kuromi.

     con las primeras palabras que se le otorgan, las comisuras no tardan en expandirse con ilusión ante la creencia de que por fin podría hacerse con su peluche favorito de todo el lugar. pero, tan pronto como aparece, se va, y lo único con lo que permanece es con una sensación amarga que aprieta comisuras. al final, recupera su mochila para sacar su teléfono móvil, preparando su aplicación de notas de voz para grabar algo que después apuntaría en su diario: ‘ día dos, ¡una niña linda me ha negado un punto para conseguir el peluche de gloomy bear de mis sueños! justo cuando pensaba que el día no podía ir peor, no te olvides de su carita ’ asiente al terminar de grabar, observándola con párpados achicados. ‘ ¿cuál es tu nombre y por qué me odias? ’

la sorpresa inunda las facciones femeninas, tras observar cómo abre su mochila para sacar un objeto: ¿es una asesina? desconoce las razones por las que terceros arriban al juego, sin embargo, está preparada para todo. un suspiro cae delicado entre sus fauces, no era más que un teléfono. una serie de carcajadas corroen el nerviosismo que sintió por un ínfimo instante, era adorable; ¿cómo pudo pensar que alguien tan linda podría ser un asesino? ‘ ¡basta! me estás haciendo sentir culpable ’ a pesar de ser un reproche lo que se escapa de sus labios, las carcajadas acompañaron cada uno de los vocablos. ‘ no te odio, solo no quiero que te acostumbres a manipular a las personas ’ intenta, de alguna forma, traer su punto en escena sin indagar en traumas / contextos escolares. aún así, la sonrisa en su rostro ha desaparecido hasta transformarse en un fantasma. ‘ soy choerry y te daré los puntos para tu peluche y otro más, si me das las razones por las que de verdad lo necesitas ’ se cruza de brazos, ha conseguido lo suficiente en un intento de superar a un desconocido, o al menos eso creía. por alguna razón, que desconoce, ha optado por negociar con la contraria, en un intento de eliminar el sentimiento de ser un nuevo títere, que siente correr por sus venas.

kel.

alza las cejas con sorpresa que no puede evitar, pero es la confianza que demuestra la justa y suficiente para impulsar la continuidad de la propuesta. algo le dice que sí terminará humillado al final de la partida (o las que se den, considerando su competitividad), mas no se arrepiente.   ‘ no puedo echarme para atrás, tengo que defender mi honor. ’   sonrisa que le dedica demuestra que sus palabras no van en serio. la verdad es que aceptaría la derrota tranquilamente, porque si algo cree tener es coordinación, y si le llega a ganar… sabrá admirar su habilidad o pedir la revancha. ambas suenan bien en su mente. la invita a emprender marcha con un movimiento de cabeza, la máquina no se encuentra tan lejos de alcance y cuando llega, la señala con la diestra.   ‘ ¿quieres hacer los honores? mi única petición es no ir al nivel avanzado de primera. no convoques mi muerte tan pronto. ’

‘ me gusta, un hombre que no teme a la humillación ’ asiente, enseñando su blanca dentina. estaba acostumbrada a enfrentarse a personas que se encontrasen a su altura, en máquinas como aquella, sin embargo, tampoco conocía del todo las habilidades de su contrincante: quizás la sorprendía. cuando corta distancias con la máquina, una serie de remembranzas de su infancia comienza a bañar su oscura cabellera; aquel recinto, se había transformado en una zona de ocio de sus ratos libres. ‘ no seré injusta cuando has demostrado ser todo un caballero ’ y con ello no se refiere al clásico sentido de la palabra; sino a la valentía y honor que carga sobre sus hombros. estaba siendo dramática, sí, como acostumbraba. ‘ ¿qué género en particular te gusta? porque me muero por probar la canción de doja cat que tiene esta máquina ’ se sube a la máquina y posa ambas piernas a un costado de las flechas, procurando no tocar más de la cuenta. solo su pie izquierdo aparece en escena, con el fin de buscar entre el repertorio la canción pensada. ‘ ¿intermedio o básico? ’ interroga y observa por sobre su hombro a su nuevo compañero.

candy​.

“Me alegra haberlo hecho, temía que me rechazaran por ser demasiado inmadura.” Entiende que es un juego de niños, pero le divierte de todas formas y suerte la suya que fue a encontrar a alguien que piensa igual, entre toda esa gente competitiva y centrada, es un alivio. Se quita el otro zapato, quedando descalza y permite que la chica tome su mano, siguiendo pasos ajenos. “Mhm…” Analiza un segundo el inflable, no es ni muy alto, ni muy bajo, pero su estructura se muestra inestable. “Podría intentarlo, con el impulso correcto lo lograría, tal vez.” Le gustaría sonar más segura pero lo cierto es que no tiene idea de cual sería su desempeño. “¿Por qué? ¿Planeas subir y convertirte en Rapunzel?” 

