Tumgik
alwaysbusyguy · 5 months
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Calienta mi alma como solo tus besos lo saben hacer, y yo me encargaré de que mis dedos enciendan el resto.
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alwaysbusyguy · 6 months
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Deseo
Deseo que no deje de llover, que el clima me mantenga preso en la habitación y deba cancelar la clase de hoy. Quisiera disfrutar la lluvia y el tiempo libre como si no fueran las últimas clases que impartiré, como si no fuera a despedirme pronto de los bailarines que he formado.
Suspiro al recordarlo.
Han pasado tantas cosas este verano… me la pasé corriendo tras mis metas sabiendo que si las lograba tendría que despedirme de mi gran pasión.
Pero aún así elegí tomar ese camino.
No tenía mucha fe en ser elegido entre tantos candidatos y sin embargo, después de tanta burocracia, exámenes y retos, ya firmé un contrato.
Un gran peso se me ha quitado de encima, y me siento satisfecho por haberlo logrado, pero no puedo evitar sentir melancolía por despedirme de los escenarios.
Dentro de poco tendré que hacer la maleta y despedirme de aquellos que confiaron su pasión en mí y que me dieron la oportunidad de demostrar (me) que efectivamente era muy capaz de hacer grandes cosas.
Mi etapa artística se queda atrás y ahora seguiré un camino menos brillante y glorioso, totalmente contrario. Diré a dios a la danza y comenzare con el ejercicio diario, cambiaré los zapatos de baile por botas, el vestuario por uniforme, y los pasos por las armas.
Serviré a mi patria, mantendré a mi familia, y protegeré con la vida a la persona que más amo.
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alwaysbusyguy · 6 months
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Cansado de esperar
El camarero está tardando demasiado.
Te llevo observando varios minutos, mirando el menú, respondiendo mensajes en el teléfono, tomando fotos, y aunque mi mirada no denota más que cansancio y tristeza no te das cuenta. Estás frente a mí, pero no estás conmigo.
Intento encontrar las palabras para iniciar una conversación, pero no recuerdo que es lo que nos mantenía unidos. No logro decir nada relevante, y tampoco te esfuerzas en mantener la conversación.
Hay un silencio muy largo, algunas quejas de la vida cotidiana. Pero nada más.
Nada...
De pronto los recuerdos del pasado llegan a mí. La emoción al encontrarnos después de tanto tiempo. Las horas de conversaciones, los secretos y las risas. Tú te emocionabas al verme y hablábamos por horas, tú compartías tu tiempo conmigo y disfrutábamos cada encuentro.
El contraste entre el pasado y el presente me duele.
¿A dónde se fueron esos momentos? ¿A dónde te fuiste y por qué no has vuelto? Estoy esperando que regreses pero estás aquí, frente a mí en la misma mesa.
Suspiro pero tampoco lo notas. Menos mal porque mis ojos se han humedecido.
Cuando te fuiste, supe que cumplir tu sueño era importante y que lo lograrías, así que esperé pacientemente tu regreso.
Pero nunca volviste.
Tienes el mismo rostro de la persona que esperé por años, pero no eres tú. Cuando me miras tus ojos ya no brillan, ni sonríes, y tampoco han vuelto las alegrías a nuestro lado, ni la felicidad que me brindaba tu compañía.
Pero seguí esperando a que volvieras, a que en algún momento pudiéramos volver a disfrutar de nuestras presencias como en los viejos tiempos, pero cada reunión llegaba a casa con esa pequeña decepción en el pecho porque nada era igual.
Hasta que el pecho comenz�� a pesar de tantas pequeñas decepciones.
Intento detener la secuencia de pensamientos que me dicen que ya no soy relevante en tu vida, que has cambiado, pero viajan más rápido de lo que puedo controlar. Trato de ser justo y de entender que no es personal, que las personas cambian...
No sé si es de melancolía, tristeza o decepción, pero suspiro más lento y más pesado está vez.
