Te amo, aunque no somos ni seremos.
Pero estuvimos y fuimos.
Fuimos las personas correctas, con la vida equivocada.
Fuimos la forma más bonita y triste que tuvo la vida, para echarnos en cara, que no se puede tener todo.
Lo sé y lo sabes.
Eres mi amor para otra vida, mi amor para otra ocasión.
Llegaste justo a tiempo y aún así fue demasiado tarde.
Me entendías más que nadie, y no existía alguien, que te quisiera más que yo.
Siempre he creído que todo es posible y que lo imposible, sólo tarda un poquito más.
Pero querido amor imposible, contigo esa teoría está de más.
A veces siento que fuimos impuntuales, o que el destino se ha encaprichado tanto con nosotros, que decidió ponernos un minuto tarde…
Tal vez una persona antes o una persona después.
FUIMOS TODO Y NO FUIMOS NADA
775 notes
·
View notes
Castigo.
Hice sufrir demasiado a la persona que más me amo y que amé más que a nadie, es un pecado llegar a cometer este tipo de reacciones, es lo peor que puedes llegar a hacer en el mundo y en toda tu vida.
Gracias a ello la perdí, perdí una única fuente de amor, apoyo y dulzura, una dosis en mi vida que fue tan normal, que cuando desapareció me sentí en un profundo caos. Me castigo día tras día por haberte perdido, no hay día en que piense "¿Cómo pudiste perderla?". No me trato con amabilidad, no me trato a mi mismo con amor o algo de ternura, todo ello ya me lo diste y ahora que lo perdí yo solo, no merezco ni un poco de perdón por el daño que te hice.
No soy una persona perfecta, di lo mejor de mi para hacerte feliz, pero no te valoré como debía en uno que otro aspecto y eso te lastimó, no fuiste la indicada porque mi ser se sentía como el enemigo alado tuyo, no me nacían las cosas que querías porque una parte de mi sentía que algo podía hacer mal, no te di un ramo de rosas por falta de tiempo y falta de interés, y ahora que veo flores solo pienso en ti, esperando indirectamente a que un día te de flores y así ver tu sonrisa brillantemente hermosa.
Quizás por eso es que estoy dejandome cicatrices, el dolor que siento tras hacerme una herida me recuerda lo que te hice sufrir, es un castigo que me estoy poniendo desde hace días, ahora mismo no es algo que merezca el simple hecho de sentirme cómodo, quizás por eso mi espalda me lo recuerda cada vez que estoy parado o sentado, estudiando o escuchando música, que es la única vía de sentir paz, ahora también se volvió una forma de recordarme lo que hice mal, lo que no debo olvidar, lo que debo vivir por haber cometido todos los errores que cometí.
El castigo por haber cometido el pecado vil de haber hecho daño a la única persona que me hizo feliz todo este tiempo de la vida sin sentido e inútil, mi castigo se vuelve digna para alguien como yo.
- Un fragmento de sol muerto.
🌩️
25 notes
·
View notes
Ocean Eyes: Hiccup (Parte I)
A veces pienso que cuando nos volvemos cercanos a alguien, una parte de nosotros se vuelve de esa persona. Como si se dividiera de nuestro ser y se colocara una de sus prendas distintivas. Y así nuestro interior es un cúmulo de muchas fracciones con distintos looks, unas más pequeñas y otras más grandes, según la proximidad y la relevancia que cada persona tenga o haya tenido en nuestra existencia.
El día de ayer, durante un momento de intensa reflexión (o debilidad), me surgió la curiosidad impulsiva de saber qué había sucedido con cierta persona que fue de gran relevancia en mi pasado. Para efectos descriptivos y de privacidad, lo llamaremos “Hiccup”, ya que sí, es idéntico al personaje.
Ahora no quisiera entrar en detalle sobre cómo comenzó todo o cómo sucedió, pero diré que se trataba de un chico de enormes y brillantes ojos azules originario del norte de Italia, que amaba la fotografía y los viajes por el mundo tanto como yo. Era extremadamente inteligente e interesante, y fue mi mayor adoración durante los años 2018 y 2019.
Hiccup y yo comenzamos siendo mejores amigos, para después confesar que en algún punto habíamos desarrollado sentimientos más fuertes y atracción el uno por el otro. Honestamente no estoy segura de que se haya tratado de amor, sin embargo, jamás en la vida había sentido tanta proximidad y entendimiento hacia una persona.
