poco tarde.
“¡No! ¡Espera! ¡Ay, maldita sea! ¡ME DUELE TODO EL CUERPO, ALUZZA! ¡GRACIAS!” Rodó los ojos, sentía la sensación de embrigaguez, pero se sentía extremadamente débil.
10. febrero. 2022.
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La suculenta verde
Ambiente de imperturbabilidad era la que estaba presente en el rostro de aquella mujer con colores vivos y poderosos reposando sobre su melena oscura mientras que con su mano derecha jugaba con aquel jarroncito esperando en algún momento deleitar su textura y sabor.
"¿No te habías enterado, Mariposa?" Posó sus orbes en los de la joven que comenzaba a avanzar hacia la mayor.
: "Con cuidado, que una tormenta de tierra se aproximará... No tengo mucho tiempo, pero te contaré la historia de Chamiré. Es la hija de Leona Mielosa, mi Jefa... La Jefa de esta aldea..."
Con tu larga melena castaña y tus piecitos andando hacia tu hogar cargas con la culpa y confusión de aquel consultorio sin entender la razón del grito de aquella doctora que exclamó:
"¡ES QUE ESA NIÑA TIENE EL PESO DE UN ADULTO! ¡DEBERÍAS DE PONERLE A DIETA!"
Está bien, Chamiré. Digo, no lo está y está pasando algo. No quiero mentirte. No es tu culpa, tampoco lo es de Lía ni de Leona Mielosa.
Aquella tarde llegaste mirándote al espejo con 9 años apenas, asustada y viéndote el abdomen. Te lo querías cortar con unas tijeras.
Lamento mucho por haber llegado tarde. Sé que a veces sientes que no puedes y ambas nos ponemos a pensar en aquellas personas que no pueden y juntas vamos a dar nuestro punto de vista cuando estemos cuerdas y busquemos a Telxie y Mariposa, ¿okay?
"Sí" Me respondió distraídamente.
"Anda, ve a jugar"
"Espera... ¡Espera!" Vociferó en voz alta hacia la mujer que avanzaba a caminar hacia atrás del maguey, no entendía porque llevaba tanta prisa. Hasta parecía que solamente había aparecido en su camino para contarle una anécdota.
"Por favor, ¡espera! ¡Te juro que puedo aguantar la tormenta de tierra!" Exclamó, mientras corría detrás de la señora. Era cierto, hoy cumplía dos semanas controlándose. Pero no sabía hasta cuando. Camiones, piedras, ladrillos, cemento, arena, jarros, tierra mojada, tiza... comenzaron a pegarle en la mejilla a Mariposa pero la joven decidió abrir sus alas para protegerse de la distracción. Comenzaban a sangrar y su cabeza empezaba a parlotear y gritar que parara. La señora pronto a pronto comenzaba a difuminarse en el aire... ¿Quién era y por qué estaba allí parada? No lo entendía, la última vez se había dormido con Telxie y con el número de celular del lente de luz..."
"Ella solo le dijo...
"Anda, ve a jugar..."
08. febrero. 2022
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Cenando con el lente de la luz.
“¡Al ratito vengo, lías!”
“Está bien, pero llevas el móvil ¿de acuerdo?”
“Vale” Asintió con la cabeza con una amplia sonrisa. Mientras inhalaba y exhalaba por quinteaba vez, a la par que con sus delicadas manos abría la manija de la puerta, sus pies comenzaron avanzar hacia la salida y observó el azul de vertebrados estampados en la piel del Griego, lo miro un poco tímida pero a la vez alegre, era atractivo, lo esperaba con lentes, lo miró encorvado y con las manos atrás.
“Quizás me vaya a cantar tuvimos un sirenito justo al año de casados, eres una payasa Telxie ... pensó para sí misma a la par que pasaba a concentrarse en el joven”
“Hola...”
“Hola...”
Pequeños segundos pero que parecieron eras ambos seres se quedaron ensimismados el uno con el otro; pero la valiente joven comenzó a caminar y el lente de luz decidió hablar y hablar.
La noche se convirtió en risa.
“En dos semanas es mi cumpleaños por si deseas hacerme una fiesta de sorpresa” Expulsó una risa.
“¿En serio?”
“Sería una mala idea decirle que lo había visto ya varias veces en el camión, y que sé que es lo que estudia, que sé donde trabaja porque lo vi con su uniforme porque por simple coincidencia vi que se subió al camión dos veces y nos bajamos en la misma parada del camión y que me fui caminando más lento para ver en donde vivía, casa... ¿101? No lo sé, ok a ver, concéntrenos, ay no... me preguntó algo, pero no quiero parecer que no me interesa, ok a ver, cerebro de Telxie, concéntrate en una cosa a la vez, aquí... ¿qué nos preguntó?”
“¿Qué música te gusta?”
“Eh... Realmente soy versátil, un día puedo estar escuchando a Enrique Bunbury y al otro día a Selena Gómez..”
“Creo que yo no podría escucharla...”
La muchacha solo se río...
“Y... ¿qué más te gusta hacer?”
“Me gusta escribir cuando me siento mal”
“¿Te sientes mal?”
“Oh, no, no... Más bien escribía cuando mis ex-novios me hacían sentir mal”
Creo que no fue buena idea decir eso.