Por primera vez entiendo lo que pasa. Simplemente ya no eres la misma persona.
Y yo sigo esperando a que regrese la persona que se fue. Espero a alguien que ya no existe, a alguien que ya murió, que ya no va a volver.
Y mi corazón se quiebra en ese instante.
Porque a quien esperé con tanta ilusión jamás volverá y yo ya me cansé de esperar.
Se me ha esfumado el hambre, el ánimo y la ilusión.
¿Por qué lloras? Tu mano se posa sobre la mía y despierto de mis pensamientos. Es la primera vez en la noche que me miras a los ojos, pero ya es demasiado tarde.
Suspiro por última vez y dejo mi parte de la cuenta sobre la mesa.
Me cansé de esperar…
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alwaysbusyguy · 6 months
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Se puede encontrar belleza dentro de todo, incluso dentro de la tristeza, porque muchas veces de la tristeza nace el arte. El arte de escribir un libro, el arte de escribir una canción, el arte de escribir un poema.
El arte en su mayoría nace de la tristeza y no hay nada que posea más belleza que el arte.
-Metamorfosis.
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alwaysbusyguy · 7 months
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Pasan los días y cada vez estoy más segura de que quiero estar contigo todo lo que me resta de vida.
Moonlight
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alwaysbusyguy · 7 months
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Así es.
La terapia no se trata sólo de curar el trauma que otros te han infligido. La terapia también tiene como objetivo evitar que causes traumas a otras personas, especialmente a las personas que te aman.
Oríah | Entre destellos e Ilusiones ☁️.
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alwaysbusyguy · 7 months
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“La vida es muy corta para tener asuntos pendientes.”
— Cementerio de mascotas, Stephen King.
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alwaysbusyguy · 7 months
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Crees que eres el ser más ingenioso, y por cierto; también crees que te burlarás de todos para siempre: Y no; a cada uno nos llegará en plena conciencia. El momento "ideal"; para realmente conocerte...
Mabel
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alwaysbusyguy · 8 months
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alwaysbusyguy · 8 months
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No puedo evitar sentirme nervioso en esta nueva etapa de mi vida.
He tenido algunos cambios rápidos y un fuerte golpe de melancolía me ha golpeado.
Supongo que solo extraño la seguridad de lo que conozco, en este puente a una nueva etapa de la que desconozco todo.
Sin embargo, a diferencia de muchos años atrás, me siento cómodo y listo para enfrentar los nuevos retos que me esperan.
Ya no me asusta soltar las cosas que amo, porque sé que puedo retomarlas en cualquier momento.
Los caminos nuevos ya no me intimidan. Creo que al fin he entendido la vida.
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alwaysbusyguy · 8 months
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Pinterest.
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alwaysbusyguy · 8 months
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CALOR HÚMEDO
El beso acalorado desde los labios húmedos hasta la profundidad de tu boca y la tibieza de tu lengua derritiendo mis pensamientos entre suspiros.
Tu abrazo bajo la lluvia, nuestros cuerpos danzando sin miedo a enfermar, las ropas húmedas, tus brazos tibios rodeándome bajo la tela semitransparente.
Mis manos nerviosas explorando zonas recónditas de tu cuerpo en la oscuridad mientras me observas en silencio con una sonrisa.
El sudor en nuestros cuerpos acalorados cuando encuentro el punto que te hace enloquecer. De pronto el calor húmedo pasa de ser una sensación molesta al presagio de un mayor placer.
—Han
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alwaysbusyguy · 8 months
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Es mejor retirarte y dejar un bonito recuerdo, que insistir y convertirte en una verdadera molestia. No sé pierde nada que no tuviste, no se mantiene lo que no es tuyo y no puedes aferrarte a algo que no se quiere quedar. Si eres valiente para decir "Adios", la vida te compensara con un nuevo "Hola".
- solovivesenmimente2
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alwaysbusyguy · 8 months
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Mi jardín ha sido invadido
A veces cuando me siento perdido me gusta aislarme para conectar mejor conmigo mismo. Disfruto en soledad de mi propia compañía.
