Many Eyes - Miranda Pfeiffer

“No te vayas a morir sin probar la maravilla de tirar con amor.”

— Gabriel García Márquez (Memoria de mis putas tristes)

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[Parte 2]

…pronto su mano paso por mi cabello, su nariz rozo la piel de mi cuello blanco provocando que la excitación y la tensión sexual me asfixiaran, dejándome respirar solo en los pocos momentos en los que me dejaba sola, tiempo en el que aproveche para observar sus libros infinitos, su inusual pared verdosa y sobre todo el fondo del pasillo donde se asomaba la orilla de su cama azul marina que a mi piel le urgía ahogarse en ella pronto.

En algun momento de mi delirio el ya estaba probando el sabor de mi cuello y sus manos recorriendo mis pechos pero cuando le pedí besarme se rehusó casi totalmente, haciéndolo muy esporádicamente lo que me entristeció un poco pero no lo suficiente para detenerme, con algunas partes de mi cuerpo al descubierto que él maravillado elogiaba y contemplaba sin ninguna censura, fuí de su mano directo al tan esperado final del pasillo, donde finalmente después de imaginarla día y noche en un millón de ilógicas historias, pude contemplar su masculina figura desnuda, era más delgado de lo que esperaba pero eso no evitó que poco después me sometiera frente al vergonzoso espejo de su pared. Callada seguía cada una de sus órdenes dejándome envolver por su voluntad distorsionada por el alcohol, esto lo volvía brusco pero ni así pudo escapar de regalarme un éxtasis total acompañado por la maravillosa sensación de sus salvajes rizos entre mis manos…y piernas.

Al terminar, desnudos y aún ebrios hablábamos a obscuras solo con la poca luz que nos regalaba la romántica luna, incada a un lado suyo para mi sorpresa ese ser de aire vulnerable o talvez solo demasiado intoxicado desencadenaba en mi una ternura exorbitante, bañado en una extraña luz azul me suplicaba cosas que probablemente decidió olvidar…

-A- [Parte 1]

Esa mañana desperté solo para entrar a un sueño mucho más profundo, uno totalmente quimérico por el que mi alma se movía automáticamente, semiconsciente de mi misma apenas reconociéndome, entre mi sangre hirviendo, los poros de mi piel y mis ruidosos pensamientos que inútilmente intente ahogar con un triste cigarrillo debajo de la ridícula sombra de un delgado árbol quien me cobijaba del intenso sol de mediodía, esperaba a que llegará a nuestro encuentro prohibido el ya atrasado ser de aire.

Una vida después sintiendo cada segundo me llamo su claxon casi pronunciando mi nombre sin embargo no lo mire hasta que se vió obligado a tocar por segunda vez, con movimientos lentos intentando alargar mi llegada caminé hacia él, aún sin digerir la escena con su bella imagen enfrente mío intercambiamos unas cuantas palabras ordinarias casi por obligación, después de ayudarme a ponerme el casco me subí atrás de él en su amada motocicleta y no dude ni un segundo en rodearlo fuertemente con mis brazos queriendo absorber la energía que brotaba de este ser de aire, durante el viaje observaba obsesiva cada centímetro de su perfecta piel morena al descubierto y sus rizos incontrolables queriendo escapar del casco que los aprisionaba, miraba su espalda y trataba de memorizar en mi piel sus formas exactas con mis brazos moviéndolos sutilmente embriagándome con cada instante de este esquicito sueño.

Mi mente inmune al paso del tiempo me decía que habíamos llegado en instantes o talvez eternidades, así como la charla que tuvimos acompañados por algunos vasos de alcohol protagonizada por cinismo, arte, sexo, música y risas pronto su mano paso por mi cabello, su nariz rozo la piel de mi cuello blanco provocando que la excitación y la tensión sexual me asfixiaran, dejándome respirar solo en los pocos momentos en los que me dejaba sola, tiempo en el que aproveche para observar sus libros infinitos, su inusual pared verdosa y sobre todo el fondo del pasillo donde se asomaba la orilla de su cama azul marina que a mi piel le urgía ahogarse en ella pronto…

"Esa mañana desperté solo para entrar a un sueño mucho más profundo, uno totalmente quimérico y sin sentido... Llena de pánico solo pude dejarme envolver por la voluntad de este ser de aire." #acuarela #arte #versos #lazos #burbujas #proyectoartistico #a #relatos

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Imagen y texto por: Val Rhoswen