Tumgik
#Esta es nuestra casa
elbiotipo · 1 year
Text
O sea, estamos en una situación muy delicada. El candidato de extrema derecha en Argentina directamente quiere dolarizar la economía. Sería una pérdida total de soberanía económica, una vez que te dolarizás, no se vuelve para atrás. No sé si constitucionalmente sea siquiera posible, y seguro va a haber mucho rechazo, pero Milei es un creyente ferviente en sus ideas, es fanático en serio, así que va a tratar, aunque sea de modo de facto, de dolarizar el país, más de lo que ya está.
Lula acaba de tender un puente importantísimo para la independencia económica de Argentina y de toda la región. Si Alberto y Massa no lo agarran, sinceramente son unos pelotudos. Esto tiene que salir lo más rápido posible. Un comunicado que diga "sí, estamos trabajando en esto" en vez de "ehhh sí vamos a ver, pasito a pasito", ya sería tremenda señal. No es tiempo de fallar.
15 notes · View notes
Lo que sucede cuando ni dios sabe que hacer con sus cosas y sus casas (Nuestras)...¡Lapsus!
Tumblr media
Las iglesias en ruinas de Filadelfia; Las fotografías fueron tomadas por Matthew Christopher, fotógrafo y conferencista que trabaja en la ciudad, quien ha hecho campaña para recaudar más de $45,000 para preservarlas y mantenerlas.
4 notes · View notes
leotavarezalcalde · 6 months
Text
Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media Tumblr media
Unidos contra el Dengue: Protejamos Nuestra Comunidad
Amigos y amigas de Baitoa,
En esta temporada de lluvias, el Dengue se convierte en una amenaza real para nuestra comunidad. Quiero recordarles a todos la importancia de estar alerta y tomar medidas preventivas para protegernos a nosotros mismos y a nuestras familias.
Eliminemos Criaderos: Revisemos nuestros hogares y patios para eliminar cualquier lugar donde el mosquito Aedes aegypti, transmisor del Dengue, pueda criar. Aguas estancadas en recipientes, neumáticos viejos y otros objetos pueden convertirse en criaderos.
Usar Repelente: Utilicemos repelentes de mosquitos para protegernos cuando estemos al aire libre, especialmente durante las horas del amanecer y el atardecer, cuando los mosquitos son más activos.
Ropa Protectora: Si es posible, usemos ropa de manga larga y pantalones largos para reducir la exposición de nuestra piel a las picaduras de mosquitos.
Mantengamos Nuestras Casas Limpias: Mantengamos nuestras casas limpias y ordenadas. Un ambiente limpio es menos atractivo para los mosquitos.
Educación y Concientización: Compartamos esta información con nuestros vecinos y amigos. La educación es nuestra mejor herramienta contra el Dengue.
Juntos, podemos detener la propagación del Dengue en Baitoa. Hagamos nuestra parte para mantener nuestra comunidad segura y saludable. Contamos con su apoyo y colaboración en esta lucha.
#Dengue #Prevención #ComunidadUnida #BaitoaSaludable #LeonardoTavarezComprometido
1 note · View note
batanriotus · 1 year
Text
Tumblr media Tumblr media
Ya tenemos presente estas imágenes primaverales de nuestras casas rurales que tanto esperamos cuando llega el mes de Marzo
Prepara una escapada en una casa para esta primavera.
1 note · View note
myillicitaffair · 2 months
Text
Strawberries & cigarettes | Esteban Kukuriczka
Tumblr media
Sumario: llamar a tu ex en la mitad de la noche jamás podrá ser buena idea, a menos de que se trate de él, claro.
Advertencias: sexo explícito (+18), masturbación, dirty talking, degradación, cigarrillos y engaños.
Créditos: el fic está basado en la canción de troye sivan y las fotos utilizadas para el collage las saqué de pinterest.
Nota del autor: este mi primer request, gracias por pedirlo, amoor xx
2k words
La ciudad se alza orgullosa frente a mis ojos, los edificios brillando en todo su esplendor. Un limitado arsenal de vehículos se pasea por las calles; desplegada en una silla de mimbre, me pregunto su destino.
¿A dónde se dirigen a las 2 de la mañana?
La bulliciosa metrópoli parece tomarse un respiro a estas horas de la madrugada, logrando, por consiguiente, relajar a los escasos espectadores de su tranquilidad.
Jugueteo con el cigarrillo entre mis dedos, notándolo desperdigarse gracias a la brisa otoñal. Es un mal hábito, lo sé, pero es de los pocos resabios de su presencia que aún conservo, una de las pocas garantías que aseveran su paso por mi vida.
Lo introduzco en mi boca, inhalando el humo profundamente para luego exhalarlo. Degusto sus notas amargas en mis papilas gustativas, como casi saboreando sus labios…
Esteban y yo habíamos terminado en buenos términos; él vivía en capital y yo demasiado lejos, ahí fue cuando descubrimos que la relación a distancia simplemente no funcionaba para nosotros.
Después su carrera como actor despegó, yo senté cabeza con un viejo novio de la infancia- inofensivo, predecible- y en nuestras vidas ya no cabía lugar para el otro. Incluso ahora, cohabitando en la misma ciudad, nuestros rumbos se habían desviado del otro.
Tecleo los números de su teléfono de memoria, grabados a fuego en mi retina.
Soy perfectamente consciente de las horribles consecuencias que mis acciones podrían conllevar, pero nada de eso cobra importancia cuando la línea se interrumpe con su contestación, su voz dormida aguardando al otro lado de la llamada.
“¿Hola?”- Vocifera, ronco y un tanto desorientado.
Mi pulso se desestabiliza al escucharlo hablar luego de tanto tiempo, recordando de golpe los matices en su tono. Me lo imagino tumbado en su recámara, durmiendo en posición fetal, como siempre, la almohada abrazada entre su fuerte contextura.
“¿Tebi, te desperté?”- Mi respuesta se oye torpe ante el nerviosismo. ¡Es la madrugada, claro que lo desperté!
“Nena, ¿sos vos?”- Pregunta, esta vez un tanto más despierto y despabilado.
Aquel viejo apodo se desliza por sus labios sin siquiera notarlo, sin causarle ningún esfuerzo. Sin embargo, a mi me destruye, me obliga a rebobinar el tiempo y fundirme en los agridulces recuerdos.
“¡Si! Perdón que te llame tan tarde”- Me disculpo atropelladamente, de pasada nada más- “Yo se que no hablamos hace meses.”
Me arrepiento de mis palabras en el segundo en el que las formulo, mis miedos se solidifican ante mis ojos; el temor a parecer necesitada, débil, obsesiva incluso.
Más allá de ello, se que fue la decisión correcta. Es en noches como estas, solitarias y sin una estrella parpadeando en el cielo, en que más extraño su luz, la que jamás fallaba en brindar sin pretensiones.
Un par de lagrimas fugaces atentan mis mejillas, derrumbando por completo el sereno revestimiento que tanto me esforcé en construir.
“¿Estás bien? ¿Qué pasó?”- Cuestiona, todo en su actitud delatando una reciente preocupación. Puedo oír el rechinar de las bases de su cama, evidenciando su brusca reacción, la fricción contra las sábanas al enderezar su espalda.
“Si si, pero ¿Podes pasarte por casa?”- Propongo, más temblorosa de lo que me gustaría.