Pensar en voz alta, hablar conmigo mismo mientras paseo a solas es un placer que pocos entienden y muchos tachan de "locos".
Y no es que odie la compañía, pero prefiero hacerlo a solas. Me gusta caminar por lugares solitarios en el que nadie pueda interrumpir el acelerador flujo de mis pensamientos, y las conclusiones veloces a las que llego antes de poder pronunciar las palabras.
Es por eso que me gustaba ese jardín en forma de laberinto. Pocos se atrevían a entrar, temían perderse por un largo rato, pero yo lo amaba precisamente por esa razón.
Un día le hablé de mi jardín a alguien a quien apreciaba y le gustó. Entonces comenzamos a visitarlo juntos.
Tiempo después desapareció entre los pasillos del laberinto.
Más tarde, otra persona me dio la confianza de mostrarle mi jardín y pasear en él.
Ahora cuando quiero estar a solas, mi jardín ya no está solo, mi jardín ha sido invadido, y a veces me arrepiento de haberlo compartido.
Aunque no se atraviese nadie en mi camino puedo escuchar el eco de sus voces en alguna parte del laberinto, y ya no me siento a solas conmigo mismo.
—Han
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alwaysbusyguy · 8 months
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.。.Silent Night .。.
A veces, cuando la luna ya estaba muy en lo alto y sus pensamientos aún se encontraban despiertos y revoloteantes, le era inútil permanecer entre las sábanas intentando conciliar el sueño, y como era costumbre cuando su mente estaba despierta, su cuerpo no pudo permanecer quieto por mucho tiempo; después de dar vueltas en la cama sabiendo que era en vano, decidió tomar algo de aire fresco y despejar sus pensamientos libremente para después intentar una vez más encontrase con Morfeo.
Noches como esas eran comunes en su vida desde que tenía memoria y algunas solían ser mentalmente desgastantes, pero no aquella. Sus pies descalzos se deslizaron por el piso de madera hasta atravesar el umbral que llevaba al balcón, aquel que pocas veces solía visitar durante el día, pero que frecuentaba en las noches de insomnio.
Afuera el aire era frío, sorpresivamente agradable, tanto que se le antojó posar sus brazos sobre el borde del balcón y contemplar la vista. No vivía en el nivel más alto del edificio debido a la ligera fobia que le causaban las exageradas alturas, pero aún en el segundo piso podía distraer su curiosa mirada a lo largo de la calle de vez en cuando.
La luna lucía diferente esa noche; el silencio lejos de sentirse solitario como lo había sido meses atrás le transmitía una paz que creyó nunca volvería a sentir. En sus pensamientos no había pendientes repitiéndose una y otra vez, ni conversaciones que hubiera deseado cambiar, tampoco arrepentimiento sobre decisiones del pasado.
Solo había una pequeña cosa que si bien no le quitaba el sueño tampoco le era indiferente. Entre el sutil sonido del viento y el eco de lejanos sonidos nocturnos encontró la tranquilidad suficiente para pensar con claridad sobre aquello que merodeaba por su mente en ese instante.
No se trataba de nada que fuera de gran urgencia, pero que sentía deseos de volver a hacer desde hacía tiempo con la misma inspiración de años atrás: escribir.
Nunca se había considerado especialmente bueno en la escritura, más eso no impidió que se dedicara a ello ocasionalmente. Incluso hacía muchos meses una persona le había dicho que él no sabía lo que era capaz de transmitir cuando escribía; y ese había sido quizás el mejor halago que había recibido en toda su vida.
Por desgracia, hacía tanto tiempo que había abandonado las letras que cada vez se sentía más incapaz de escribir algo que a sus ojos fuera digno de compartir. Aquello le ocasionaba una pequeña frustración en la mente, porque de verdad disfrutaba tomar una pluma y perderse entre sus pensamientos y la tinta sobre el papel; lo extrañaba, lo deseaba, lo necesitaba tanto, e incluso su queridísimo hermano le había aconsejado que solo debería soltarse. Y sabía que tenía razón.
