Rika: A veces una pesadilla se convierte en el mejor de los sueños. Michael Crist, el hermano mayor de mi exnovio, jamás había reparado en mi... hasta ahora.

Michael: Erika Fane creció dando vueltas por mi casa, siempre cerca. Y, ahora la oportunidad de vengarme por lo que les hizo a mis amigos es demasiado buena. He sido paciente. He esperado el momento. Hasta la últimas de sus pesadillas se hará realidad.

Cuando me miró al espejo siempre veo defectos: mi cabello que no es negro ni castaño (muy oscuro para ser castaño y muy claro para ser negro) mis cejas, que por más que intento no quedan simétricas, ojos marrones comunes... y lo que más odio: lunares. Lunares por toda mi cara: en mi frente, en mi ceja izquierda,en mi nariz, en mis mejillas, en mi labio, en mi barbilla. Los odio. Eso es lo que veo cuando me miró al espejo. Me puse a dieta y perdí peso (no estaba gorda pero si tenía kilos de más) pensaba que si lo hacía me amaría un poco más. No fue así.

<Es que, a medianoche, el tiempo transcurre de una manera especial. Y es inútil oponerse a ello.>

No diría que estoy triste.

Tampoco deprimida.

Y definitivamente, feliz no estoy.

Más bien me siento melancólica.

¿O acaso, melancolía es otro sinónimo para tristeza?

¿Nunca has enfrentado a alguien y sientes que tú corazón te duele?

¿Nunca has pensado en alguien, y de pronto sientes que quieres llorar?

Pregúntate por qué.

¿Por qué es tan insoportable?

¿Es porque lo quieres?

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