La buena noticia es que el muchacho pareció no interesarle y la noche se mantuvo amena porque la volvió a invitar a cenar hamburguesas.
“¿Sabías lo que significan esos tenis mojados?”
“Yo una vez los lavé con cloro”
Hizo una mueca. “Lo siento...”
“Está bien, nunca me voy a recuperar, fue lo primero que me compré con el primer sueldo de mi trabajo”
“¡Muchacho! ¡Ya vamos a cerrar! ¿Luego que no te lo vas a comer? ¿Te lo pongo pa’llevar?”
“Ay, es que en realidad es para mí señora, ya ve que uno como mujer a veces come de más, pero sí, para llevar por favor.”
El joven solo sonrió.
Caminaron, mientras observaban la luna y el misterio del joven de la luz se mantenía en la joven.
“¿Me llamarás?”
“Sin lugar a dudas”
“Gracias, por lo de la hamburguesa..”
“Buenas noches”
“Buenas noches, enertaiment.”
febrero,2019.
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La montaña rusa de las emociones.
En un bajar y subir de emociones el cerebro se encontraba en este jueguito que involucra desde la agitación cardiaca hasta las sensaciones de pesadez recorrer por todo el cuerpo.
¿Es posible que un ser sienta tanto? Quizás sí, quizás no.
¿Quién lo puede saber?
Lo que SÍ queda claro es que durante el maravilloso transcurso del día las emociones (como cada momento de la vida) estuvieron presentes y hoy se fue más consciente de cada una de ellas.
El atracón y la restricción de nueva cuenta formaron parte del día.
De pronto cuando la joven se encontraba esperando un medio de transporte para laborar se encontró con un puesto de un delicioso manjar de cacao y con una figura geométrica redonda llena de frutos secos por todo su cuerpo pero la restricción le prohibió ingerirla por miedo a engrandecer su cuerpo y repiténdole que no eran horas porque su amigo el ayuno intermitente tenía que cumplir sí o sí sus famosas 12 horas.
¿QUIÉN CHINGADOS INVENTÓ ESAS REGLAS PATÉTICAS?
A lo que iba, el corazón se puso triste y se ha de decir que hubo una discusión interna en el cerebro del ser lo que provocó que salieran los acompañantes del humano: ansiedad y depresión.
Hoy no querían salir, pero la restricción les ganó.
¿Qué pasó?
El cerebro adoptó al atracón y buscó refugió porque se sentía regañado y quería vengarse de la restricción tal cual adolescente en rebeldía.
Atisbó el primer chocolate, lo desnudó y los dientes se apoderaron hasta procesarlo en el aparato digestivo. Volvió a agarrar otro y otro y otro, no pudo parar, su respiración se exaltó, se sintió culpable, tomó otra cantidad de chocolates, se subió a una habitación, los desnudo, los hizo suyos y se los devoró aún la respiración agitada. Segundos después, se sintió sucia, sintió asco y vergüenza por sí. Salió de la habitación y el olfato sintió la presencia de la madre tierra y aunque se desesperó... hoy no le probó.
Las ganas del ser de comer tierra siguen en vigencia pero se siente orgullosa de lo logrado hoy.
El ser a veces le dice “Sí, bueno... chinga tu madre <3″ Y se siente tan bien.
Se comió sus deliciosos tacos, los gozó, sintió su textura y sus sabores, agradeció el tener bocado y techo bajo ella.
Y agradeció, agradeció a todo.
Gracias vida por seguir dándome oportunidad.
Mañana quién sabe si esté aquí.
Gracias <3.
28. 12. 2021.
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Moviendo la mandíbula y abriendo la boca para ahogarme con las emociones que quedaron sin expresarse en la niñez. Con la respiración agitada y con la mente culpándose por la acción. Mis dedos se deslizan y recorren ayudando al ser a expresar lo que por muchos años la mente de la persona con sensación de mediocridad, soledad y nimiedad se guardo en lo más profundo de su corazón.
Por mucho tiempo se ha sentido fuera del contexto de las platicas de los seres humanos, perdida e invadida entre sus pensamientos ella se pregunta muchas veces si pertenece a este mundo o su misión en esta vida era hablar sobre su sentir para acompañar a todos aquellos que tampoco se han atrevido a expresar lo que sienten.
Una cosa lleva a otra se repite ella muchas veces.
(Párrafo con sentimientos en el momento, no están completas)
Letras en el agua.
25.12.2021.
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TCA. 25.12.2021.
Sumergida entre un mar de emociones se encuentra el palpitar de mi corazón y es por que la textura del exquisito vino tinto me ha aflorado mi sentir.
Hoy, como siempre la tierra me grita suplicándome deleitarla con mi lengua hasta llegar a mis más profundos latidos del corazón.
¿Es mi culpa por ser tan débil?
Durante mucho tiempo la pequeñez invadió mi ser y me recorrió la pesadez de mi alma más oscura y de nueva cuenta quiere volver a adueñarse de mi territorio espiritual y me pregunto yo: ¿debo dejarla entrar? Siento el estruendoso cosquilleo de dicho ser recorrer la planta de mi pies hasta apoderarse de mi parte más débil: mi cerebro.
Letras en el agua.
(Marie)
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