Agradezco el soporte que el asiento me proporciona, tal vez sin este, mis piernas hubiesen cedido ante la ansiedad.
Espero paciente al otro lado de la convocatoria, siendo testigo de su respiración acompasada, como sopesando mis palabras.
“Estoy allá en 15 minutos, máximo.”- Confirma, irguiéndose para emprender camino.
“Esteban”- Llamo su atención, provocando que sus extremidades se aquieten- “Muchas gracias…”
Una sonrisa brota de su expresión, dándole lugar a una leve risa, que escucho desde la quietud de mi balcón. Sin notarlo, mis comisuras imitan su gesto.
“No hay de qué, chiquita, ¡esperame que ya llego!”- Asegura, dando por concluida la comunicación.
Un poco más distendida, permanezco quieta en mi lugar, moviendo mis anestesiados dedos solo para fumar pausadamente.
Una pequeña expectativa comienza a burbujear en mi interior; con la simple idea de volver a estar en su presencia, mi corazón descontrolado golpetea mi caja torácica, como tratando de huir de sus confinamientos.
¿Cuánto tiempo habré permanecido así? Genuinamente, no lo sé, pero lo suficiente para que él arribe.
Mis ensoñaciones se ven interrumpidas por el timbre resonando en mi departamento, generando temblores en toda la superficie.
Salto de mi butaca impacientemente, avanzando con agilidad hasta el recibidor. Del otro lado de la puerta, lo descubro enfrentándome, jugueteando con las llaves entre sus dedos. Sus orbes se pasean por mi persona presurosamente, por lo que autorizo a los propios a hacer lo mismo.
A pesar de nuestro breve tiempo separados, él permaneció prácticamente intocado; su postura relajada, sus cabellos alocados y desparramados en todas direcciones… “tal vez dejó crecerse la barba”, filosofo al chequearlo.
Sin más premeditaciones, me arrojo a sus brazos entreabiertos, los cuales me reciben gustosamente. Escondo mi nariz en su cuello, inhalando aquella familiar fragancia, perdiéndome en su calor corporal engulléndome por completo. Se toma la libertad de posar su pera contra la corona de mi cabeza.
Contra mis propios deseos, me despego de su torso, alejándome levemente para guiarlo adentro. Estiro mi mano, aguardando que la tome para adentrarnos en el living.
Una vez allí, esquivo la pequeña mesa ratona para dirigirlo hacia el sillón, donde se sienta sin mediar palabra.
Allí, parada en la sala de estar, mis pensamientos giran en su torno, envalentonándose con cada segundo que transcurre. Por un impulso indescifrable, me apropincuo a su espacio personal, rompiendo dicha barrera.
Acomodo mis piernas de modo que las suyas queden entre medio, para luego sentarme sobre sus templados muslos, regodeándome en la sensación de su contacto físico. Mi boca busca la suya en un movimiento desesperado, moviendo mis labios contra los suyos con una inesperada urgencia.
Me inunda la decepción al sentirlo separar nuestros rostros. La confusión tiñe su semblante, mientras investiga la escena que se le presenta.
“¿Y tu novio?”- Consulta, penetrándome con el fulgor de su mirada.
Abrazo su nuca entre mis brazos, atrayéndolo nuevamente hacia mí. Una mano se desliza hasta juguetear con el cuello de su remera, señalizando mi deseo de arrancársela.
“No está en casa”- Ronroneo en su oído, serpenteando mis manos por sus hombros con delicadeza- “No pienses en él, amor, concéntrate en mí.”
Comienzo a despilfarrar besos por su cuello, succionando su sensible piel hasta dejar marcas, clavándole los dientes juguetonamente para luego chupar el escozor. Saboreo su colonia en mi lengua y me encuentro adicta a su sabor amaderado, incapaz de separarme. Una necesidad primal se cuece en mi interior al presenciar su tez brillante con mi saliva.
“Esto está mal, nena”- Gime profundamente, echando su cabeza hacia atrás y concediéndome más acceso.
Me cuelo entre nuestras siluetas, acariciando su agitado abdomen, el cual se estremece ante mi toque. Batallo con el botón de su pantalón hasta desabrocharlo, sin parafernalias desciendo el cierre y descanso mi palma en su entrepierna.
“Decime que queres parar y yo lo hago”- Respiro, sobre la ardiente piel de sus hombros. Aún estática sobre su ropa interior.
“Sabes que no te voy a pedir que pares”- Murmura pesadamente, levantando sus caderas hasta rozarse con mis dedos. Evacua un sollozo de alivio.
Como cobrando vida, deslizo mis yemas por su longitud, generando una creciente erección. Masturbo su miembro sobre el calzoncillo a un ritmo agonizantemente lento.
“Entonces no te niegues, Tebi”- Respondo, inmiscuyéndome en la tela para palparlo piel a piel y acelerar mis atenciones.
Sus gemidos llenan el aire, complaciéndome de sobre manera y excitándome más de lo que creía posible. Buscando desesperadamente calmar el ardor, me froto contra la tela del pantalón, escasas barreras separándolo de mi centro.
Sus músculos se tensan bajo mi coño, devolviéndome placer al golpear mi clítoris al unísono de mis caricias en su polla. Mis labios se entreabren ante la fricción, escurriendo murmullos de regocijo por mis cuerdas vocales.
“Al final, que puta que resultaste”- Se burla cínicamente, enjaulando mi cintura en su agarre para presionarme más contra él.
Subo el volumen de mis quejidos ante la nueva intensidad de sus acciones, la degradación dejándome sin raciocinio. Mi torso completamente presionado contra el suyo, mis manos aún tocándolo deprisa.
Utilizando su fuerza, me recuesta en el sillón y se despega de mí, sentándose en el otro costado de este.
“Quiero que me muestres como te estuviste tocando, pensando en mí, mientras tu noviecito dormía a tu lado”- Demanda, su vista fija en mi mientras comienza a palparse.
“Mi amor, por favor”- Ruego, un tanto agobiada ante las llamaradas quemando mi vientre bajo.
Observo sus movimientos con atención, como sus yemas rozan su glande perezosamente, excitándose aún más. Una gota de sudor descendiendo por su cuello ante el esfuerzo físico, escondiéndose bajo su camiseta de algodón.
Bajo mis shorts aun observando la imagen frente a mí, aventándolos al suelo junto con mi blusa. Recubierta únicamente por mi ropa interior, asciendo hasta mi busto, pellizcando mis pezones hasta formar duros picos entre mis dedos. Sus penetrantes orbes persiguen cada uno de mis movimientos, sintonizando los suyos para que ambos nos movamos al mismo ritmo.
“Tu noviecito no te sabe satisfacer, por eso tuviste que llamarme, ¿o no?”- Se mofa al presenciar la impaciencia que me consume, como me apresuro a infiltrarme por mis bragas para sobar mi punto mas sensible con urgencia.
“Nadie me coge como vos, Tebi…”- Susurro, extraviada ante el renovado éxtasis.
Fantaseo con su toque entre mis labios, desparramando mi humedad, saboreándola desenfadadamente, con los ojos cerrados y la lengua paseándose por sus propios dígitos.
Sin embargo, debo conformarme con la mediocridad de la autovalidez, hasta que decida tomar piedad de mis intentos en vano de remplazar sus atenciones.