‘ estamos aquí para enfrentar riesgos, no para arrepentirnos cuando ya me tienes sin zapatos ’ sonríe, pareciera que su discurso es un reproche, no obstante, solo era un intento de motivar a la contraria de llegar a la cúspide de la estructura. ‘ en ese caso serías tú, rapunzel es preciosa ’ asiente, estaba acostumbrada a mantenerse en las sombras, ser la compañia: casi el arroz de cada comida. ‘ ven, vamos a cantar arriba de todo para que nos digan infantiles con ganas ’ invita, posando uno de sus pies sobre la estructura, de esta forma se impulsa y logra caer sobre el inflable. 

airther.

@airther_ ha compartido su ubicación: 📍 mini-golf, sunset.

manos se aferran al palo de golf, postura perfecta tal como había aprendido desde que era un chiquillo que apenas y sabía caminar. se balancea con suavidad, mirada puesta en pequeña bola blanca, y solo le toma colocar algo de impulso para, finalmente, hacer un tiro preciso y perfecto. por supuesto, pequeño objeto blanco y brillante no parece captar información, por lo que sale disparada en cualquier dirección, y boca cae abierta al ver como casi golpea a persona desconocida, un pequeño ‘oops’ deslizándose de su garganta. ‘ yah, ten cuidado por dónde caminas, arruinaste mi lanzamiento ’ ceño se frunce sin razón alguna, culpa que recae sobre sus hombros, pero nunca había sido asiduo de hacerse cargo de sus errores.

distraída, busca un nuevo foco de interés tras cansarse de competir con extraños en el arcade. camina por el recinto, se mueve entre atracciones con palo de golf entre sus dígitos y pelota en diestra, ni siquiera sabía cómo empezar. divisa a lo lejos a figura masculina; quizás él sabía. error. tan pronto estuvo cerca, tuvo que correr con rapidez su cabeza hacia atrás o sería víctima de un verdadero atentado. esperó una disculpa, sin embargo, la continuación de sus palabras solo logró sorprenderla, tenía que ser una broma. ‘ ¡¿eres estúpido?! ’ exclama, molesta y sentida, tira la pelota al suelo y toma con ambas manos el horrible bastón. ‘ ¡intentas matarme y ahora me dices a mí que tenga cuidado! ’ estaba indignada, pronuncia el pronombre personal con un alza de voz, sin importarle si alguien más la había escuchado. ‘ le diré a mi hermano, mide casi dos metros y no temerá en darte una golpiza por haberme hecho esto ’ lo duda, seguramente solo se reirá de ella y le dirá que tenga más cuidado; mas, el contrario no tenía esa información. 

char​.

la pista sobre las teclas le hace apartar la mirada y echarle un vistazo al tablero. sólo sabía dónde se aceleraba, pensó que era suficiente y… un momento. ¿qué era nitro? ‘ quizá deba intentar otro de los juegos — ’ murmura con cierto aura pesimista empujándole los hombros hacia abajo. ‘ parece que estás acostumbrada a este tipo de lugares. ¿conoces otra máquina donde pueda sacar puntos de una manera más sencilla? o — ’ ahí su cerebro se ilumina con una idea. entonces no le basta con mirarle, también se remueve sobre su asiento para dedicarle atención absoluta. ‘ ¿estás pensando en canjear tus puntos por algún premio? ’

‘ ¿eres principiante? ’   interroga curiosa, generando hasta cierto deje de ternura en su vientre; estaba acostumbrada desde corta edad a mover sus dígitos en tableros o pies en máquinas de baile, siendo su centro de diversión de cada sábado en compañía de sus amigas de infancia.  ‘ un poco, sí, la verdad es que soy más competitiva que buena jugadora ’ se encoge de hombros y lleva su mirada nuevamente hacia la pantalla, aún con el presunto adolescente en la cúspide de los puntajes: lo odiaba. la pregunta sobre sus puntos la toman por sorpresa ( lo había olvidado ). ‘ ni siquiera pensé en los premios ’ pronunció entre risas bajas, se ensimismo tanto en superar a un desconocido que olvidó por completo la verdadera razón de su estadía entre las maquinas. ‘ en fin, ¿te buscamos algo más simple? hay un juego que son solo saltos, puedo ayudarte con algunas partidas, eh, ¿qué dices? te ayudaré a encontrar tu especialidad ’ guiña un ojo en su dirección, mueve su cabeza en dirección a las máquinas a sus espaldas, prefería la compañía que seguir cegada con un desafío ingrato.