En cuanto dejaba sus inseguridades atrás y comenzaba a repartir palabras como llegaban a su mente, su pluma era capaz de exponer sus ideas, de describir las imágenes mentales que se había formulado y de esa manera podía despertar sentimientos en las personas que ni él era capaz de imaginar.
Era increíble, casi mágica la manera en la que las palabras lograban llevar  mensajes de una mente a otra, transmitir sentimientos de un alma a otra, viajar de un universo a otro… Sin embargo, su seguridad se había marchado junto a la persona que le había inspirado en un principio después de una serie de eventos desafortunados, por lo que soltarse de nuevo le resultaba realmente difícil.
Y era injusto, muy injusto, porque aquél ser se había ido y hecho una nueva vida y seguía repartiendo letras y sentimientos sin culpa alguna, pero él no, simplemente no había superado esa parte de sí mismo, aquella que no podía exponerse del todo.
Tenía un pequeño defecto; tenía “alma de escritor” como solía llamarle. Su pluma era fiel a sus pensamientos; no podía expresarse a medias. Cuando escribía se volvía incapaz de ocultar algo, ni sus pensamientos más tenaces ni sus temores más profundos y podía leerse como un libro abierto.
Pero se había detenido, no porque necesitara una musa que le inspirara (aunque aquello tampoco le molestaría), o a alguien especial a quien dedicarle sus palabras. La razón por la que su pluma se había detenido era porque él se había negado a transmitir lo que en su mente pasaba cuando las cosas dejaron de funcionar y los tiempos de alegría se habían desvanecido. Cuando todo se volvió confuso y la tristeza le invadió el alma dejó su pluma de lado, porque no le gustaba entintar las desdichas y transmitir lo que no era digno de mantenerse eterno en la memoria.
Pero los recuerdos se sentían diferentes esa noche. Ya no dolían, mejor aún, le eran indiferentes. Y no se había dado cuenta de cuando exactamente habían cambiado las cosas; se había asegurado de mantenerse lo suficiente ocupado cuando todo se salió de su control que no tuvo tiempo para pensar en lo que le hacía daño, ni se había detenido a reflexionar sobre lo ocurrido.
No se había permitido trasnochar en el balcón, ni observado el cielo hasta entonces. De haberlo hecho quizás se habría dado cuenta de que en realidad ya había superado a las personas y los momentos que le habían cortado las alas de la inspiración y lo habían orillado a negarse escribir, que ya no existía razón que se lo impidiera más que él mismo.
Vaya, hasta se sentía un poco tonto de darse cuenta de todo ello hasta esas alturas, pero al mismo tiempo se sentía feliz de saber que había pasado un página que por mucho tiempo temió dejar en el olvido como si se tratase de un pecado, cuando en realidad solo lo mantenía atado a un pasado que no tenía remedio.
Pero eso ya era historia antigua y lo sabía porque estaba disfrutando mucho el silencio a su alrededor sin pensamientos ni recuerdos que lo atormentaran.
Si no fuera porque la temperatura había descendido, se hubiera quedado observando el cielo por más tiempo, pero para su sorpresa las estrellas habían desparecido casi en su totalidad y en su lugar podía ver la tenue luz del amanecer apareciendo a lo lejos.
Esa escena logró que en su rostro se dibujara una genuina sonrisa. Ya era un nuevo día, literal y metafóricamente hablando.  
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alwaysbusyguy · 8 months
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Caminos
Hay caminos que es mejor recorrer solos, sin compañías que distraigan la atención. Momentos en los que se debe avanzar en silencio, donde la única voz que se escuche sea la del interior.
Solo cuando no hay nadie mirando el ser humano es realmente honestos consigo mismo. Solo así nos podemos concentrar en lo que realmente sentimos, o en su caso, ya no sentimos.