“No doy más, necesito que te corras conmigo, mi amor”- Pide al sentir su orgasmo aproximarse, ahora follando su propio puño con premura.
Al ver su estado de frenesí descontrolado, decido avivar mis caricias a mis zonas intimas, introduciendo mis dedos en mi apretado agujero hasta notar que mi estomago empieza a tensarse.
El ambiente transluce nuestros inminentes apogeos con los suspiros que desangran nuestras gargantas, el sucio sonido de humedad encontrada por extremidades y suplicas al aire, con un destinatario en concreto.
Acerca su temblorosa complexión a la mía, atisbando mi muñeca moverse al compás de los bombeos en su longitud y arrimándose a mis piernas abiertas. Ante un sollozo particularmente estridente de su parte, despierto de mi ensimismamiento y lo acerco a partir de sus caderas en erráticos movimientos.
“Encima de mí, por favor, ¡correte encima de mí!”- Imploro, aturdida por las oleadas de placer poseyéndome por completo.
Suelta un grave gruñido seguido de improperios al momento de llegar a la culminación de la satisfacción, depositando cuerdas infinitas de semen blanco sobre mi meciente pecho. Su excitación comienza a chorrear por mi vientre, agrupándose en mi ombligo para continuar su descenso pausado.
Con tal candencia rodeando los actos desplegados, logro abandonarme al pasmo de la conclusión con un arrollador orgasmo; mi coño apretando mis propios dedos, deseando que se aniden allí, mi cuerpo gozando violentos espasmos, mi visión jamás partiendo de las farolas apuntadas en mi dirección.
“Muy bien, chiquita, siempre tan obediente para mi”- Me alaga, estirando sus yemas para recoger unas resbalantes gotas de semen y empotrarlas en mi boca entreabierta, indicándome tácitamente mis propias acciones.
Mi lengua recorre cada uno de sus surcos y recovecos, aspirando casi instantáneamente su salada carga, como si de un codiciado elixir se tratase.
“Ahora vas a dejar que te coja hasta que no puedas ni caminar, hasta que te olvides incluso de su nombre ¿si bebita?”- Propone sin remover sus dígitos de mi cavidad, sus crudas palabras contrastando con la suavidad de sus manos en mí.
Asiento frenéticamente, ahuecando mis mejillas para lograr tomarlo aún más profundo, notando un estremecimiento recorrer mi medula espinal ante la anticipación de una larga noche de pasión.
Aclarar que cumplió con sus promesas al pie de la letra sería, francamente, caer en un vago eufemismo…
236 notes · View notes
koishhiteru · 3 months
Note
Hola!!! Podrías hacer una historia de enzo comiendo con los padres de la reader? Muchísimas gracias ♡
Tumblr media
౨ৎ EATING DINNER
warnings: ninguno, solo fluff ♡
n/a: muchas gracias por dejar tu request! me ha parecido un escenario muy tierno. espero que te guste.
Tumblr media
Enzo y tú estabais frente a la puerta de la casa de tu infancia, esperando a que tus padres os abran y podáis pasar. El peli negro te agarraba la mano con fuerza, estaba nervioso de volverse a ver con tus padres. Tú giraste la cabeza y dejaste un pequeño beso en su mandíbula para tranquilizarlo.
No pasaron más de cinco segundos en cuanto tu madre abrió la puerta, con un delantal que indicaba que estaba haciendo la comida.
“¡Cariño!” exclamó al verte y no dudó en abrazarte, tú correspondiste al abrazo con una gran sonrisa.
“Hola, mamá” saludaste de vuelta mientras te separabas del abrazo y entrabas a la casa, esperando a que Enzo también lo hiciera.
“Hola, señora” dijo tu novio mientras pasaba por la puerta y le daba dos besos a tu madre.
Tú madre le saludó con una sonrisa y acto seguido se fue a la cocina para terminar la lasaña que estaba haciendo, fuisteis al salón y os encontrasteis a tu padre viendo la televisión.
“Hola, papá” saludaste dándole un abrazo también y él dejó un beso en tu cabeza.
Tu padre se levantó del sofá y fue a saludar a Enzo con un apretón de manos. “Hola muchacho” le dijo a lo que tu novio solo asintió con una pequeña sonrisa.
Os sentasteis los tres en el sofá, tú en el medio, para esperar a que la comida esté preparada.
“¿Qué estás viendo?” le preguntaste a tu padre como intento de sacar conversación.
“Ah, una antigua serie que veía yo de pequeño” contestó sin mirarte, por lo que solo asentiste y recostaste tu cabeza en el hombro de Enzo.
Pasasteis allí un rato entre charlas cortas y triviales hasta que tu madre os avisó de que la comida ya estaba lista. Fuisteis a sentaros en la mesa, Enzo y tú sentados frente a tus padres.
La comida empezó con las preguntas típicas que te hacen tus padres, y tú las respondías alegremente. O al menos así era hasta que tú madre le hizo una pregunta a Enzo.
“Y bueno, Enzo, ¿cuando le vas a pedir matrimonio a nuestra hija?” casi te atragantas con el agua al escuchar la pregunta tan directa que hizo tu madre y pudiste ver cómo Enzo se ponía un poco colorado.
“¡Pero mamá! ¿Cómo le vas a preguntar eso?” reclamaste antes de que tu novio pudiera responder.
“¿Qué pasa? Ya lleváis cinco años de relación” se excusó la señora con total normalidad.
“Sí, ¿y para cuando los hijos? Yo no me quiero quedar sin nietos” agregó tu padre, tirando más leña al fuego.
Suspiraste y cerraste los ojos, tus padres siempre se las manejaban para avergonzarte. Miraste de reojo a Enzo y viste como él seguía comiendo mientras intentaba ocultar una risa, antes de que pudieras echarle la bronca a tus padres por poneros en un aprieto, tu novio contestó por ti.
“Bueno, no puedo deciros si le pediré matrimonio ya que eso es un secreto” dijo el guiñando un ojo, tú lo miraste sorprendida. “Y sobre los hijos, eso es algo que debemos de hablar más adelante, ¿no crees?” preguntó esta vez dirigiéndose a ti.
Estabas sorprendida por sus respuestas y lo bien que supo manejar la situación, no podías parar de pensar en lo que él había dicho, ¿de verdad te iba a proponer matrimonio?
No saliste de tu trance hasta que Enzo no colocó su mano en tu muslo disimuladamente para que contestaras.
“…Sí, exacto, eso es algo que se hablará en el futuro” respondiste sonriendo nerviosamente.
Después de ese momento de incomodidad que pasaste, la comida se pasó entre risas y conversaciones triviales.
Al terminar de comer, os tomasteis un café y decidisteis jugar a algún juego de mesa para pasar el rato. Sin duda comer con tus padres no era tan difícil como Enzo se imaginaba.
Tumblr media
325 notes · View notes
fragmentos-literarixs · 3 months
Text
Esta noche es mágica, todo lo que me rodea ha desaparecido y sólo nos encontramos tú y yo, donde nuestros cuerpos danzan y a la vez flotan. Cada caricia es electrizante, cada beso provoca mariposas en mi estómago, y cada movimiento de placer me lleva al cielo y me permite tocar las estrellas.