kaizen​.

le es sencillo reconocer aquel tono de voz. facciones cambiando de forma abrupta y esa maldición desprendiendo de sus labios a modo de susurro. ‘ ya quisiera thomas ser tan lindo como yo ~ ’ pretende dolor, en ese negar que se dedica casi decepcionado, siguiendo con el actuar pomposo ( ahora que lo piensa, totalmente característico del empleado de su edificio ). ‘ pero creo que eso ya había quedado en claro, ton-ti-ta ’ arrastrando cada sílaba, con la burla provocando el alza de sus comisuras. ‘ yo no confío en ti. y si me subo de copiloto tendré que usar un casco, unas rodilleras, algo para el pecho ~ ’ a sabiendas que cada una de sus palabras cargan con completas falacias. por que podría confiarle su vida entera, algo sobre el lazo que los ha unido desde su concepción. pero no lo dice, se guarda esos pensamientos con la única intención de incordiar. ‘ ¿a cuál kart vamos a subir, a todo esto? mira que te estoy dando la oportunidad de elegir ~ ’ manos se las lleva hasta los bolsillos, siguiendo con ese actuar casi despreocupado digno de quien no lleva perfeccionismo y encanto tatuado en la frente. 

‘ ¿te repites eso cada día para poder vivir contigo mismo, uh? ’ interroga burlesca, la realidad la carga su compañero de vientre, sin embargo, se niega a aceptar cualquier fuese el atributo positivo que se aludiese a sí mismo: esos eran de ella. frunce su ceño y golpea con su pie izquierdo el suelo, en protesta; cómo se atrevía a llamarla tontita, el imbécil mayor era él. se quedó con la estatura, más las neuronas llegaron todas a su cerebro. ‘ vuelve a decirme tontita y te corto los huevos ’ amenaza, apuntándolo con su dedo índice. es un teatro, una verdadera dramatización que la acompaña desde pequeña, enamorada de personificar personalidades que no posee, hasta volverse en adicta y olvidar por completo sus verdaderas preferencias. suelta un bufido, justo después que los vocablos masculinos han terminado, era un hablador. ‘ casco no necesitas, de todas formas, el aire en tu cabeza no va a sufrir ningún daño. ’ alude a la falta de inteligencia, como una estrategia de  juego de honor entre ambos. ‘ ay, ¿por qué tan consid— ’ se detiene a mitad de palabra, justo cuando sus orbes se posan sobre cuello contrario. ‘ ¡¿es ese mi collar?! maldito ratero, asqueroso, lo busqué por todos lados ’ su mano se levanta rápida, buscando tomar el borde del cuello de su prenda superior, con el propósito de comprobar que realmente se trataba de su pertenencia. 

styx​.

   ‘¿entonces puedo ahorrarme la bebida?’ bromea. ahora que ya la ha ofrecido, va a comprársela igual diga lo que diga, agradecida de que por fin alguien haya accedido. ‘soy styx’ saluda de igual manera. ‘¿ya te subiste a algún otro? quiero probar suerte en el mini bowling, pero no sé si soy tan habilidosa’

‘ yo corro por la bebida, después de todo, eres como un ángel caído del cielo ’ afirma, asintiendo con su cabeza emocionada. estaba acostumbrada a congeniar con terceros, incluso si implicaba moldear sus anhelos y personalidad ( necesitaba hacerlo ). ‘ la verdad es que no, estuve todo este tiempo intentando superar a un desconocido en una máquina de arcade ’ seguramente tenía siete años; más la competitividad se encuentra arraigada a su cien. ‘ ay, no puede ser tan complicado, ¿no? es solo una miniatura ’ una serie de risas escapan de sus labios, qué podría salir mal. ‘ ¡es enorme! vamos, antes de que empiece ’ vuelve a jalar a la fémina con genuina emoción en su hablar. ‘ prómeteme que me dejarás tomarte la mano cuando estemos allá arriba, o me dará un paro cardíaco ’

kaizen​.

             📍 kvizen_ shared his location  ──  carreras de karts a las 20:20 hrs.  

‘ tienes dos opciones ~ ’ la sonrisa a medias se dibuja en labios apenas acerca a figura más cercana, manos detrás de su espalda en un gesto solemne ( totalmente inventado ). ‘ puedes ir contra mi o ser mi copiloto pero te advierto que mi examen de manejo lo pasé hasta el tercer intento ~ ’ mentira se da con total naturalidad, manteniéndose expectante a respuesta contraria.  