Es por eso que se deben recorrer más senderos a solas, debatir sobre las acciones, reflexionar sobre las decisiones y enfrentar sin temor las dudas.
Porque casi siempre se tienen las respuestas a las inquietudes que "no sabemos" resolver. Suele pasar que lo sabemos, pero no nos agrada la manera en la que debemos proceder.
Y la compañía puede ayudar, sí, pero también distraer la misión de aclarar el panorama. Sobre todo cuando no es la correcta y pretende manipular las decisiones ya tomadas.
Así que a veces hay que tomar las maletas, elegir un destino y evitar dar explicaciones a cualquiera.
A veces solo basta prestar atención a la propia voz y darse cuenta de que siempre es y será la mejor consejera.
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alwaysbusyguy · 8 months
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Cerrar un ciclo
Hay que saber cuándo una etapa llega a su fin. Cuando insistimos en alargarla más de lo necesario, perdemos la alegría y el sentido de las otras etapas que tenemos que vivir.
Poner fin a un ciclo, cerrar puertas, concluir capítulos… no importa el nombre que le demos, lo importante es dejar en el pasado los momentos de la vida que ya terminaron.
¿Me han despedido del trabajo? ¿Ha terminado una relación? ¿Me he ido de casa de mis padres? ¿Me he ido a vivir a otro país? Esa amistad que tanto tiempo cultivé, ¿ha desaparecido sin más?
Puedes pasar mucho tiempo preguntándote por qué ha sucedido algo así. Puedes decirte a ti mismo que no darás un paso más hasta entender por qué motivo esas cosas que eran tan importantes en tu vida se convirtieron de repente en polvo.
Pero una actitud así supondrá un desgaste inmenso para todos: tu país, tu cónyuge, tus amigos, tus hijos, tu hermano; todos ellos estarán cerrando ciclos, pasando página, mirando hacia delante, y todos sufrirán al verte paralizado.
Nadie puede estar al mismo tiempo en el presente y en el pasado, ni siquiera al intentar entender lo sucedido. El pasado no volverá: no podemos ser eternamente niños, adolescentes tardíos, hijos con sentimientos de culpa o de rencor hacia sus padres, amantes que reviven día y noche su relación con una persona que se fue para no volver.
Todo pasa, y lo mejor que podemos hacer es no volver a ello. Por eso es tan importante (¡por muy doloroso que sea!) destruir recuerdos, cambiar de casa, donar cosas a los orfanatos, vender o dar nuestros libros. Todo en este mundo visible es una manifestación del mundo invisible, de lo que sucede en nuestro corazón. Deshacerse de ciertos recuerdos significa también dejar libre un espacio para que otras cosas ocupen su lugar.
Dejar para siempre. Soltar. Desprenderse. Nadie en esta vida juega con cartas marcadas. Por ello, unas veces ganamos y otras, perdemos. No esperes que te devuelvan lo que has dado, no esperes que reconozcan tu esfuerzo, que descubran tu genio, que entiendan tu amor.
Deja de encender tu televisión emocional y ver siempre el mismo programa, en el que se muestra cómo has sufrido con determinada pérdida: eso no hace sino envenenarte.
Nada hay más peligroso que las rupturas amorosas que no aceptamos, las promesas de empleo que no tienen fecha de inicio, las decisiones siempre pospuestas en espera del “momento ideal”. Antes de comenzar un nuevo capítulo hay que terminar el anterior: repítete a ti mismo que lo pasado no volverá jamás. Recuerda que hubo una época en que podías vivir sin aquello, sin aquella persona, que no hay nada insustituible, que un hábito no es una necesidad.
Puede parecer obvio, puede que sea difícil, pero es muy importante.
Cerrar ciclos. No por orgullo, ni por incapacidad, ni por soberbia, sino porque, sencillamente, aquello ya no encaja en tu vida. Cierra la puerta, cambia el disco, limpia la casa, sacude el polvo. Deja de ser quien eras, y transfórmate en el que eres. -
—PAULO COELHO
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