Quizá estoy loca por sentirte aquí cerca a pesar de que estás lejos y en diferentes horas, pero cada sensación y cada sentimiento me hacen creer y aferrarme a ti, y a lo nuestro.
¿Cómo fue que llegamos aquí, amor? ¿Y por qué llegaste de esta manera a mi vida? Si supieras que antes de tu llegada todo solía ser silencioso, triste y gris, pero entonces te vi, supe que estaba en tu mira, y desde ese momento comenzó nuestra historia de amor que llenó de un hermoso color azul casa rincón de mi existencia.
Pero la vida es terriblemente injusta, porque nos hizo coincidir para enamorarnos, pero teníamos muchas cosas en contra que no nos permitió estar como queríamos. Así que si esto es todo lo que tenemos, si sólo puedo verte pero no acercarme a ti, me quedaré justo aquí, amándote, hasta que el final venga y arrase con nosotros.
Escritos perdidos - parte 1 (30/05/2023)
— Rose Noire.
182 notes · View notes
wosohavemyheart · 4 months
Text
FALTA DE COMUNICACIÓN
Tumblr media
-Heeeyy, t/n- Me saluda alegre Mapi cuando entra en el vestuario. Solo estamos nosotras dos por ser las primeras en llegar.
-Hey, Mapi- Intento que no se note mi estado de ánimo pero es imposible.
Me mira molesta
-¿Otra vez, t/n?- Se pone las menos en la cadera.
-Supongo- Me encojo de hombros sin ganas de hablar mucho.
-Te juro que le voy a decir 4 cosas a esas dos.
-No Mapi, no- Niego sentándome para ponerme las botas
-¿Cómo que no? Por mucho que Alexia tenga entrevistas y anuncios y cosas de esas no le da derecho a descuidarte y no te digo de Ona... Que lo de ella ni siquiera es por trabajo.
Trago saliva pero no argumento nada.
-¿Hace cuanto no aparecen por casa?- Dice ahora más suavemente sentándose a mi lado.
Me agacho para atarme los cordones
-Pues Ona lleva 3 días y Alexia llevaba 2 días sin aparecer, ayer por la noche sobre las 3 llegó pero ni siquiera la vi y esta mañana cuando me he levantado ya no estaba...
-Alexia se va a enterar, por mucho que sea mi mejor amiga esto no tiene defensa...
-Me voy a fuera hasta que empiece el entreno- Le informo y sin más salgo de ahí. Necesito aire y necesito lo único que ahora mismo me entiende, el fútbol.
En el campo hay varios del personal hablando o preparando el entreno de hoy pero cuando me ven coger una pelota e irme a una portería del fondo me dejan en paz
No se cuanto tiempo me tiro sola con el balón y la portería, parecen horas, pero en algún momento alguien aparece a mi lado con otra pelota y no necesito verla para saber quién es, Alexia.
No digo nada y ella tampoco, simplemente se pasa el tiempo entre chutes y en silencio hasta que nos llama Jona
-Bien, voy a hacer parejas para que hagáis los ejercicios- Dice el entrenador
-T/n con Alexia.
Bufo sonoramente y está me escucha porque está a mi lado.
-No pensé que mi presencia te desagradara tanto- Dice suavemente con culpa.
-No me puede desagradar algo que no tengo desde hace un mes, Putellas.
Me mira tragando saliva y baja la mirada.
-Lo siento, car...- La detengo soltando un risa nasal
-No es el momento, Putellas.
-Realmente está mal la cosa- Susurra para si misma pero la alcanzó a escuchar y aprieto la mandíbula y los puños.
No es el momento de ponerme a discutir con ella, no aquí.
El entreno se basa en incomodidad aunque seguimos teniendo esa conexión con el balón y las palabras justas y necesarias para hacer nuestro trabajo.
Noto la mirada de todas encima nuestra en algún punto del entreno, sabían que algo no iba bien desde hace tiempo.
Notaba también que Ona nos miraba pero cuando la miraba a ella no podía mantenerla ni 5 segundos.
Nada más terminar el entreno me voy de ahí cambiándome en 5 minutos. No tenía ganas de que las chicas que mirarán y de estar en el mismo cuarto que mis parejas si todavía podía llamarlas así.
Al llegar a casa me quité la ropa quedando en ropa interior, puse música con el altavoz y enseguida me tiré a la piscina. Estábamos a mitad de mayo y ya hacia un calor infernal.
Necesitaba relajarme y distraerme.
Después de un rato nadando decidí tomar el sol en la colchoneta con las gafas y así estaba hasta que note movimiento. Abrí los ojos y observé a Alexia sentada en una tumbona mirándome.
Ella no sabía que estaba mirandola por las gafas así que opte por esperar.
A los pocos minutos llegó también Ona y se sentó a su lado después de besarla.
Inconsciente aprieto los labios.
Parece que la única que no está bien en la relación soy yo.
-Somos imbéciles, Ona- Suelta la capitana después de unos 10 minutos en silencio mirándome
-Lo sé- Dice esta con culpabilidad
-Lo sois- Afirmo yo haciéndome notar y levantando las gafas.
-T/n, ¿podemos hablar?- Pregunta la más baja y alzo un ceja
-¿Ahora queréis hablar? ¿Después de un mes ocupadas y haciendo como si yo no estuviera presente?
-Por favor, t/n. Hablemos- Pide la rubia.
Lo considero unos segundos y salgo del agua, al hacer esto se quedan embobadas con mi cuerpo y aunque este enfadada con ellas al menos disfruto sabiendo que el deseo y admiración no lo he perdido.
Me seco y visto rápidamente, no creo que sea una conversación para estar en ropa interior.
Vamos dentro de la casa y me siento en el sofá con Nala encima, ellas están enfrente sentadas.
-Hablar- Digo y ambas se miran.
-Lo sentimos T/n- Empieza Ona- Somos unas subnormales y nos hemos comportado como tal.
-Si, cuando soltaste lo de querer niños nos bloqueamos-Dice la mayor ahora- A mi por lo menos me pillo de improvisto y me abrume y me puse a aceptar entrevistas, fotos y todas estas cosas inconscientemente para alejarme.
-Si, a mi me pasó lo mismo pero saliendo más de la cuenta. Sé que no es excusa ni que tengamos derecho a pedir perdón pero lo sentimos T/n, de verdad.
-Hemos estado hablando de todo esto nosotras y lo sentimos de verdad. Somos idiotas.
-Así que habéis estado hablando entre vosotras. Entonces el problema puede que sea yo y no vosotras- Digo derrotada.
-No, no, cariño- Dice Alexia- Solo que no sabíamos cómo decirte esto sin hacerte daño o desilusionarte.
-Pues me habéis hecho más daño así que si me hubieseis dicho como os sentiais- Suelto una sonrisa triste apartando la mirada.
-Lo sabemos y nos sentimos realmente mal, amor- Dice Ona y ambas se sientan con cautela a mi lado.
-En una relación lo más importante es la comunicación y en una relación de tres más todavía- Digo- No podéis guardaros las cosas cuando os hacen daño. No quiero que lo nuestro sea así
-No volverá a pasar, cariño.
-No- Afirma Ona
Pongo la cabeza en el hombro de Ale y paso una mano por la cintura de Ona para acercarla.
-Si no queréis aumentar la familia no pasa nada, solo era un comentario- Susurro sintiéndome un poco culpable de haber causado el problema.