‘ no me gusta ninguna ’ se apresura a pronunciar, sin permitir que continuase con sus palabras, es rápida y está acostumbrada ( casi biológicamente ) a interrumpir al más alto. ‘ ¿quién te crees? ¿thomas? jamás tendrás su elegancia y habilidad para recibir mis paquetes ’ hace referencia al portero del edificio que comparten, frunciendo el ceño en reproche. amenaza con golpear su brazo, más detiene el avance de su mano antes de colisionar, permitiéndose pellizcar sobre su ropa. ‘ yo voy a manejar, tú serás copiloto ’ sabe que aquello los arrastraría a una derrota segura, ambos sabían que su licencia de conducir se debió a su carisma más que habilidades; por lo mismo, suele mantenerse alejada de manubrios y frenos. ‘ creo que es momento que pruebes tu confianza en mí ’

char​.

📍  locación — arcade.

‘ ¿cómo funciona esto? ’ el primero comentario se lo dedica a sí mismo, mediante un murmullo y después de iniciar la carrera de autos en la máquina de arcade. ‘ ¿cómo — ? ’ la segunda pregunta queda a medias, después de chocar aparatosamente contra las paredes de un túnel. la tercera inquisición llega bastante tarde, una vez le marcan como perdedor de la partida. aparentemente ha llegado de octavo en una carrera de… ocho. ‘ no entiendo cómo funciona esto ’ se remueve un tantito en su asiento. sólo cuando percibe un movimiento por el rabillo de su ojo es que se gira para hablar. ‘ oye. ¿sabes cómo se gana? ’

sus dedos se mueven rápidos contra las teclas, una tras otra, siguiendo el compás del videojuego. se ha propuesto superar al primer puesto, determinación que la ha llevado hasta el tercero y casi una hora de partidas sin cesar. ignora la interrogante masculina hasta que un nuevo puntaje aparece en su pantalla, una sonrisa amplia aparece en sus fauces tras subir al segundo del ranking. estira su brazo para tomar entre sus dígitos la botella de agua y, curiosa, observa resultado contrario. ‘ ¿sabes para qué funciona cada tecla? eso es lo primordial. ’ inicia, creyéndose sabia, cuando solo ha desenterrado una adicción de infancia. ‘ mira, inicia de nuevo, seguro no estás entendiéndolo ’  

kuromi.

    ‘ oye ~~ me falta un punto para conseguir ese peluche de ahí ’ lo señala con el dedo índice, volviendo la mirada a la persona con iris brillosos y un puchero que buscaba teatralizar súplica. ‘ ¿me darías uno? ¿por fii? ’

‘ con lo linda que eres, ¿quién sería capaz de negarte un punto? ’ sigue con su mirada el recorrido de su índice, sonríe al reconocer que vale la pena mendigar un poco para tenerlo. ‘ pero algo me dice que quizás — me estás manipulando ’ tiene experiencia, ha mantenido demasiadas amistades enamoradas de sí mismas y conocedoras de su valía; era imposible que ella no fuese otra más, solo había que verla. aparece un puchero en sus labios, imitando el actuar contrario. ‘ y solo estaría malenseñándote si te lo doy sin más, ¿no crees? ’ 

herse.

 📍  ubicación — patio de comidas.

          ‘ cinco mil dólares y la tarjeta de juegos con el saldo intacto a cambio de que finjas estar lesionade y no participes del laser tag ’ hace su oferta a une participante al azar, con ánimos de descubrir si es de quienes traicionarían a su equipo por una suma de dinero similar a la que probablemente recibirían en caso de ganar. ‘ te ves ágil ’ señala, a modo de justificación para esa propuesta que en realidad hace por mero entretenimiento. 

‘ ¡¿pero por qué eres así?! ’ se queja, deteniendo el camino de su papita hasta sus labios; la mantiene justo en el borde de sus tonalidades carmesí, mientras su dígito se aferra a ella: firme. diferente a su raciocinio. ‘ no encuentro cinco mil dólares todos los días en la calle, eres despiadada ’ continúa con el mar de reproches, ve en las opciones una gran tentación; más cuando comparte equipo con desconocidos. si tan solo estuviese su hermano: el fin sería diferente. ‘ la tarjeta de juegos, ¿cuánto saldo tiene exactamente? ’ interroga,  mascando el borde de la fría fritura, se había distraído lo suficiente para olvidar la verdadera razón de su ruta elegida. 

ivy​.