Y es que justo lo que le dio tanta relevancia a este suceso, es el grado tan elevado de compatibilidad entre nosotros. Teníamos un balance extraordinario de similitudes y diferencias, veíamos al mundo con miradas parecidas, y nuestro proceso de razonamiento era casi igual.
Compartíamos el mismo humor, la misma energía, la misma intensidad. Nuestras vivencias eran similares, nuestros pensamientos encajaban entre sí la mayor parte del tiempo, teníamos inseguridades y demonios parecidos, y al mismo tiempo otros totalmente opuestos que se tranquilizaban con la presencia y el apoyo mutuo.
Con él podía hablar de lo que fuera como fuera.. podía ser débil o invencible, nerd, awkward, tímida, antisocial, argumentativa, ruidosa, incallable.. podía llorar, podía reír a carcajadas, podía estar ardiendo de rabia, podía dudar del mundo o tomarlo con fuerza.. y simplemente todo estaría bien. Hablar con él se sentía bien en todo momento, se sentía cómodo, sin juicios, sin piedras en el camino, sin miedos, sin cuestiones. Él siempre tenía algo qué decir, algo acertado, algo interesante, y nuestras conversaciones eran infinitas.
Cada palabra fluía como un río de agua fresca por la mañana.
Jamás me había sentido tan bien con una persona, tan comprendida, tan libre de ser yo misma en cada una de mis facetas, en cada momento, en cada estado de ánimo. Estar con él nunca era desgastante, nunca era agotador, nunca era tedioso. Al contrario, era seguridad, compañía, libertad, diversión, frescura.. era estimulación mental interminable.
Nunca nos deteníamos, hablábamos de todo y de nada de forma continua. Compartíamos cada detalle de nuestras vidas y nos apoyábamos en cada paso, sin importar lo cerca o lo lejos que nos encontráramos. Sabíamos todo el uno del otro, explicábamos nuestros argumentos informados y tomábamos decisiones cotidianas juntos.
Creábamos estrategias para superar las cosas de la vida que nos atemorizaban.. desde cómo sobrevivir una reunión de trabajo con colegas incómodos, hasta cuál era el mejor regalo para dar a un familiar en su cumpleaños, o qué modelo de reloj de mano era el más adecuado según sus características y precio. Siempre que uno dudaba, el otro estaba ahí junto para tomar su mano, ayudarle a encontrar la respuesta, y darle fortaleza en el camino.
Amaba compartir mi vida con él, y adoraba que él compartiera la suya conmigo.
Nuestras discusiones nunca lo eran, más bien se trataban de momentos en los que dábamos nuestros puntos de vista, nuestro pensar y sentir, nuestras opiniones.. que al final terminaban complementándose, siendo en realidad la mitad exacta de un todo.
Tanta era nuestra complementariedad y compatibilidad, que él mismo decía que éramos un equipo perfecto. Su color preferido era el rojo y el mío el azul.. cálido y frío, ambos primarios, conceptualmente opuestos en la rueda de color.
Éramos un transformer o un mecha, donde yo era el cerebro y él era el corazón. Yo era selectiva, él minimalista. Ambos perfeccionistas. Y juntos hacíamos que el robot gigante funcionara con eficiencia. Porque justamente, nuestra principal diferencia era la penúltima letra de nuestras personalidades.. INTJ e INFJ. Mi T que me hace decidir con base en la lógica, y su F que lo hace decidir con base en el sentimiento.
Yo era su mente y él mi corazón.
Continuará..
7 notes
·
View notes
"Te amo, aunque no somos ni seremos"
Pero estuvimos y fuimos.
Fuimos las personas correctas con la vida equivocada.
Fuimos la forma más bonita y triste,
que tuvo la vida, para echarnos en cara
que no se puede tener todo.
Lo sé y lo sabes.
Eres mi amor para otra vida, mi amor para otra ocasión.
Llegaste demasiado pronto, Y aún así demasiado tarde.
Me entendías más que a nadie, Y no existía alguien, que te quisiera más que yo.
Siempre he creído que todo es posible,
y que lo imposible.... Solo tarda un poquito más.
Pero querido amor imposible, contigo esa teoría está de mas.
A veces siento que fuimos impuntuales, o que el destino se haya encaprichado tanto
Con nosotros.
Que decidió ponernos un minuto tarde.
Tal vez una persona antes, o una persona después.
"Fuimos todo y no fuimos nada"
~autor desconocido.
119 notes
·
View notes