-Si queremos- Suelta la morena y me separó de ellas mirandolas desconcertada
-¿Qué?
-De eso también estuvimos hablando- Dice Ale- Aumentemos la familia- Afirma
-¿De verdad?- Pregunto sin creerlo todavía
-Si- Dicen las dos a la vez
N/A: Felices fiestas para tod@s los que podáis disfrutarlas y para los que no es así espero que todo mejore y el año que viene sea mejor ❤❤
97 notes · View notes
historiasdeldivan · 25 days
Text
"No me dejes olvidarte"
Por favor, no me dejes olvidarte, no hagas caso a mis palabras, a mi tristeza disfrazada de olvido, a mis sonrisas después de ti, a mi voz no quebrantada luego de oírte, por favor, no lo hagas, no me dejes olvidarte.
Quiero conservar los buenos recuerdos, los que no duelen, tu mano en mi mano, el calor de tu cuerpo, tus caricias, el café por las mañanas, las charlas hasta la madrugada, las risas mientras nos mirábamos a los ojos, tu espalda y mi espalda liberando mil batallas.
No me dejes olvidarte, no quiero que esta tristeza que de vez en cuando siento haga que un día quiera arrancarte de mí por completo, y ya no sepa como regresar a ti. Sé que ya no somos, ni seremos, pero quiero guardar de alguna manera el sonido de tu voz en mi memoria, en un cassette, un disquete, un cd, un usb, un vinilo... no lo sé, pero quiero que sea algo tangible, que me recuerde que existes y que estás lejos de mi daño y de todos esos verbos que hablan de dejarte ir, de olvidarte.
Haré un compilado de música que guarde todas aquellas canciones que escuchaba mientras me enamoraba de ti, de esas que nos hacían cosquillas en los huesos y nido en las tripas. No quiero sembrar odio y convertirme en esa clase de chica que nunca quise ser, de esas que hablan mal de las personas que alguna vez amaron, de las alas que alguna vez la salvaron de la muerte. No quiero sentir como desapareces, como te desvaneces día a día entre mis recuerdos y mi rutina, no quiero enmudecer lo que hiciste en mí, la persona en la que me convertiste, hubiera deseado que te quedaras, que lo nuestro nunca hubiera terminado, así no hablaría como una loca dos por tres con tus fantasmas.
Por favor, no doblegues mi alma al desprecio, a mirar tus fotos con rabia e impotencia, a ver tu persona con desdén y decepción, por favor, no lo hagas, no permitas que te olvide, que olvide los fuimos y el sonido de nuestras risas juntas.
No me dejes olvidarte, no desaparezcas por completo de las esquinas de mi casa, de la oscuridad por la noche, de mis inviernos y veranos, de las noches estrelladas, de las tardes en la que lloro por alguna razón, por favor, al menos, no te vayas de aquí, que es el único lugar en el que te puedo tener.
- Jessica González -
Tumblr media
55 notes · View notes
caostalgia · 11 months
Text
Los 20s son raros, estas en la etapa donde comienzas a trabajar, a vivir, a ser independiente.
Seamos honestos, uno empieza a serlo cuando trabaja pues siempre permanecemos bajo el yugo de los padres, de una casa, de una comida caliente al volver.
Todos estamos improvisando en este interminable mundo siempre móvil, nadie me dijo nunca que teníamos que comprar papel de baño que siempre había parecido interminable, o ese aroma a lavanda que siempre había en el closet era porque se ponían pastillas para madera.
Pero tampoco me dijeron la enorme satisfacción de un trabajo bien hecho, de comprarme todo lo que quise por mi propia cuenta.
Crecer es extraño, ser adulto es extraño.
Me encanta este mundo lleno de niños jugando a ser grandes.
Ser grandes jugando a ser niños.
¿Recuerdan lo primero que compraron con su primer sueldo? Es irrealista la felicidad que se siente.
Pero, ¿por qué nos preocupamos?
Seamos honestos, nadie sabe lo que está haciendo, solo nos queda hacer lo que nuestro instinto cree que es mejor bajo nuestras experiencias y todo lo que forma parte de nosotros.
Ser adulto es todo un performance.
-Mala poesía
256 notes · View notes
46snowfox · 15 days
Text
Diabolik Lovers Daylight Animate Tokuten:「Durmiendo junto a un★Vampiro」 [Reiji Sakamaki]
Tumblr media
Título original: 「添い寝でおやすみ★ヴァンパイア」
//Traducción pedida en Ko-fi//
Reiji: Oh… La puerta de su habitación está abierta. Aah, no sé si tiene cero sentido de supervivencia o si es simplemente descuidada… *se acerca* ¿Estará dormida? Espero que no se haya quedado dormida encima de la cama sin cubrirse con alguna manta. *entra* Está sobre la cama… y no está tapada… solo sabe causar problemas. *te cubre con una manta*. ¿Hm? Esta revista… “técnicas para cortar verduras para decorar”.
Reiji (1:07): ¿Acaso quería probar a hacer esto? Dudo que puedas hacer algo tan complicado. Hm, supongo que puedo darle una ojeada. Voy a tomar prestada tu silla *se sienta*.  ¿Hm? Vaya, tiene una nota adhesiva y hay otra en la página siguiente, a ver. Jaja… Marcó unas decoraciones bastante llamativas porque pensó que podrían gustarme. Tienes un lado bastante adorable, no me molestaría que practicáramos estos cortes. Ya puedo prever que vas a cortarte un dedo, así que será mejor que tengas a alguien a tu lado, estarás más segura que estando sola.
Reiji (2:23): Oh, ¿te desperté? ¡…! Aah… ¿No recuerdas? Antes de caer dormida estabas leyendo una revista mientras pensabas en mí, incluso estabas dejando notas en ella… Y aun así dijiste el nombre de otra persona… ¿Qué significa? Me debes una explicación. Vamos, levántate.
Reiji (3:06): Sí, soy yo, no necesitas asustarte. No te preocupes, más importante, antes dijiste el nombre de otra persona mientras estabas medio dormida. ¿Acaso estabas soñando? ¿Fue un auto-reflejo? Pues eso se me hace más raro considerando lo mucho que piensas en mí. *te muestra la revista* Tras ver esta prueba no puedes excusarte. Ya es tarde para esconderla, puesto que ya he posado mi vista en las notas que escribiste en ella. Sí, las vi. Querías practicar cómo hacer decoraciones con las verduras, ¿me equivoco? Bueno, me lo imaginaba, si lo haces bien te felicitaré, pero dudo que suceda.
Reiji (4:13): ¿Lo lograrás si practicas? Si practicas estoy seguro de que desperdiciarás ingredientes, te cortarás y dejarás la cocina hecha un desastre, no puedo imaginar un futuro pacífico en donde eso no ocurra…  Tampoco te deprimas… te aconsejaré, pero ya es demasiado tarde, hagámoslo mañana. ¿Por qué te ves insatisfecha? ¿Acaso te incomoda que te ayude?
Reiji (5:03): La dificultad de estas decoraciones es demasiado alta como para que las domines en un solo día. Sé que querías sorprenderme, pero si hubieras practicado estas técnicas te habrías llenado las manos de heridas y te habría descubierto de inmediato. ¿O acaso planeabas causarme problemas de más a propósito? Entonces recibe mi ayuda sin quejarte. Aunque si te la pasas fallando incluso conmigo entrenándote tendré que castigarte, ¿de acuerdo? Entonces, como te ves cansada va siendo hora de dormir. Asegúrate de acostarte bajo las mantas.