‘ ¿quieres compartir el go-kart conmigo? ’ cuestiona a una de las tantas caras conocidas en el lugar. ‘ puedes manejar si quieres. ’ no es que ella no sepa manejar, obvio, solo intenta ser amable con su compañere. 

la invitación llega como anillo al dedo; tras abandonar las prácticas y caer en una derrota inminente. ve en la fémina la oportunidad perfecta para distraerse de su caída libre. ‘ amaría compartir cada juego contigo ’ y no miente, es incapaz de tomar decisiones por sí misma, por lo que encontrar una nueva líder sería el mejor escenario. ‘ no, no, no. si manejo yo perderemos, nunca he aprendido a direccionar bien estas cosas ’ y con ello se refería a cada manubrio que se posaba bajo sus manos. avanza en dirección a la atracción. ‘ mamá dice que algunos nacemos para ser escoltados ’ anima la situación antes de despertar la pena en su nueva compañía. 

kel.

  ’ ¿te animas? ’ se apoya cuidadosamente contra juego, señalando con la diestra la estructura más simple de un auto, porque es mucho más entretenido competir contra alguien que disfrutarlo por su cuenta.   ’ o… ¿máquina de baile? ‘   cambia la petición cuando encuentra con la mirada lo que menciona. eleva las cejas, casi en una invitación.   ’ es mucho más entretenido, si me lo preguntas. ' 

su nariz se arruga ante la solicitud, dudaba poder ganar un juego que ponía sus nervios de punta; sin embargo, las opciones restantes resultaban tentadoras. su mirada siguió la impropia, en dirección a la máquina que sonaba con trompetas de gloria en su cabeza. ‘ oh, ¿estás seguro? te humillaré en esa ’ advierte, entre risas y con tonalidad burlona, es una especialista en mover sus extremidades al compás de un ritmo; por algo había sido su carrera elegida. ‘ prometo tener piedad y no humillarte, si accedes a continuar con tu funeral ’ exagera, elevando sus manos para apretar la alta coleta que adorna su cabeza. 

candy​.

📍 locación — inflables.

“¿Entras conmigo?” Pregunta sonriente, refiriéndose al inflable con forma de castillo que tienen enfrente, a la vez que se quita los zapatos. “Vamos, será divertido.” 

‘ estaba deseosa que alguien se animase a invitarme ’ es sincera, incapaz de actuar por sí misma; compañera de la masa y acostumbrada a dejar el rumbo de sus decisiones en manos de otros, se apresura a tomar la extremidad impropia para iniciar su camino, mientras sus pies quitan los zapatos con la punta del contrario. ‘ ¿podrás escalar hasta arriba? ’

( +1 ) nueva notificación !   @𝐂𝐇𝐄𝐑𝐑𝐈𝐄𝐒  ( dromui )  ha compartido un nuevo outfit                                                        𝐂𝐎𝐃𝐈𝐆𝐎 𝟎𝟎𝟐. stars wars

tulipa​.

“¿puedes creer que soy la mejor lanzadora de canasta y no tenía ni idea?” pregunta dirigiéndose a la persona junto a la que se ha detenido. “mira lo que pude intercambiar con mis tickets” sacude entonces el peluche que lleva entre sus brazos. “lo cierto es que no soy muy fan de los peluchitos pero me pareció tiernísimo… ¡te lo regalo! ¿qué dices?”

‘ ¡claro que puedo creerlo! ’ ¿por qué mentiría siquiera? ella era apenas una extraña, la emoción se apodera de sus orbes a medida que el discurso avanza, palabra tras palabra, solo logran entusiasmar más a la oriunda del país surcoreano. sus labios se abren de par en par al observar el galardón, sin embargo, tan rápido como llega se va: una serie de carcajadas se disparan de sus tonalidades carmesí, mientras niega con su cabeza y mueve sus manos frente a ella. ‘ no, me niego a quitarte tu primer premio en tu nueva habilidad, si quieres me das el segundo o —’  se detiene, ha sido iluminada con una mejor idea. ‘ ¡podemos compartir su tuición! ’

*        styx​.

   ‘te compro una bebida si entras conmigo a drop tower, ¿qué dices? es un planazo’ en realidad le da miedo subir sola, pero eso no lo dice.

     su andar es interrumpido de golpe por discurso desconocido, sin poder evitar voltearse para observar a su nueva compañía. en respuesta, busca entrelazar su brazo con el impropio. ‘ ni siquiera tenías que ofrecerme algo para aceptar ser tu acompañante esta tarde ’ es sincera, ya se encontraba demasiado aburrida para continuar en solitario, ella se ha convertido en su salvavidas personal. ‘ soy choerry y estaré encantada de subirme contigo a cada juego que exista ’ una sonrisa amplia se crea en su rostro.