Reiji (5:58): Vamos, cúbrete hasta el cuello. Me quedaré a tu lado hasta que te quedes dormida. Ahora, cierra tus ojos… *se vuelve a sentar en la silla* Estaré leyendo esta revista mientras observo tu rostro dormido. ¿Te tranquiliza? Es un honor saber eso. A diferencia de ciertas personas sin disciplina yo no te atacaré ni morderé de la nada. Aunque si eso es lo que deseas, puedo hacerlo. Oh vaya, ¿te has sonrojado? Déjame ver tu expresión. *se acerca a ti*
Reiji (7:06): Fufu, buenas noches, espero que tengas espléndidos sueños *beso*. Supongo que le encargaré el resto que limpien la casa o que salgan a comprar para evitar que no interfieran en nuestras prácticas… Si nos encuentran van a causar alboroto. Oh, ya ha caído dormida, debe de haber estado agotada. Dudo que leer un libro la haya dejado tan cansada, es probable que alguien la haya usado para cumplir recados… Ah, desearía que aprendiera a decir que no. Oh, debo evitar despertarla. Todavía debo pulir los platos, será mejor que me retire. Me llevaré la revista para leerla en mi habitación.
Reiji (8:15): ¡…! Ahora sí dijo mi nombre mientras dormía… No tiene remedio, supongo que veré su rostro dormido por un rato más… Ya va siendo hora de retirarme. Espero ansioso el tiempo que pasaremos juntos mañana. Yo seré el primero en decirte buenos días, así que descansa… *se retira de la habitación*
Reiji (9:17): *leyendo la revista mientras camina* Hm… Necesitamos pepinos, zanahorias, rábanos… y también… paprica. Voy a ver si tenemos todo eso en el refrigerador.  Oh, también necesitaremos curitas y desinfectante. Aparte de pulir los platos también afilaré los cuchillos. Seguiré leyendo al llegar a la habitación, debo acabar las preparaciones ahora y despertar a mi amada estando en plena forma.
¿Te gustan mis traducciones? Puedes apoyarme en ko-fi nwn
34 notes · View notes
Lo que sucede cuando ni dios sabe que hacer con sus cosas y sus casas (Nuestras)...¡Lapsus!
Tumblr media
2 notes · View notes
olee · 13 days
Text
Mi Primer Día Sin Ti | Enzo Vogrincic
Tumblr media
Estás borracha por las calles de Madrid y no puedes dejar de pensar en Enzo.
Este es mi primer día sin verte. Camino por las calles de Madrid, borracha, son las 21:00 de la noche. Desde Malasaña hasta Niño Jesús, mis pies ya no pueden más. Lo único en lo que puedo pensar es en caminar contigo, tú sosteniéndome del brazo y guiándome. Pero estás de viaje. "¡Pff... te odio!" Te fuiste, dejándome atrás, y ahora estás en Uruguay o tal vez en Los Ángeles. Ni siquiera sé dónde estás exactamente. Sin embargo, aquí estoy yo, caminando sola, bajo estas luces amarillentas de Madrid, esperándote descaradamente. ¿Y tú? Tú estás en Júpiter. Me dejaste, o tal vez fui yo quien te dejó. ¡Ay, Enzo! Cómo te echo de menos. Mis pies duelen mientras paso por el Retiro. ¿Recuerdas al gatito negro? Está por aquí. Acabo de ver su cola cerca de la verja del Retiro.
El gato se ha ido, al igual que tú. Exactamente igual. Aquí estoy, borracha, tratando de descubrir dónde se ha escondido. Tanto el gato como tú.
Ahora estoy frente a la barra donde solíamos pasar tiempo juntos. Recuerdo lo mucho que te gustaba ese vino puro de Italia; no puedo recordar el nombre específico, pero era tu favorito. Estoy tan borracha que apenas puedo recordar algo.
Decido ponerme mis audífonos y escuchar nuestra banda favorita... ¿cuál era? Ah, sí, Radiohead, ¿verdad? O ¿tal vez era alguna banda revolucionaria de Uruguay? No puedo recordar. Optaré por un poco de Charly García, ese álbum "Bancate Ese Defecto", ese mismo.
Enzo, ¿estás enamorado? ¿De alguien más, supongo? Porque te fuiste sin decir adiós. Solo dijiste: "No puedo seguir contigo". Y así, puff, te fuiste, como aquel gato negro.
Ya casi llego a mi departamento. ¡Ay, Enzo! ¡Cómo te extraño! Estoy un poco loca, o mejor dicho, borracha. Ya estoy ansiosa por llegar a casa, servirme una copa de vino blanco y escuchar alguna canción extraña de Uruguay o algo que me haga llorar, como alguna de Silvio Rodríguez. Ojalá.
Recuerdo cuando nos emborrachábamos de vino y poníamos "Cementerio Club" de Pescado Rabioso. Tú fingías odiarlo, pero sabía que en el fondo amabas mi alma rockera. Ay, esos fueron tiempos maravillosos. Antes de que fueras famoso... Pero debo decirte que estoy muy orgullosa de ti. Has logrado ser quien siempre quisiste ser: un actor estrella, reconocido por Hollywood. De verdad, estoy feliz por ti y te admiro mucho por eso.
Estoy ansiosa por llegar a casa, mis pies ya no pueden más. Ay, ya veo la farola cerca de casa, esa luz amarillenta me hace desear ir a buscarte y besarte, pero sé que no estás aquí.
Enzo, veo una sombra bajo la farola cuando me acerco a casa, pero tengo que entrar. El portero está dormido. No sé qué hacer. Decido pasar de largo e ignorar al tipo que está fumando cerca. Sin embargo, no puedo evitar notar ciertos rasgos familiares en él. La forma en que sostiene el cigarrillo... Ay, es igual a ti. Y su altura, sus jeans doblados al final... todo me recuerda a ti.
Ignoro al tipo y saco mi llave, pero al intentar abrir la puerta, ¡se atasca! ¡Ay! No sé qué hacer. El portero debe de estar en el séptimo cielo, no me atrevo a tocar el intercomunicador. Enzo, ese tipo me está mirando. ¡Ay, no! Se está acercando. ¡Voy a gritar!
“Dejáme, yo te ayudo", dice. Ay, Enzo, tiene la misma voz que tú. Parece ser uruguayo. Pero no puedo verlo claramente. Todo está borroso, estoy borracha.
Finalmente, cuando el desconocido se acerca para ayudarme, reconozco su voz. Es Enzo. Mis lágrimas comienzan a fluir mientras lo miro con incredulidad. "Pensé que eras Enzo", murmuro entre sollozos, "lo siento tanto".
Enzo me mira con ternura y me asegura: "Soy realmente yo". Me acompaña hasta la puerta, y cuando finalmente lo veo claramente, la realidad golpea con fuerza. Es él, mi Enzo. No puedo contener las lágrimas mientras le explico lo mucho que lo extrañé, lo confundida que estaba y lo siento por haberlo malinterpretado.
Él me abraza con fuerza y me susurra palabras de consuelo. "Estoy aquí, cariño. Todo está bien", me dice mientras me acaricia el cabello. En ese momento, sé que todo estará bien.
45 notes · View notes
kaos-literario · 7 days
Text
Poemas al amor de mi vida que decidió abandonar esta, para dejarme sin vida…
Era amor todo eso que escondimos, esas pequeñas cosas que se volvieron clandestinas, lo que nos dio tanto miedo, el terror que sentíamos si alguien llegaba a saber lo que estábamos haciendo, y eso era amor, nuestros secretos compartidos.
Las caminatas perdidas por el pasillo, ancho y blanquecino, ¿que iba a saber yo que caminaba por el cielo? y que tu mano tocaría con ligereza la mía, es que estábamos tan cerca, y eso era amor.
Nuestras miradas conectadas en complicidad, la adrenalina corriendo por nuestras venas, el sexo encendido, la conciencia apagada, es que yo no sabia... y tu sabias más de la cuenta.
¿Que iba a saber yo que un ángel como tu visitaba el infierno? Con frecuencia, sin culpa, todo para ti significaba libertad, y que yo anduviera detrás de sueños rotos, te encendía de verdad.
Compartimos risas en medio de libros tapados en polvo y humedad, te contaba todo lo que hice en la mañana, tu me contabas lo que me harías en un segundo más, era amor u obsesión, ninguna lo iba a prevenir.
Tu porque andabas rota, un ángel caído fingiendo ser celestial, yo andaba jugando a tirones vacíos, bebiendo en un vaso de café chocolatada, y escapándome de mi casa cada vez que me llamabas.
21 notes · View notes
osadiafromheaven · 2 months
Text
FULL MOON IN VIRGO + CARD OF THE WEEKND
(ENGLISH AND SPANISH)
Tumblr media Tumblr media
This Saturday 24th we are living an incredible moon in virgo; which invites us to let go what doesn't benefit us at this time in our lives. It's an excellent moment to do a cleaning in areas where we feel disconnected; it's the right time for energetic cleansing, tidy up some space in our house, remove everything we no longer use, but above all to try to enter into balance and connect with our body and soul at the same time. Also, matching this Virgo energy, this weekend will be charged by the 'Page of Cups'. The emotional component of this card fills us with an impressive creative flow, allowing us to give birth to new beginnings charged with this energy. Thanks to the driving force of this moon in Virgo, the Page of Cups brings us good news. By integrating both energies (Page of Cups and moon in Virgo) it's important to keep in mind that when everything seems not to be working, never stop dreaming, because a dream is the first step to give success a chance. Trust in yourself.
~Blue. ✨🧚🏻‍♀️
LUNA LLENA EN VIRGO + CARTA DEL FIN DE SEMANA
Este sábado 24 se está viviendo una increíble luna en virgo; la cual nos pide soltar aquello que ya no nos esté aportando nada en este momento, nos invita a hacer una limpieza en áreas en las que nos sintamos desconectados. Es excelente para limpiezas energéticas, ordenar algún espacio de nuestra casa, sacar todo aquello que ya no utilizamos, pero sobre todo para tratar de entrar en balance y conectar con nuestro cuerpo y alma al mismo tiempo. Así también, acompañando esta energía virginiana, este fin de semana estará cargado por el paje o sota de copas. El componente emocional de esta carta nos llena de un caudal creativo impresionante, que nos permite dar origen a nuevos comienzos cargados de esta energía. Gracias a la fuerza impulsadora de esta luna en virgo, la sota de copas nos trae buenas nuevas. Integrando ambas energías (sota de copas y luna en virgo) es importante tener en cuenta que cuando todo parece no funcionar, nunca hay que dejar de soñar; ya que, un sueño es el primer paso para darle una oportunidad al éxito. Confía en tí.
~Blue. ✨🧚🏻‍♀️
23 notes · View notes
Text
Otoño, para siempre.
II
"General... ¡General! ¿Por qué se retrasó tanto? El portal está por abrirse. Si usted no hubiera llegado a tiempo…”. No alcanzó a terminar la oración, cuyo final sabíamos hubiera tenido matices apocalípticos. "Soren se habría horrorizado de haber sabido lo que ha venido hacer aquí. ¿Por qué habría de darle el corazón de nuestro pueblo, la última esperanza por sobrevivir, a alguien que nos había traicionado?”, casi podía escuchar su pregunta incrédula en mi cabeza.
Alana no había cambiado nada, aún en esta encarnación conservaba toda su belleza; su inocencia y su candor seguían presentes en sus verdes ojos. Me había quedado más de lo que hubiese sido prudente, pero es que no podía despegarle los ojos. Ella, mi mal logrado amor, y quien había sido sacrificada por el bien de los nuestros, pero, al mismo tiempo, había sido tildada como la más infame de las traidoras en nuestros libros de historia —aunque eso sólo el consejo y yo lo sabíamos—. A petición suya, sus valientes acciones y sacrificio permanecían en el más absoluto de los secretos. Me corroía el alma oír a la gente hablar, con odio en sus voces, sobre ella, así como escupir al mencionar su nombre. Mi bella Alana, tan sabía, tan valiente y yo... la maté... al arrancarle el cristal de Khaladar del pecho para salvar a nuestro pueblo. Todavía recuerdo a la luz extinguirse de sus ojos.
Los cristales de Khaladar contienen la energía mágica de un individuo y están conectados a nuestro corazón. Arrancárselo a alguien era considerado el peor de los crímenes, pues resultaba en una muerte dolorosa e irremediable. El de Alana tenía un poder increíble, ya que, al ser la última del linaje de sacerdotisas de nuestro pueblo, la hacían poseedora de una energía extremadamente purificadora y vivificante, algo que no sabíamos al momento de conocernos.
La guerra con los Quirzon había agotado nuestros recursos. Estábamos condenados al exterminio o a la extinción; ambas muertes inevitables con la sola distinción en el tiempo que necesitaban para producirse. Eran estos portales mágicos nuestra única salvación, pues mediante ellos podíamos hallar mundos de los cuales recolectar energía para recargar nuestros cristales y seguir luchando. Cuando los Quirzon drenaron la energía del PortaCristal atestaron un golpe mortal a nuestro pueblo, mas, el sacrificio de Alana logró recargarlo. Sin embargo, su energía ha comenzado a menguar desde hace un par de años. Los ancianos y yo creemos que tiene que ver con la reencarnación de Alana, pero no tenemos información suficiente para comprenderlo. Por ello es que vine aquí, para averiguar la razón, pero jamás me imaginé que me iba a sentir tan fascinado al verla y al darle el último pedazo del cristal de Khaladar que había latido con su corazón.
Era hora de regresar a casa y darle mi reporte al consejo. La neblina pronto se disiparía y el portal quedaría al descubierto. Los portales eran cada vez más inestables y las sacerdotisas tenían problemas para controlarlos. Oré por que esto funcionará y que nuestra corazonada fuera acertada: que, de algún modo, el último pedazo de Khaladar sería capaz de reconocer a su dueña y cobraría vida de nuevo. Pasara lo que pasara, estaba seguro de que volvería a Alana pronto. La verdad, no quería separarme de ella ni un instante, pero el consejo me había llamado a casa y debía acudir a dar mi reporte, además de ayudar a estabilizar el PortaCristal —cosa que cada vez requería más energía—. “Nos vemos pronto, Alana, amor mío, espérame”, murmuré y atravesé el portal que me llevaría de vuelta a Kalhadar y a su cielo índigo de dos lunas.
Tumblr media
III
¿Seguía soñando o estaba despierta? Alana abrió los ojos para toparse con el anillo que, el hombre tan extraño que había conocido en el café, le había dado el día anterior. Parecía un anillo de plata común y corriente, engarzado con una piedra transparente que, probablemente, era zirconio o cuarzo. No podría ser un diamante, ya que era demasiado grande para serlo y dudaba mucho que hubieran extraños que fueran por ahí, regalando anillos de diamantes a diestra y siniestra como si fuesen chocolates. Lo tomó en sus manos y lo examinó con cuidado. No parecía nada fuera de lo común, excepto que estaba grabado con unos símbolos extraños en la parte interior de la banda. ¡Qué encuentro más bizarro! El día anterior, el extraño desapareció en la bruma y, pese a haberlo buscado por espacio de media hora, no había logrado dar con su paradero. Preguntó a los empleados del café si alguien lo conocía, pero era la primera vez que alguien lo veía. Alana esperó, por un buen rato, para ver si regresaba, pero no lo hizo. Había sido imposible seguir escribiendo por lo que regresó a su casa. Igualmente bizarro había sido el sueño que había tenido esa noche. Era una plétora de imágenes disyuntivas; sangre, caos, una luz refulgente, dolor y esos ojos de un inconfundible azul zafiro, mirándola llenos de lágrimas.
Viendo el reloj que ya vaticinaba la llegada tarde a su trabajo, Alana se levantó de un salto de la cama. Dejando atrás todas sus preguntas y preocupaciones en el ajetreo de la mañana. Llegó a su trabajo, en el despacho contable, con cinco minutos de retraso. Por suerte, su jefe todavía no llegaba. Se apresuró a encender la computadora y a revisar los correos que le habían entrado a su bandeja, procediendo a continuar con las partidas que había dejado por anotar en el sistema contable. El día transcurrió como era lo usual, sumamente ocupado. El modesto despacho contable en el que trabajaba le llevaba la contabilidad a varios negocios pequeños del pueblo por precios muy módicos, por lo que la oficina estaba atestada de trabajo.
La hora de salida llegó antes de que se diera cuenta y, con un gesto de despedida, les dijo hasta pronto a sus compañeros de trabajo y se dirigió al café de la montaña. En su bolsillo cargaba con la cajita que contenía el anillo que el atractivo extraño le había dado. Caminando por el sendero que llevaba al café, se llenaba de tranquilidad, mientras respiraba y, de vez en vez, se detenía para mirar hacia las nubes y meditar un poco. Estar en contacto con la naturaleza la energizaba. Podía escuchar esas melodías que producían las hojas al chocar con la fugacidad del viento que envolvía, de repente, a los árboles, así como sentir el nacimiento y crecimiento de la grama, mientras el olor a invierno le acariciaba la nariz con el aire que respiraba.
Ya estaba llegando al café cuando sintió algo. Era difícil para ella describirlo, pues, de pronto, se percibió envuelta en un escalofrío que, al mismo tiempo, le hacía vibrar la piel. Esa energía parecía proceder de la dirección en donde se podía ver un claro en la profundidad del bosque. Por lo general, Alana no era una persona curiosa y bien hubiera ignorado ese sentimiento, pero era demasiado fuerte para ignorarlo. Parecía como si fuese una ligadura de hierro y ella un magneto. Fue así que, jalada por la fuerza que emitía el claro, se adentró en el bosque, hasta donde la luz de la luna iluminaba. Había una formación rocosa en el centro, en cuyo reflejo la luz de la luna parecía un espejo. De repente, le pareció ver que brillaba con una luz verde. En ese preciso momento sintió que una mano le amordazada la boca y un aliento caliente le humedecía el oído.
“Por Kandar, ¿cómo demonios nos halló Quirlon aquí? Debió haber perdido energía el escudo. Alana, escúchame, no tengo tiempo de explicarte. Necesito que confíes en mí, por favor.”
El pánico la embargaba al ver que, sobre las rocas, se abría un hoyo resplandeciente de energía verduzca y por el que tres hombres, muy altos y delgados, salían de él. Sin embargo, algo la hacía sentir confiada también, y eso lo provocaba el hombre que, con mirada suplicante, la observaba.
“Debemos correr. Por favor, no grites. Voy a soltarte la boca. Asiente con la cabeza si entiendes lo que te estoy diciendo”.
Alcanzó a asentir con su cabeza y él, sin mediar otra palabra, la tomó de la mano y procedió a correr hacia lo más profundo del bosque. Así corrieron por varios minutos hasta quedarse sin aliento. Por fin, tomaron asiento bajo el abrigo de un gigantesco abeto.
“¿Quién es usted y quiénes son esos hombres?", Alana le preguntó al recuperar el aliento.
“Soy Valdar y ése era Quirion y su secuaces. Deben haber seguido el rastro de energía del portal hasta aquí. Lo siento, Alana. Lo último que quería era traerlos hasta ti.”
“¿Por qué me llama Alana? Mi nombre es Alina. Creo que me ha confundido con alguien más".
Procedió a sacar la cajita que contenía el anillo de su bolsillo y lo abrió para entregárselo cuando, repentinamente, se le cayó de las manos. Se arrodilló de inmediato a buscarlo, pero, su mala suerte era tanta, que se cortó la mano con el filo de una roca mientras lo buscaba entre la hojarasca; aun así, lo encontró y, al levantarlo, extendiendo su mano hacia el extraño que la miraba, se percató de la expresión de asombro que éste tenía en el rostro.
Un poquito de sangre había caído sobre la piedra, pero Alina no creía que su aversión a ella fuera tanta para ameritar la expresión en su rostro. El anillo seguía igual. El extraño despegó los ojos del anillo y la miró directamente a los ojos. Esos ojos parecían dos pozos azules profundos, en cuyos yacían innumerables secretos que la amenazaban con tragársela entera. De repente, el extraño se desabotonó la camisa. Yacía sobre su corazón una pequeña gema que resplandecía con una luz rojiza. Los ojos de Alina debieron haber delatado su asombro al ver cómo la gema cambiaba a un color violeta y después un profundo azul.
“¿ Qué miras?”, le preguntó el extraño.
“Es muy curioso cómo cambia de color”, Alina le respondió.
“En Kandar, de donde provengo, los cristales que tenemos en el pecho son incoloros para todos, excepto para aquel o aquella con quien hemos establecido un vínculo de alma. Esa persona puede ver los colores de nuestras emociones reflejados en ella. Así como tú ves los mios, yo veo los tuyos, Alana", le dijo, mientras la miraba con el peso de un siglo de dolor en su mirada.
"Ya le dije que mi nombre no es Alana es Alina".
“Tú eres mi Alana y esto lo confirma. No sólo que tú puedas ver los colores de mi cristal, sino que yo pueda ver los del tuyo”, sostuvo su mano en la suya y tomó el anillo entre sus dedos. “Refluye de un profundo gris casi negro, porque estás confundida y temes, pero también veo un destello azul. Tu alma recuerda la mía".
Tumblr media
E.V.E
19 notes · View notes